Esta es una mini historia ACHELE inspirada por la canción Sex on fire - Kings of Leon, solo tendrá 5 capítulos así diario subiré un capitulo así hasta llegar al viernes.

Espero que les guste y me lo hagan saber.


"Lay where you are laying, don't make a sound… I know they are watching, they are watching"

El alcohol ya viajaba por mis venas desde hace un par de horas, no podía soportar tenerla tan cerca viendo como disfrutaba con su nuevo "Romance" no se si solo lo hacia por joderme o porque en verdad quería olvidarme.

La fiesta de Naya parecía no tener fin, había mucha gente, amigos en común, gente del medio, algunas personas que aun no conocía y yo solo me concentraba en una… Lea.

-Tal parece que si me olvido no?- trate sonreír aunque se que no funciono.

-Tu crees que con todo lo que vivieron se olvidara de ti? Al contrario con lo que le hiciste basta y sobra para que no te olvide- Me respondió JGroff sarcásticamente, y yo automáticamente le lance una mirada amenazante.

-No me lo tomes a mal rubia, pero en cierta parte te lo mereces.-

-Carajo, un puto error lo tiene cualquiera- Volví a responder de la misma manera.

-Cuando se ama, un error como ese no ocurre- Tomo su cerveza se alejo de mi lado yéndose a bailar con Naya.

Sus palabras retumbaron mi cabeza, claro que la amaba, y la amo todavía, yo tampoco podría perdonarme nunca ese puto error que tuve, pero ya habían pasado meses y ni siquiera dejo que me explicase, no me volvió a dirigir la palabra, ni siquiera una mirada.

Me dolía y si, en el fondo sabia que me merecía eso y mas… pero la extrañaba tanto.

Toda la noche desde que llegue a la fiesta, estuve observándola la sentía tan lejos de mi, estando a solo unos cuantos paso, estaba extremadamente hermosa esa noche; traía puesto un vestido strapples demasiado pegado a su cuerpo, el cual definía a la perfección esas curvas que me volvían loca, calzaba unos zapatos de tacón rojos a juego con su vestido, y el cabello lacio sin recoger… Simplemente supo darme donde mas me dolía, ella sabia como me gustaba cuando se arreglaba así.

Y en ese momento ocurrió, su acompañante se alejo en dirección al baño dejándola sola, y volteo hacia mi, y nuestras miradas se cruzaron… No se por cuanto tiempo pero ninguna de las dos quitaba la mirada… Y pude ver en sus ojos, el dolor, el amor y el deseo que aun permanecían en ella.

Sin decir ninguna palabra se dirigió a una de las habitaciones y la seguí instintivamente, no sabía si era una señal para que yo fuera, o era idea mía… pero me arriesgue.

La puerta de la recamara estaba entreabierta y entre, y ahí estaba ella de espaldas a mi, mirando por el ventanal de la habitación, cerré delicadamente la puerta tras de mi y me acerque…

Dios, no podría describir la sensación de miedo, adrenalina, emoción, amor que sentía en ese momento, las piernas, las manos, todo el cuerpo me temblaba, un sudor frio me recorría desde la nuca hasta la punta de los pies y entonces hablo…

-Podrías dejar de mirarme e incomodar a Cory- Dijo fríamente, no era lo que esperaba pero al menos me había dirigido la palabra.

-Si no puedo dejar de mirarte es porque te ves increíblemente hermosa- Dije muy segura – Y cory? Por dios, me importa muy poco si se incomoda o no.

-Claro, ya se que no te importa la gente que supuestamente tu "Quieres"- hizo un gesto con sus manos, y finalmente volteo regalándome una de las miradas mas frías que pude haber visto, y sus palabras… sus palabras simplemente iban a hacerme decir algo que a lo mejor me arrepentiría después.

-Yo Lea? A mi no me importa la gente que quiero? Si mal no recuerdo tu fuiste la que comenzaste una relación con "UNO DE MIS MEJORES AMIGOS" – enfatice las últimas palabras

-Pues te recuerdo también que tu fuiste la que te acostaste con una de las bailarinas en nuestra propia casa- Y ahí estaba todo… era el momento de explotar, pude ver todo el dolor en sus ojos, la ira que un guardaban.

-FUE UN PUTO ERROR… NO… NO ESTAB…-

-No me interesa saber nada de lo que paso, me di cuenta que eres una mentirosa, que nada te importo nuestra relación ni mucho menos yo, ahora si me permites, quiero recomenzar mi vida, ser feliz con Cory…. Tu te puedes ir a la mierda- Me dijo empujándome y ya con lagrimas en los ojos… la misma situación que yo, tenia ganas de llorar de rabia por no dejarme explicar… No todo era como parecía.

Camino hacia la puerta, pero corrí y cerré lo poco de la puerta que había abierto, acorralándola entre esta y mi cuerpo.

-Déjame ir Dianna- Respondió sin voltearse

-No, no te dejare ir hasta que me escuches- Pegue por completo mi cuerpo al suyo aspirando el olor de su cabello… Vainilla como siempre.

-No tenemos nada que hablar, para mi es como si no existieras- Y al decir eso algo dentro de se rompió, no podía decirme eso. Tome su brazo y la voltee dejándola frente a mí a unos escasos milímetros cerca.

-EXISTO, ESTOY AQUÍ- Le grite con desesperación – Y no te vas a olvidar de mi, estés con quien estés… Siempre serás mía.

Y la pegue hacia la puerta, juntando mas mi cuerpo sobre el suyo, y sin dejarla que reaccionase la bese, frenéticamente, ella tratando de sepárame pero yo evitándolo… Poco a poco fue cediendo a la fuerza que ponía y termino por darme paso a su boca.

La tome por la cintura, mientras ella se aferraba a mi chaqueta, nuestras lenguas se encontraban haciendo que el momento se nos fuera de las manos y comenzáramos y buscar mas, buscar lo que hace mucho tiempo habíamos perdido.

Se separo de mi, y esperaba una cachetada, un golpe, pero no fue así… al contrario tiro para atrás mi chaqueta quitándomela, mientras ahora sus ojos reflejaban deseo, pasión.

Comencé a subir mis manos por sus piernas, acariciando su trasero mientras nuestras lenguas seguían bailando al ritmo que ella misma imponía.

Abandone sus labios, para bajar a su cuello y morderlo suavemente a lo que Lea me respondió con un gemido que lo único que hizo fue aumentar mis ganas de hacerla mía. Sentí sus manos colándose por debajo de mi playera, sus manos estaban frías y temblando, pero yo sentía las mas bellas caricias que nadie podía darme mas que ella, fue subiendo hasta encontrarse con mis cuales apretó suavemente, mientras que ahora la que gemía era yo.

-Dios Lea, hace mucho que extrañaba esto…- Susurre con una voz demasiado sensual en su oído atrapándolo con mis labios y comencé a lamer el lóbulo de su oreja, sabia que era uno de sus puntos débiles.

- Ahhh..- Volvió a gemir un poco más fuerte y yo ya no podía esperar, sabia que afuera estaban todos, y que no tardarían en percatarse de nuestra ausencia.

Una de mis manos subía por su muslo, dejando pequeños apretones, mientras volvíamos a unir nuestros labios, subí hasta estar mas cerca de su parte intima la cual ya desprendía un calor que siempre sucedía al momento de hacer el amor, el que trajera vestido me facilitaba mas las cosas, comencé a acariciar su clítoris sobre la ropa.

-Mmmm…- Lea me apretó más hacia ella, sabia que ya la tenía a mi merced, ya era demasiado tarde para que pudiera detener todo. Una de sus manos comenzó a bajar y a desabrochar mi jean, y supuse a donde se dirigía, así que aumente la velocidad con la que uno de mis dedos acariciaba su clítoris, pero me era insuficiente, hice a un lado sus bragas y la acaricie ahora si directamente y pude notar cuan mojada estaba.

-Me gusta cuando te mojas así mi amor, estas tan caliente… se que solo yo logro eso- Dije muy cerca de sus labios los cuales ella volvió a capturar mordiendo mi labio inferior.

-Dios, necesito sentirte dentro… - murmuro muy bajo pero perceptible para mi.

Comencé a acariciar la entrada que ya se encontraba por demás lubricada, mientras ella se abría paso entre mi ropa interior y comenzaba a tocarme también.

Sin dudar y sin avisar introduje dos dedos dentro de ella, los cuales fueron muy bien recibidos apretando con sus paredes.

-Aaaah…siii….- Comenzó a mover sus caderas de forma circular mientras mis dedos entraban y salían, Lea acariciaba frenéticamente mi clítoris lo cual me hacia que me excitase demasiado.

Ahora las dos movíamos nuestras caderas acoplándonos a un ritmo no tan rápido pero tampoco tan lento…

-Más, mas dentro p… por favor- dijo entre gemidos, lo estaba disfrutando, lo podía ver en su cara, sus gestos, comencé a depositar pequeños besos en su cara… cuando de repente tocaron a la puerta.

-Lea? Lea estas ahí? – La voz que interrumpía nuestro momento era la de Cory, Lea rápidamente me empujo pero yo rápidamente tape su boca con mi mano.

-Shhh… no hagas ruido- Dije en un susurro solo audible para ella.

Cory volvió a tocar la puerta -Quien esta allí dentro? – comenzó a tocar mas fuerte.

-S.. Soy yo… Dianna… estoy hablando por teléfono, no me molestes- Dije gritando con la voz un poco entre cortada debido a la excitación que traía, mientras mi cuerpo seguía pegado al de Lea.

-Dianna, has visto a Lea? – Automáticamente la morena se tenso.

-Yo que voy a saber… No eres tu el novio… tu debes de saber- Comente molesta.

Se escucharon unos pasos alejándose y ahora si Lea volvía a empujarme fuera de ella.

-Suéltame, no se te ocurra volver a tocarme- comenzó a acomodarse su ropa, temblando del miedo la excitación, que se yo.

-Hace rato no me decías lo mismo- Dije sonriéndole sensualmente – Hay no pensaras en salir tan rápido no? Seria muy obvio que estabas conmigo, saldré yo primero y después tu ok?-

-Como sea, pero hazlo ya que no quiero tenerte cerca-

- Vale…- Me coloque mi chaqueta, y me dirigí hacia la puerta, pero antes pare a un lado de ella – Se que no lo amas como aun me amas a mi…. Tú me perteneces- Y sin mas saque mi celular e hice como si estuviera en una llamada para salir de la recamara. Aun sentía mis mejillas rojas, las piernas me temblaban por el placer que antes estaba teniendo al sentir sus dedos de Lea.

Todos me miraron confusos, en especial JGroff que al parecer fue el que se dio cuenta de mi estado.

-Si… vale…. Te llamo mañana y nos vemos como quedamos… Ok… un beso!- Corte mi falsa llamada ante la mirada de todos, me dirigí hacia la cocina y saque una cerveza de la nevera, lo demás ya habían vuelto a sus cosas menos Cory que me miraba fijamente al igual que JGroff.

No podía sostenerles la mirada, me delataría yo misma, así que comencé a buscar algo en mi teléfono.

Y poco tiempo después puede ver como Lea salía también, ya arreglada mientras Cory se le acercaba furioso.

-Donde estabas Lea?- dijo en un tono bajo pero duro.

-No me siento bien Cory, necesito regresar a casa- Dijo la morena mirando hacia el suelo.

-Vamos te llev…-

-No, me voy sola… necesito estar sola- Dijo Lea recogiendo sus cosas, mientras se despedía de todos. Antes de salir me dirigió una mirada, la cual correspondí… pero no supe interpretar.

Del otro lado sentí otra mirada, una mirada llena de odio, ya sabia de quien era así que no necesitaba mirar… Salí de la cocina dándole el último trago a mi cerveza y cruzándome con Cory el cual no se movió al ver que iba a pasar, yo tampoco le pedí permiso y mi hombro choco con parte de su cuerpo.

Ninguno de los dos pido disculpas, ambos sabíamos que todo estaba más que claro… El supo que Lea también había estado en ese cuarto.

-Nos vemos después chicos- También me despedí de todos con un solo gesto de mano a tan solo unos minutos que Lea, dándole la confirmación a Cory de lo que había pasado.

" Quédate así donde estábamos, no hagas ruido… Se que nos están mirando, nos están mirando"