Me gusta mucho DOOM ¿Saben?

Me considero fanática de los juegos en general, y aunque no los conozco al 100% he estado en la comunidad durante años. Así que, al ver que en este sitio no hay fanfics en español, decidí ser la primera en escribir alguno. Es un proyecto que comencé en 2012 y recién ahora en 2018 comienzo a retomar (y de verdad espero hacerlo), así que cualquier error, sugerencia o comentario es bien recibido.

Disclaimer: DOOM, así como sus novelas visuales y libros, son propiedad de ID Software.


Esto es una historia difícil de contar, incluso para alguien como yo. A decir verdad, no sé cómo llegué a este lugar.

Bueno, si lo sé, pero siempre digo que no porque me avergüenza un poco: hace poco más de 3 semanas golpee a mi oficial superior por querer disparar contra un grupo de civiles. Ellos estaban manifestándose, pero dentro de todo, era una manifestación pacífica, por lo que no existían motivos. Muchas veces un soldado es un poco, eh... ¿cabeza dura? como para entender eso, pero en mi momento de pendejez, se me ocurrió atentar contra quien apuntaba a una multitud con el rifle. Tras un leve paso por la corte, se determinó que cumpliría un año de servicio "voluntario" en una base militar en Marte, propiedad de la Union Aerospace Corporation (UAC).

Mi nombre es Flynn Taggart (1); un Marine de Elite. Como tal, soy experto en el campo de batalla y estoy listo para la acción.

Llegué con el recibimiento normal acompañado de preguntas y se me asignó algo sin mucho trabajo: vigilar la sala de videovigilancia. Era divertido, pues de esa manera podía distraerme viendo cosas que casi nadie podía ver. En dichos vídeos, descubrí un poco de lo que iba esto: la Union Aerospace Corporation tenía un proyecto con Marte y sus 2 lunas: Phobos y Deimos. Así mismo, vi que a la mayoría de científicos y militares se les ofrecía una generosa cantidad de dinero por hacer funcionar este lugar como debería. Al parecer requerían bastante gente porque habían abierto una vía de teletransportación entre Phobos y Deimos. Había otro vídeo que explicaba este tema más a fondo: se lanzaba por el teletransportador objetos simples como un lápiz o un vaso... ¡Y aparecían al otro lado!. Viendo eso incluso yo pensé que era buena idea.

El asunto comenzó a complicarse cuando a nuestra querida UAC se le ocurrió comenzar a utilizar humanos para experimentar. Eso lo supe de buena fuente; la UAC había colocado anuncios y papeles a lo largo de la base donde ofrecía una gran cantidad de dinero por ofrecerse como voluntario. Dicha cantidad podía ser hasta 20 veces mayor a lo que se ganaba aquí (y eso que la mayoría ganaba bastante de por sí), lo cual atrajo la atención de militares y científicos por igual.

Sin embargo, fue una horrible elección para los desdichados que por avaricia decidieron participar: la gente usada para experimentos no se rematerializaba, o cuando lo hacían regresaban muertos con quemaduras de 3er grado en todo el cuerpo. Otros aparecían descuartizados. Los que corrían con "suerte", volvían locos o esquizofrénicos, lo cual les hacía cometer actos que los dañaban a sí mismos, como comerse los dedos y arrancarse extremidades. Los que corrían con todavía mayor suerte, sufrían una explosión de cuerpo completo en el trayecto.

Fue un desastre identificar cadáveres tras ello, y como me tocaba el trabajo sucio, pues no me quedó más que participar. Mientras todos nos dedicábamos a ello se recibió un mensaje desde Phobos: "¡Requerimos soporte militar inmediato! ¡Tenemos problemas con los portales!"

Dejé unas muestras de fluidos a un lado cuando escuché eso para cortar cartucho en mi confiable M16A4 y justo en ese momento se sintió una especie de terremoto, lo cual provocó que la luz eléctrica se fuera por completo. Ya no volvió: en su lugar solamente las luces de emergencia alumbraban los pasillos de la base. Nos reunimos en una sala principal y cuando los científicos quisieron establecer contacto con la base en Deimos, descubrieron con horror que ya no existía: se había desvanecido.

Mi oficial superior hizo acto de presencia para darnos órdenes.

—¡Escuchen! ¡Ya que Deimos se ha desvanecido, la gente de Phobos DEBE de ser evacuada antes de que ocurra algo peor! ¡Ustedes, como marines encargados de la seguridad de UAC, serán enviados a investigar que está pasando en ese maldito lugar!

—¡Señor, sí señor!

Preparamos nuestras armas. Personalmente, yo siempre he sido muy taciturno, por lo que me dedicaba a escuchar a mis compañeros bromear sobre el incidente. Avanzamos por los pasillos de la base principal hasta llegar a la puerta que conduce a Phobos. Nos acomodamos en fila india para entrar y justo ahí sentí una mano en mi hombro deteniéndome.

—Taggart, tú no. Tú te quedas aquí.

Era mi oficial superior. Yo lo miré con fastidio.

—Sí señor.

Me quedé estático viendo como mis compañeros entraban de uno por uno.

—Asegura la puerta, Taggart. Y asegúrate de que nadie más entre - me ordenó mi superior, por lo que tras cerrar la puerta metálica, me senté en el suelo a esperar mientras miraba los conjuntos de estrellas y constelaciones que se veían a través de la pared de vidrio que tenía el pasillo que conducía a la puerta que había cerrado recién. Podía decir incluso que estaba ganándome el sueño, pero decidí esperar, siempre atento a las señales de mi radio.

Tras un par de horas, escuché en el radio un grito desgarrador. Pensé que alguno de mis compañeros había sufrido un susto o alguna caída, pero todo comenzó a volverse más tétrico cuando escuché a mi superior gritándoles ordenes, rugidos, disparos y finalmente... una frase que me marcaría para siempre:

"Todos tus compañeros están MUERTOS"

Me invadió un terror indescriptible y solté el radio comunicador hasta que tras un par de minutos recuperé la compostura. Pensé mis 2 opciones: En primera tenía la opción de quedarme sin hacer nada, pero no tenía sentido porque solo había un par de científicos que no podían ayudarme en mucho. La otra era ir y averiguar yo mismo lo que había pasado con mis compañeros, pero eso era poner en riesgo mi propia vida.

Y como el idiota que soy, elegí la segunda opción, así que me agaché por el radio y al levantarme, quité los seguros de la puerta que me separaba del pasillo de Phobos y tras pasar mi tarjeta de identificación, se abrió para mí.

Ese fue sin duda, el primero en una larga lista de errores que cometí.


(1) - Ese fue el nombre dado al "Doomguy" en los libros basados de DOOM y DOOM II.