Buenas!
Soy nueva por aquí!
he leído cientos de fanfiction y he pensado que ya era hora de colaborar.
No sé si os gustará este one shot, pero quiero ir probando y viendo si os gusta lo que escribo y cómo lo hago o no.
Ahora es cuando digo que estos personajes son de la maravillosa JK Rowling y yo solo los uso un poquito =)
Aquí tenéis ^^
SOLO QUEDAN CICATRICES.
No se había dado cuenta de cómo había volado el tiempo. Todavía sostenía la taza de té en sus manos , pero ya estaba frío. Dejó el sofá tras ella y se dirigió a la ventana, donde siguió recordando el tiempo que pasó en aquel horrible lugar. Su segundo cautiverio. Su torre. Sus miedos. Sus fantasmas. Y lo vivió todo de nuevo. Y el dolor volvió a sus ojos, como siempre lo hacía cuando pensaba en aquello. Sonrió dejando escapar su tristeza. Ella no se engañaba a sí misma, ellos no habían cambiado, seguían siendo los pretenciosos de siempre pero tras los meses que pasó allí, comprobó que no solo ella estaba en una situación delicada y peligrosa.
Permaneció encerrada día y noche, acompañada por una soledad que la mantenía aterrorizada. Sin embargo, algunos sonidos conseguían sacarla de su letargo. Cada grito, cada pelea, cada hechizo, y cada llanto quedaron grabados en su memoria. En los pocos momentos en los que su cerebro parecía despertar, se filtraban ideas y fragmentos de lo que hasta entonces había sido su vida. No habría pasado más de un mes, cuando de repente un pensamiento cruzó su mente. Hogwarts. Su primer día allí. Su recuerdo feliz y la luz de su patronus. Siguió deambulando por sus mente hasta que se dio cuenta de que el sombrero seleccionador, siempre cuenta verdades a medias: cada casa en Hogwarts es el estandarte de una cualidad, pero les mentía sobre cuales eran cada una. Nunca pensó en cuan leales eran los Slytherin, cuánta pasión y valentía ponían en lo que hacían y sobre todo la capacidad de soñar que tenían.
Nunca llegaron a entenderse, pero Draco Malfoy la sacó de la torre. Y no lo hizo sólo. Los chicos a los que todos repudiaron por sus decisiones, la salvaron. No sabía si salir de allí significaría su fin. Pero no lo fue y despertó en un sofá cómodo esa misma tarde.
La calle donde vivía Hermione Granger era tranquila. Se dirigió a la cocina para prepararse un chocolate, eso no lo dejaría enfríar. Volvío y se sentó en la vieja butaca de Harry con su libro favorito. No habría pasado ni un minuto cuando volvió a levantar su vista hacia la ventana. Ellos sólo hablaron una vez y no hubo ninguna palabra. No hizo falta. Antes de desmayarse al atravesar los jardines de la mansión, agarrada de la mano de su peor enemigo, lo miró a los ojos en silencio y vió todo. Observó el vacío que provoca el dolor de la pérdida, la tristeza con la que aprieta la incertidumbre de no saber si sobreviviría un día más en esa prisión de la que estaba ayudando a escapar y el deseo de redención por los crímenes que cometió cuando era un ignorante.
Le habría gustado que alguna de esas veces en las que él la observaba desde la acera del parque, se hubiese acercado a para poder decirle que las heridas estaban sanadas y que las cicatrices sirven para recordar cómo mejora todo. Pero él nunca se acercó, tal vez porque no quiso, tal vez porque él ni siquiera pensó que ella lo había descubierto.
Suspiró, recuperando la alegría en sus ojos y continuó con la línea en la que se había quedado.
No sé si alguien llegará a leerme, pero por si acaso os digo, que aun no manejo fanfiction muy bien por lo que si alguien quiere decirme algo y no contesto pronto, será porque estoy tratando de encontrar los mensajes jaja
Un saludo a todos =)
...TheSecretWitch...
