Bueno amigos esta historia es meramente experimental, es mucho más ágil que mi trabajo anterior pero también más corto, así que bueno déjenme sus opiniones y críticas , si les gusto háganmelo saber

Psdt. No es un one shot

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Bienvenido viajero, adelante, no temas, no muerdo. Es una noche fría ¿Verdad?, eres muy afortunado, lo sabes cierto, ¿Por qué? Bueno, "amigo", tu camino te ha traído aquí, a mi humilde taberna. Ven acércate, no temas, que es un noche fría, y yo, siempre guardo espacio para uno más cerca del fuego. Deja que el calor de mi llama te abrace, bebe un poco de mi famosa aguamiel y ponte cómodo, que la historia que te contare no será corta, ¿Qué solo estas de paso? Oh, "amigo", aquí nadie está solo de paso, ¿Por qué? Ya lo veras.

Noches frías como estas son muy típicas por este lado del imperio, cada noche de invierno los bosques tienen a volverse, peligrosos, grandes bestias recorren estos caminos, sedientas de sangre y muerte, los Arashanis lo sabían de primera mano, nadie sabe de dónde o cuando vinieron, ni porque en un acto de absoluta locura alzarían sus reinos de este lado del imperio. Aun así sus reinos prosperarían, alzándose ante esta inclemente naturaleza, pero bueno, nada es eterno "amigo", de ellos ya no queda nada hoy , más que viejas ruinas que las bestias que un día combatieron, reclaman como suyas, ¿Si son peligrosas?, solo un loco, un demente, o un verdadero idiota se aventuraría por estas viejas ruinas, adentrándose a las fauces de la muerte en busca quizás de una buena historia que contar a sus nietos, y aun que, demente se quedaría corto para describirlo, aquel joven bribón de cabellos blancos lo era.

Con sigilo y maestría se escabullo entre las bestias adormitadas, avanzando por aquellas ancestrales cámaras que en el pasado fueran recorridas por reyes y príncipes. Y que ahora fungían como madriguera de tan abominables seres. Con cada paso, su corazón aceleraba su ritmo, su respiración se agitaba y su astucia aumentaba. Espadas, coronas, copas y monedas , tesoros olvidados de un reino que parece haber sido devorado por el tiempo , decoraban aquel lúgubre túnel. Cada paso lo acercaba a la puerta del trono, cada paso lo acercaban a su tesoro, el único tesoro que en verdad importaba

- La sala del trono, tan grande y magnifica como la imagine, aunque en lo personal hubiera contratado otro decorador- Dijo aquel joven bribón, con una confianza y arrogancia absoluta mientras que jugueteando con su gran capa de piel ,se ajustaba su cinturón.

- Hubo una vez un príncipe Arashani, se decía que este podía doblegar la voluntad de la bestias, con solo tocar su flauta mágica, y que así llevo a su reino a un edad dorada protegiéndola hasta sus últimos días en la tierra , en su honor el tesoro del príncipe flautista fue alzado sobre el trono del rey, como símbolo de su poder-

- Y ahora cientos de años después. La flauta de Guar, es toda mía- Su júbilo era grande, era mayúsculo, pero cuando estas mucho tiempo en el negocio aprendes ciertas cosas, una de ellas y la más importante. El tesoro solo es el inicio de la aventura.

Sombras y nieblas, danzaron por toda la sala, mientras una tétrica vos gritaba a todo pulmón – Ladrón- Cayendo desde lo alto como cometas, diez figuras tomaron forma, de espectrales galas los reyes guardianes del tesoro encararon al joven aventurero – Ladrón- gritaron al unísono – Devuelve el tesoro del príncipe flautista, o atente a tu sentencia – Muerte- Gritaron los otros , desenvainando sus espadas.

- Mis honorables, altezas lamento esta abrupta intromisión a su acogedor palacio, pero me niego rotundamente y decididamente , a entregar tanto mi vida como mi tesoro- Esbozando un sonrisa socarrona , y como el más viejo de los camorristas desenvaino igualmente su reluciente hoja – Ataquen , si creen que pueden quitármela – las hojas chocaron, su maestría con la espada supero con creces la de los reyes, esquivando, bloqueando y devolviendo cada estocada, el sentía que podía hacerlo por siempre si así quisiera, pero el sol se ocultaba y si esperaba que su plan funcionara tendrá que apresurar el paso.

- Oh mis altezas , me rindo ante su magnificencia en el manejo de la espada, es por eso que como el caballero que soy , insisto en que tomen la flauta y que nuestra pequeña gresca quede en el olvido- Los espectros no hubieran dudado en tomar su tesoro de vuelta pero la luz que se filtraba de aquella antigua y maravillosa cúpula de cristal al centro de su sala , les impedía acercarse al joven espadachín – Tienen suerte mis altezas, no soy un hombre rencoroso, no tomare en cuenta la ofensa que me dieron al no aceptar mis disculpas, a cambio claro, de quedarme con este pequeño presente-

- Pequeño ladrón, por cuanto crees que el sol te protegerá, la noche se acerca, y cuando el ultimo rayo del sol haya muerto, lo harás tu- Mátalo- Alimenta a las bestias-

-En eso , su majestad, usted está equivocado, mi estancia aquí no se prolongara mucho más , lamento despedirme tan pronto pero tengo que decir adiós- Sacando de su capa un arma dorada de intrincados mecanismos, disparo un gancho fuera del palacio que a toda velocidad lo llevo fuera, ante la atónita mirada de los ancestrales espectros.

- Y, una cosa más sus reales pelmazos, no soy solo un ladrón, soy Lincoln Loud el más grande recuperador que este mundo conocerá jamás-

A la lejanía, pudo oírlo mientras se alejaba de aquel viejo palacio, el grito iracundo de unos espectros que solo atinaba a llamarlo por su nombre con toda la furia que medio milenio le permitió liberar

La muerte nos tiende a cambiar, ¿Verdad?, ja, ja, ja , ¿Qué le ocurrirá al pequeño peliblanco, a ese joven bribón le espera una gran aventura por delante suyo, y a nosotros una larga noche ven acércate al fuego , que la noche será aún más fría, y en mi taberna siempre hay espacio para uno mas.