VALINOR

PROLOGO:  Del otro lado del mar

Puedo sentir el viento soplar y colarse por cada fibra de mi ser, aspiró el olor a sal del mar con fuerza reteniéndole en mis pulmones lo mas que puedo deseando hacer mas intimo el contacto. Debo admitir que en mi corazón siento una dicha mezclada con expectación y nerviosismo....aún después de tantos siglos recuerdo las fatídicas palabras de Namo, temo que no se me permita atravesar la barrera que los Valar han construido para proteger las tierras imperecederas. Ahora que he perdido mi anillo, mis poderes han disminuido considerablemente; he tenido que dejar a mi esposo atrás, al gran amor de mi vida inmortal....él debe quedarse algún tiempo mas con lo que queda de nuestra gente, sé que pronto él vendrá junto a mi.

Ya estamos muy cerca, puedo sentirlo....sé que todos los que vienen en este barco pueden sentirlo también, me alegro que Mithandir haya venido conmigo....él se ha vuelto un gran amigo con el transcurrir de los siglos; que decir de mi querido Haldir, mi capitán de la guardia de Lothlorién, le he visto crecer, sufrir, luchar y amar durante todo este tiempo que he sido bendecida con su dulce y leal compañía, ha sido el hijo que nunca tuve. No menos importante es el portador del anillo, ese pequeño hobbit con un corazón inquebrantable que los mas grandiosos señores de los elfos podrían envidiar. Y que decir de el esposo de mi hija, el gran señor elfo portador de sabiduría que ha sido mi apoyo incondicional y de mi pueblo, él por primera vez en numerosas vidas de hombres porta un semblante lleno de tranquilidad y confianza. Pronto estará junto a la luz de su vida.

Ahora que estoy cerca de retornar al hogar que hace tantos milenios deje atrás, puedo ver la espesa neblina abrirse para darnos paso. Haldir ha llegado hasta mi lado expectante, puedo sentir su corazón palpitar con fuerza.....muy pronto se reunirá con sus padres. Tiene miedo, lo sé a pesar de lo mucho que intenta esconderlo....se avergüenza de su sentir pero oh mi joven elfo ¿por qué temes a tu destino? Nunca has temido y ahora lo haces porque tus hermanos han decidido quedarse en Lothlorién y te sientes culpable de cómo tus padres te recibirán al haberles dejado. Tomó tu mano con fuerza, veo la sorpresa de tu rostro la cual segundos después es reemplazada por una expresión de gratitud y entendimiento. Aprietas mas mi mano entre la tuya y la acercas hasta tu pecho a la altura de tu corazón, me permites sentir tu inmortalidad y me ofreces un juramento sin palabras, siempre estarás a mi lado.

Mithrandir y Frodo han llegado a nuestro lado, ellos también confían en que la gracia de Eru este a nuestro favor. Nuestro barco se interna entre las olas y la espuma, todo parece indicar que Ulmo se haya complacido con nuestra llegada; la mano de Haldir estrecha la mía con fuerza, sé que intenta infundirme valor para lo que vendrá, más no temo. Pronto veré a mis amigos de antaño, mi padre.....mi hija....la luz de los Valar y la eterna dicha que hace tanto perdí.

Varios tripulantes lanzan exclamaciones de alegría y sorpresa cuando las doradas costas se descubren a nuestros ojos, por fin hemos llegado....por fin después de tantos siglos, guerras, odios y temores estamos en casa.