Okey, he tenido una semana muy dura, las ideas las he tenido todas revueltas en mi cabeza y realmente necesitaba desahogarme con la primera que saqué de mi mente.

Este drabble está inspirado en uno de los PV's de Free! Staring Days, en el cual al final, vemos a un pequeño Haruka mirando el horizonte, a lo que un pájaro suelta una pluma y Haruka la toma. Me emociné demasiado al mirar esos bonitos ojos de mi bebé Nanase, así que escribí lo primero que pensé.

Realmente, me disculpo por tildes, comas, acentos o puntos que hagan falta. Esto de escribir a las 3 AM no es bonito, no señor.

Ahora me voy, pasen buena noche.

Felices fiestas, mazel tov o lo que sea,

Blast fuera, paz!


| Blue Feathers |

por anoniblast25

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Fue una vez que caminaba por un sendero del parque rodeado con árboles de cerezos. Fue aquella vez en la que él iba saliendo de la escuela y se dirigía directo a casa, como todos los días. Fue aquella vez en la que se encontraba solo, y nadie podía gritarle que no dijera nada o inclusive golpearle por haber susurrado las palabras más dolorosas para sí mismo.

"Yo... quiero dejar de nadar. Yo realmente odio la natación."

Fue esa vez en la que, abatido con dolor y desgracia, pensó y dijo cosas que después romperían su corazón. Fue una vez que se enojó tanto, y que pensó en quedarse ahí, debajo de los cerezos, hasta que llegase el anochecer y las estrellas saliesen.

Porque la presión era demasiada,
en los amigos ya no se confiaba,
y el agua ya no lo aceptaba.

Fue esa maldita vez en la que el aire se revolvió con el rocío, y gotas cayeron en los pétalos de cerezo. Fue única aquella vez en la que el aire lo jaloneó, e hizo que los pétalos cayesen en su cabello.

Fue esa la vez donde un pájaro de enormes alas voló tan cerca de él, sus plumas se habían caído y una de ellas aterrizó en una de las manos de Nanase Haruka.

Porque los recuerdos llegaron como truenos,
su débil corazón ya no estaba muerto,
y la esperanza iba creciendo.

Fue esa la primera vez donde con sus ojos zarcos lloró, y con sus manos, él estrujó la pluma junto a su pecho.

"Yo... no quiero dejar de nadar. Yo realmente amo la natación."

Fue esa la última vez donde tentó esa pluma de hermoso color azul, y dónde sintió que aquella pluma lo protegería.

Porque un hermoso pajarillo de colores lo veía,
desde una pequeña lejanía,
y orgulloso y grande yacía.

‹‹Yo... realmente, amo el agua.››


Sí, eso fue todo. Gracias.