The New Girl in Town
Capitulo 1: "Mariposas" llegando a la ciudad
Marco Díaz, un chico común, en un vecindario común, de una ciudad como cualquier otra, el chico despertaba pesadamente, después de una noche en vela viendo series y chateando con sus amigos, lo típico para un chico de 17 años.
Comenzó su rutina normal de todos los días, bueno, casi todos los días, las vacaciones de verano comenzaron hace una semana, por lo que el chico no escatimaba en quedarse despierto hasta tarde y levantarse un poco menos temprano de lo habitual, pero después de tan pesado año escolar en la preparatoria, se tenía bien merecido un respiro. El castaño se levantó e hizo su cama, preparo su ropa limpia para comenzar el día y se dirigió al baño para tomar una ducha, el joven al salir con la toalla se acercó al espejo, haciendo una mueca de disgusto.
-Porque no puedo tener barba? - decía el chico mientras observa el escaso bello facial que tenía sobre su labio superior. - Con ese bigote parezco un puberto todavía.
El chico tomo su rastrillo y comenzó a quitar el poco bello que tenía.
-Mucho mejor- Dijo el chico, mientras disponía a salir a su habitación para cambiarse.
El moreno se puso unos jeans negros ajustados y una playera blanca, un conjunto básico pero que el chico utilizaba sobre todo cuando se quedaba en casa.
Bajo las escaleras esperando encontrar a sus padres teniendo el desayuno listo como siempre, pero al llegar a la cocina se dio cuenta que ninguno de los dos estaba ahí.
- Que curioso...- dijo el moreno mientras alzaba una ceja - Tal vez salieron a comprar algo.
El chico vio sobre la mesa un plato cubierto con papel de aluminio y una nota pegada, el chico la tomo curioso y leyó.
Tu padre y yo iremos a presentarnos con los nuevos vecinos de al lado, te dejamos el desayuno listo, quería despertarte pero supongo que te quedaste despierto hasta tarde, preferí no molestarte, si la comida ya está tibia puedes calentarla en el microondas.
Mama.
-Nuevos vecinos?- marco se extrañó, así que se asomó en la vengan para ver la casa de al lado, efectivamente un camión de mudanzas se encontraba ahí, mientras su padre y un hombre de cabello y barba claras bajaban cajas mientras charlaban.
El chico se dirigió a la cocina para calentar su desayuno, mientras comía, saco su teléfono para ver si tenía alguna notificación, el moreno vio que tenía un mensaje de su amigo Ferguzon;
Qué onda marco, oye...
No podre acompañarte a ver la película, me surgió un pendiente familiar, lo siento, te diría que le avisaras a Alfonso pero se fue con su familia de vacaciones esta mañana, lo siento amigo, será la próxima.
- Agh, perfecto, supongo que me quedare en casa todo el dia.- Resoplo el chico con algo de disgusto. Marco no era del tipo de personas que se enojaban cuando algo no sale como quieren, pero si sentía mucha pereza solo de pensar en pasar la tarde sin hacer nada, tendría que inventarse algo que hacer para matar el tiempo, era curioso como estuvo todo el semestre deseando unas vacaciones y ahora que las tenía el aburrimiento era abismal algunos días.
El chico comenzó a lavar los platos que había sucios, y al terminar se dirigió al sofá para ver televisión, con suerte encontraría algo bueno que ver, sin embargo cuando estaba a punto de tomar el control recordó que sus padres estaban con los vecinos, y ya tenía un bien rato que se habían ido, se preguntó que estarían haciendo, así que salió de casa a ver si su padre seguía con el nuevo vecino.
Al salir de casa marco se percató de que el camión de mudanza ya no estaba, pensó que tal vez sus padres ya no estaba ahí, pero lo descarto al ver que el auto de sus padres seguía aparcado.
Marco se acercó a la cerca de madera que dividía ambas propiedades, observando la entrada de la casa de sus vecinos.
- Buscas a tus padres?
-Wow!- El chico se sobresaltó al escuchar una voz, al ver de dónde provenía pudo observar a una chica sentada en una silla fuera de la casa, frente a una de las ventanas, una chica de cabello rubio, tés blanca, ojos azules como el cielo, aparentaba tener la misma edad que el chico. Todo lo anterior podría ser suficiente para que cualquier persona la considerada bella, pero lo que al chico embelesó, fue la sonrisa que ella tenía dibujada en su rostro, despidiendo un aura de confianza, fresca y cálida a la vez.
-Perdona, te asuste? - dijo la rubia muy tranquila y con la misma sonrisa.
-Yo... Lo siento, no vi que estabas ahí... Soy...- El chico pretendía presentarse, pero fue interrumpido, sin ver por donde caminaba, topó con la pequeña cerca.
- Marco Díaz- dijo la chica soltando una pequeña risa al ver lo distraído que era el chico.- Tus padres ya se presentaron con nosotros.
-Oh sí, me avisaron en una nota, lamento no haber venido antes con ellos.- El chico rodeo la cerca para llega hasta donde estaba la chica.
- No te preocupes.- contesto la chica con amabilidad- Mi nombre es Star por cierto.
-Star... Es un placer.- Dijo el chico con una sonrisa, tendiéndole la mano.
- El placer es mío- Contestó la chica correspondiendo el apretó de manos - Quieres sentarte? - le dijo la rubia al chico mientras se apartaba hacia un lado para que pudiera tomar asiento.
- Seguro- Exclamo el chico.- y dime, vienen de muy lejos o eres de por aquí?
- Bueno, venimos de una pequeña ciudad al norte de echo creek, Mewni Ville, no se si la conozcas.
- Oh sí, he oído hablar de ella.
- Si bueno... No es una ciudad glamorosa, pero es tranquila, aunque algo pequeña.
- Y porque decidieron mudarse?
- Mi padre es dueño de un sembradío de maíz en las afueras de echo creek, pero papá casi nunca estaba con mamá y conmigo por viajar hasta la otra punta de la ciudad, al final lo mas conveniente era que viviéramos en echo Creek que esta mas cerca.
- Entiendo- Dijo el chico asintiendo con la cabeza.
- Si, aunque, la casa en la que vivíamos ha pertenecido a la familia de mi madre por décadas, fue muy difícil dejarla para poder venir aquí.- Dijo la chica con un tono un poco mas apagado pero manteniendo la sonrisa.
- Oh...Lamento escuchar eso - dijo marco al darse cuenta del cambio de tono de la chica- No te preocupes, se sentirán como en casa de inmediato, les encantara la ciudad.
- Eso espero- Contesto la chica con una amplia sonrisa.
- Y qué te parece el vecindario?- Dijo el chico mientras miraba el resto de las casas.
- Parece tranquilo, con gente amable- dijo la chica mientras le lanzaba una mirada al chico, a lo cual el no pudo evitar sonrojarse un poco.
-Si supongo que si- el chico soltó una leve risa, que denotaba un poco su nerviosismo.
Ambos chicos estaban ahí sentados, disfrutando de la brisa de verano, algo curioso ya que aunque ella acababa de conocer al chico, no sentía que estuvieran en un silencio incómodo.
-Querida, podrías traerme... Oh,no sabía que tenías compañía - Una mujer de alta estatura y de cabello azul grisáceo salió de la puerta principal, y observo a ambos. - Tu debes Marco,verdad?
- Asi es, Marco Díaz para servirle. Es un placer- Dijo el chico poniéndose de pie y ofreciéndole la mano a la mujer.
- El placer es mío Marco, soy Moon Butterfly, veo que ya conociste a mi hija.- Dijo la Sra Butterfly sonriendo y mirando de reojo a su hija.
-Si algo así- respondió Marco soltando una muy leve risa.
-Espero no te moleste, ella puede ser muy impulsiva e hiperactiva.
- Mamá! - Star replicó a su madre por hablar así en frente del chico que acababa de conocer.
- Tranquila hija, solo le estaba avisando a lo que se atiene si quiere ser tu amigo, o algo mas...
-Mama!- Dijo la chica con un sonrojo notable.
- Umm... - Marco no podía decir nada, el también se sentía apenado, pero tomaba la situación con humor.
Moon reía entre dientes mientras tomaba el hombro de su hija- Estoy bromeando hija, y lo siento Marco, espero no te sientas comprometido, pero no te preocupes, cuando la conozcas te darás cuenta que es encantadora.
-Mama, no deberías estar charlando con los Diaz en la cocina?- dijo la rubia mientras hacía un puchero por el comportamiento de su madre, aunque ella bien sabía que las dos solían llevarse así.
-Oh, es verdad eso venía a decirte, podrías ir por algo de leche? Necesitamos un poco para el café.
-Umm... No conozco bien el lugar mamá, supongo que tendrás que prestarme el auto para dar una vuelta y...
-No, sabes que no puedes usar el auto.
-Oh por favor mama! Hace un año que obtuve mi licencia y nunca he conducido tu auto.
-Solo emergencias Star, ya sabes la regla.
-Bien.- resopló la chica viéndose vencida por los argumentos de su madre, la chica nk entendía como en la más mínima discusión Moon siempre salía victoriosa.
-Hay una tienda de autoservicio cerca, podría acompañarte si quieres.- Dijo marco proponiendo su solución para el "dilema" de la chica.
-Eso sería genial, gracias! - dijo la chica mientras se ponía de pie.
-Muy amable de tu parte Marco, cuídala bien, si? Y ojo con ella, ya dije que es muy impulsiva.
-Mama! Que mosco te pico hoy?
- Ninguno, solo estoy de buen humor- Dijo la mujer cubriéndose la boca delicadamente escondiendo una risa. -Anda ve, ya sabes que tu padre necesita su taza de café matutina.
-Si bueno... Vamos Marco!
-Claro, enseguida volvemos Sra Butterfly!
Moon se despedía de los chicos alzando la mano y se dispuso a entrar a la casa.
Los dos caminaban por la acera rumbo a la tienda, mientras caminaban ambos miraban al otro de vez en cuando, pero cuando sus miradas se cruzaban los dos apartaban la misma, con una sonrisa en el rostro.
- Y dime Star, estudias?
-Por supuesto, acabo de terminar el segundo año de preparatoria, tú?
- Que coincidencia, yo también!
- De verdad? Vaya suerte la mía.- Dijo la chica con un tono muy alegre.
- Porque lo dices?
-Bueno, me imagino que vas a la academia de echo creek cierto?
- Si así es, ingresaras ahí?
-Sip, en unas semanas tengo que preparar todo para mi inscripción.
- Entonces, es posible que seamos compañeros de clase?- dijo el chico alegremente mientras levantando su mano
- Con suerte si- dijo la chica mientras soltaba una risa y chocaba si palma con la del moreno.
-Bien aquí estamos.- Dijo el chico mientras se detenía en seco, la rubia no se percató en que momento llegaron a la tienda.
Ambos entraron, mientras charlaban de diferentes cosas, se dirigieron al área donde estaba refrigerado todo lo embotellado, la chica tomó el litro de leche que necesitaba y pagaron en caja, seguido de esto ambos salieron y caminaron de vuelta a casa de Star.
- Entonces cinta roja?
- Yep, toda una máquina de golpes
-Uy, un chico malo. - dijo Star riendo un poco.
-Así es nena, mejor ten cuidado con el chico peligro- Dijo Marco en un tono evidentemente exagerado, a lo que los dos comenzaron a reír a carcajadas.
- Y dime Star, cuáles son tus hobbys? - Pregunto el chico con curiosidad
-Bueno, me gusta escuchar música, y bailar.
- Enserio? Qué tipo de música te gusta?
-Es algo tonto, me gusta el pop para adolescentes, tu sabes, no es profundo ni novedoso pero me gusta.
- No! Claro que no es tonto, a mi también me encanta el género.
-De verdad? Cuál es tu artista favorito?
- No es un artista como tal, son un grupo, se llaman love...
-Sentence?!
-A ti también?- Dijo el chico sorprendido
-Los adoro! Amo a Justin Towers!
-Yo también!
-... Eh? Amas a Justin Towers?
-No!... Bueno si pero no asi, son mi banda favorita de todos los tiempos.
-Sabes, tengo todos sus discos, y uno de ellos autografiado!
-No es verdad! Que envidia!
-Te lo mostrare cuando lleguemos si? Tengo una caja de mudanza únicamente para mis cosas de Love sentence.
-Me encantaría ver tu pequeño tesoro- dijo marco entre risas.
Marco y Star llegaron a la casa de los Butterfly, al entrar ambos se dirigieron a la cocina, al entrar los padres de cada uno charlaban.
-Marco! Saluda al señor River!
-Señor River- Marco le tendió la mano al padre de Star- Es un placer conocerlo.
-Mucho gusto chico.- le correspondió el apretón y además le dio una fuerte palmada en el hombro.
-Marco, porque no ayudas a Star a subir sus cosas?- Sugirió Angie Díaz,la madre de Marco.
-Oh no no se moleste, de verdad.- Dijo Star apenada.
- No pasa nada, lo hare con gusto. - Dijo marco sonriéndole a Star.
- Mi hijo es muy perfeccionista, apuesto que te ayudara a aprovechar espacio en tu habitación con tus muebles.
-Papa!- Dijo Marco algo apenado.
-Es una virtud mijo!
-Vamos Star, ya quiero ver tu colección de Love Sentence
-Claro vamos!- ambos chicos subieron al cuarto de Star.
Más tarde...
Marco y Star de ser unos completos extraños pasaron a bailar y cantar las canciones de love sentence a todo volumen, mientras tanto los padres de ambos charlaban en la cocina.
- Parece que se llevan bien- Dijo river al escuchar el escándalo que hacían su hija y su nuevo amigo.
-Así parece ser- contesto El señor Diaz
-Querido, ya casi es hora.
- Oh es verdad, disculpen que nos excusemos asi de repente, tenemos que ir a una exposición a ofrecer mis pinturas para ponerlas en venta.
-Oh claro, olvide que lo habían mencionado - Dijo Moon recordando entre tantas cosas que habían charlado que Rafael se dedicaba a pintar cuadros y esculpid para vender sus piezas.
- Debemos hablarle a marco para que baje y vaya a casa.
- Sabe, si gustan pueden dejar que Marco se quede.- Dijo la sra Butterfly
-Oh no queremos importunarlos, sabemos que lo de la mudanza es algo pesado- Contesto el Sr Diaz
-No se preocupen, es un gusto tenerlo aquí, se ve que es bien muchacho, además... - el señor River guardo silencio para escuchar a los jóvenes haciendo escandalo arriba,- no parece que el chico tenga ganas de irse.
-Como dejamos Mewni Ville, Star dejo muchos amigos atrás, y se ve que tener la compañía de Marco hace que no se sienta sola.- Completo Moon, -Si le da permiso puede quedarse mas tiempo, no se preocupen.
-Bien, en ese caso nosotros nos retiramos, enserio les agradecemos su amabilidad.- termino por decir la Sra Diaz
-Y nosotros su bienvenida - Contesto Moon amablemente
Los Diaz se despidieron cortésmente y se retiraron.
Más tarde, cuarto de Star...
- Y es por eso que no estoy seguro si su siguiente gira será tan buena como la anterior. - Termino de decir Marco.
-Vaya, si que tienes un argumento.- Dijo Star entre risas mientras
Después de un rato cantando y bailando, se concentraron en acomodar las cosas de atar en sus respectivos lugares.
- Donde pongo esto Star?- dijo Marco mientras sostenía una caja de cartón algo pequeña, como del tamaño de dos cajas de zapatos.
-Que co... Oh cuidado con esa... Es algo...
La caja de la nada se abrió por debajo dejando de caer todo su contenido.
-Frágil... - Termino de decir Star.
- Lo lamento enserio! De.. Déjame ayudarte a levantarlo.
- No importa... Déjalo ahí...- Star tenía un tono notablemente triste, muy diferente al que tuvo el resto del día.
-Star? Está todo bien?
- Si si... Es solo que.. Es algo que no quería ver.
Marco observo que la caja estaba muy maltratada, algo mohosa y casi inservible, obviamente Star la tenía en un lugar bien escondida, y no solía abrirla a menudo.
- Sé que nos conocemos de nada, pero si necesitas hablar, aquí estoy para escuchar.- Dijo Marco en un uno comprensivo
- Es una historia algo larga, y no muy feliz, mejor sigamos recogiendo si? Necesitare tus consejos para mover los muebles porque soy un desastre con mi habitación!- Dijo Star cambiando su tono a uno más alegre.
Marco miro a la chica, sabía que algo tenia, pero de eso se preocuparía mas adelante, cuando ella quisiera hablar.
Ambos comenzaron a acomodar las cosas de Star , mientras en el suelo ya hacían unas cuantas cartas, un collar de corazón partido a la mitad... Y una diadema roja con cuernos.
Continuara...
Bueno chicos, ya sé que he estado muy desaparecido últimamente, pero quería compartirles este fic que escribí en mis ratos libres, la idea me llegó al ver la imagen que tiene como portada (Aclaro que no es mia, solo la edite un poco, y no se quién es el artista, sorry!)