Sentir el peso de cada día sobre los hombros,
Sentir el cansancio del envejecimiento.
Ver pasar los años y percibir que no se ha avanzado.
Es como sufrir el asaeteo continuo de la derrota.
!Amargas!, muy amargas son las decisiones tomadas a la ligera.
Decisiones sin consultar, sin busca de consejo...
El tiempo transcurre lento a veces, pero envejezco rápido,
y con el tiempo atrás, quedan esperanzas e ilusiones.
