Aclaraciones:

-Itachi:35 años ; Sakura: 17 años.

Someone like me

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— Deberías estar en la fiesta — dijo él moreno al verla entrar a su estudio-con los de tu edad.

— Pero no me interesan — cerró la puerta tras ella, para luego acercarse sigilosamente hasta su escritorio; donde se encontraba el susodicho- ni ellos ni sus conversaciones.

Sakura subió al escritorio y se arrastró sobre este con un pequeño gateo; cogió al Uchiha de la solapa de su camisa quedando así rostro con rostro, sintiendo sus respiraciones mezclarse.

— Puedes parar con todo esto de una vez — mencionó con semblante serio tratando de separarse de ella.

— Pararía, si fueras sincero al decirlo — explicó la pelirrosa atrayéndolo a ella nuevamente.

Lo había descubierto, esa chiquilla era más observadora de lo que él creía.

— Si supiera todo lo que he hecho, como solía ser, mi pasado, mi historia palabra por palabra — se detuvo a pensarlo un momento — ¿aún así quisieras estar con alguien como yo?

La pelirrosa sonrió de medio lado, mirándolo con dulzura.

— No me importa lo que hayas hecho-miró fijo a sus ojos impávidos — ni con quién hayas andado, solo quiero quedarme contigo y ver que pasa esta noche.

Se aproximó lo más que pudo a él y fundió sus labios en un beso, un beso sin lujuria ni pasión. Solo un beso

Estaba claro que el era mayor, todo un señor y que esto era un delito; pero se había enamorado, debía admitirlo, y si eso era un delito, pues iría a la cárcel gustoso.

Cogió a Sakura de sus bazos, atrayendo su cuerpo al propio. Esta rodeó el cuello del moreno con sus brazos y tomó asiento sobre él, abriendo sus piernas. El Uchiha gruño al sentirla rozar su entrepierna.

Lo que en un principio inicio como solo un beso, fue tornándose más violento y fogoso con el rozar de sus cuerpos.

Deslizó sus manos sobre los brazos de ella, acariciando el costado de sus pechos y cintura por sobre la ropa; posicionándose en sus caderas. Sakura deshizo el agarre de su cuello y fue descendiendo sus manos por el torso del moreno, desabrochando su camisa y deshaciéndose de esta; para luego ser sucedida por sus labios, besando su cuerpo, y su lengua, lamiendo cada herida de su alma.

Levantó su falda y acarició su intimidad, esta jadeó, estaba húmeda. Quiso deshacerse de sus bragas, mas por la posición le era imposible, por lo que optó por moverla hacia un lado y penetrarla.

— Ah — jadeó ella aferrándose al cuerpo del moreno.

No quería su cuerpo, la quería a ella, que fuese suya y él suyo. Que no lo olvidara, aunque en el fondo sabía que así seria- es la edad- pensó tratando de mentalizarse.

Empezó a iniciar un lento y rítmico vaivén de caderas.

Gemidos, su estudio se había convertido en un concierto de gemidos emitidos por ella; y le agradaba, se regocijaba al escuchar la exhalación de su vida en cada sorbo de aire. Le era morboso y ,de cierto modo, vicioso.

— ¡Ah! — gimieron ambos al unisonó.

La pelirrosa se apoyó en el pecho de él, sentía su piel mojada a causa del sudor y su respiración notoriamente agitada.

Se aferró a él en un intento de no querer que ese momento acabara nunca. Ella mejor que nadie sabía que usualmente cuando las cosas llegaban tan lejos como ahora, las personas tendían a desaparecer y, usualmente, eso no le importaría en lo más mínimo; claro, si es que esa persona no fuese Itachi Uchiha.

Sin embargo estaba confundida, él no era así, el no era un adolescente. Y solo se percato de ello al sentirlo aferrarse a ella también.

Espero les haya gustado.

Gracias por leer :)

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