Últimamente la vagancia me puede y entre que estoy bastante atareado y demas no tengo muchas ganas de escribir(prometo actualizar pronto "el amo de la muerte" por si a alguien le gusta ¬¬) pero esta historia es como una espina clavada y tenia que sacarla así que hoy(¿un lunes¿tendre fiebre?) pongo el primer capitulo, los siguientes pronto sobretodo si me muestran apoyo :)

me olvidaba no es slash , cualquier pregunta ya saben

Dicho esto, los personajes no me pertenecen, salvo los Hasler (hablare al final de ellos), soy un chico pobre y no una mujer multimillonaria, la warner no me da de comer y hago esto como pasatiempo y por cariño a la saga

El ladrón de poca monta

Apenas pasaba de la media noche de un 7 de febrero de 1985 cuando en una callejón oscuro y sucio, que comunicaba dos calles residenciales, se aparecía como de la nada un figura menuda y regordeta. El sujeto miro hacia todos los lados, comprobando que nadie le hubiese visto, suspiro. No lo podía evitar estaba nervioso, solo Merlín sabia porque azares del destino estaba envuelto en este lió. No tenia mas remedio que reconocer que el era un delincuente de poca monta. Desde su época, en Hogwarts se había juntado con lo peor de lo peor, la única excepción eran los mortífagos. Nunca se pasaría a su bando de eso estaba seguro, su madre la única que le había transmitido cariño era una muggle y la mejor persona que había conocido. Por eso desde su muerte cuando el cursaba segundo en Hogwarts se había mantenido alejado de los seguidores de aquel que no debe ser nombrado.

Recordó los sucesos acontecidos hace 5 años cuando el mago que había echo temblar los cimientos de la sociedad mágica había caído derrotado por un bebe apenas un año. No pudo evitar que otra ola de miedo lo lo invadiera y le vino la persistente seguridad de que esta misión era demasiado para el. Metió la mano en el bolso y toco la enorme cantidad de oro que le habían entregado hace dos días. "es solo un adelanto" pensó"lo que me darán cuando termine me permitirá no volver a trabajar en mi vida" otra voz que se parecía extrañamente a la de su padre surgió de su cabeza "como si hubieses trabajado alguna vez antes" fruncio el entrecejo "bueno me permitirá no volver a robar en mi vida… fijo que es lo que mama querría para mi"

Se recargo en la esquina y recorrió con ojos enrojecidos a causa del humo del tabaco toda la calle, a pesar de la oscuridad pudo observar los jardines exquisitamente cuidados y no pudo evitar dudar "¿estaré haciendo bien¿estarían equivocados?" pensó "alguien que cuida así las plantas no puede ser mala persona". Recordó que uno de los motivos por los que había aceptado "aparte de los 3000 galeones prometidos, claro" era que considero que estaba haciendo bien, contrario a robar esto era una buena accion, no legal pero para su ética deformada a lo largo de innumerables años de perrerías y trapicheos era como dar de comer a un niño hambriento. Sonrió en eso consistía su misión, en un niño hambriento. Sentado observando la casa donde se encontraba su objetivo. Una farola iluminaba el jardín, setos, árboles y un camino de piedra hasta la entrada de una impecable casa de dos plantas, no parecía la casa de aquellos monstruos que le habían descrito la pareja que lo contrato.

Decidió esperar y tenerlo vigilados para comprobar si era verdad lo que le habían contado, "unas horas no le hará daño al niño". Ya había investigado con sus cientos de contactos a la pareja de magos que con billetera repleta le habían contratado, no había nada oscuro, ni nada extraño en su pasado, ninguna salpicadura ,nada. Era una pareja de casi cuarentones que habían perdido a su único hijo en la guerra contra el innombrable. Su hijo tendría casi la edad del objetivo si siguiera vivo pero en un ataque del innombrable a San Mungo un año antes de su caída había resultado que varios pacientes resultasen heridos o muertos, entre ellos el hijo de los Hasler(asi se llamaba la pareja) de apenas un mes de vida no pudo sobrevivir al caerle unos escombros encima. Su madre que estaba todavía en el hospital fue salvada por Sirius Black y el fallecido James Potter, antiguos aurores que estaban en el hospital para acompañar a la mujer del ultimo que cursaba su 8 mes de embarazo y que escapo acompañada de Remus Lupin cuando empezó el ataque.

Se puso a pensar en el primero de aquellos hombres, lo conocía, en realidad conocía a los cuatro hombres que se hacían llamar los merodeadores. Durante la época de ellos en Hogwarts fueron una fuente inagotable de ingresos, y después habían mantenido una buena relación y de vez en cuando les seguía vendiendo alguno de sus productos hasta aquel fatídico día. Volvió a pensar en lo muy unidos que estaban Sirius y James. Tenia que reconocerlo era extraño todo lo que paso después. Se le hacia casi imposible pensar que el primero hubiese vendido a su casihermano. Al primero lo encarcelaron en Azkaban y todavía seguía cumpliendo condena, el segundo murio protegiendo a sus hijos. Pero el sabia que había algo raro, como buen mentiroso sabia reconocer a otro y cuando vio las imágenes del hijo mayor de los Black en los periódicos no pudo dejar de notar que sus gritos clamando inocencia parecían del todo reales. Suspiro "si las cosas fueran distintas… seguramente esa pareja no estaría haciendo esto y yo no estaría pasando frió" saco su pipa y se puso a fumar esperando que la noche terminara aunque todavía quedaba un buen trecho para poder ver al niño y el comportamiento de los supuestos monstruos.

Rememoro los hechos acontecidos hace dos días en cabeza puerco, Aberforth había hablado con una pareja que parecía desesperada aunque el viejo no se entero bien del motivo. Cuando le preguntaron al cantinero por un hombre que estuviera dispuesto a hacer cualquier cosa, le había mandado una lechuza. Media hora después Aberforth se retiro, dejándolos solos en un cuarto, 50 galeones mas rico. En ese cuarto la pareja le había contado con todo lujo de detalles su historia de su fallecido hijo para luego informarles de lo que había pasado escasa semanas antes. Como vivían cerca de esta zona y un día la mujer comprando la comida en un supermercado se había encontrado con una señora flaca, con cara de caballo acompañada de dos niños, uno gordo, y el otro flaco y casi desnutrido. "No les hubiese prestado atención si no fuera por que el pequeño cojeaba y tenia el brazo en cabestrillo" dijo la señora entre hipidos conteniendo las lagrimas mientras su esposo la frotaba la espalda. "me resultaba conocido el niño y entonces caí en que era igual que el, pero no podía ser, ese niño con ropa enorme y que parecía apunto de morir de hambre" "me acerque y… le pregunte su nombre, cuando el pequeño me lo dijo en susurros con los ojos como platos" hizo una larga pausa para tomar aire " por Merlín parecía que nunca nadie se había dirigido a el con cariño" dijo con rabia "le levante el flequillo y la vi, no había duda" " entonces llego la señora que estaba con ellos lo agarro del brazo lastimado y tiro de el, sin importarle nada... el niño lloraba y la seguia como podía" " tarde un rato en salir de shock cuando lo hice Salí corriendo detrás de ellos y le dije que esperara" la rabia se notaba en las facciones de la señora Hasler. "Me dijo…que nunca mas se me volviera a ocurrir acercase a su familia y a ese monstruo llamo al pobre chico" "ni siquiera se inmuto cuando lo llamo así, parecía que era lo mas normal del mundo"la mujer se había callado en ese instante y el marido había empezado a hablar " mi mujer me llamo histérica, yo trabajo en una sucursal de Gringotts en el mundo muggle, así que estamos al tanto de tecnología muggle" le había acotado el marido al ver la cara de extrañeza que había puesto. "cuando me contó lo sucedido no me lo podía creer decidí ir a comprobarlo y averigüe donde vivian, cuando pique a la puerta un hombre grande con un bigote inmenso me había abierto luego le exigí ver al niño" el marido empezo a temblar como minutos antes había echo su esposa , " me dijo que no me metiera en sus asuntos" "entonces se abrió la puerta de la cocina y apareció el niño tal y como me había descrito mi mujer, pero aparte tenia un moretón en un ojo" el señor Hasler sacudió la cabeza "no me lo podía creer" se llevo las manos a la cara "el niño es famoso, tendría que ser un héroe, y ahíestaba mirándome a duras penas desde la puerta" la frustración del hombre se hacia cada vez mas evidente "por Merlín su padre salvo la vida a mi mujer e intento salvar a mi hijo y ahora su hijo esta siendo maltratado por sus parientes". Por lo que le contaron después habían intentado llevarse al niñ,o pero primero el que al parecer era su tío lo había impedido echándolo de malas maneras de casa, y cuando recurrieron al ministerio los habían tachados de locos "como va a ser maltratado el" decían que le habían dicho un ayudante de Fudge. En este punto estaba francamente contrariado, juraría que la pareja que tenia delante no le no mentía, pero tenia que reconocer que el pensaba como los del ministerio, por mas que intentaba encontrar una mentira en sus palabras, una mirada extraña y no la había. Al fin se atrevió a preguntar, "muy bien pero ¿que quieren exactamente de mi?" ambos se habían puesto totalmente serios y lo miraron directamente a los ojos, en ese instante había comprendido lo que le esperaba, el marido se aclaro la garganta "queremos que nos traigas a Harry Potter".

Con un suspiro recordó como casi se trago la pipa de la impresión, una cosa era imaginárselo y otra que se lo dijesen así. Hubiese preferido que le encargaran lanzarles unos hechizos a los tíos del mocoso que esto. Recordó como se había negado en rotundo y la señora termino arrodillada delante de mi suplicándoselo, cuando la miro a los ojos le vinieron varios recuerdos de su madre suplicándole a supadre que le diera dinero para comprarle una varita. Bufo pensando que en ese momento se había decidido que estuviera aquí, el hombre saco una inmensa bolsa de dinero y lo coloco encima de la mesa, le dijo que que si aceptaba esa seria solo una parte de una 10 veces mayor de la que me darían cuando terminara. Recordó haber suspirado, ya estaba todo decidido. Solo les pidió que le juraran que no le estaban mintiendo, cuando ambos así lo hicieron, asintió, agarro la bolsa y desapareció.

Dio una ultima calada a su vieja pipa y la guardo, se hecho un hechizo de camuflaje, abrió la puerta del jardín del numero 4 y se oculto entre unos arbusto y un árbol. Apoyo la cabeza en el y no tardo en quedarse dormido.

Así se lo encontraron los primero rallos del sol ya por la mañana, cuando unos gritos provenientes de la casa lo hicieron ponerse alerta

- Maldito mocoso, te he dicho que no frías tanto el beicon- gritaba la voz de un hombre- y déjalo en mi plato con mas cuidado

Se acerco sin hacer ruido a la ventana mas cercana, observó a toda la familia, "vaya que si parece un caballo" pensó de Petunia" y vaya que están gordos el marido y el niño" entonces se fijo en un niño delgado y pequeñísimo "no tiene el brazo en cabestrillo aunque si cojea y no parece golpeado"penso el hombre, Harry echaba la comida en el plato del niño mas grande .Lo reconoció no había duda de quien era, igual a su padre aunque mas enclenque, pero tenia los ojos verdes," igual que su madre pensó" cuando el niño termino de echar todo el beicon en el plato del otro chico dejándolo lleno de todo tipo frituras, Harry levanto la cabeza hacia su tía "tía que voy a comer yo" pregunto. El ladrón presto máxima atención cuando la mujer le sonrió, por un momento pensó que le iba a dar su plato, pero entonces se fijo que su sonrisa era casi sádica, la mujer metió la mano en el frutero y extrajo un pequeño pomelo y se lo tendió sin ganas, el chico solo asintió. "vale ahora no tengo dudas, tengo que sacar a este niño de esta casa". "bien, pero ¿como lo hago?", no dudaba que si montaba algún escándalo entrando a saco y lanzaba algún hechizo estaría en Azkaban antes de lo que se tarda en decir expeliermus. Decidió esperar, "seguro que lo tienen que llevar al colegio, allí lo asaltare"

Al cuarto de hora la puerta de la casa se abrió, el hombre sin la protección del hechizo de camuflaje se oculto detrás del árbol y observo. El tío del muchacho se adelanto y abrió la pesada puerta del jardín, el que indudablemente era su hijo le siguió y detrás su mujer, Harry iba cojeando por lo que iba el ultimo

- vamos imbecil date prisas¿no querrás que llegue tarde a clase por tu culpa?.-rugió su tío cerca de un coche tipo ranchera

Desde el escondite observo como el niño tragando su dolor daba un paso hacia delante demasiado forzado con la pierna que cojeaba, a la vez la puerta del jardín se cerraba, el chico tropezó y se fue de cabeza contra ella. Cuando ya estaba seguro de ver una desgracia la puerta salio volando como por arte de magia y se empotro en el coche que estaba aparcado delante de la casa. El extraño no sabia si reír o llorar "al menos se que es un mago y bastante poderoso" pensó

Vernon Dursley pasó su mirada de su sobrino a su coche que lucia bastante extraño con una puerta atravesando la del acompañante, petunia estaba blanca mirando de lado a lado mirando que ningún vecino hubiese visto lo ocurrido. El sujeto se escondió mejor detrás del árbol

- TU- rugió Vernon y se dirigió hacia su sobrino que había estado mirando incrédulo puerta- ¿¡¡¡COMO TE ATREVES!!!?- lo agarro del brazo, Harry le dirigió una mirada llena de miedo

- no he hecho nada –gritaba- no tío, lo siento, lo siento. Por favor- decía el muchacho mientras era arrastrado hacia la casa – Harry hizo un intento de escapar y su tío le dio un puñetazo que lo tumbo en el suelo mientras le gritaba improperios-

El hombre tuvo suficiente, estaba rojo de rabia, justo cuando iba a salir un grito proveniente de la mujer le hizo detenerse- VERNON- ambos hombres la miraron desde sus posiciones- aquí no, pueden verte, dentro de casa, -. Vernon asentio mientras los ojos del ladrón se ponían como platos. No espero un segundo mas saco su varita y olvidándose de todo disimulo, le lanzo un petrificus totalus a Vernon que estaba apunto de entrar por la puerta, este quedo congelado soltando a Harry y cayendo aparatosamente para atrás. Petunia y Dudley gritaron de miedo mientras Harry miraba a su salvador con los ojos como platos. El hombre dirigió dos hechizos que dieron en la mujer y el niño gordo. El extraño no se paro a pensar en la inusual potencia de los hechizos que había utilizado. Se dirigió hacia Harry que seguía estático.

-vas a venir conmigo Harry, no te resistas.- dijo dando un paso hacia delante

- ¿Quien es usted¿Qué quiere¿Que les ha hecho¿los ha matado¿Qué es ese palo?- "parece que no sabe que es un mago" pensó

-voy a sacarte de aquí- dijo justo cuando llego junto a el- "y me voy a embolsar unos cuantos galeones" pensó con una sonrisa en el mismo instante que tocaba el brazo del chico. Casi no lo había tocado cuando la casa emitió un zumbido y una cúpula de color grisáceo opaco surgió de la nada envolviendo toda la casa, el jardín y partes colindantes. Apenas fue un parpadeo y no sabia como paso pero en un segundo estaba volando hasta estamparse contra el árbol que le había servido de refugio minutos antes. Con la vista borrosa observo como un anciano aparecía frente a la cúpula la tocaba y esta desaparecía, segundos después aparecían docenos de hombres vestidos como aurores. "mierda" fue lo único que pudo pensar antes de caer inconsciente

Dos días después ese hombre lloraba mientras era arrastrado por dos dementores por un estrecho pasillo de la prisión de magos, donde le habían asegurado que pasaría el resto de su vida. En esos dos días había habido una especie de juicio donde sin dejarle hablar (solo le habían preguntado si tenia cómplices, el se negó a decirlo pensando que no conseguiría nada delatando a los Hasler y quizas ellos podían ayudar a Harry o "quizás fue mi ultima muestra de que también corría sangre de su madre por este cuerpo" había pensado) le habían condenado a cadena perpetua en Azkaban por intento de secuestro y atacar a una familia inocente. Intento contar lo que había visto con todas sus fuerzas pero le había sido totalmente imposible. Recordaba a Dumbledore mirarlo furioso y como Fudge le acusaba entre otras cosas de pegarle un puñetazo a Harry pero la mayoría de los recuerdos eran aplastados por el momento en que Dumbledore le comunico la muerte de su madre muchos años antes, que los dementores le obligaban a recordar. De repente un dementor se soltó, el solo agradeció la perdida de contacto con ese repugnante ser. Y abrió una celda. El otro lo tiro y callo aparatosamente sobre la fría piedra, los dos dementores se retiraron flotando mientras el lloraba. De repente un ruido le llamo la atención en la celda de enfrente. Un hombre se movía de un lado a otro, parecía enloquecido y murmuraba algo que sonaba parecido a "colchusano". De repente se paro miro hacia la celda de enfrente y sus ojos se abrieron dejando ver dos ojos grises enmarcados por arrugas y ojeras.

-¿Mundungus?-dijo el hombre de los ojos grises- ¿porque estas tu aquí?

Mundungus Fletcher tardo 10 segundos en reconocerlo y 1 en contestar

-por intentar salvar a tu ahijado

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Unas pequeñas aclaraciones, no me gusta Mundungus y se que esta fuera de carácter pero era el único personaje que encajaba (mas o menos) para lo que tengo pensado, asi que le construí un pasado y le di un poco de ética, espero que sepan perdonar esa falta mia, de todas formas por si habia alguna duda el proota es Harry, no el :D

Por el mismo camino van los Hasler, estuve estrujándome el cerebro pensando en una pareja que pudiera cumplir su función para no tener que inventarla del todo (no me gusta hacerlo en los fics) pero no encontré ninguna. Un dato curioso, una hora antes de publicar esto se llamaban los Smith típico apellido para que no resaltaran mucho, media hora después pensé en los Rowling, este me atraía mas, no lo veía como inventar, sino como introducir a alguien en la historia, pero cuando estaba corrigiendo me pareció un poco fuerte lo de la muerte de un hijo y pensé que mejor no le pongo el nombre de alguien conocido. Busque un nombre sin mas, no tienen mas historia.

Si preguntan que paso exactamente cuando Mundungus toco a harry y porque sus hechizos salian con mas fuerza, eso se vera en proximos capitulos.

el próximo capitulo:

El perro encarcelado