Hola, hola.

En esta ocasión, la
mini-historia de los
verdes.

Esta parte es solo
la introducción al
conflicto principal de
la historia.

AU; rated T.
CONSUMO DE ALCOHOL.

Historia dividida en cinco partes.

Basado en: "A little death", de The Neighbourhood.

PRIMERA PARTE

"DANCING THROUGH THE NIGHT"

Todos los jueves, hasta los días sábados, junto a sus hermanos frecuentaba ese club; todas las semanas, todos los meses, esos tres días. La chaqueta variaba entre la negra, la de cuero o la de mezclilla, los pantalones también, entre los blancos, los jeans rasgados o los negros… Las camisas, esas tenían una variación más amplia. Trataba de no tener el mismo estilo que sus hermanos, no le gustaba que los compararan y les dijera que "hasta se visten parecido"; daba las gracias por tener estilos diferentes: Boomer solía vestirse de manera más hipster, mientras que Brick no dejaba de usar camisas sin mangas y pantalones más holgados –Butch ocupaba ajustados, así como Boomer.

–¿Listos? –preguntó Brick, terminando de atar su cabello–. El auto ya está afuera.

Siempre lo mismo. Bien perfumado, bien arreglado, bien preparado.

Llegaban al club y las luces de neón les daban la bienvenida, luego era la gente que ya los conocía.

¿Quedó claro que, de verdad, eran clientes frecuentes?

Chocaban los puños con los baristas, saludaban a uno que otro chico o chica que estuviese en la barra también. Los conocían, a varios, pero de ahí a que se llevasen bien, no. En caso de Butch, él sí tenía a una chica con la que se llevaba bien.

Alta, prototipo de modelo curvilínea, esa figura de reloj de arena se contoneaba mientras caminaba, con toda la intención de cautivar desde el inicio la atención del chico –claro que siempre funcionaba. ¿Su nombre? Cassie.

–Ahí viene tu chica –dice Boomer, sobando un poco la pequeña barba que se estaba dejando–, ¿prefieres que nos alejemos?

–Nah –negó Butch–, es muy temprano para que se caliente el ambiente.

–Tan sutil –comentó Brick, rodando los ojos mientras sonreía.

Cassie echó su ondulada cabellera rojiza hacia atrás antes de lanzarse a los brazos de Butch.

–Tanto tiempo sin verte, mi novio temporal.

–¿Vas a seguir diciéndome novio temporal? –preguntó Butch, empujándola un poco para poder mirarla a los ojos marrones cuando le hablase.

–Es que somos novios temporales. Solo tres días a la semana.

–No somos ni eso –aclaró él, pero ella solo rio.

Mientras la parejita estaba ahí, hablando, Brick echaba una ojeada al entorno. Reconocía las mismas caras de siempre, quizás uno de ellos con algún acompañante nuevo, pero tampoco es como si el público variase demasiado.

Cada vez que llegaba un grupo nuevo, se sabía por el revuelo que causaban en el club sin saber que lo causaban; ya cuando eras un cliente frecuente, te cuentan que sí generaste un impacto entre el público.

A ellos también les pasó, pero ya no era tiempo de comentar eso.

–Brick –dijo Boomer codeándolo–, mira hacia allá.

Dirigió la mirada hacia donde su hermano le indicaba y pudo ver a una chica nueva.

No era precisamente una chica de características inusuales, o que llamase la atención por su encanto físico, pero incluso así, Brick no le quitaba los ojos de encima.

–¿Estará perdida? –le preguntó a Boomer.

–Eso parece –respondió.

–¿Qué es lo que parece?

Ambos se giraron hacia Butch, quien ya no estaba siendo abrazo por Cassie, ella había desaparecido, quizás había ido al baño. El chico ya estaba bebiendo un destilado puro, los otros dos chicos se miraron y asintieron.

–¡Amigo! –dijo Boomer–. ¡Dos por acá!

–¿Me están ignorando? –insistió Butch.

–Mira hacia allá –Brick hizo un gesto con su dedo para que mirase hacia la pista de baile–. Cerca de la columna con las luces de neón azules.

Vio a un montón de gente, pero incluso entre ellos, no le fue difícil identificar a la chica de cabello negro, corto, que se movía entre la gente, buscando a alguien poniéndose en puntillas.

–Oh, una chica nueva, ¿qué tiene eso de relevante? –preguntó al momento en que Boomer recibía los tragos y le extendía uno a Brick.

–Que no es como si fuese invitada de alguien más –dijo Boomer–. Quizás vino a buscar a su novio infiel –bromeó.

Norma y Katy, las chicas que Brick y Boomer solían ligarse respectivamente, se acercaron y el tema de conversación, al parecer, se dio por terminado. Cassie también había llegado.

–¿Qué miras tanto? –le preguntó ella, pero Butch despegó la mirada de la chica de cabello negro para fijarse en Cassie.

–Nada, solo me pareció ver a gente nueva, es todo.

–Ah, sí, mira qué interesante.

No esperó nada más y jaló a Butch a la pista de baile, pero él se contuvo de ir, aferrándose a la barra.

–¿Qué sucede? –se extraña Cassie.

–Sigo algo sobrio –afirmó–. Espera un rato, quiero estar bien mareado antes de lanzarme a la pista de baile.

–Ya, ¿entonces no te molesta si voy con Bruce?

–Ve, ve, yo seguiré bebiendo por mientras. Tal vez nos veamos después en la pista.

Cassie le sonrió y se alejó de él casi dando saltitos.

"Quién carajo es Bruce", pensó, ya que no recordaba a nadie que tuviese ese nombre. "Bueno, tampoco es como si me supiera los nombres de todos los que vienen, solo reconozco sus caras".

Pidió otro trago, y lo bebió mientras veía a la chica nueva de cabello negro bailar al ritmo de la ya tan explotada canción de Dua Lipa. No es que tuviese un estilo particular para bailar, pero se movía haciendo ondas con su cuerpo, o al menos así lo percibía Butch; mantenía sus brazos en alto, luego pasaba una mano por su cabello y esbozaba una coqueta sonrisa permaneciendo con los ojos cerrados, entregada al disfrute del ritmo.

Cuando ya iba por su cuarto vaso de la noche y ya sentía que se le entumecía, de a poco, la cara, vio que la chica se estaba reuniendo con dos más.

"Maldición, yo quería ir a hablarle antes de que llegara Cassie".

Las chicas que se le unieron eran una pelirroja y una rubia, ellas tenían el cabello más largo, pero al igual que la morena, lo mantenían suelto.

Les echó un vistazo a sus hermanos, mas no los encontró a su lado: Brick estaba con Norma sentado en su regazo en una de las mesas dispuestas –e ignoradas por todo el mundo– en un rincón del local, besándose apasionadamente; Boomer, en tanto, estaba con la bajita Katy bailando en la pista.

–Qué hijos de puta, me dejaron solo con el alcohol –fingió sentirse ofendido, pasado a llevar–. Qué le vamos a hacer.

Dejó pagado lo que llevaba consumido y se acercó a la pista de baile.

La chica de cabello negro no había salido de su campo visual desde hacía rato y, si no le hablaba, se sentiría como la mierda, como si fuese un maldito cobarde incapaz de generar una simple conversación en un club.

Se abría paso entre la gente, cada vez estaba más cerca. Y si bien la música estaba a un volumen considerablemente alto, él igual fue capaz de escuchar –o eso creía– la voz de la chica, que distaba de ser una voz aguda como era la de Cassie.

–¡Ugh! ¡Cassie! –se quejó cuando sintió el agarre de la chica.

–¿Ahora sí estás lo suficientemente ebrio como para bailar conmigo?

–Creí que estabas haciéndole compañía a Bruce –se extrañó Butch, zafándose un poco del agarre de la coqueta chica.

–Ya llegó su novio, no valía la pena que estuviese de violinista.

–Ah…

–Ya, vamos, me prometiste que íbamos a bailar cuando estuvieses lo suficientemente mareado.

Tomó su muñeca y lo acercó a ella.

¿Quién era el artista que sonaba ahora? Era lo que menos le importaba, simplemente saltaba y se movía junto a Cassie haciendo que sus cuerpos estuviesen tocándose. Ella pasó sus manos alrededor del cuello de él, por lo que Butch correspondió tomándola de la cintura. Dios, es que ella también era capaz de embelesarlo con su belleza y su coquetería.

Gracias a esa posición fue que pudo mirar por sobre la cabeza de Cassie y ver a la chica de cabello negro que pasaba sus manos por su nuca, al parecer se estaba refrescando, no había dejado de bailar durante todo ese rato, es normal que tuviese calor para ese momento.

Cassie lo agarra del cuello de la camisa y lo atrae hacia ella para poder susurrarle al oído:

–Escuché que se llama Buttercup.

Butch parpadeó, miró por última vez a Buttercup y se acercó a la boca de Cassie para besarla.

Al menos ya sabía el nombre de la nueva.

La segunda parte será publicada el 15/03. Ante cualquier retraso, avisaré en mi cuenta de instagram (floorvioleetta).

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