Hola Banda ¿Cómo se sienten hoy? Les traigo una nueva historia que hace unos días adopte, en la historia "Renace un amor oscuro" escribí el motivo de la adopción, he hecho algunas modificaciones, así como corrección en la escritura y ortografía, además de cambiarle otras palabras para acomodarlas mejor para darle más énfasis a la historia, sin más ¡Comenzamos!

Autor: Animeloco, yo solo edito y acomodo la historia de acuerdo a lo que escribió.

Leyenda:

-blah, blah, blah- personaje hablando.

-blah, blah, blah- personaje pensando.

-blah, blah, blah- biju o entidad sobrenatural hablando.

-blah, blah, blah- biju o entidad sobrenatural pensando.

Disclaimer: los personajes pertenecen a Masashi Kishimoto lo hago sin fines de lucro. Únicamente con fines de entretener.

Capítulo 1: Un nuevo integrante del clan

-Sabes a veces pienso que él será más fuerte que nuestras dos razas juntas– dije mientras mi esposo miraba por una ventana, y yo con mi niño en brazos, él voltea a verme con su gran sonrisa, la cual siempre me ha gustado

-Te equivocas Kushina- me dijo mi esposo, mientras se acercaba a mí con calma.

-¿A qué te refieres? Minato- le pregunte a mi esposo.

-Él ya es más fuerte que nuestras dos razas, el marcara un nuevo camino– se coloca enfrente de mí, después se arrodilla para acariciar la cabeza de nuestro niño -¿Cómo lo llamaremos?- pregunto Minato mientras seguía acariciando la cabeza del bebé

-Aún no se me ocurre nada, ¿Por qué no se lo preguntamos a tu maestro? Él sabría algo sobre eso– le pregunto, pues es nuestro primer hijo que tenemos, él pone una cara de tristeza, muy raro en Minato, cada vez que pone ese semblante, significa que ocurrió algo desagradable.

–Él salió de viaje y en el camino le dieron caza – me contesto con tristeza, mientras yo me quede pasmada por lo que dijo, el me miro y me puso su mejor sonrisa –pero no te preocupes, se puso a invernar, tomo su último trago y se fue a descansar. Despertara más tarde, para que nos ayude con el nombre del bebé- contento mi esposo que seguía acariciando la cabeza dorada de mi bebé.

-¡Qué bien! ya me había asustado – suspire de alivio a lo cual el tomo mi barbilla y se acercó a mí de un momento a otro nos estábamos besando muy amorosamente, como siempre me dejo sin aire por sus besos, de un momento a otro ya me sentía mareada y él me sonría como siempre por lo que le devolví la sonrisa – sabes…algún día me dirás como haces esos besos tuyos- dije con una sonrisa algo tonta y sonrojada, cosa que el noto.

-Querida, lo que hago es mi amor hacía ti, además nuestro hijo necesita nuestro amor y… – dijo Minato, en ese momento se detuvo y me miro con ojos alegres y de euforia –¡Ya sé que nombre darle!- dijo con felicidad Minato.

- ¿Cuál?- pregunto con curiosidad.

- Su nombre será Naruto – dijo con una sonrisa, saque una risita de entre mis labios - ¿Qué, no te gusta?- me pregunto Minato con un toque de miedo.

-Sí, pero se me hizo irónico que se llamara igual al protagonista del libro de tu maestro- conteste muy sonriente, pero a la vez confundida.

-Tal vez, pero siento que hará igual o más grande- dijo Minato con calma, esas palabras me sonaron en mi cabeza, es muy probable que tenga razón, quizás sea alguien importante.

-tienes razón, Minato– le conteste, para después miramos a los ojos y sonreír. Él se sentó a mi lado y nos recargamos el uno junto al otro luego mire a nuestro niño. Mi bebé tenía una gran sonrisa aun mientras dormia entre mis brazos, pero no pude el aguantar mirar sus mejillas – sabes, estas marcas siempre le recordaran lo que es y le dirán a los demás lo que es- dije acariciando esas marquitas de bigotes en sus mejillas, que para mí son muy lindas.

-tal vez, pero él será feliz, cuando crezca será alguien fuerte y nos tendrá a nosotros como apoyo para los eventos que le caigan- me contesto Minato con seguridad en sus palabras.

- tienes razón- le dije para después besar la frente de mi Naruto.

Han pasado varios año y es de mañana, en una habitación una chica se levanta con los primeros rayos del sol, en cuanto se levanta solo mira su habitación con ojos aun cansados, se los talla e inmediatamente se encamina a su baño, ella en su mente solo tiene imágenes crueles de su padre diciéndole "crece más", "eres una vergüenza" "eres débil" entre otras cosas hirientes que habían mermado su estima personal, al terminar de bañarse entra a su cuarto para colocarse una falda de color blanco, con camisa y chaleco del mismo color, pero el cuello de la camisa tiene franjas negras las cuales terminan en una cruz y el chaleco el signo de una hoja, al terminar de colocarse el uniforme ella se mira al espejo y se pone algo triste

-¿Cuando me reconocerá mi padre? – se preguntaba así misma, ya que nuca en su vida su padre le había tomado en cuenta, solo a su hermana, estaba sumida en sus pensamientos cuando escucha llamar a la puerta - ¿si?- pregunto Hinata.

- Hinata, nuestro padre quiere que bajes a desayunar- contesto una voz más joven que la suya.

-voy en un momento– contesto Hinata, para inmediatamente salir de su cuarto, bajar las escaleras de su casa y entrar al comedor donde estaba su padre, el cual la miro de una forma fría y calculadora.

-¿no te había dicho que en esta casa se come cuando todos están reunidos?- recrimino el padre a Hinata, la cual agacho la cabeza en forma sumisa

- lo…lo lamento padre – contesto con nervios y algo asustada debido al tono de voz de su padre.

-ya olvídalo y empecemos a comer, no quiero que se vuelva repetir- contesto de forma fría y sin emociones el padre de Hinata.

- si – contesto de forma sutil Hinata para sentarse, su hermana se sienta junto a su padre sin prestarle atención a Hinata.

-¿Por qué siempre no puedo ser alguien para mi padre?- pensó Hinata que sentía que unas lágrimas intentaban escapar por sus ojos.

En una escuela, una directora de cabellos dorados se encuentra enfrente de todos los maestros y prefectos, los cuales llevaban ropa formal, hombres vestían pantalón negro, con zapatos del mismo color, camisa blanca de manga corta, corbata negra, llevaban la insignia de la escuela en el hombro derecho, las mujeres vestían igual, salvo la falda recta a medio muslo negro con zapatillas de tacón mediano color negro

-Bien, lo he reunido hoy, debido a que muchos sabrán es nuevo año y los de nuevo ingreso llegan hoy- dijo Tsunade, una mujer de 50 años, que no aparentaban, la cual observaba a los presentes, pero se percató que dos faltaban –Faltan dos personas- dijo la directora del plantel.

-¿Quiénes Tsunade-sama?– pregunto un hombre de cabellos grises con un parche en uno de sus ojos y una mascada que le cubría desde la nariz hasta el mentón.

-Son Hinata y Neji Hyuga, de Hinata puedo entender el problema que tiene con su padre, pero de Neji es algo raro- contesto Tsunade, pues tenía el conocimiento que la chica Hyuga tenía graves conflictos con su padre Hiashi, debido a un asunto familiar.

-Tsunade-sama ¿checo las solicitudes que le entregue ayer?– le pregunto su ayudante una chica de cabello oscuro corto hasta la nuca, la chica llevaba un traje color negro y en sus manos un porta hojas con algunas anotaciones.

-¿Solicitudes? ¿Qué solicitudes Shizune?- pregunto extrañada la directora.

-Estas que tengo– dijo Shizune entregándole unos papeles que tiene en su tabla de trabajo, la mujer toma uno de ellos y lo mira con detenimiento.

-¡¿PERO CUANDO PASO ESTO?!– grito asombrada la directora, todos la miraban rara por la forma en que grito - ¿Cuándo le ocurrió esto?- pregunto con cierto temor la directora.

-no lo sabemos Tsunade-sama– contesto un hombre calvo de gran cantidad de cicatrices en el rostro – solo comento que quería ser pasado de turno- dijo el prefecto.

-No importa, más tarde investigamos y descubrimos el por qué pidió este cambio– le dice otro de anteojos obscuros con paliacate.

- Ibiki, Ebisu, ustedes dos están a cargo de la seguridad del chico, no quiero incidentes dentro de la institución, ni con los alumnos ¿Entendieron?- pregunto Tsunade de forma clara.

-¡Hai!– contestaron ambos prefectos

-Los demás pueden retirarse y empezar a hacer los preparativos para los de nuevo ingreso. No tardaremos en abrir la escuela- dijo Tsunade las indicaciones.

-¡Hai!– contestarón lo demás prefectos, para salir inmediatamente de la oficina. Una vez dejada la oficina los prefectos, la directora toma otra solicitud y se queda viendo la fotografía del muchacho.

- ¡SHIZUNE!, ¡TENEMOS UN PROBLEMA!- grito Tsunade al ver que se trataba de alguien muy especial.

Todo en la escuela se encuentra arreglado para el recibimiento de los nuevos alumnos, algunas chicas se encuentran arreglando el auditorio, hasta que son interrumpidas por una joven que entra completamente cansada.

- lo lamento chicas, es…es que hoy tuve una mañana difícil- se disculpada Hinata que estaba cansada de correr por llegar temprano a la institución.

-Otra vez tu padre, ¿verdad?– la chica voltea y se encuentra con un joven de ojos felinos que cargaba unas sillas en sus hombros los uniformes de los hombres son iguales a los de las chicas pero ellos llevan pantalones

- algo así Kiba-kun- contesto con timidez, pues no era raro que los amigos de Hinata conocieran esa parte de su vida.

-Hinata, deberías vivir sola, con lo que ganas en tu trabajo tú podrías vivir sola – decía una chica de cabellos chocolate con pompones en sus cabellos mientras acomodaba algunas sillas, la ojiperla inmediatamente toma algunas sillas y las empieza a colocar

-sí, tal vez, pero no me atrevo, no sé si pueda vivir sola – algo deprimida – ya que soy una i…- iba a contestar pero alguien la detuvo.

-¡ni lo digas, no quiero escucharte decirlo!– le contesto un chico rellenito que pasa con una gran cantidad de sillas a su espalda.

- Chouji, yo…- Hinata iba a replicar, pero es detenida nuevamente.

- oye, ¡ni lo digas ni en broma! tu eres muy fuerte, tú me ayudaste la otra vez- le dijo Chouji para animar a Hinata –ahora si me disculpan, me retiro, esto está algo pesado y ya me dio hambre– dijo Chouji iba a dejar las sillas en su lugar, los demás tienen una gotita en la nuca, pero la ojiperla sonríe un poco y luego se vuelve a entristecer un poc. Para cuando acabaron de colocar las cosas, los chicos se colocan en el escenario junto a algunos maestros, en las afueras del auditorio, dos de los prefectos de salón que son la ojiperla y la chica pelirrosa las cuales recibían a los de nuevo ingreso.

- bien creo que son todos – dice la pelirrosa algo cansada.

-Sí, ya fueron todos, ahora hay que entrar para poder dar el discurso- dijo Hinata e ingreso junto a Sakura al auditorio.

-¿Quién lo va a dar ahora?- pregunto Sakura.

-Mmm…si no mal recuerdo le toca ahora a… - en eso Hinata siente una brisa fresca pasar cerca de ella, a lo cual se toma de hombros para frotarse por el escalofrio que sintio– Sakura ¿no…no sentiste un poco de frío?- pregunto Hinata, tratando de calmar la sensación gélida.

-¿Eh?, no, tal vez solo fue el aire, vamos hay que entrar- contesto Sakura para explicar el fenómeno.

-Sí, tienes razón– contesto Hinata y ambas entran para colocarse en el escenario enfrente de todos los de nuevo ingreso, los alumnos al ver a las alumnas que estaban junto a los maestros se quedaron babeando y las mujeres se quedaron igual al ver a los chicos, pero ninguno a Chouji (Ya tendrás la oportunidad de conocer a una chica, no claudique), en ese instante entra la directora todos se colocan de pie, excepto un chico que tiene un folleto sobre su cara y esta recostado en su silla, todos lo notan pero mejor lo dejan pasar.

-¡Todos siéntense por favor y relájense! espero que estén cómodos como el muchacho que esta recostado en la silla – todos se empiezan a reír pero el muchacho ni se inmuta solo escuchan un ronquido por debajo del folleto que tiene en su cara a lo cual solo le pusieron ojos de enojo y al instante todos toman asiento –como sea, sean bienvenidos a la escuela Konoha, donde se les asegurará que su estadio será muy reconfortante y aprenderán mucho para salir al mundo con las bases necesarias para alcanzar grandes aspiraciones– dio su "discurso" la directora, la cual al terminar todos aplauden, pero el chico dormido solo ronca otra vez para luego volver en silencio, uno de los prefectos no aguanta más y le quita el folleto, sin embargo nota que ya no está ahí. Los maestros, prefectos y alumnos se quedan consternados – bue…bueno dejemos eso de lado– mira al prefecto de cabello castaño y ojos obscuros el cual mira al de cabellos plateados ambos desaparecen –bien ahora todos ya conocen las reglas de la escuela, pero solo hay una la más importante –todos los alumnos ponen atención a la regla que dirá la directora – no pueden salir de sus habitaciones después de la noche, está estrictamente prohibido que ustedes salgan de sus habitaciones, eso es todos, ya pueden irse y ¡disfruten su estadía!– dijo Tsunade con una sonrisa, mientras que los alumnos de nuevo ingreso se retiran, después ella se dirige a los maestros -Quiero que encuentren a ese muchacho, tengo que hablar con él- dijo seria la directora.

-¿Para qué lo ocupa Tsunade-sama?- pregunto un maestro de grandes cejas.

-Quiero asegurarme de algo, bien Hinata, Sakura e Ino, es mejor se retiren ahora se está haciendo tarde y es hora que los de nuevo ingreso entren a sus clases- dijo las indicaciones la directora.

-De acuerdo– contestaron las aludidas y empiezan a caminar a la salida del auditorio.

En los patios de la escuela se encuentran dos maestros están buscando por todos lados para encontrar al muchacho que se escapó del auditorio

-Kakashi, no creo que se encuentre en los patios traseros – dijo Yamato viendo a todos lados, el nombrado se queda pensativo – ¿ocurre algo?- pregunto Yamato al voltear a verlo

-Ese muchacho ¿Aun no entiendo cómo se fue sin poder verlo?…me recuerda los demás- decía muy pensativo, pues él era uno de los profesores que a pesar de tener un ojo tapado, casi nada se le escapaba.

-Kakashi, no creo que sea como ellos, tal vez sea raro pero no es de ellos, él es completamente diferente a ellos- dijo Yamato con seriedad.

-Tienes razón, tal vez solo es mi imaginación- se justificó Kakashi.

-O tal vez lo sea, pero no estás del todo equivocado, soy algo parecido a ellos – comento Gai, ambos se quedan callados, de repente los maestros voltean y se encuentran que el chico está corriendo lejos de ellos.

- ¡Yamato, rápido que no escape!- exclamo Kakashi al ver al chico correr.

-de acuerdo- dijo Yamato e inmediatamente ambos maestros empezaron a correr tras el chico.

En una barda cerca de la escuela una gran multitud de chicos y chicas se encuentran gritando cerca de esta puerta mientras son detenidos por las prefectas.

-¡Ya cállense o las mandaremos directamente a sus dormitorios!– les grita una chica de cabellos rubios.

-¿Ehhh? ¡No es justo, queremos verlos!– grita una de las chicas que estaba en el montón.

-¡Si es cierto entramos para verlos a ellos! – les dice otra chica con cara soñadora.

-También entramos por ellas, aunque Hinata-san no está mal – dijo una chica, la nombrada se sonroja algo por lo dicho.

-Chi…¡chicos si no se comportan los mandaremos a sus dormitorios!– Les dice la ojiperla, con timidez, sin embargo en ese momento se empieza a abrir la puerta –chicas ya están aquí rápido a sus puestos –las otras se colocan en su lugar, para cuando se abre por completo de la puerta salen varios chicos, dos de ellos morenos con ojos obscuros, uno de tez seria y el otro de mirada fría, un chico con una cola en forma de caballo, uno de cabellera larga y ojos perlados

-¿Neji?– decía asombrada Hinata pero el chico la miro y le da una sonrisa, detrás de ellos una mujer de cabellos rojos con anteojos, después un chico de cabello anaranjado y de gran estatura junto con otro de cabello verde, inmediatamente entra un chico de cabello rubio largo, uno pelirrojo de ojos verdes, otro de igual manera pero de ojos azules, luego una chica de coletas rubias y ojos azul oscuro junto a su hermano moreno, otros de tez pálida y cabello en forma de hongo pero uno de ellos tiene ojos blancos con aureolas y el otro de color obscuro, una chica de cabellera castaña con una mascada en su cuello junto con otra parecida a ella pero con cabello largo, una chica de igual color de cabellera pero de gran sonrisa; al terminar de salir todos ellos la multitud se emociona más.

-¡Chicos y chicas contrólense o los mandamos de nuevo a sus dormito…! – grito Sakura, pero enfrente de la pelirrosa parece un muchacho corriendo y mirando así atrás, que sin darse cuenta se tropieza con el moreno de mirada fría ambos caen al suelo, pero el moreno se repone rápidamente y mira hacia atrás y se encuentra con el muchacho levantándose.

-Lo lamento pero es que no quiero que me atrapen– dijo el chico, las chicas lo miran con ganas me matarlo pero mira atrás del moreno de cabello rebelde rubio y marcas de bigotes en cada mejilla, después ve a los maestros correr detrás él.

-¡Chicas que no escape, no lo encargo Tsunade-sama! – Grito Kakashi aun corriendo, la más cercana es la ojiperla la cual lo atrapa, mas, el muchacho solo la mira y cae en sus manos, el moreno se acerca al que lo tumbo.

- ¿Cómo te llamas?- pregunto enojado el chico moreno.

-lo lamento me tengo que ir– se acerca al oído del moreno –sabes deberías cambiar tu forma de recuperarte si no aras que sospechen de ti – el moreno se queda quieto.

- ¿Quién eres tú?- volvió a preguntar.

-Lo siento, pero luego nos vemos – toma a la chica de la cintura y sale corriendo con ella, hasta llegar a un salón – lo lamento tú y yo llegamos hasta aquí- dijo el chico rubio.

- ¿Quién eres? – pregunto Hinata aun en los brazos del chico.

- Yo…soy un pequeño lobo solitario – dice el joven con una gran sonrisa de par en par.

Hasta aquí llega el primer capítulo, si lo lees Animeloco dame tu opinión de como quedo el primer capítulo, además no olviden de comentar, dejar un review, una sugerencia, puntos de vista de esta historia y más a los que fueron lectores de la misma, sin más me despido. Hasta la próxima.