Hola a todos, he vuelto!
Aquí traigo la segunda parte de "Lo que se espera de mi" ya que todos estabais tan entusiasmados con la idea.
Espero estar a la altura y que disfrutéis de verdad este fic.
Por favor, decirme que pensáis y hacia donde queréis que vaya esta historia porque aunque yo la escribo, es toda vuestra.
Espero vuestros Reviews!
Disfrutad! :)
Severus y Hermione Snape estaban besándose fogosamente sobre la gran cama de su dormitorio.
Él la tenía bajo su cuerpo y mientras recorría su boca con la lengua, empezaba a subir la camiseta de su mujer.
Estaban solos en la mansión. Eileen se había pasado todo el verano trabajando en una compañía de teatro muggle representando el musical Mamma Mia! por las principales ciudades del mundo y Sofía estaba pasando los últimos días de Agosto en la Madriguera con los hijos de Harry y Ginny.
El matrimonio gozó de un tranquilo verano. Estaban preparando los baúles para volver en unos días al colegio cuando Severus empezó a "atacar" a su mujer y disfrutar de un momento de intimidad aprovechando que sus dos princesas estaban fuera de casa.
Hermione se removía bajo el toque de su marido. Le costaba creer que después de años de matrimonio y dos hijas él la siguiera deseando de esa forma pero cuando la tocaba de esa manera su mente la despejaba de cualquier duda.
La erección de él presionaba de forma sugerente la entrepierna de Hermione y aunque ambos seguían a medio vestir se movían con urgencia.
La camisa de Severus fue a parar al suelo al lado de la camiseta de su mujer. Empezó a pellizcar sus pezones por encima del sujetador azul de encaje, su boca empezó a recorrer el cuello de su esposa en dirección a sus pechos.
Hermione gemía suavemente y soltaba algún que otro suspiro que no hacían otra cosa que encender todavía mas a su marido.
La juguetona lengua de Severus se dirigía sin piedad a jugar con los pezones de su mujer. Ambos estaban jadeando...
-Por Merlín papa, que asco! - gritó Eileen horrorizada.
El matrimonio se separó en seguida y dejó sus placenteras actividades para mirar con enfado a su hija mayor.
-Que haces tu aquí?- preguntó Hermione mientras convocaba su camiseta y se la ponía.- Se supone que estabas en el trabajo...
-He venido a traeros las invitaciones para esta noche mamá. Pero si llego a saber que me encuentro con... esto, aviso!
-Eileen, no sabes llamar?- preguntó Severus mientras se abotonaba la camisa.
-La puerta estaba abierta y... Además, es asqueroso! Merlín imagina que llego a traer a Sofía conmigo!
-Nena no es asqueroso.- dijo Hermione.- Tienes que entender que tu padre y yo tenemos ciertas necesidades que...
-Ah! La la la la la la...- dijo Eileen tapándose los oídos.- No necesito ni quiero saber sobre vuestra vida sexual, otra vez cerrar la puerta como las personas normales y me ahorráis el trauma.
-Mira que llegas a ser exagerada. - dijo Severus poniendo los ojos en blanco.
Eileen dejó las invitaciones sobre la cómoda de la habitación y se despidió de sus padres. Les dijo que se marchaba a por el último ensayo y que los vería en el teatro.
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A las 19.00 Hermione y Severus llegaron a casa de los Malfoy. Lucius, Narcissa, Draco, Pansy y Lucius junior ya estaban preparados para salir. Todos llevaban sus mejores galas.
Esa era la última función de Eileen antes de volver al colegio para cursar su sexto año. Después de la obra,iban todos a cenar a un lujoso hotel y luego había una pequeña fiesta con todo el elenco.
Cuando llegaron al teatro del centro del Londres Muggle, los Potter ya les esperaban allí con su pequeña Sofía que jugaba con Lily, la pequeña de los Potter.
Todos entraron y se dispusieron a disfrutar del musical.
Aunque Severus creía que era una autentica perdida de tiempo que su hija se subiera a un escenario a cantar y bailar dando brincos por ahí, tuvo que reconocer que se sintió muy orgulloso de ella cuando la vio interpretar magistralmente el papel de Sophie.
No le gustó tanto cuando su pequeña (de casi 16 años, pero SU pequeña al fin y al cabo) se besaba con el actor que interpretaba a su prometido. Un niñato moreno que se ganó al instante la antipatía de Severus y la de Lucius junior que le mandaba miradas llenas de odio que no pasaron desapercibidas para Snape.
Al final de la obra todo el publico se ponía en pie y bailaba y cantaba la canción Waterloo con todo el elenco. Seveurs, Lucius y Draco y Lucius junior eran de los pocos que se mantenían sentados.
La función terminó entre muchos aplausos y una pequeña sorpresa para Eileen que consistió en un agradecimiento público para Eileen, un regalo que luego resultó ser una foto de todo el elenco es un bonito marco de plata y un gran ramo de rosas.
Después de ese emotivo momento todos salieron y las familias esperaron a la chica para ir a la cena.
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La cena transcurrió tranquila y entre risas en uno de los salones de un lujoso hotel del centro.
Después pasaron a una de las salas de fiestas que habían reservado para los actores y allí empezó la fiesta.
Severus, Draco, Harry y Lucius se acercaron al bar y pidieron tres vasos de escocés. las mujeres estaban sentadas en unos cómodos sofás mientras charlaban y bebían sus cócteles. Los niños correteaban entre los adultos jugando y Lucius junior miraba con mala cara como Eileen hablaba animadamente con el resto de actores.
La música era alegre e invitaba a bailar. Los adultos se acercaron a sus respectivas parejas y se animaron a estrenar la pista de baile. Incluso Severus se puso a bailar con su mujer pero solo para que no se le acercara ninguno de esos actorcitos que tanto la miraban.
Aprovechando la distracción, Lucius Junior, se acercó a Eileen y la arrastró por el brazo a un pasillo lateral.
-Que narices haces Luc?- preguntó Eileen algo molesta.
-No, que narices haces tu! Te pasas todo el verano mandándome lechuzas, fotos y diciéndome cuanto me echas de menos y cuando por fin llegas a Londres yo ni existo.
-Sabes que no es cierto. Entiende que han sido mis compañeros por casi 3 meses y me quiero despedir de ellos.
-Entiende tu que me he pasado casi 3 meses esperando a que volvieras.
Eileen lo miró sorprendida y se lanzó a abrazarlo.
-Te he echado muchísimo de menos Luc.
-Yo a ti mas Eili.- dijo Lucius junior con una sonrisa.
Él quería besarla a toda costa. Se había pasado el verano suspirando por esa chica que ahora tenía en sus brazos. Era ahora o nunca. Se acercaba lentamente a sus labios. Ella parecía no rechazarlo...
-Que narices hacéis?- interrumpió Draco.
-Papa! - dijo Lucius soltando rápidamente a Eileen.- Esto...
-Calla, no quiero oír nada. No he visto nada. Y mas os vale ser mas cuidadosos o Snape te mata hijo.
-Pero tío Draco, que no ha pasado nada...
-Eileen nena, no tienes que hablar de algo que no he visto. Yo solo eh encontrado a mi hijo hablando con su amiga. Nada mas. Y ahora los dos de vuelta a la fiesta donde hay luz y estáis rodeados de gente.
Los dos chicos bajaron la cabeza avergonzados y se dirigieron al salón. Cuando su hijo pasaba por su lado, Draco lo detuvo.
-Andate con ojo. Parece mentira que no conozcas a tu padrino. Si pones un solo dedo encima de su hija te mata!
El chico suspiro resignado y se dirigió a la fiesta.
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Eileen maldecía interiormente a su tío Draco. Llevaba enamorada de Luc siglos y cuando por fin parecía que lo suyo iba a ir un paso mas allá aparecía él...
Ese iba a ser un curso interesante para todos.
TBC...
Reviews? :)
