El Potterverso, por primera vez y espero que sirva para todas las historias, pertenece a Rowling. Ea, ya lo sabéis.


Supervivientes


1

Dennis Creevey

Héroe

Dennis no vuelve a Hogwarts hasta que la Batalla ha terminado, como Colin le ordenó (y porque lo amenazó con contarle a Laura que lleva dos años colado por ella si se le ocurría quedarse a luchar). No lo hace por el pasadizo por el que salió, sino por el camino que comunica el castillo con Hogsmeade. Se muere de ganas de ver a Colin. Con lo entusiasta que es su hermano (y ni cien guerras cambiarán eso), seguro que tiene miles de anécdotas que contarle, y quizá hasta se las haya ingeniado para sacar fotos de la batalla para enseñárselas a sus padres, como le prometió.

Sin embargo, conforme va acercándose al colegio y descubre los destrozos con cada vez más claridad, algo frío se acomoda en su pecho y hace que se estremezca. Apenas tiene quince años, pero ha pasado todo el curso escondido del Ministerio y eso lo ha vuelto bastante precavido. Tiene la impresión de que le han arrebatado un año de su vida y guarda rencor a todos esos magos que no pueden vivir en paz con los demás y tienen que hacer daño para sentirse bien.

Cuando está atravesando la entrada al colegio, observa que los cerdos alados –que fueron la primera imagen que Dennis tuvo de Hogwarts, con nueve años, cuando su hermano le mandó una carta llena de fotos y le aseguró que aquello era súper genial– están decapitados y los restos de las alas que siempre le han fascinado están esparcidos por el suelo por alguna maldición. Y Dennis odia aún más a los mortífagos –palabra que oyó ya en Hogwarts, después de que terminara el Torneo de los Tres Magos.

No tiene ni idea de dónde puede estar Colin, así que se dirige al Gran Comedor. Los tres años que ha pasado en Hogwarts le han servido para comprender, entre otras cosas, que la gente siempre se reúne ahí cuando pasa algo. Camina por los pasillos destrozados, entre gárgolas despedazadas y armaduras abolladas, diciéndose que eso no se parece en nada a las fotografías que le mandaba su hermano hace seis años y temiendo quién pueda haber muerto de su bando. Porque es imposible que hayan derrotado al malo sin sufrir alguna baja.

El nombre de Laura Madley viene a la mente de Dennis casi inmediatamente después que el de su hermano cuando se planta ante la entrada del Gran Comedor. Temiendo lo que pueda encontrar, el joven da unos pasos para enfrentarse con lo que pueda haber dentro.

Ver el lugar en el que fue Seleccionado, celebró las victorias del equipo de quidditch de su casa, charló con sus compañeros mientras desayunaba y repasó tantos exámenes cinco minutos antes de la campana tan destrozado hace que algo dentro de Dennis se rompa también. Es horrible. Hogwarts siempre ha sido como un segundo hogar para él. Hogar que esa Batalla ha destrozado. Todo está lleno de cadáveres sobre los que lloran los que han perdido a las personas que habitaban en esos cuerpos.

Entonces, un remolino de cabello castaño se acerca a él y lo abraza. Dennis no reconoce a Laura hasta que la muchacha entierra el rostro en su hombro, temblando. Y tiene un mal presentimiento.

—¿Dónde está Colin?—su amiga se separa de él y clava los ojos en el suelo—. ¡Laura! ¿Dónde está mi hermano?—exige saber.

Laura está a punto de llorar. De nuevo, porque sus ojos grises ya están enrojecidos. Y no se atreve a mirar a Dennis a la cara. Y él se asusta aún más. ¿Qué le ha pasado a Colin? ¿Lo han herido? ¿Tan grave es?

—Ven—toma su mano y lo guía. Ese simple contacto, que en otras circunstancias hubiera hecho que el estómago de Dennis se pusiera a dar volteretas de alegría, no le transmite nada ahora. Simplemente se deja llevar por la Hufflepuff, mientras algo en su interior empieza a encajar las piezas.

Ve a su hermano antes de que Laura se detenga. Está en el suelo, entre una mujer adulta que Dennis no reconoce y un Ravenclaw con el que se cruzó en una ocasión. Como él mismo, Colin nunca ha sido excesivamente grande, y su hermano mayor parece casi más pequeño que él. Tiene los ojos cerrados, y Dennis quiere pensar que está inconsciente por algún maleficio.

—¿Cuándo se va a despertar?—se escucha a sí mismo preguntar. Laura lo mira con los ojos llorosos.

—Dennis, no… no va a despertar. Los mortífagos…

—No, seguro que tiene que despertarse—se empecina él, y se deja caer junto a Colin—. Lo que pasa es que tiene el sueño muy profundo—agarra el hombro de su hermano y lo sacude—. Eh, Colin, venga, levántate…

Las lágrimas bajan por el rostro de Laura, pero Dennis no se da cuenta. Porque sin querer ha rozado el cuello de su hermano, y está insoportablemente frío. Es porque lo han dejado en el suelo, se dice, sin querer creer lo que se hace más evidente a cada segundo que pasa.

—Dennis, está muerto—susurra Laura—. Estaba en los jardines, lo trajo un tipo enorme que creo que no es del colegio…

—¡No está muerto! ¡No digas eso!—chilla Dennis, tratando con más ahínco de despertar a su hermano, intentando sin éxito retener las lágrimas que empiezan a escaparse de sus ojos. No obstante, las palabras de Laura han activado un mecanismo en su cerebro. Porque el que Colin esté tan frío, quieto y que no se despierte por mucho que su hermano pequeño lo sacuda encaja más con la teoría de que… que…—. Está dormido—solloza en voz baja, incorporando a Colin y abrazándolo. No quiere creer que su hermano lo haya abandonado, no después de haber pasado meses escondido con él y haberlo oído decir infinidad de ocasiones que no lo iba a dejar solo jamás, cada vez que tenía una pesadilla—. Está dormido—repite, para que sólo lo oiga Colin.

—Señor Creevey—Dennis levanta la vista y descubre a la profesora Sprout ante él, con un brazo rodeando los hombros de Laura, por cuyo rostro corren ríos de lágrimas—. Sé que no es un consuelo—dice en voz baja, y el muchacho tiene la impresión de que ella también está a punto de llorar—, pero yo estaba ahí y…—Dennis no escucha el resto. Sabe que la profesora Sprout nunca miente. A veces intenta endulzar las verdades más amargas, pero incluso a ella le resulta imposible suavizar algo así.

Colin está muerto. Le dio esperanzas, le hizo promesas y se llevó todo eso con él cuando lo abandonó por luchar en una guerra de magos. Dennis desea pegarle por ser tan mentiroso y no cumplir sus promesas, pero en lugar de ello lo abraza con más fuerza, intentando contagiarle los fuertes latidos de su corazón sin éxito, llorando, porque ahora él tiene que hacer de hermano mayor cuando ha dedicado toda su vida a imitar a la persona que ya no puede seguir siendo un ejemplo para él.

Y justo entonces, la palabra "héroe" se filtra en su cerebro saturado de emociones. Las palabras de antes y después de esas cinco letras llegan poco después, y Dennis logra componer la oración que ha oído a duras penas.

"Ha muerto como un héroe. Debes estar orgulloso de él".

Y Dennis explota.

—¿Y a mí qué mierda me importa cómo haya muerto?—grita, incapaz de dominar su furia—. ¡Está muerto! ¡Lo habéis matado todos, haciendo la puta Guerra! ¡Colin no era un héroe para vosotros! ¡Era mi hermano! ¡Y me lo habéis quitado, todos!

Cuando termina de expresar, como puede, la ira que lo recorre, ésta deja paso, de nuevo, al dolor. Y a Dennis no le importa que todo el Gran Comedor lo esté mirando, ni siquiera se siente mal por haber hecho que Laura llore aún más. Deja a Colin tumbado en el suelo de nuevo y se abraza a él, llorando y temblando sin poder evitarlo.

Le da igual que hayan ganado la Guerra. Le importa bien poco que vayan a venir tiempos de paz, en los que nadie volverá a perseguirlo por ser hijo de muggles.

Porque él no ha ganado nada. Él ha perdido a la persona que siempre lo ha protegido, al héroe que merece ser llamado así desde antes de la Guerra, desde antes siquiera de saber que era un mago. Se ha quedado sin su ejemplo a seguir.


Notas de la autora: La idea de hacer estas historias me las dio Cris Snape cuando comentó en el review (precioso, por cierto) de Una razón para brindar que le gustaría saber más sobre cómo les fue a los secundarios... así que esto es para ella, por la idea, por llamarse como yo y porque es requete-simpática.