Habían pasado un par de años en Fairy Tail, Natsu y Lucy habían tenido una pequeña hija, peli-rosa como no, la pequeña llamada Layla era una alborotadora como su padre, tenía el pelo largo, ojos marrones y aparte controlaba el fuego de momento.
Su madre tenía la esperanza de que fuera como ella también, ya que cualquiera podría decir que no era su hija si no la conocían.
Cuando Natsu y Layla llegaron a casa, Lucy estaba haciendo la cena y hablando con Happy, de cualquier idiotez que Happy había dicho, al escuchar la puerta los dos se voltearon para ver a los dos peli-rosas que entraban por la puerta.
-¡mama mama!- la pequeña Layla grito corriendo hacia su madre para abrazarla.
-¿qué pasa para que estés tan feliz?- la pregunto Lucy mientras la abrazaba.
-¡papa dijo que me enseñaría a controlar el fuego después de cenar! –grito una pequeña Layla entusiasma.
Al oír eso, Lucy lanzo una mirada asesina a Natsu para después mirar a su pequeña con una sonrisa.- ves a lavarte las manos para cenar-
Cuando se fue, Lucy se acerco a Natsu enfadada y le miro con mirada asesina, a lo que Natsu se asusto, había descubierto con el paso de los años que Lucy daba tanto miedo como Erza o más.
-¡¿estás tonto o te caíste al nacer?!- le dijo una furiosa Lucy.-¿¡pero cómo se te ocurre decirla que la enseñaras a controlar el fuego?! Solo tiene tres años-
-vamos no es para tanto, yo la veo capaz, es lista- dijo poniendo su típica sonrisa que hizo que Lucy suspirara.
-vamos Lucy, yo creo que sí que es capaz- dijo Happy con una sonrisa.
-¿seguro?- pregunto la rubia al gato que volaba a su lado.
-¡aye!- respondió.
-está bien, pero como queméis algo te mato Natsu Dragneel- dijo la rubia antes de ir a terminar de hacer la cena.
Después de cenar y de recoger todo, Lucy se sentó en el sofá mirando a Natsu y a Layla, a ver que tenían pensado hacer, Natsu antes de empezar la explicación miro a Lucy y trago saliva, ella lo estaba mirando con mirada de asesina.
-pues a ver pequeña- Natsu se agacho a la altura de su hija e hizo una pequeña llama en su mano. – hazlo tu ahora-.
-¡GUAUUUU papa como mola!- dijo Layla sonriendo amplia mente.
Al parecer de Lucy, su hija parecía feliz, y pensaba que todo iba a salir bien hasta que…
La pequeña se lleno de llamas por todo el cuerpo y empezó a sonreír como si nada – ¿¡ASI PAPA?!
-NATSU PARALA O QUEMARA ALGO- dijo Lucy furiosa, al parecer ella leía el futuro, iba a destruir media casa si Natsu no la paraba, al fin y al cabo esa es la especialidad de los de Fairy Tail.
La pequeña se apoyo en el sofá sin darse cuenta y este empezó a arder.
¡Apágalo Natsu!- dijo una Lucy ya histérica.
Natsu tropezó con el cubo de agua, tirándoselo a Lucy encima, a lucy la pareció el colmo, el sofá seguía ardiendo, y el fuego se extiendo hasta la alfombra y las cortinas.
Empezó a salir humo por las ventanas, y gracias a que juvia pasaba por allí lo apago y se fue, después…
Menos mal que nadie salió herido…- suspiro Natsu- ¿estás bien pequeña?
Si papa –sonrió como si ella no hubiera hecho nada, definitivamente era como Natsu.
¿Y tu Lucy? –natsu se acerco a ella agarrándola por la cintura.
Ah… estoy bien –Lucy parecía tranquila.
Estaban a punto de besarse cuando lucy soltó una bofetada a Natsu,- ¡te dije que no la enseñaras todavía, imbécil!-
Natsu se sobaba con la mano la parte de la cara donde Lucy le había dado.-ya ya… PERO NO TENIAS QUE PEGARME-
-ahora limpia tu todo lo que se ha quemado- ordeno Lucy señalando la casa.
Mientras Natsu limpiaba y lucy estaba enfadada, Misaki no paraba de reírse.
-tengo unos padres muy raros- seguía riéndose.