NO AUTORIZO LA COPIA DE ÉSTE FIC. CUALQUIER DUPLICADO DE LA NOVELA ES UN PLAGIO.

Historia desde el punto de vista de Rosalie.

—¡Cuéntamelo todo! — Alice chillaba desde el teléfono.

¿Qué le contara todo? Había muy poco que hablar en realidad. Una tarde en las calles de Seattle y un descuido me llevaron a conocer al chico con el que tenía una cita ésta noche, y por el cual mi mejor amiga, Alice, se había vuelto loca. No era como si fuese mi primer encuentro amoroso con un hombre en… dos años.

Claramente estaba fuera de las pistas, por trabajo y un mal amor, pero aquel encuentro me hizo doblegar, pero al parecer llegar a los treinta años y no tener un marido o un novio a tu lado, era el caos, por no decir, el apocalipsis femenino.

—Alice, es… ¡perfecto! — solté sin poder aguantarme. Me paseaba de un lado a otro en mi casa, algo nerviosa por la cita. —Bueno sólo he conversado con él lo suficiente para convencerme de salir a cenar ésta noche. Y si tan sólo… Si tan sólo lo hubieras visto. No me había sentido así desde…

—Ni se te ocurra mencionarlo. —Alice me recordó.

—Lo sé. En fin. — continué. —No me preguntes más sobre cómo acepté, simplemente ocurrió…

-FLASHBACK-

Salir a comer fuera del edificio de mi empresa, para cambiar la rutina fue toda una aventura: Miles de personas habían pensado como yo, claramente, y las calles eran imposibles de andar, peor aún, con aquellos nuevos tacones que se veían tan hermosos y se sentían tan terribles. Mala, no, pésima idea salir a ablandarlos en un día laboral.

Finalmente, y con la bolsa de mi comida envasada en mano, regresé a mi edificio con tanta prisa como me fue posible. Tanta que ni siquiera pensaba en la masa de gente como seres individuales.

—¡Lo siento! — el hombre chocó su cuerpo con el mío y antes de que los tacones me jugaran una mala pasada, él me agarró. Mi comida se hizo añicos en el suelo y hasta fue pisoteado por un par de transeúntes.

—¡Cuidado! — le respondí molesta, viendo mis bolsas en el suelo. El almuerzo comenzaba a desparramarse en el pavimento, y sentí deseos de gritarle a cada uno de los que me rodeaban. En especial al tipo que tenía en frente.

—Lo siento, en verdad. ¡Déjame hacer algo! — se disculpaba en vano. — No me fijaba para dónde iba la masa.

Lo miré.

Nunca creí en tonterías como el amor a primera vista, ni nada romántico. Para mí el amor dejó de existir hace mucho tiempo, y no iba a reconocer ni en mil años que ese chico me enamoró con tan sólo una sonrisa. No, no lo iba a admitir.

—No te preocupes. — me encogí de hombros y me volteé para marcharme, y pasar otro día sin comida. Qué fastidio de jornada me esperaba.

—¡Espera! — me siguió. —Deja compensar mi error. — dijo sonriente.

Y como no, esos hipnotizadores hoyuelos me cazaron como una presa sin salida.

-FIN DEL FLASHBACK-

—¿Y por eso es perfecto? — Alice bufó del otro lado del teléfono.

Me reí. Claro que sonaba estúpido, que con sólo un breve diálogo, y la invitación a cenar fuese suficiente para formar un criterio del tipo, pero Alice no lo había visto sonreír. Si tan sólo hubiera visto el brillo en sus ojos cuando intentaba convencerme de cenar… Quizás también lo llamaría 'perfecto'.

—¿Al menos sabes su nombre o has sido tan fácil como para aceptar su invitación así sin más?

—¡Alice! — me quejé entre risas. —Se llama Emmett. Emmett McCarty.

N/A: Primer capítulo algo breve. Será una comedia romántica totalmente, con mucho humor por delante.

Respondo todos los reviews. Los Guests los respondo en el próximo capítulo.

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Gracias por leer.