Hola¡ este es un Fic de Hetalia, alemaniaxitalia. es mi primer Fic de Mpreg y ademas de hetalia, aparecen algunos personajes originales como, los gemelos de Antonio y Romano y su Tia/hermana Venezuela, su tio Colombia y Ecuador. el hijo awesome de Prusia y el hijo de Sora. ademas el de Italia y Alemania.

Espero que les guste uwu...

Pajejas:

AlemaniaxItalia

EspañaxRomano

PrussiaxAustria

RusiaxChina... entre otros...

Se encontraba junto a Japón admirando el hermoso atardecer que anunciaba la venida de la noche, era increíble pensar que aquella paz no podía ser mejor. los tenues rayos de luz del sol se desvanecian entre los vivos colores que se formaban en el cielo y que poco a poco se opacaban. Acariciaba su vientre con ternura y algo de ansiedad. no sabía cuanto tiempo de embarazo tenía y aun la pequeña semilla no estaba notando. Estaba feliz, eso era lo único que podía decir y pensar en ese momento.

Aunque muchas veces Italia le provocaba un paro cardiaco a Japón los dos mantenía una estrecha amistad, por eso el castaño viva junto a el sólo por una temporada.

-!¿QUE?- exclamó el moreno al tal comentario

-silencio kiku...-

-dios!...no me digas que me pro pase contigo- dijo. Llevo su mano a su frente para quitar un poco de sudor, suspiro hondo para luego que darle viendo-¿ lo hice? !¿Soy el padre?-

-no! Ve~- exclamó con sus mejillas un poco coloradas. Bajo su mirada con algo de timidez- bueno pues veras...-

- Feliciano Vargas... No me digas que...-

Estaba tan avergonzado que nada salía de su garganta sólo trataba de no desmayarse en ese momento

- se me antojo pizza, vamos a comer un poco- dijo desviando la conversación. El moreno suspiro al ver que nervioso estaba-tal vez cuando éste... Ve~... Más tranquilo te pueda contar-

...

Así pasaron los días e Italia siempre buscaba la forma de no tener que explicar quien era el padre de la creatura que tenía en el vientre, Japón veía como cuando llegaba el momento de tocar el tema el castaño se mantenía muy tímido, más de lo que siempre era.

La residencia de Japón era cerca de la playa, disfrutaba la vida tranquila que mostraba en aquel lugar, de verdad le encantaba.

La semilla que estaba en su interior comenzaba a crecer haciéndose totar cada vez más algo que le preocupaba más a Japón que a Italia ¿Como reaccionarian todos al verlo en ese estado?, así que para que no se le notará mucho suguirio que se vistiera con un kimono, oferta que Italia rechazo

Se encamino a su cama, el sueño lo estaba venciendo, lentamente se acostó y se dejo llevar por la noche

...

Otro día empezaba, los rayos de sol entraban por la ventana, llegando al bello rostro castaño, que con la calidez va despertando poco a poco. Se levanto con un poco de pereza y se dirigo al cuarto de baño. Una vez que había terminado de aliatarse y tender su cama salió de la habitación

- ¡muy buenos días Italia! – saludo Japón al verlo llegar al comedor.

- ¡buenos días Japón! Voy a salir a caminar…. –

- como digas... Italia – se quedo unos momentos en silencio para luego volver a hablar – el almuerzo ya va ha estar listo

- no te preocupes, si quieres te ayudo cuando venga, así comemos los dos – comento con una sonrisa

- como digas – se contagió por la sonrisa del castaño

...

Caminaba tranquilo por un parque que se encontraba cerca, había dejado el correr todas las mañanas para remplazarlo por una caminata le ayudaba a distráelo, unos niños jugaban muy alegres divirtiéndose con muchas energías. Se imaginaba que m pronto el estaría tambiéndo con su hijo, divirtiéndose con el, disfrutando la niñez del menor. Al pensar esto no pudo evitar que sus ojos se humedecieran hasta el punto de hacer que unas lágrimas recorrieran sus mejillas

- creo que ya es hora de regresar bebé – susurró, mientras acaricia el nido de su hijo, para luego retirarse.

...

A penas llego se dirigió a la cocina, encontrándose con alguien totalmente diferente a quien esperaba.

- A-Alemania... Eres tú?

Un fornido y serio rubio giro su cuerpo para quedar frente al castaño

-hola Italia ¿Como éstas?

- Ale... Alemania…. Estoy bien, y... ¿tú? – estaba nervioso no le había dicho a nadie de su estado, pues, la verdad tenia miedo de dar explicaciones.

- ¡Muy bien!... a que no sabes, alquile una casa para nosotros dos

- ¿para? – ¿Casa?... ¿Casa para qué?, se preguntaba

-para poder estar juntos los dos

- Esta bien... Pero... – caminaba lento, estaba nervioso y confundido, ya hasta le estaban dando nauseas, con cuidado acerco a su vientre la mano del rubio. Suspiro confundido por lo que estaba haciendo y al levantar la mirada se encuentra con los dos iris. Azules del rubio bien abiertos

- Alemania... Yo...

- Hola, hermano – dice una tercera persona por detrás - ¿Qué no saludas a tu hermano mayor?

El castaño dio vuelta aun con la mano en el vientre, al frente de el estaba el padre de su hijo y al otro lado su hermano.

- claro – se acerco dejando a Alemania parado en ese mismo sitio, un poco tímido lo abrazarlo. El cual lo recibió en sus brazos, rodeando la cintura del más joven, aspirando el dulce aroma a mar. Pero, se percato de algo que no había notado, una barriguita muy pequeña que topaba con su vientre plano, abrió los ojos en grande, acaso… ¿pero como?... ¿Cuándo?.. Se separo y lo miro a los ojos.

- ¿Feliciano?

- estoy mal del estómago, hermano...- dijo alejándose de el antes que notará algo más, por suerte el bebé del miedo que su madre sentía se había escondido, tal vez sentía el peligro...

Continuará...