La Guerra por fin había terminado y todos los estudiantes de Hogwarts estaban volviendo a las nuevas instalaciones de la escuela, entre ellos nuestros más grandes héroes, estaban ya todos tomando asiento en sus respectivos lugares, dando comienzo a la bienvenida, dando el comienzo de un nuevo año para ellos y los nuevos estudiantes.

Harry comía y reía junto con sus amigos, pero desde hace un tiempo y ahora mismo miraba solo por curiosidad la mesa de los Slytherin buscando a su antiguo enemigo y a sus amigos no hallando a ninguno de ellos sintiendo como en su estómago se formaba un leve nudo de preocupación hacia el hurón, se levantó de la mesa, dirigiéndose a los dormitorios para descansat y a mitad del camino la vio a Ginny Wesley junto con otros compañeros de otros cursos con varitas levantadas apuntando a Draco Malfoy solo para darle el golpe de gracia.

Antes de que ocurriera Harry tomo su varita rápidamente lanzando un hechizo lo bastante poderoso para que sus ex amigos retrocedieran y lo vieran con asombro y a la vez con furia por haberlos detenido, según ellos de hacer lo correcto

-¿¡Que trataban de hacer!? –grito Harry tomando posición enfrente de Draco por lo visto el único sobreviviente de esa masacre que había causado su ex novia junto con otros compañeros

-porque lo defiendes, el merece morir junto con los demás – grito la colorina sin tenerle miedo

-si no quieren que yo los mate a ustedes es mejor que se larguen –sentencio el león sin esperar otra respuesta de los demás

-o Harry le harías eso a tu novia, a tu amadísima novia- lo decía mientras se intentaba acercar a él para sacarlo del camino

-EX NOVIA – recalcando la palabra como si la pronunciara con asco – ahora lárgate de aquí, si no quieres vértela conmigo – apenas término de decir esas palabras Ginny y los demás se fueron sin decir ninguna palabra

Harry volteo para ver a la serpiente totalmente lastimado e inconsciente, parecía que no respirara y eso le preocupo un poco se acercó lo suficiente para tomar su pulso a un seguía vivo, solo eso lo hiso soltar un suspiro de alivio, como pudo lo puso en su espalda y lo llevo a la enfermería donde se quedó cuidando del hurón mientras lo curaban.

Cuando la enfermera al fin se fue dejándolos solos el león se dedicó a mirar detenidamente cada parte del rubio examinando su rostro, ese rostro que parecía porcelana, esos finos labios que parecían una delicada línea que con solo verlos te invitaba a besarlos y aprobarlos.

Harry se mordió el labio inferior haciendo volver a la realidad, retándose a sí mismo por tales pensamientos, miro nuevamente al rubio buscando esta vez su mirada, esa mirada que solo le dedicaba a él, esa mirada de desprecio y tal vez de algo más, pero no la hallo estaba plácidamente dormido recuperándose por lo ocurrido.

El castaño seguía mirando los labios del rubio y estaba solo, el hurón estaba dormido y nadie los veía, nadie lo culparía, nadie lo sabría, se levantó de su silla y se sentó tomándole la mano a la serpiente, mientras la acariciaba dulcemente, lentamente se acercó a sus labios intentando que sus nervios no lo hicieran fallar, cuando por fin sintió el contacto de esos delicados labios.

Su cuerpo entero reacciono sintiendo una gran electricidad que le invadía, que su estómago explotaba de mariposas, con solo ese contacto su cuerpo se sentía de maravilla sacándose de esas estúpidas dudas que tenía hacia el rubio, ya con esto estaba más que claro que Draco Malfoy le atraía de pies a cabeza.

Harry estaba en su propio mundo disfrutando los labios del dragón, besándolos delicadamente, cuando sintió que le correspondían y los otros labios se movían a su ritmo, ninguno de los dos quería separarse lo estaban disfrutando y mucho, así que Harry pidió permiso con su lengua para poder meter está en la boca del otro, lo cual el otro no negó, dejándole el pase libre a su boca.

las dos lenguas peleaban por quien llevaba el control ninguno de los dos quería detenerse pero el aire estaba siendo necesario sus bocas se separaron lentamente dejando ver un hilillo de saliva que era lo único que los separaba.

Cuando por fin se separó Harry pudo apreciar aun Draco Malfoy sonrojado y a la vez con ganas de golpearlo por que se había atrevido a hacer tal cosa con él, el león solo le sonrió entretenido por la actitud del rubio, se acercó nuevamente a sus labios viendo como esta vez el rubio ponía un poco de resistencia pero nuevamente dejándose llevar por los instintos del castaño y así besarse nuevamente, a la vez sus manos se entrelazaban delicadamente esta vez dejándose llevar por los sentimientos que se transmitían entre ellos dos con un simple beso.