Holaa! En este fanfic es como si solo hubiera pasado hasta el capitulo 11. Bueno espero que os guste.

Capitulo 1:

¿Voy a dónde?

Naomi POV:

Todo era como un día normal. Mis hermanos gemelos escondidos debajo de la mesa comiendo los dulces que les había traido, mi hermana mayor ligando y mi hermano mayor siendo tan encantador como siempre. Si, un día normal, excepto por el hecho de que había visita. Una familia amiga de mi padrastro y otra amiga de mi madre.

Yuzuha Hitachiin, la amiga de mi madre, estaba sentada al lado de ella hablando. Hacía tiempo que no veía a la familia Hitachiin. A Yuzuha y su marido los había visto cinco o seis veces. A sus hijos una vez cuando era bastante pequeña.

Yumiko, mi hermana, estaba hablando con el hijo del amigo de mi padrastro coquetamente. Y cómo hacen todos, el cae rendido a sus pies. Tss, idiota.

Tora y Takeshi, los gemelos, estaban debajo de la mesa del comedor (raro que nadie más se de cuenta) comiendo unos dulces que "robé" de la cocina, mientras los demás comíamos (como personas civilizadas) en la mesa.

Y Kaito , mi hermano mayor, acababa de hacer un nuevo amigo. Claro, un amigo que puede beneficiarle mucho.

Si, día normal. Excepto por el hecho de que tenía la sensación de que algo iva a pasar. Y no me equibocaba.

El amigo de mi padrastro se fue, pero Yuzuha se quedo. Mi madre me llamó y yo fui hacia ella y la señora Hitachiin.

- Naomi, tengo una sorpresa para ti.- Dijo mi madre sonriente.

- ¿Que sorpresa? - Le pregunte.

- ¡Te he matriculado en Ouran!- Dijo mi madre contenta.

- Pero...¿No esta un poco lejos? - Le pregunte yo. Un poco mucho diría yo.

- Lo se, y aquí esta la segunda parte de la sorpresa.- Dijo mi madre.

No me gusta como va a acabar esto...Pense.

- Te quedaras este curso con la familia Hitachiin.- Dijo ella sonriente.

- ¿¡Que!? - Dije yo intentando sonar lo menos grosera posible, ya que la señora Hitachiin estaba al lado. - Pero máma, no podemos causarles molestias a la familia Hitachiin. Tener que llevarme al instituto y cuidar de mí es mucha molestia.

- Tranquila mis hijos van al mismo instituto asi que no es problema, y no me importa tener que cuidar de ti en absoluto.- Dijo Yuzuha sonriente.

¿Hijos? Ah, verdad. Esos gemelos. Maldición. Pensé

- ¿Cuando me iría? - Pregunte a mi madre dandome por vencida.

- Hoy, cuando se vaya Yuzuha.- Dijo mi madre.

- ¿Tan pronto? Tengo que hacer la maleta y...- Dije yo antes de ser interrumpida.

- Tranquila las maletas ya estan hechas. - Dijo mi madre sonriendo. Esa sonrisa diabólica... ¡Lo tenía todo planeado! ¿Cómo no me había dado cuenta?

No se podía hacer nada. Me iva a Ouran.

Tercera Persona:

Los gemelos estaban esperando en el salon sentados en el sofa jugando a un juego. Esperando a que llegara su nuevo juguete. Al principio no estaban muy contentos con la estancia de esa chica desconocida, pero luego pensaron que no estaría mal otro juguete.

Habían prometido al Host Club que la llevarían después de las clases al club. Tamaki, Honey y Haruhi estaban muy contentos con la llegada de esa chica. Tamaki quería tener una nueva "hija" , Honey quería que comiera pastel con él y Haruhi pensaba que no estaría mal estar con una chica para variar.

La puerta del salon se abrio mostrando a su madre con una chica detras suya. Deberá medir dos centimetros mas que Haruhi. Tenía el pelo marron oscuro por los hombros y ojos verdes con largas pestañas. Su cuerpo se podría definir como el de un reloj. Los gemelos se levantaron del sofa a la vez.

- Chicos, ella es Naomi Shimizu y como ya sabéis se quedará todo este curso aquí.- Dijo Yuzuha sonriente dirigiendose a los gemelos y luego se giró hacia Naomi.- Ellos son mis hijos, Hikaru y Kaoru. Ellos te guiaran por la casa y por el instituto. Tu habitación esta al lado de la de ellos.

La chica asintió. Una criada vino y cogió sus maletas para llevarlas a su habitación.

- Bueno la cena estará lista dentro de poco. Podéis hablar mientras tanto.- Dijo Yuzuha mientras salía de la habitación.

Naomi POV:

La vi salir de la habitación y me gire hacia los gemelos. Eran más altos que yo, aunque no mucho. Tenían unas sonrisas diabólicas en sus identicas caras.

- Vaya Kaoru, parece que llego nuestro nuevo juguete.- Dijo el que ahora se que es Hikaru, ya que ha llamado al otro Kaoru.

- Eso parece, Hikaru.- Dijo Kaoru.

- No soy el juguete de nadie.- Dije sin dar mucha importancia a sus comentarios.

- Vaya, un juguete rebelde.- Dijeron los dos a la vez poniendose cada uno a un lado mía.

Me quede mirandolos fijamente. Hikaru y Kaoru. Sonreí pensando que ya podía diferenciarlos.

Despues de mirarme de arriba a abajo me tiraron al sofa y se sentaron cada uno a un lado.

- ¿Estas en la misma clase que nosotros? - Preguntaron ellos.

- Eso parece. - Dije yo con expresión aburrida.

- Luego de las clases vendras a nuestro club - Dijeron los gemelos a la vez con una sonrisa.

No me gusta cuando la gente habla y dice cosas como si fuera una orden pero , ¿que podría yo hacer toda la tarde en esta mansión sola? Nada interesante. No veía ninguna opción mejor, por lo que no discutí sobre su forma de hablarme.

- Vale.- Dije otra vez con expresión aburrida.

Empezaron a hablarme de los miembros de su club , que aún no habían mencionado de que era. No pude evitar dejar de sonreir y de reirme por la forma que los explicaban a cada uno. Ellos tambien sonreían. Tamaki era un dramático total, un idiota y el "Rey" ; Kyoya era terrorifico, un obsesionado del dinero y el rey en la sombra ; Honey siempre estaba comiendo dulces y era adorable y Mori tan solo no decía nada y siempre protegía a Honey. Luego hablaron de un tal Haruhi, por algunos comentarios parecía que fuera una chica pero ellos dijeron que era un chico.

No tardamos en cenar y después me duche. La habitación era bastante grande. Anna, mi sirvienta, había venido conmigo. Ella me peinaba, me yudaba a vestirme, ordenaba mis cosas, etc. También tenía mucha confianza con ella. Me estaba haciendo una trenza para dormir.

- ¿Que tal el día? ¿Te caen bien sus hijos? - Me pregunto con voz dulce sonriendome.

La mire a través del espejo.

- No muy mal, supongo. Y no me caen extremadamente mal.- Respondí yo, sin mucha ilusión en mi voz - Tan solo llevo aquí unas horas y ya echo de menos a mis hermanos.

- Lo entiendo...- Dijo Anna.- Pero Naomi, intenta dejarlos entrar en tu tren.

El tren. Mi vida era como un tren. La gente bajaba y subía al tren. Yo tenía la puerta cerrada para que nadie bajara o subiera.

- Yo no puedo hacerlo, ellos tienen que abrir la puerta.- Dije yo.

Entonces me metí en la cama, ya con el pijama.