Disculpen si no es de su agrado. Pero en mi imaginación resultaba gracioso. Espero que puedan disfrutarlo como yo lo hice mientras lo escribía. Y apreciaría sus criticas, ya que soy bastante nueva en esto. (:

South Park no me pertenece, les pertenece a los grandioso Matt Stone y Trey Parker~

Un Kenny resignado se desploma en la silla soltando un bufido. El chico de parka naranja esta indignado, exasperado y dolido en lo más profundo de su ego.

Cómo era posible que el chico más sexy de todo South Park no haya podido convencer a un misero chico que lo besara. No entraba en su cabeza. O sea, cómo iba a llamarse así mismo bisexual si ni siquiera había probado los dulces y suaves labios de un hombre.

Y sí, puede que les llame la atención de forma física y todo eso, pero si no lograba llevarlo a la practica, qué ganaba?. Y todo esto rondaba en la cabeza de nuestro amigo McCormick, que maldecía mientras miraba como sus amigos ignoraban cruelmente su angustia, mientras jugaban a las cartas.

Por otro lado, Stan y Kyle mantenían una muy entretenida partida de cartas pasando de los problemas de su amigo, ya que estuvo toda la semana quejándose de lo mismo sin darles tregua.

En serio chicos, no lo entiendo. Es que acaso soy tan feo?- Decía McCormick, poniendo ojos de perrito mojado para reflejar su angustia.

Stan que no quito ni un segundo su vista del juego, bufo – En serio Kenny. Ya esta. No puedes obligar a alguien a que te bese. Y no, no es que eres feo. Sino que a los chicos no les apetece andar a los besuqueos contigo y más solo por una estupida teoría…

Estupida teoría? En serio Stanley? Me ofendes – dramatizaba Kenny, aunque el comentario no le había caído del todo bien.

Esto es más que una estupida teoría, esta en juego la sexualidad de un pobre chico desahuciado, esto capaz marque mi futuro. Y tú dices que es estupido? – remarco volviendo a poner sus ojos llorosos.

Ahhh solo digo que no vas a definir tu sexualidad por besarte con una persona – soltó Marsh ya bajando las cartas e intentando hacer entrar en razón a su amigo.

Mientras Kenny intentaba por todos los medio hacer entender su razón a Stan y viceversa. Kyle, ya exasperado de toda esta situación, baja sus cartas y se levanta de su asiento para dirigirse donde estaba sentado Kenny.

Antes de que ambos muchachos pudieran preguntar a su amigo que pasaba, el Judío toma el rostro de Kenny entre sus manos y muy delicadamente roza sus labios para luego unirlos completamente en un suave y sumamente tierno beso. Luego de unos segundos delinea el labio inferior del rubio con su legua, y McCormick una vez recuperado del shock, corresponde el beso entre abriendo sus labios para darle lugar a que sus leguas recorran la cavidad bucal del otro, con roces suaves pero continuos.

A pesar de que la situación generaba una sensación completamente placentera para Ken, la falta de oxigeno se hizo presente y debido a eso tuvieron que separarse.

Unidos por un fino hilo de saliva y a una distancia de pocos centímetros entre ambos, él de ushanka verde entre abre los ojos para encontrase con el rostro del inmortal, entre una mezcla de shockeado y ruborizado.

Broflovski, satisfecho, sonríe de lado y habla en un suave susurro – Si el culón se llega a enterar, te matare hasta que quedes completamente muerto-

Y una vez dicho todo, vuelve a su lugar. Pero cuando levanta la vista ve a Stanley con los ojos desorbitados y con un rubor que sobrepasa el normal de una persona y a Kenneth que de a poco iba recobrando el habla.

Wow…. Creo que fue el mejor beso que me han dado en mi vida. En serio, Kyle…. –baja la mirada- Incluso creo que tengo una erección, mira. – Dijo señalando sus partes bajas.

Stan que de apoco iba cayendo en cuenta de lo que acababa de pasar - Kyle… que carajo fue eso…

KENNY!- Kyle al escuchar los comentarios y ver el estado de sus dos amigos, comienza a sentir como sus mejillas van tomando temperatura a causa de la vergüenza Oh vamos… Y-yo lo hice porque Kenny no se callaba. –suspira e infla sus mejillas, cerrando sus ojos esmeraldas, resignados – Aparte bien lo dijiste tu Stan, un beso no va a marcar mi sexualidad… Ahora ¿podemos retomar el juego y dar por concluido el tema?. – finalizo tomando las cartas y sin intenciones de seguir escuchando a los otros dos. Obviamente, el moreno y el rubio no acotaron más al respecto, temían que si insistían despertarían a Sheila Broflovski dentro del pelirrojo.