Los personajes no son de mi propiedad, sino, de la magistral mente de JK. La trama principal de este fanfic, está ambientada en una linda experiencia que viví a los 15 años, el movimiento estudiantil en Chile, el año 2006.

Se necesitan romper reglas. Ella lo hace y él incondicionalmente, le seguirá. ¡Pingüinos, unidos, jamás serán vencidos!

Capítulo I

El primer día, de mi último año.

Ron Weasley POV

Sentí el despertador a lo lejos, muy lejos, a pesar de estar cerca, muy cerca de mi cuerpo.

De un manotazo lo apagué, me enrosqué nuevamente en las sábanas y seguí soñando con algo que ya había olvidado. No importaba, el no recordar mi sueño no era excusa para no poder seguir durmiendo y disfrutar de mi cama y comodidad.

—¡Ronald Weasley! ¡Es tu primer y último día de clases en el colegio, levántate ahora mismo! —la voz de mi angelical madre era tan dulce por las mañanas…

Ajeno a los gritos que provenían de la planta baja, lentamente me senté en la orilla de mi cama, estiré mis brazos hacia atrás, moví mi cuello con tranquilidad. Observé mi habitación por un instante, estaba todo el uniforme del colegio correctamente planchado (gracias, mamá) el pantalón gris, con la raya recta en cada pierna, los zapatos negros lustrados, brillaban demasiado a mi gusto, la camisa blanca, la corbata azul marino con las líneas moradas tan oscuras como el azul que ni siquiera se notaban, y el chaquetón del mismo tono azulado, con la insignia del colegio en un bolsillo que se encontraba en la parte izquierda del pecho.

Con cuidado, tomé la ropa y entré al baño. Una ducha rápida y en menos de cinco minutos, estaría abajo, tomando desayuno con el resto de mi familia.

—¡Cómo me haces rabiar, hijo!

—Ya estoy aquí, listo —sabía cómo calmar a mami, le di un beso en su mejilla y automáticamente me respondió con una sonrisa—, ¿Te vas conmigo, Ginny?

—No. Harry me pasará a buscar. ¿Quieres irte con nosotros?

—Por supuesto que quiere —mi padre, algo calvo, pero con un poco de cabello rojizo en vez de canas platinadas, aún no comprendía que mi hermana tenía 16 años, y que estaba bastante bien cuidada siendo la novia de mi mejor amigo, Harry.

—¡Papá! Llevo más de tres años de novia con Harry, ¿y aún no le tienes confianza?

—Nunca le tendré confianza al joven que me haya arrebatado a mi pelirroja pequeña —Ginny le miró con la mirada enojona Weasley—. Sabes que bromeo pequeñita, y que te cuido porque eres hermosa y siempre serás mi hija regalona —le hablaba mi padre, mientras le acariciaba la cabellera.

—¡Qué no soy pequeña papá! —respondía un poco más calmada, sonriendo.

—Lamento informarles que el sujeto por el cual pelean, está afuera, esperándonos —me levanté, hice ademán de despedirme, y jalando a Ginny de los brazos protectores de mi padre, salimos al encuentro de mi amigo.

Harry es mi mejor amigo, lo conocí cuando tenía cinco años. Siempre ha usado gafas, y estas le cubren sus ojos verdes heredados de su madre. Su cabello nunca ha estado ordenado, al igual que el mío, con la diferencia que su tono es el negro azabache, y el mío, rojizo como el sol al atardecer. Desde que fuimos compañeros de kínder (1) no nos hemos separado más, y producto de las siempre visitas a mi casa, mi hermana Ginny, (un año menor que yo) se enamoró perdidamente de él hace como… como cinco años atrás.

Harry es igual de pánfilo que yo… bueno, ahora no lo es tanto, puesto que desde que comenzó a salir oficialmente con mi hermana, cambió un poquito y se volvió más sociable y abierto con la gente. Es un alumno excelente, con las mejores calificaciones, y este año ha agregado un nuevo reto a su vida. Él junto a otros amigos nuestros, desean postularse para ser el CEAL (2) de nuestro colegio, Hogwarts. Tienen muchas ideas y yo, como buen amigo (y para sociabilizar mejor con mis compañeros) les apoyaré en todo lo que pueda.

—Te extrañé… —Ginny le daba un pequeño pero dulce beso cerca de sus labios, mi amigo aún se sonrojaba por esas muestras y dosis de ternura por parte de mi hermana.

—Ginny, lo viste anoche —le recordé para fastidiarla un poco y aliviar la vergüenza de mi amigo.

Ella nada más me movía su cabello del mismo tono que el mío, en muestra de —no querer hablar más contigo— agarraba del brazo a mi amigo y partían la caminata unos pasos más adelantes que yo.

—¿Listo para nuestro primer y último día de clases, amigo? —mientras caminábamos, Harry torció su cabeza para mirarme hacia atrás.

—Listo y estaba pensando en que… —iba a continuar hablando, pero una pareja nos hizo perder el hilo de nuestra conversación.

—A que no adivinan quién me pidió noviazgo a fines de mes —radiantemente, Luna nos daba aquella noticia.

—¡No lo puedo creer! —articulaba mi hermana. Yo reía internamente; al parecer, era el único sin novia en el grupo.

—¡Hasta que te confesaste, Neville! —Harry abrazada y animaba a nuestro compañero de curso, Neville. Un personaje en el aula, algo desgarbado, con las mejillas rojas y una mirada tierna. Siempre estuvo enamorado de Luna Lovegood, la chica quien hacía un momento había interrumpido nuestra conversación—, que su relación perdure mucho tiempo, como la mía con Ginny —deseaba mi amigo realmente emocionado.

Luna, la ahora novia de Neville, es dueña de un cabello rubio y largo, el cual cubría toda su espalda, unos ojos azules, iguales a los míos, con la diferencia que estos eran algo desorbitados 'o yo los veía así'. Es bastante endémica esta chica, le gusta lo paranormal y los objetos raros, aún así, es la mejor amiga de mi hermana y no sé cómo caracteres tan distintos, se llevaban tan bien.

—¡Tienes que contarme todo, con lujo y detalles! —Ginny la arrastraba mucho más adelante. Lo bueno de aquello, era que podría conversar con mis amigos tranquilamente lo que quedaba de camino hasta llegar a nuestro colegio, nuestra casa de estudios por más de trece años.

Seguimos con la caminata, muy alegre y amena, conversando de nuestros últimos días de vacaciones, sobre todo con Neville, puesto que a Harry lo veía prácticamente, todos los días.

—… Y así fue como me animé a confesarme ante Luna, no lo habría hecho si no la hubiera llamado ese día preguntándole cómo estaba su cobayo africano.

—Algo poco romántico, pero al fin de cuentas vale, están juntos, ahora falta Ron.

—¿Yo?

—Claro, así podremos salir todos en pareja, sería divertido, ¿no crees, Harry?

—Por supuesto que sí.

—Se supone que tienes que apoyarme, no darle la razón al enamoradizo reciente.

—Porque soy tu amigo, y porque además, también soy un enamoradizo, quiero que del mismo modo conozcas lo feliz que uno se siente amado y amando.

Si había algo que odiaba con todas mis fuerzas, pero lo disimulaba muy bien, era que me intentaran conseguir una novia. Debo decir que nunca había tenido una, pero no porque no quisiera, sino porque no tenía tiempo para ellas. Soy el presidente del club de ajedrez y me encanta, soy el presidente de mi salón, el mejor de mi clase, seguido por Harry, claro, y siempre salgo en el cuadro de honor por mi correcta vestimenta, un ejemplo a seguir, según mis pares. Por eso mismo, muchas chicas de cursos inferiores quisieron tener nexos conmigo, pero era netamente el querer resaltar… no quiero encontrar el amor, y tampoco quiero que me encuentre.

—No podemos buscarte pareja en el salón… estar de novio con alguna de nuestras compañeras de curso sería ilegal, son como nuestras hermanas —decía Neville.

—Y las más lindas de tercero medio (3) ya están ocupadas —agregaba Harry.

—Tendremos que buscar en cursos menores o en otros colegios.

—Si necesito ayuda —traté de sonar lo más convincente posible—, les diré, serán los primeros, se los juro.

—Bien. Promesa de hombres —y así sellamos el pacto. Un pacto que realmente, lo había profesado sin importancia alguna.

Inconsciente del tiempo, llegamos justo a la hora de entrar a clases, ni siquiera percibí el retraso de nuestra llegada por haberme quedado un poco más de tiempo en mi cama.

Se sentía bien el volver a los pasillos del colegio, aunque no quiera reconocerlo, siempre se extraña, porque aquí pasa de todo, a mí aún no me ocurren cosas tan fantásticas, pero lo digo por la gente que está a mi alrededor.

Mientras me dirigía solitariamente a mi sala (porque mis amigos se ponían como sanguijuelas con sus novias) me di cuenta de algo, se podía ver gente extranjera en la oficina del director Albus, —sé que es extraño, porque conozco a todas las personas de Hogwarts— ¿Una pareja de padres? Y parece que pedían una matrícula. Sea bueno o malo, igual conoceré a esa persona.

Seguí mi camino, entré a mi sala que tenía el número 17, dejé mi bolso y salí a tomar aire, a esperar a mis amigos, a seguir con mi primer y último día de clases.

Había algo en mi interior que me decía que este año sería especial, pero no sólo por ser el último. Mi aura —como le llamaría Luna— se sentía especial y emocionado.

Nota de la autora:

Primer fic que escribo de Harry Potter, y espero que no sea el último xD. Del mismo modo, es el primero en donde incursiono a la temática 'humor'… veremos qué sucede ahí, puesto que soy una dramática de alma y corazón jajaja.

Muchas gracias a quien se pasea por aquí, lee y deja un rr, y también agrega a favoritos y todas esas cosas que nos da el GO!

Si se dan cuenta, Ron es totalmente distinto al Ron que conocemos… y no solamente él, sino que la gran mayoría de los personajes sufrirán algún o varios cambios en cuanto a sus características. Jugaremos un poco con el OcC.

Ahora, para entender esta historia, diré que está ambientada en mi época de la enseñanza media (para extranjeros, secundaria, bachillerato, últimos años antes de la universidad). Aquí en Chile, hubo un movimiento de estudiantes el año 2006, que se conoció como la Revolución de los pingüinos. Viví experiencias muy hermosas, y por lo mismo, quiero que cada uno de ustedes conozca este movimiento, ya sea si es de mi país o extranjero. Utilizaré varios términos que ustedes no puedan conocer, y estos irán en el…

Vocabulario:

1. Kinder: (También llamado nivel de transición) es el primer año oficial escolar en Chile, uno ingresa cuando tiene cinco años, y prácticamente te enseñan a dibujar, pintar y las actividades básicas de un infante.

2. CEAL: es la abreviatura de Centro de Alumnos. El CEAL se encarga de cumplir las reglas y derechos de los estudiantes, lo componen un presidente, vicepresidente, tesorero, secretario, delegado de deportes, delegado de cultura etc. son la voz de alumnado cuando hay quejas y problemas tanto a nivel del colegio, como también, quienes se encargan de las confecciones de actividades para sus compañeros y compañeras (creación de aniversarios, fiestas, etc.).

3. Tercero medio: hablaré mucho de primero, segundo, tercero y cuarto medio. Estas son los cuatro años ANTES de ingresar a la universidad. Les haré esta tablita, para que se enteren cómo es la distribución de cursos en Chile, según nuestra edad :D

En Chile, ingresamos a clases los primero días de Marzo, tenemos nuestras vacaciones de invierno (dos semanas) la mitad de Julio, y comenzamos nuestras vacaciones de verano a mediados de Diciembre.

Las estaciones del año son: Septiembre, Octubre y Noviembre PRIMAVERA. Diciembre, Enero y Febrero, VERANO. Marzo, Abril y Mayo, OTOÑO. Junio, Julio y Agosto, INVIERNO. (hago esta aclaración porque estoy segura que muchas personas que viven en otros sectores del mundo puede que les llame la atención la distribución del clima y las fechas de vacaciones y esas cosas).

Nivel de transición o kínder, cinco-seis años aprox.

Primero básico, seis-siete años aprox.

Segundo básico, siete-ocho años aprox.

Tercero básico, ocho-nueve años aprox.

Cuarto básico, nueve-diez años aprox.

Quinto básico, diez-once años aprox.

Sexto básico, once-doce años aprox.

Séptimo básico, doce-trece años aprox.

Octavo básico, trece-catorce años aprox.

Primero medio catorce-quince años aprox.

Segundo medio quince-dieciséis años aprox.

Tercero medio dieciséis-diecisiete años aprox.

Cuarto medio diecisiete-dieciocho años aprox.

Edito: 30/06/11 Los capítulos próximos a este fic son mucho más extensos en cuanto a narración y a hechos que acontecen. Gracias por visitar esta historia, nuevo lector ^^ y gracias a los fanáticos que se la vuelven a leer xD