DISCLAIMER: no es mío, ni el poema ni los personajes. YO nada más encontré la manera de juntarles.
"Un poema de amor y una pasión desesperada"
-Perdón por llegar tarde, es que me quedé de más en la oficina y…- dijo una Hermione apurada, colocando su bolsa en el respaldo de la silla y sentándose rápidamente en la silla frente a un moreno con cara de fastidio.
-No te disculpes, en serio. No vale la pena.- dijo el moreno haciendo un gesto con la mano y mirando fijamente a Hermione.
-Ok...-dijo la castaña dudosa. Odiaba esto de las jodidas citas a ciegas entre sus malditos amigos.
-Ahora, tienes 20 segundos para decirme algo interesante sobre ti antes de que me vaya.- Hermione frunció el ceño.
-Pero ni siquiera…
-Diecinueve, dieciocho…- empezó a contar el moreno y Hermione miro alrededor de ella. Esto era una broma? Saldría Ginny de la nada con una cámara en la mano gritando "hey, sorpresa!" Al parecer no.
-Amm, bueno…- El moreno tenía la muñeca levantada mostrando su reloj y viendo a Hermione fijamente.- Pues, la verdad no se qué decir.- dijo una castaña nerviosa. El moreno la seguía mirando impasible desde su lugar.- Bueno, pues…Me gusta leer…mucho…y escribir.- dijo Hermione sonriendo levemente.- De hecho soy editora de libros. Me gusta cocinar y tambien hornear…me gustan los niños y los animales pequeños…los que son amables nada más porque después…
-Te regalo veinte segundos de mi tiempo y esto es lo mejor que me pudiste decir?- dijo con una expresión seria el moreno a una sorprendida Hermione.- No me gusta que me hagan perder mi tiempo y honestamente lo acabas de hacer.- Hermione miraba sorprendida como el hombre se levantaba de su asiento y la miraba a los ojos.- Por cierto, no eres tan bonita como me dijeron. No vale la pena para nada.- dijo murmurando lo ultimo dándose media vuelta y saliendo del lugar. Hermione se quedo viendo la silla quedó había vaciado el hombre antes de irse tan abruptamente. Odiaba las citas a ciegas.
Por algún extraño motivo Ginny, su mejor amiga desde que Hermione tiene memoria, estaba empeñada en juntarla con cualquier hombre disponible que su amiga pelirroja conociese. Todo esto empeoró cuando Ginny se casó con el mejor amigo de Hermione. Al parecer Ginny encontraba que ser una mujer soltera y con apenas relaciones entre personas del sexo opuesto a los 27 años de su vida un poco triste. Hermione nunca había sido una persona social. Si, tenía amigos, pero todos habían iniciado la amistad con ella. Ginny comenzó a hablarle de la nada un día en el parque, Harry le pidió una pluma en una clase de la Universidad y Ron se la devolvió mientras le pedía la tarea de cálculo. Todas sus amistades comenzaban por parte de los demás.
Su último y único novio lo conoció porque él le pedio ser su compañera de laboratorio en el último año y ella había aceptado. Durante las prácticas en la tarde una cosa había llevado a la otra y de pronto eran novios. Después de casi dos años él decidió que deseaba irse al extranjero a poder seguir sus sueños, los cuales al parecer no incluían a Hermione.
-Disculpe, aquí esta su cuenta.- dijo una mesera, depositando una carpetita color negro con un ticket de papel sobresaliendo de una esquina. Hermione la miro confundida.
-No, debe de haber un error, yo no he comido…- y de pronto lo entendió. El muy cínico había comido mientras la esperaba y se había largado dejándole la cuenta. Hermione suspiró derrotada y saco la tarjeta de crédito de su cartera. Al menos él idiota no pidió lo más costoso del menú. La mesera se retiro con la cuenta y la tarjeta. Después de un momento la mesera regreso.
-Lo siento señorita, pero su cuenta ya ha sido cubierta y le mandan esto.- dijo la mesera, poniendo un pequeño caballito de tequila en la mesa. Hermione le miro aun mas confundida.
-Pero, yo no pedí esto y quién pago la cuenta?.- Hermione dudaba seriamente de que el hombre se hubiera regresado a pagar lo que comió. Nadie nunca regresaba.
-No, la bebida y la cuenta son de parte del caballero de la barra.- Hermione frunció el ceño y miró hacia la barra del bar donde la mesera estaba señalando a un hombre de cabellera rubia. Hermione frunció mas el ceño.
-No, creo que hay un error. No lo conozco, de seguro se refería a la otra mujer que está sentada atrás de mi.- La castaña señalo a la mujer que estaba comiendo sola detrás de ella. La mesera negó.
-No, no hay error, el señor fue muy específico a la hora de señalarla.- dijo la mesera, retirándose, dejando en la mesa la tarjeta de Hermione y la bebida. La castaña miró hacia la barra y frunció de nuevo el ceño. No conocía a nadie rubio, mucho menos a un hombre. La castaña se levantó, tomo su bolsa del respaldo de la silla y se dirigió hacia el bar. Cuando llegó hacia el hombre, le toco suavemente el hombro y le hablo.
-Disculpe.- el hombre se volteó y Hermione pasó saliva. La castaña nunca pensó que un hombre rubio pudiera ser tan atractivo. El hombre tenía los ojos más azules que había visto nunca, tenía una ligera capa de barba también de color rubio, casi castaño muy claro, la castaña podía casi jurar un poco de rojo si lo miraba muy de cerca.- Amm…- Hermione sacudió la cabeza, concentrándose.- Creo que hubo un error. La señorita me dijo que había pagado la cuenta y este trago.- dijo posando el vasito en la barra, junto al rubio. El rubio miró el vasito y luego a Hermione.
-No, no hubo un error.- dijo el rubio sonriendo de lado y le ofreció su mano.- Draco Malfoy.- dijo presentándose. Hermione lo miró sorprendida.
-Amm…Hermione.- dijo tomando la mano y apretándola. El rubio sostuvo la mano de Hermione por un momento más.
-Tienes lindas manos, Hermione.- La castaña se ruborizo y volvió a sacudir la cabeza. Concéntrate.
-Bueno, venía a pagarte.- dijo sacando su cartera de la bolsa para poder sacar efectivo cuando el rubio la detuvo con su mano.
-No, no puedo aceptarlo.- Hermione abrió la boca para poder contradecirlo pero el rubio la volvió a introducir.- No deberías pagar por algo que no consumiste, mucho menos algo de ese imbécil.- Hermione le miro extrañada.
-Amm, gracias supongo, pero no es necesario, me sentiría mejor si…
-Me sentiría realmente ofendido si recibiera dinero de ti, Hermione.- dijo el rubio sacando una silla alta de la barra y señalando para que Hermione se sentara.- y no creo que queramos ofendernos tan recién iniciada nuestra amistad.- dijo el rubio tomando su bebida y dándole un sorbo. Hermione negó lentamente con la cabeza. El rubio sonrió.- Bien, Hermione, noté qué no tuviste nada de comer, no sé si te gustaría pasar directo al postre?-pregunto el rubio. Hermione le miro confundida. No sabía si era por como lo había dicho el rubio o porque de verdad era muy atractivo pero encontraba un ligero rastro de insinuación sexual en eso.
-Tengo una duda.- dijo la castaña.- Cuando te refieres al postre, te refieres a comida de verdad o estás hablando de relaciones sexuales?- Hermione pregunto sentándose en la silla alta junto al rubio. – Es que una vez leí un libro y decían esa misma frase pero la noche no termino con un pastel de chocolate si no en otra cosa.- dijo Hermione. El rubio soltó una risa y la castaña se ruborizo.
-No, no me refiero a eso en absoluto. De hecho, me refería al pastel de chocolate o algún tipo de variado.- dijo el rubio, ahora acerco el vasito de tequila a la castaña.- Se veía que lo necesitabas.- Hermione asintió lentamente, respiro hondo y se tomo el vasito de un solo trago. Draco sonrió cuando vio como Hermione hacia cara de asco.
-Sabe muy…- Hermione saco la lengua haciendo mostrar su desagrado por el líquido ámbar.
-Después de tres seguidos no sientes nada.- dijo el rubio ordenando un par más y la castaña asintió. Ya después de casi 6 vasitos de tequila, Hermione se había quitado el abrigo y estaba compartiendo un pedazo de pastel de chocolate junto con el rubio.
-…Y luego llega la mesera con la cuenta.- Hermione soltó una risa y el rubio sonrió.- Nunca me había pasado algo tan vergonzoso.- La castaña partió un pedazo de pastel con su tenedor y se lo llevo a la boca.- Este es el mejor pastel de chocolate de todo el mundo…incluyendo el mío y eso que el mío es muy bueno.- dijo con la boca llena haciendo que el rubio soltará una risa.
-Yo juzgaré eso.- dijo el rubio también llevándose a la boca un pedazo de pastel.
-Algún día te haré un pastel. Todos deberían hacer pasteles. Comer pasteles siempre.- Hermione sonrió ante el pensamiento y luego frunció el ceño.- aunque me daría diabetes y probamente estaría enorme.- soltó una risita tonta.- y ahora si adiós todas las oportunidades de citas.
-A que te refieres?- frunció el ceño el rubio.
-Imagínate, en este mismo instante estoy comiendo pastel con un desconocido porque acabo de ser completamente dejada en una cita en menos de 20 segundos.- dijo Hermione apoyando su mano en su mejilla y moviendo el pastel en su plato.- Y eso es con un sobrepeso menor a 5 kilos, imagínate si comiera pastel todo el día, mi sobrepeso seria de más de 50 kilogramos y no creo que tendría ninguna oportunidad para entonces.- la castaña termino su oración con un suspiro.
-No creo que tu peso tenga nada que ver.- dijo el rubio encogiéndose de hombros, llevándose un pedazo de pastel a la boca. Hermione le miro con una ceja enarcada.
-No? Entonces dime qué es? Porque honestamente no puedo descifrarlo. En todo este tiempo, en todas las horribles citas que me ha arreglado Ginny siempre resultan en desastre. En ninguna miento, trato de ser yo misma, les digo lo que me gusta y siempre resulta aburrido.- dijo levantando la voz.
-Dime que te gusta. - dijo el rubio, curioso.- No creo que sea aburrido.- Hermione rodo los ojos.
-Si lo es. Al momento en que digo que me gusta leer puedo sentir como te estás durmiendo por dentro.- Draco sonrió.
-No creo que leer sea aburrido. De hecho lo encuentro interesante.- dijo el rubio encogiéndose de hombros y llevándose otro pedazo de pastel a la boca. Hermione le miro escéptica.
-De verdad? No crees que leer sea aburrido?- Draco negó con la cabeza. Hermione bufó.- Bueno, después de leer sigue escribir.
-Escribir tampoco es aburrido. De hecho es algo como terapéutico. Poner todo en palabras, lo que no expresas.- dijo el rubio tomando ahora un sorbo de su licor. Hermione le miraba con la boca abierta.
-EXACTO! Porque los demás piensan que es aburrido? Luego mencionas lo de cocinar y hornear y ahí ya se hundió todo.- dijo Hermione tomando de nuevo un vasito de tequila de un solo sorbo, ya sin sentir el ardor en la garganta.
-Ahí me tienes, no sé nada de cocinar o de hornear, aunque en los infomerciales las mujeres se ven muy divertidas mientras lo hacen.- dijo el rubio sonriendo junto con Hermione.
-Bueno, pero no es tan necesario para un hombre cocinar.- dijo Hermione con el ceño fruncido.
-Si lo es. Sabes lo que cuesta la comida rápida en estos días? – Hermione soltó una risita y asintió mirando al rubio.- creo que cocinar es sexy, aunque creo que es debido a que te imagino solo con un delantal puesto y nada más.- dijo el rubio con voz ronca. Hermione se ruborizo y trago el pedazo de pastel que tenía en la boca.
-Yo podría cocinar para ti algún día…- dijo la castaña como quien no quiere la cosa. El rubio sonrió.
-En serio? Pero cumplirás mi enferma fantasía de no usar nada debajo del delantal?- dijo acercándose a su cara. Hermione podía oler el chocolate y la colonia del rubio estando tan cerca de él.
-No creo que sea una enferma fantasía.- dijo Hermione susurrando. El rubio se acerco más a ella, casi donde sus frente estaban juntas.
-Como sabes que no es enferma, Hermione? A lo mejor en mi mente te hago muchas cosas malas.- dijo en un susurro el rubio. Hermione negó.
-Hay fantasías mas enfermas.- El rubio enarco una ceja.
-Como cuales?- Hermione se ruborizo.
-Muchas.- dijo la castaña separándose del rubio. Draco no iba a tener nada de eso, el rubio acerco la silla de Hermione a la de él y le paso el brazo por el respaldo de la silla, haciendo que la mano quedará justo a la altura de su pecho derecho. Hermione podía sentir el calor.
-Menciona una. Una de las tuyas.- dijo el rubio a Hermione al oído. La castaña negó lentamente con la cabeza. El rubio sonrió y tomo uno de los caballitos de la barra y se lo tomo de un trago. Hermione simplemente miro como su manzana de Adán subía y bajaba con el trago de tequila. El rubio le tendió a Hermione un caballito de tequila, la castaña lo tomo y se dé un solo trago se lo llevo a la boca. – dime, Hermione.- dijo el rubio mientras le mordía ligeramente la oreja a la castaña. Hermione sintió un escalofrió.
-Te burlarás.- dijo en voz baja. Draco negó.
-Dudo que me burle de una fantasía tuya Hermione. Algo me dice que no es la típica fantasía adolescente de doctor con paciente o Maestro con alumna.- dijo el rubio ahora besándole el cuello lentamente.- Dime y la hacemos realidad.- dijo el rubio susurrando. Hermione inclino su cabeza, dándole más acceso al rubio.
-Siempre he tenido la fantasía de…-la castaña se detuvo pero el rubio la motivo a seguir con un ligero mordisco en el cuello.-…de hacer el amor mientras recitan el poema numero 1 de Neruda. El primero de "20 poemas de amor y una canción desesperada".- el rubio sonrió mientras le pasaba su mano por la cintura y le besaba detrás de la oreja.
-Bueno es no es muy difícil de cumplir. Creo que has encontrado a la persona correcta, pequeña.- dijo el rubio son una sonrisa enorme en el rostro. Hermione le miro confundida.
-Aunque no haciendo el amor, más bien más…fuerte.- dijo Hermione no sabiendo expresarse. El rubio se sorprendió con la soltura de la castaña, debía ser todo el tequila.
-Algo así como…- El rubio se acerco de nuevo al odio de Hermione y susurro.-… coger?- Hermione soltó un gemido que el rubio corto besándole los labios. Hermione sintió como el rubio la tomaba por la nuca y le besaba con pasión. Sentía como Draco le succionaba el labio inferior y como trataba su lengua abrirse paso entre ellos. Cuando su lengua lo logro, acaricio la lengua de ella sensualmente y Hermione nunca había sentido algo más erótico en su vida…y era solo un beso. El rubio dejo de besarla, se paro y deposito un billete en la barra.- creo que es momento de irnos.- dijo, tomando el abrigo y la bolsa de la castaña con un brazo y con la otra mano la tomo a ella por la cintura.
-Pero un no me acababa mi pastel.- se quejo ella. El rubio le beso la mejilla y sonrió.
-Lo último en lo que estarás pensando en mi apartamento es en pastel.-dijo el rubio jalando a la castaña hacia afuera del lugar, haciendo la señal para detener a un taxi y rápido un taxi se detuvo a la orilla del local. El rubio le abrió la puerta a la castaña y entro después él, le dio la dirección al taxista y partieron.
-De verdad vamos a tu apartamento?- pregunto la castaña tímida. El rubio asintió con la cabeza y le aparto un poco de cabello del rostro. Hermione se mordió el labio nerviosa.- No traigo ropa interior bonita.- dijo para sí misma la castaña. El rubio soltó una risa.
-No creo que la ropa interior sea necesaria Hermione.- dijo el rubio mientras le acariciaba la rodilla descubierta por el vestido y le besaba los labios sensualmente. Hermione pasó su mano por el cuero cabelludo del rubio, estirando un poco.
-Draco…-gimió Hermione, haciéndole saber al rubio lo bien que se sentía su mano recorrer el contorno de su rodilla. Algo tan sencillo y sensual a la vez.
-"Cuerpo de mujer…"- dijo pasando la mano desocupada por su cintura, alzándola y poniéndola en su regazo, Hermione a horcajadas sobre él.-" Blancas colinas…"- dijo ahora besando su clavícula y el borde de sus senos que se dejaba ver por el escote del vestido.- "Muslos blancos…"- el rubio acaricio los muslos de Hermione, quién simplemente gemía por las caricias que el rubio le proporcionaba. El rubio rozó con su dedo la entrepierna de Hermione y la castaña arco su espalda, ofreciéndole su pecho al rubio.- "Te pareces al mundo en la actitud de entrega…"- El rubio le devoró el escote del vestido, comiéndole a besos el borde de sus senos.- "mi cuerpo de Labriego salvaje te socava y hace saltar al hijo del fondo de la tierra…"- el rubio tomo las caderas de Hermione con ambas manos y las froto sobre su entrepierna, quien se hacía notar bastante erecta debajo de la tela de su pantalón. Hermione le estaba gimiendo al rubio en su oído cuando escucho a lo lejos la voz de otra persona.
-Hey!.- dijo el taxista. El rubio saco un billete de su cartera, se lo arrojo al taxista y aun con Hermione a horcajadas, la bolsa y el abrigo de ella se bajo del taxi y entro a su apartamento. Hermione no dejó de besarle la mandíbula y el cuello en todo el camino. En cuanto entraron al apartamento el rubio pego a Hermione contra la puerta y la beso.
-Draco, dime más.- gimió Hermione en su oído. El rubio no se podía concentrar más que en lo bien que Hermione encajaba con su cuerpo.- Draco, mas!- Dijo Hermione con voz demandante. El rubio acomodo bien los muslos de la castaña alrededor de su cadera y dejo ir una mano hacia la entrepierna de la castaña, aventurándose dentro de sus pliegues, sintiendo como le excitaba que le cumpliera su fantasía.
-"fui solo como un túnel…"- el rubio movió sus dedos dentro de los pliegues de Hermione, sintiendo su humedad causada por él.- "De mi huían los pájaros…"- dijo mientras la movía de contra la puerta al sillón, la recostaba y se sacaba el vestido de un solo tirón. Ahí la tenía, con un pequeño conjunto de lencería discreta color azul marino y los cabellos alborotados. Draco se removió su camisa, su pantalón y su bóxer, quedando completamente desnudo e hizo lo mismo con ella.- Que sigue Hermione?.- le pregunto el rubio a la castaña, mientras ella sentía como el rubio pasaba la punta de su miembro por los pliegues sus pliegues, sentía como su pene tocaba su clítoris y era el cielo.- Que sigue, Hermione? Dímelo.- Hermione le beso la boca y le acaricio el pecho.
-"Y en mi la noche entraba su invasión poderosa…"- La castaña se quedo sin aliento al sentir como el rubio la penetraba decidido, sin darle tiempo de tomar aire, seguro.- Draco…- gemía Hermione, abrazándolo por la espalda.
-"Para sobrevivirme te forje como un arma…"-El rubio comenzó un ritmo decidió, firme, sin pausa, haciéndole saber quien estaba llevando las riendas de quién.- "Como la flecha de mi arco…"- Hermione sintió como el rubio la embestía con más fuerza, haciendo que ella le pasada un brazo por los hombros, sosteniéndose y una pierna por la cadera.- "Como una piedra en mi honda…"- Draco le tomo un pecho con la boca, succionando el pezón fuertemente, haciendo que Hermione soltará un gritito de sorpresa y excitación. El rubio sabía que no iba a durar mucho con esos grititos de Hermione.- "Pero cae la hora de la venganza…"Tomo a Hermione por la cintura y se sentó, haciendo que la castaña volviera a quedar a horcajadas sobre él, penetrándola aun más profundo.-" y te amo…"- Susurro el rubio, besándole el pecho, sobre el corazón.
-"Cuerpo de piel…"- dijo la castaña besándole la mandíbula mientras se movía sobre él. El rubio hecho la cabeza hacia atrás, mientras ayudaba con la manos a mover las caderas de Hermione sobre las de él.- "De musgo…"- dijo acariciando la barba a medio crecer en el rostro del rubio.- "De leche ávida y firme…"- Hermione le beso el cuello y le paso las manos por los anchos hombres y sus omoplatos. La castaña mordió el hombro del rubio, sintiendo como su orgasmo la envolvía.
-Eso es, castaña. Así, déjame sentirte.- murmuraba el rubio en el oído de la castaña, sintiendo como Hermione estaba disfrutando de su acto.- "A los vasos de pecho!..."- el rubio le volvió a tomar un pecho en la boca, succionando y haciendo que Hermione se arqueara hacia él y cerrara los ojos del placer.-" A los ojos de ausencia!..."- El rubio bajó su mano hacia el clítoris de Hermione y empezó a frotarlo hábilmente, haciendo que Hermione gimiera y volviera a empezar a mover sus caderas de nuevo contra las del rubio.- "A las rosas del pubis…"- Hermione abrazo al rubio con ambos brazos por los hombros de él y recargo su mejilla junto a la de Draco y comenzó a gemir en el oído de él roncamente. El rubio sonrió al sentir como Hermione estaba en busca de otro orgasmos nuevamente.- "A tu voz lenta y triste…"- el rubio sentía la respiración entrecortada de Hermione en su oído.-"cuerpo de mujer mía, persistirá en tu gracia…"
-Draco, vente conmigo. –le invito Hermione en un susurro en su oído. Draco sintió como su orgasmo llegaba junto con él de Hermione, haciendo que soltará un gemido ronco y abrazara a Hermione por la cintura con su brazo, moviéndola lentamente, para poder terminar dentro de ella. Hermione se quedo inmóvil por un rato, respirando entrecortadamente en el cuello del rubio. Ambos se quedaron abrazados por unos momentos inmóviles.
-"Mi sed, mi ansia sin límite…"- dijo Hermione besándole la boca lentamente. El rubio se dejo besar, sintiendo como Hermione trataba de imprimir en ese beso todo. Al terminar, Hermione recargo su frente en la de él y se miraron a los ojos.
-"Mi camino indeciso. Oscuros causes donde la sed eterna sigue…"- dijo el rubio acariciándole los rizos desordenados lejos del rostro de ella. Hermione sonrió débilmente.
-"Y la fatiga sigue, y el dolor infinito."- Termino la castaña, removiendo también el cabello rubio de la frente del rubio, dejando ver sus ojos azules. Ambos se quedaron callados simplemente mirándose a los ojos.- Es la mejor cita fallida que he tenido.- dijo en voz baja Hermione. El rubio soltó una risa y le beso los labios rápidamente.
-Sabias que como esté hay otros 20 poemas y creo que hasta una canción también…
Es la segunda vez que hago un fic solo por escribir una escena de sexo...y debería hacerlo más seguido. Es muy divertido.
Como siempre, a frida se le ocurren cosas mientras no puede actualizar la historia que tiene pendiente, pero ya ven que siempre actualizó cuando menos se lo esperan.
Si tengo algún error en el poema de Neruda, disculpas de antemano, lo escribí de mente, ni siquiera lo busqué. Me corrigen en los reviews :)
Atte: Friidaaa (a 26 de julio del 2O11 a las 2:18 de la tarde) *Es la primera vez que no actualizo en la madrugada o noche.*
