HOLA! Lo sé, deje abandonado este fic a cual le tengo mucho cariño, habían varias cosas que no me tenian conforme y bueno me estoy haciendo el tiempo de editarlo, a pesar, de que estoy con temporada alta en mi trabajo es donde mas me baja la inspiración por lo que edite el primer capitulo, le agregue y cambie ciertas frases que no me tenían satisfecha…Espero que los cambios os gusten y no se preocupen por las actualizaciones porque la historia esta terminada, son 4 capítulos y subiré uno por semana

Este capitulo va dedicado a Gema Talerico y a su maravillosa historia Volte di Luna

Capitulo 1

Se miraba en el espejo y todo lo que veía era su horrible cuerpo, sin darse cuenta que la imagen que se mostraba en el espejo era otra, los huesos de sus caderas y costillas sobresalían casi con lastima de su piel sus piernas delgadas y cara demacrada. Negó con la cabeza y se vistió con dos chalecos y dos pantalones por el frío y para que los demás no se dieran cuenta de nada, ellos no lo entenderían, no sabían lo que era perfección.

Al bajar de la sala común se encontró con Ron y Hermione los cuales lo animaron a ir a cenar al Gran Comedor a lo que el respondió que al rato los alcanzaba y que si se le hacia tarde iba a ir a las cocinas…que pobre mentira pero mas le dolía que los amigos que siempre considero su familia se la creyeran, ambos estaban tan absortos en su mundo que él paso a segundo plano, y no les recriminaba quizás si en su vida hubiese alguien que amara con todas sus fuerzas estaría igual que ellos pero no había nadie, la guerra había dejado muchas heridas y huellas imborrables y a él completamente solo rodeado de mucha gente.

Sus ojos grises escaneaban la mesa de los leones sin encontrar su objetivo, sabia que había algo raro y le sorprendía que nadie mas se diera cuenta, hace aproximadamente tres meses que el niño de oro se ausentaba a todas las comidas y su cara poco a poco demostraba lo delgado que estaba ¿Cómo los idiotas de sus amigos no se daban cuenta?

Quería hacer algo, ¿Qué hacer? Eran rivales a toda regla y a pesar de que Él lo salvo dos veces no podía hacer nada sin que lo juzgasen pero simplemente ya no podía seguir viendo su rostro demacrarse, necesitaba ver ese brillo en sus ojos, necesitaba que estuviera bien…lo necesitaba, cuando llego a esa conclusión sufrió un leve shock, en su vida jamás había necesitado a alguien…era una serpiente, astuto, jamás a necesitado algo que no le diese un beneficio a cambio pero tampoco se iba a quedar de brazos cruzados, el iba a salvar al-niño-que-vivió.

Caminaba por el castillo, mi vida se perdía, lo podía ver pero no quería hacer nada por arreglarlo, su vida ya carecía de todo sentido y el dolor el vientre le ayudaba a saber que una parte de el aunque solo fuere la física estaba viva, necesitaba estar bien, ser el perfecto niño que vivió y que mato a Voldemort pero su cuerpo imperfecto no ayudaba, solo tenia que bajar un poco mas, solo un poco mas, hasta que el espejo le mostrara la imagen que el quería, que el ansiaba, necesitaba eso…

Se sentía observado y pronto descubrió unos ojos grises que lo miraban, no como los demás, no con admiración ni con respeto, le miraban enojados y preocupados, trato de mantener la mirada pero pronto se hizo suficiente para el, no quería verlos ya hace mucho que nadie le miraba así, es como si le estuviese recriminando las cosas que había hecho, que estaba haciendo e hizo algo que se había acostumbrado a hacer: huir , camino rápido por los pasillos del colegio tratando de encontrar un lugar confortable, fue al baño de prefectos, se desnudo y miro su imagen distorsionada a través de sus propios ojos, miraba su imperfección y se dijo el mismo casi como un mantra: solo un poco mas, solo un poco.

Mientras seguía al ojiverde toda clase de pensamientos le pasaban por la mente pero cuando entro al baño de prefectos nada le preparo, ni siquiera ese año encerrado con el Señor Oscuro, para lo que vio, el cuerpo esquelético del elegido, la piel pegada a los huesos que sobresalían en sus caderas, hombros y costillas, el niño que vivio estaba dejándose se morir, alzo la vista para encontrarse con una tormenta esmeralda, llena de dolor, y de sufrimiento. Se acerco suavemente al cuerpo del otro chico y delicadamente acaricio su mejilla, con adoración y cuidado como si en cualquier momento se fuese a romper y quizás era así, ignoro todo rastro de compasión y miro ferozmente al elegido:

No puedes seguir haciéndote esto Potter…Harry, tienes que salir, debes comer. –Dijo con voz perlada de ternura y un leve tono de orden, que más que ofender a Harry le hizo sentir después de mucho tiempo algo calido en su interior.

Yo…no…- quería decir tantas cosas, que nunca quiso que le viera hasta que fuese perfecto, que no se preocupara, que le salvara…tantos pensamientos dispersos que solo aumentaron su estado de depresión, su estado de angustia. Unos dedos se posaron en sus labios y una especie de electricidad le hizo estremecer, nunca antes un solo toque le había hecho sentir tanto

Shht…desde ahora comerás ¿me escuchas? Aunque tenga que alimentarte de mi propia mano lo haré y créeme Potter no será agradable.- lo dijo con palabras tan seguras que Harry quiso creer, Malfoy seguía susurrando palabras mientras recogía la ropa del suelo y le ayudaba a vestirse con calma sin ningún gesto de asco por su cuerpo, con una ternura que Harry nunca pensó en ver como un amante vistiendo a su amado y luego en un silencio cargado de significado le acompaño a la salida del baño de prefectos y las ultimas palabras de rubio retumbaron en su cabeza.

En la próxima comida te espero en el Gran Comedor.

Estaba nervioso, no podía ser menos después de esa despedida, caminaba con sus amigos al gran comedor, los escuchaba sin escucharlos, cada paso que daba hacia que su corazón lastimado saltase y su estomago se llenara de una extraña sensación, tenia miedo de ir y que el lo ignorara, la única persona que se había dado cuenta que las cosas no marchaban bien con el, sus amigos cruzaron el umbral de la puerta y antes que se diese cuenta tenia a un rubio a su lado, como un protector, un guardián y a pesar que todo el comedor los miraba con la boca abierta, sus amigos fruncieron el ceño pero no dijeron nada, se sintió después de mucho tiempo seguro y se dirigió con gran parsimonia a su mesa, cuando se hubo sentado vio tanta comida que fue inevitable hacer un leve gesto de asco del que el rubio se dio cuenta y antes de lo que se hubiese dado cuenta tenia delante un vaso de jugo, ensalada de frutas y un poco de cereal, nada tan difícil de digerir, nada que le hiciese sentir asqueado, miro a Malfoy tomando su mano por encima musito un gracias y soltándolo comenzó a comer lentamente.

Después de despedirse de Potter fue a la enfermería y hablo con Madame Pomfrey, le pregunto de las comidas que debe ingerir alguien con enfermedades alimentarías y aunque la enfermera quiso saber de quien se trataba Draco se mantuvo firme y solo prometió decirle quien era en caso de que las cosas empeoraran.

Mientras esperaba a Potter en la entrada los nervios comenzaron a atacarlo pero su determinación pudo mas, el no iba a dejar de hacer lo que tenia que hacer, aunque se enfrentara al mundo entero. Sintió a un grupo de personas llegar y se dio cuenta que potter venia con sus amigos, de inmediato se puso a su lado y aunque todo el Gran Comedor los miraba con desconcierto a Draco no le importo, el estaba en su lugar feliz, ayudando a alguien, sintiéndose útil. Miro a Potter con una mueca de asco y rápidamente reunió algunas cosas que podía comer sin que le dañara, ganándose una mirada agradecida junto con la palabra que pronto se acostumbraría a oír solo lo turbaba el hecho que definitivamente quería que el elegido le volviese a tocar.

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Harry se puede saber que mierda hacías con el hurón – Grito Ron en la sala común, haciendo saltar a todos los que en ese momento se encontraban ahí.

Ron ya te lo dije, solo estábamos comiendo.- dijo por enésima vez Harry con voz cansada. Hermione miraba esta conversación y había algo en los ojos de su amigo que no cuadraba, su voz sonaba cansada, pero llena de determinación, supo que había algo mas allí, quiso averiguarlo pero no quería que su novio y su mejor amigo pelearan de nuevo, a pesar que Ron había madurado siempre tuvo y tendrá cierta reticencia el rubio platinado…

¿Comiendo? ¿Desde cuando comes con el?-dijo Ron con la cara llena de manchas rojas que mostraba cuan enojado se sentía con su amigo y ahí Hermione lo vio con claridad un cierto brillo esmeralda, la palidez extrema, si por primera vez en meses vio a su mejor amigo de verdad. Jadeo y dos pares de ojos se posaron sobre ella, viendo la culpabilidad y el miedo pasando por sus ojos y abalanzándose sobre el moreno, sollozando sin decir nada Hermione dijo:

Harry ¿te ayudara no es así?- y para demostrar su punto rodeo suavemente la muñeca esquelética de su amigo el cual pego un respingo y respondió con voz conmocionada y llena de disculpa. Mientras Ron miraba este intercambio mudo, se dio cuenta de que la morena había visto algo que el no.

Si

Esta bien, Ron, amor, me acompañas a la biblioteca.- dijo la morena con voz llena de dulzura pero con el mismo tono mandón y ojos enrojecidos por las lagrimas

Pero Hermio….

No Ron, vamos ahora, después hablaras con Harry. Y el pelirrojo con la cara llena de confusión siguió a su novia dejando a Harry en la sala común lleno de alivio y culpabilidad por haber hecho sufrir a su amiga.

N/A: Bueno hemos terminado con el primer capitulo, no ha cambiado tanto pero me gusto mucho mas como quedo, la próxima semana se viene el segundo y para las pervertidas amantes del flash si habrá Lemmon pero mas adelante..

Besos y colores