Hetalia es de Himaruya. Latin Hetalia es de Latinhetalia fans.
Una Noche con Él.
capítulo único.
Para Mely-Val, quizás nunca pueda darte las gracias y todo el crédito que te mereces.
Es lo más bonito que hay en ese lugar, su reflejo, claro.
En pocos días celebrará que irá a Rusia… Ósea, aunque es obvio que él irá. ¿Cuándo no ha ido? Ajajaj. Va a ir… Sea como sea va a ir.
No importa, debe dormir, se hace de noche.
Cuando la oscuridad comienza, las pesadillas se asoman por los recovecos de las puertas, por las orillas de las ventanas. Una sombra recostada por el suelo, muy rápido, puede tomar la forma de una serpiente.
Serpientes, osos, leones y jirafas de largos cuellos.
Pero no son las sombras de los animales a los que suele temer. El problema radica en ellas… Cuando las sombras se hacen robustas, aparecen en ese entonces los hombres.
Nada, ni siquiera las siniestras criaturas de la noche, pueden causar tanto miedo como los hombres.
La razón por la que duerme con una lámpara de niño, espanta pesadillas color cían, es porque quiere espantar a las sombras de los hombres de su habitación.
Pero no lo logra.
Los hombres robustos que lo sacaron de sus sueños por las noches, vendándole los ojos, dejándolo ciego, gritándole, dejándolo sordo, callándole lo dejaron mudo.
Por años… Muchos años.
Se levanta, es una de "esas noches".
Prende las luces, se frota la cara, mira la hora. Las seis de la mañana. Suspira cansado y frustrado de esta situación que lo acongoja.
Entre cuatro paredes, encerrado, el techo, cae, presión para su pecho y el dolor…
Luz.
Se relaja un poco. Ese día, es domingo, no tiene que levantarse temprano, si bien de vez en cuando va a misa, ese día precisamente no será el día.
El papa está con Argentina, pero a veces es como si Dios lo hubiera abandonado un poco… Solo un poquito…
Sabe perfectamente que no debe levantarse temprano, se preocupa, ¡Es que sabe perfectamente que estará dándose vueltas en la cama un rato más!
Ya probó con los sedantes. Luego de un tiempo ya no funcionaron.
¿No resultó?
Porque ahora mismo no sabe bien si está durmiendo o está soñando.
Vuelve a apagar la luz, cierra los ojos y se tapa la cabeza con las mantas. Realmente odia la oscuridad.
Ve cosas con los ojos cerrados. Cosas que hace unos años vio mejor…
No entiende qué es peor, si estar despierto soñando, o estar dormido y ver como si estuviera despierto.
La razón por la que las sombras no se van, es porque no existen. La oscuridad es total. Pero están allí, atormentándole, gritando, asechando desde lo profundo de su memoria.
Está cansando.
Él que ha dado todo por los demás, y ellos, que se han llevado todo o más, de él.
Antes que llegue la luz, antes que el sol bese a la ciudad de la furia… Arden sus ojos.
Llora, el nudo en su estómago ha reventado.
Llora.
Llora…
Llora.
Estos son sus peores miedos: Recordar.
No hay cosa más dolora y atemorizante que recordar.
No lo sabe bien, se ha quedado dormido. Al menos yace tranquilo… Ya no duele tanto.
El lindo, guapo, precioso, el más grosso…
Quizás despierte molesto por no dormir tanto, pero lo merece… Quizás necesite un poco de cariño y vaya a visitar a sus vecinos, quizás a su hermano.
No va a ser uno de esos días melancólicos.
A veces agradece que aún tenga corazón. Con tanto, tantos golpes, tantas heridas.
No es un pecho frío, es él.
Caliente y cándido como el sol, el sol de mayo.
Personalmente, amo, o al menos, adoro bastante a Martín, sí, este pequeño One-Shot trata sobre él, por si no se habían dado cuenta.
De corazón, espero que las cosas puedan arreglarse en Argentina.
Atte, Reino Inquieto