Lo prometido es deuda, si me siguen en wattpad, o mi pagina de face, entonces ya saben de lo que escribo, si no, pues básicamente, esta era una historia exclusiva en esa pagina pero ahora la traigo a FF para que puedan leerla.
Son minihistorias contadas dentro del capitulo desde la perspectiva de cada musa, contiene referencias y segundas partes de OS escritos antes e historias nuevas formando una sola... comenzando con la líder favorita del publico...
Arco de Honky.
Las risas femeninas inundaban el laboratorio como si una loca científica hubiera creado a la criatura que destruiría al mundo o algún arma que la ayudar a conquistarlo.
— Finalmente —Dijo parando las risas unos segundos — ¡Finalmente lo he terminado!
Unos días después.
— ¡Damas y caballeros! —Gritó una chica en bata de laboratorio, castaña de ojos azul — Presten atención, porque esto pasara a la historia.
Se encontraba en un parque a las afueras de Akihabara con asientos para el público, un escenario montado, una pantalla gigante y una extraña maquina conectada a una silla, como si hubiera salido de una película de ciencia ficción.
La gente se reunía curiosa y siendo entrada libre muchos aprovecharon su tiempo libre aunque no tuvieran idea de que se trataba todo eso.
— Durante miles de años los seres humanos se han hecho la pregunta ¿El destino existe?, ¿Es algo tallado en piedra?, ¿Puede ser cambiado? O ¿Es inevitable? Pero sobre todo, ¿Es esa persona realmente la persona con la que estaban destinadas desde el principio? —Los murmullos comenzaron, la mayoría sin creer lo que esa científica decía o sin entender de que iba todo eso — Pues hace poco he terminado el invento que resolverá todas esas preguntas; les presento, ¡El buscador de realidades!, nombre sujeto a cambios futuros.
Las personas no sabían su aplaudir o no por lo que solo pocas lo hicieron.
— Les explicaré como funciona —No parecía decaída por el poco impacto — Una persona se sienta en esta silla, y es conectada a mi máquina, analizará ADN, rasgos físicos, funciones cerebrales y sumaremos nombre, edad, sexo y conducta, entonces mi invento buscará a la misma persona en realidades alternas y en cuando la encuentre veremos en pantalla que tipo de vida lleva esa misma persona en otro mundo.
Ahora si la idea sonaba loca, ¿Quién iba a creer algo semejante?
— Se lo que están pensando pero les puedo asegurar que no es broma —Dijo rápidamente la científica — Ya lo he probado y les puedo asegurar que funciona, pero para hacer una demostración frente a ustedes necesito voluntarios.
— Esto es una estupidez —Dijo una rubia de ojos azules, su mirada era fría e irritada.
— Onee-chan —Otra rubia más joven que la anterior intentó calmarla.
— ¿No crees que mi creación realmente funcione? —Preguntó la científica con toda calma y una sonrisa.
— Por supuesto que no, todo esto es solo un circo, no está probado científicamente que existan otras realidades y mucho menos algo como el destino.
— Entonces ¿Por qué no lo pruebas?
— No quiero formar parte de este circo, y habría que ser un completo idiota para creer todo esto, ¿Quién con dos neuronas en su cabeza querría probar un invento tan tonto e innecesario?
— ¡Yo, yo, yo! —Gritó una chica de cabello jengibre y ojos azules levantando la mano mientras corría al escenario — Yo quiero probar ese invento tonto e innecesario —Dijo bastante animada frente al escenario.
— Bueno, tenemos una voluntaria, ahora por favor tome asiento.
La chica de inmediato lo hizo y la científica colocó algunos electrodos en sus manos y rostro al igual que un casco; pinchó su dedo con una pequeña aguja haciéndola sangrar y colocándole una especie de tubo en el mismo dedo de inmediato.
— Bien, todo listo —Habló una vez terminó el trabajo — Ahora diga su nombre y edad, fuerte y claro por favor.
— Kousaka Honoka, 19 años —Respondió sin dudar.
— Perfecto, ahora pongan atención a la pantalla —Exclamó la científica después de mover algunas cosas en una Tablet que tenía a la mano — En unos segundos debería ser capaz de localizarla en alguna vida alterna.
La pantalla negra solo emitía una luz parpadeante antes de enfocar una sala con muebles que se veían bastante elegantes, en dicha sala se encontraba una mujer similar a Honoka pero con rasgos más maduros y cabello largo, se encontraba jugando con un bebe de cabello negro y ojos dorados.
— Realmente se parece a mí —Comentó la chica entusiasmada.
— Técnicamente eres tú —Dijo la científica con calma.
…
— Mimori-chan, mira qué alta estas —Exclamó la mujer levantando en el aire a la bebe — Estás volando.
La infante lo único que hacía era reír disfrutando del juego.
— Mimori-chan eres un ángel, tan linda —Alagaba al mismo tiempo que abrazaba y mimaba a la pequeña que solo reía — Algún día vas a crecer, serás una mujer bella, te volverás cantante o actriz de voz, tal vez, hasta idol y entonces cuando menos lo esperes te enamoraras de un luchador profesional y romperás el corazón de tus fans.
— ¡Oye! Deja de planear la vida de mi hija —Regañó otra mujer entrando a la sala con algunos libros en sus manos, su cabello negro azulado estaba atado en una coleta y sus ojos almendra cubiertos por unos lentes dándole un aire intelectual.
— Buu, Umi-chan no es divertida —Fue la respuesta de Honoka.
…
— ¿Reconoces a esa persona? —Preguntó la científica puesto que en ese lugar parecían muy amigables.
— No, para nada —Contestó interesada en lo que veía.
…
— Solo jugaba con la pequeña Mimori —Se quejó mientras la madre dejaba los libros de lado y tomaba a su hija en brazos.
— Tal vez —Comentó prestándole atención a la bebe — Pero de ti puedo esperar lo que sea y por experiencia prefiero no arriesgarme.
— Umi-chan mala —Se quejó nuevamente con tono infantil.
— Aun no me explico cómo es que te volviste una de las congresistas más importantes del país —Exclamó al ver el berrinche de Honoka — Lo que me recuerda, ¿Hoy no tienes ningún asunto pendiente en tu agenda?
La mujer política desvió la mirada.
— No, tengo día libre —Nada convincente a ojos de Umi.
Antes de poder responder alguien abrió y cerró una puerta y se escuchó una voz anunciando su regreso.
— Aquí están —Exclamó una chica de cabellera ceniza y ojos miel al ver a las mujeres y bebe en la sala — ¿Honoka-chan?
…
— ¡Es Kotori-chan! —Gritó sorprendida la participante al reconocer a su amiga.
— ¿Amiga tuya?
— Si, desde primaria.
…
La recién llegada tomó a la bebe en brazos y beso la mejilla de Umi con cariño.
— ¡Kotori! —Gritó con las mejillas rojas — Honoka y Mimori nos están viendo.
— ¿Tiene algo de malo? —Fingió demencia, le gustaba ver avergonzada a su pareja.
— Bueno —Umi quedó sin argumentos.
— Kotori-chan tiene razón —Habló la tercera con toda calma — Están casadas y con una hija, ya no tienen 15 años.
— Mira quien habla —Comentó la mujer de cabello azul.
…
Del otro lado de la pantalla el público no evito su asombro, se supone que en Japón no es legal el matrimonio entre el mismo sexo.
…
— ¿Así es como le agradeces a la persona que hizo posible que pudieras casarte con Kotori-chan y formar una familia? —Inquirió con toda la indignación que sentía la congresista.
— Ya, ya, Umi-chan no lo dijo en ese sentido ¿Verdad? —Kotori sonrió a su esposa y esta solo desvió la mirada con pena.
— Kotori-chan, por eso eres mi mejor amiga —Lloriqueó abrazándola.
Umi no disimuló para nada al mostrar celos.
— Por cierto, Honoka-chan —Se separó de ella para cambiar la conversación — Hace unos momentos Hitomi-san estaba buscándote por la zona del mercado.
Honoka palideció desviando la mirada.
— ¿Enserio? ¿Por qué será?
— ¿Otra vez estas escapándote de tus deberes? —Umi no tenía una mirada nada amigable.
— ¿No? —Estaba tan asustada que la negación misma salió con interrogativa.
— ¿De qué te sirve un guardaespaldas si tú misma te escapas?
— Pero.
— Pero nada, ahora mismo llamaré a Hitomi para que venga por ti —Sentenció tomando su teléfono.
— No, te suplico Umi-chan, si Hitomi se entera se lo dirá a Chidoku y no tendré agenda libre en los próximos seis meses —Honoka suplicaba de rodillas
— Debiste pensarlo antes.
— Traidora, judas, Tony Stark —Señalaba maduramente la política.
Momentos después de discutir tonterías entre ambas partes llegó una mujer en traje negro de cabellera negra y ojos castaños.
— ¡Honoka-san! —Corrió a abrazarla — Que bueno que está bien.
— Siento haberte preocupado Hitomi —Respondió separándose de ella.
— Ahora tenemos que irnos —La mujer sujeto con fuerza a su jefa — Chiduko ya me dio instrucciones de llevarla con el señor Sumeragi en cuanto la encontrara.
— ¿Qué?, no, ¡Ayuda, Kotori-chan! —Intentó resistirse.
— Suerte Honoka-chan —Dijo la mujer de voz chillona.
— ¡No quiero, ese tipo no me soporta, no deja de criticar todas mis propuestas, haré lo que sea menos ir con ese viejo amargado! —Se quejaba mientras Hitomi la cargaba en su hombro y se la llevaba.
— Cosechas lo que siembras —Exclamó Umi antes de cerrar la puerta.
…
— ¿Deseas ver un poco más? —Preguntó la científica.
— Creo que ya vi suficiente —Respondió Honoka.
La científica asintió y de inmediato puso manos a la obra en su computadora.
— Ahora veamos que tal es esta dimensión.
Al igual que antes la pantalla comenzó a generar estática hasta que lentamente fue aclarándose.
…
El lugar parecía ser un estadio, la diferencia radicaba principalmente en que era más pequeño que uno regular para ser de futbol o americano, tal vez para una cancha de tenis, pero tampoco tan pequeña, solo había un rectángulo dibujado en el piso dividido por la mitad y una esfera en el centro también dividida por la misma línea que dividía la otra figura.
A cada extremo se encontraban dos chicas, una era Honoka, se encontraba agitada y con algunas marcas de golpes por su cuerpo, sostenía una especie de esfera color roja en su mano derecha; al otro extremo se encontraba una castaña de ojos verdes en condiciones similares a Honoka y también sujetando una esfera igual.
…
— ¡Es Kira Tsubasa! —Gritó una castaña de lentes mientras algunas personas murmuraban diferentes cosas entre ellos.
— ¿Quién? —Inquirió Honoka confundida.
— ¿De verdad no la conoces? —Preguntó la organizadora de todo eso.
La rata de laboratorio, quiero decir, la voluntaria negó en respuesta.
Estaba por responder pero en el monitor ambas chicas al fin parecían decididas a hacer su movimiento.
…
Ambas arrojaron las esferas al mismo tiempo al aire dejando ver la otra mitad de la esfera era de color blanco; esta se abrió dejando salir un destello azulado que cubrió a ambas para desaparecer casi al instante dejándolas vistiendo una especie de traje o armadura extraña.
En Honoka se veía una vestimenta en color naranja con franjas negras y su cuello lo cubría un abundante pelo color crema, también una cola del mismo color, usaba guantes con el diseño de garras y botas del mismo, incluso la mirada de Honoka había cambiado y se veía feroz junto a un par de colmillos asomándose de su boca que aumentaban esa sensación.
La otra chica tampoco se quedaba atrás, su diseño era purpura con lo que parecían tres aletas dorsales de tiburón, dos en el dorso de sus manos y otra en su espalda, una cola como un lagarto y una especie de casco con un diseño similar a un tiburón la mirada en esa chica también se volvió agresiva y aterradora.
Ambas permanecieron unos segundos sin moverse antes de lanzarse contra la otra, las garras de Honoka crecieron brillando y el puño de su rival se cubrió de un aura oscura antes de impactar uno contra otro causando una nube de humo.
Al dispersarse se observó cómo ambas chicas median sus fuerzas con pulsos intentando ganar terreno empujando a su rival pero ninguna de las dos cedía un centímetro.
Abrieron la boca al mismo tiempo soltando llamaradas que causaron otra explosión pero esta vez ambas salieron de entre la nube de polvo casi de inmediato, con gran velocidad Honoka se lanzó sobre la castaña que se arrojó al piso creando un gran agujero lo que causó que detuviera su ataque y se mantuviera alerta.
Un pequeño temblor se sintió bajo sus pies y de pronto emergió con el puño bañado en esa aura negra golpeando a Honoka de lleno en la barbilla, rápidamente antes de tocar el piso giró sobre sí misma en el aire y con sus manos creo una esfera verdosa que arrojó contra su oponente impactando de lleno.
Ambas cayeron al piso.
Con respiraciones agitadas y su cuerpo doliendo por todas partes se levantaron nuevamente reanudando el intercambio de golpes y patadas, Honoka nuevamente intentó un golpe con sus garras pero su oponente la esquivo agachándose antes de intentar otro golpe a la mandíbula como el anterior pero Honoka logro esquivarlo.
Tomando distancia la chica del traje a rayas comenzó a correr a gran velocidad generando una especie de corriente de aire a su alrededor, la otra hizo lo propio creando una esfera color purpura con líneas doradas y se lanzó directamente a Honoka creando una explosión y onda de choque superiores al resto.
Al dispersarse el humo ambas se encontraban tendidas en el piso sin moverse.
Lentamente la chica en el traje purpura comenzó a incorporarse hasta terminar de pie sin moverse; Honoka lentamente reaccionó imitándola.
Ambas jadeaban de cansancio, hasta que la castaña sonrió antes de caer nuevamente y su extraña vestimenta volvía a la esfera de antes. Honoka rugió como una bestia y el público que hasta ese momento no había hecho el más mínimo ruido estalló en un gritó mucho más estridente que el de la ganadora.
— ¡Lo consiguió! —La voz de lo que parecía ser una presentadora resonó por el estadio — ¡Kousaka Honoka, derrotó a Kira Tsubasa y se corona como la nueva campeona de Tokyo! ¡Una nueva campeona se levanta después de una batalla que sin duda pasara a la historia!
El lugar parecía ser la locura y todos gritaban a todo pulmón como si ellos fueran los que ganaron aquel combate.
Justo en medio de ese festejo Honoka también cayó y su traje sufrió el mismo destino que el de su rival.
— ¡Honoka!
…
De inmediato ocho chicas ingresaron al campo al ver a la chica caer, entre ellas estaban las mismas Umi y Kotori, junto a la rubia que estaba en el público y la chica de lentes junto a otras más.
…
— ¡Tsubasa! —Del otro lado también las amigas de la castaña se acercaron para ayudarle.
— No parece ser grave y solo están agotadas —Una de las que corrieron a auxiliar a Honoka, de cabellera roja y ojos amatistas ahora revisaba a Tsubasa asegurándose de que estuviera bien.
— Descansa enana, luchaste como nunca —Dijo una de cabellera morada y ojos aguamarina.
…
— ¡Eso fue increíble! —Gritó Honoka emocionada — Otra, otra.
— ¿Por qué no? —Dijo la científica — Es agradable ver que alguien disfruta mi invento.
Sonrió mientras tecleaba nuevamente en su computadora buscando otro nuevo mundo, su invento funcionaba perfectamente pese a que en el pasado la llamaron loca, ¿Quién es el loco ahora?
Y vendrán cosas peores dice la biblia... ok, no, esto es solo el arranque de la historia y el arco de Honky... dudas, quejas, reclamos, ideas y de más en los reviews ya saben como funciona y si no, pues pregunten por review :v
