¡Hallo! Aquí tienen el prólogo de este fic que no será tan largo como la serie puesto que es un AU con muchas cosas diferentes, tendrá cosas de su creador e ideas mías. Por ahora solo les dejo la introducción de la historia, ya el primer capítulo se imaginaran que será lo de los gnomos y si, más o menos xD Bueno no hablo más, que lo disfruten.
Prologo
—No puedes ser un guardián, entiéndelo de una vez por todas por favor—el castaño suspiró por enésima vez en el tiempo que llevaba allí, estaba obstinado de la insistencia de aquel niño humano de cabellos blancos excesivamente cuidados.
—¡Maldita sea Pines! —vociferó Gleeful, obstinado de que su petición nuevamente fuese rechazada ¿cómo se atrevía ese guardián imbécil a negarle lo que más deseaba? No era justo, él tenía todo para convertirse en un guardián también.
—Precisamente por eso no puedes, estas lleno de avaricia y soberbia, tus sentimientos son muy oscuros para que puedas ser uno de nosotros. Ahora, devuelve el diario número dos y desiste de esa tonta idea de volverte un guardián.
—¡Jamás! ¿Me escuchaste bien Dipper Pines? No te lo devolveré hasta que me haya convertido en el guardián más poderoso de todos—y sin decir más, el niño de cabellos blancos se retiró de aquel bosque totalmente furioso, el castaño se las pagaría algún día.
…
Huir de sus vidas en California había sido la mejor decisión que habían tomado los gemelos Cipher. Sus padres eran simplemente insoportables, su alcohólico padre no hacía más que golpearles y su madre solo les recriminaba y echaba la culpa de cualquier cosa, pero el colmo había sido cuando su propio progenitor había intentado abusar del menor de ellos, de no ser por Bill que le había golpeado a tiempo con un bate de béisbol su hermanito hubiera vivido una de las peores experiencias que podría vivir un ser humano.
Habían tomado un autobús sin siquiera fijarse a donde los llevaría, solo recogieron lo que consideraban importante y algo de dinero –tanto ahorros como de la billetera de su padre- y se marcharon de aquella horrible casa que se hacía llamar su hogar, nada más alejado de la realidad, eso no era un hogar solo era un infierno de cuatro paredes y un techo. Pero ya no tenían que preocuparse de eso, ahora estaban muy lejos en algún lugar de Oregon, un lugar en el que nadie les haría daño: Zero Gravity. Actualmente llevaban ya tres semanas viviendo allí, por suerte, el alcalde les había dado una buena bienvenida, era alguien muy agradable aunque torpe; él les había permitido una cabaña que estaba un poco apartada del pueblo cerca del bosque, no era el mejor de los lugares pero con algo de limpieza y arreglo fue suficiente para el par de adolescentes.
—Hermano, el alcalde Soos nos ha mandado algunas compras—apareció el chico de cabellos azulados en la cocina, dejando en la mesa las compras que les habían enviado Soos con su esposa—. Es muy amable en enviarnos comida siempre pero sigo pensando que yo también debo buscar un trabajo, no puedes con todo tu solo.
Wilson Cipher era el menor de los hermanos por casi diez minutos de diferencia, desde siempre había sido bastante tímido y reservado, algo dependiente de su gemelo pero aun así ocultaba un fuerte carácter en el fondo y era más decidido a sus ya quince años, por no decir que fue quien sugirió marcharse de su antigua casa tras casi vivir tan horrible momento.
—Te digo que yo puedo, tu deberías pensar en inscribirte para la secundaria de aquí en otoño—gruñó un poco el de cabellos rubios para revisar el contenido de las bolsas, había pan, huevos, jamón, queso y varias latas—. Debería decirle a Melody que dejen de mandarnos comida, no hace falta que lo hagan.
—¿Y crees que trabajando de camarero en el café de Linda Susan alcance para comer los dos? Si no me dejas trabajar el dinero apenas y nos durará un poco…
—Bien, bien, en primero lugar soy cocinero no camarero y en segunda, deja de ser tan terco, yo puedo ocuparme.
William Cipher, por otro lado, era bastante opuesto a su hermano en vario sentidos: testarudo, orgulloso, a veces algo cínico y malicioso, pero aun así se preocupaba mucho por su hermano y llegaba a ser bastante sobreprotector con él. Desde que habían llegado a Zero Gravity había procurado evitar cualquier contacto con otros, consideraba a los adultos unos pesados y no quería que nadie lastimara a su gemelo pero se encontró con un pueblo bastante cálido –y extraño- además que había desarrollado una buena amistad con el alcalde Soos y su esposa Melody.
—Eres muy obstinado—suspiró un poco el de cabellos azules tras terminar de guardar las compras.
—Solo digo que tú no tienes que preocuparte de nada…—insistió con un tono de voz más suave—¿Qué tal si damos una vuelta por el bosque?
—No lo sé Bill, ese bosque es muy extraño y no me gusta—se negó con ligero nerviosismo.
—No seas llorón Will, solo será un paseo.
Will no fue capaz de reprochar nada, no pasó mucho cuando ya se habían adentrado a aquel bosque que aunque podría parecer normal daba una extraña sensación, como si alguien te observara pero al girar no encontrabas nada, así se sentía el menor de los Cipher. Procuraba mantenerse lo más cerca posible de su gemelo, el rubio por su lado parecía bastante tranquilo con el ambiente, le gustaba mucho pues se sentía de algún modo relajado en la naturaleza que con las personas.
—Will…—llamó de repente mientras se detenían para tomar asiento en el suelo.
—¿Si hermano? —atendió sentándose frente al rubio.
—El mundo es una porquería ¿cierto? —El menor se sorprendió bastante por aquel comentario—. Los adultos en su mayoría son horribles o son unos idiotas, empezando por nuestros padres…
—¿A qué viene esto? —preguntó algo preocupado al notar aquella triste y melancólica mirada.
—Ha pasado casi un mes desde que llegamos aquí y fue una suerte que Soos y Melody fuesen tan amables pero ¿Quién más ha querido ayudarnos? Con suerte conseguí que la tuerta me diera empleo, pero a nadie más le importa si nos morimos de hambre o no—Bill frunció el ceño apretando sus manos sobre la tierra—. Todos son egoístas, la mayoría de las personas son crueles y disfrutan ver como otros se ahogan en su inmundicia…
—Bill…
—Quisiera poder crear un mundo mejor, si tuviera la oportunidad yo podría…—Bill ahogó un quejido de dolor cuando se recostó del árbol tras sí, extrañado de oír el golpe sordo hacia el metal—¿Pero qué demonios…?
Los gemelos se fijaron en el extraño árbol metálico, el mayor de ellos acercó su mano para darle ligeros golpecitos y comprobar que realmente no era madera de lo que estaba hecho y efectivamente, no lo era. Ambos se pusieron de pie para verlo mejor, Bill acercó de nuevo su mano para pasarla por lo que se suponía era el tronco, consiguiendo abrir una especie de puertecilla para descubrir en su interior lo que parecía ser un viejo y pequeño panel con botones y palancas.
—¿Qué es eso? —preguntó Wilson viendo como su hermano presionaba los botones y movía las palancas, lo último provocó que una escotilla se abriera a menos de un metro de ellos en el suelo—.T-Te dije que este bosque era raro…
—No tengo idea, pero es interesante ¿no crees? —sonrió un poco mientras se acercaban al hoyo en el suelo, el interior de este estaba lleno de telarañas y mugre así como uno que otro insecto que de inmediato huyó al sentir la luz.
En aquel curioso hoyo se encontraba lo que parecía ser un viejo diario, estaba sucio y polvoriento pero Bill no se lo pensó mucho para cogerlo. Lo sopló un poco para quitarle el polvo y con su mano terminó de limpiarlo, los Cipher miraron curioso la mano de seis manos color dorado que estaba en la portada con un numero 3. Los dos se miraron un momento antes de abrirlo, no tenía nombre de propietario pero mientras lo hojeaban encontraron varias notas y datos de criaturas y cosas totalmente alejadas de la realidad conocida.
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—¿Quién dejaría esto aquí? ¿Qué son estas cosas? ¿Es un cuento? —pregunto el peli azul mirando curioso el contenido de aquellas páginas.
—No lo creo, ¿Por qué alguien ocultaría así un cuento? Además parece a esos diarios de campo que hacen los investigadores—Bill parecía realmente hipnotizado de lo que aquellas páginas decían, a según todo eso se encontraba en Zero Gravity—. Tenías razón en que este lugar era raro, Will.
—Yo no me refería a esa clase de raro, bueno pensaba más en algo embrujado pero aquí hay puras cosas mágicas: gnomos, hadas, cristales mágicos ¿de verdad todo esto es real?
—Parece que tendremos que averiguarlo ¿no crees? —el rubio empezó a caminar más adentro en el bosque, guiándose de lo que decía aquel diario en sus pequeños mapas para comprobar si realmente era cierto.
Grande fue la sorpresa de los Cipher al descubrir muchas de las cosas que allí mencionaban, plantas y flores mágicas con toda clase de poderes, todo era simplemente asombroso. Esa noche, tras volver a la cabaña, Bill se pasó largo rato leyendo aquel diario, todo era tan increíble pero lo que más le llamaba la atención era las paginas centrarles y algunas de las finales, ellas hablaban de entes poderosos que controlaban el balance del universo y la realidad, también mencionaba de aquellos que tenían poder sobre el día y la noche, si pudiera conseguir o contactar con esos seres, podría lograr lo que más deseaba: mejorar ese patético mundo.
—Bill ¿puedes apagar la luz? —pidió su gemelo que intentaba dormirse pero su hermano en la cama contraria estaba tan concentrado leyendo que apenas y le hizo caso—Bill por favor…
—Haré un mundo mejor Will, quiero decir, haremos un mundo mejor…
William solo sonrió sin apartar la mirada de aquellas páginas donde había varios dibujos, uno de ellos era de un extraño pino que tenía por características "Guardián 1 del balance del mundo, aquel con el control sobre la mente…"
Continuara…
Un poco corto pero solo porque es el prólogo, me esforzaré en que los capítulos si sean un poco más largos que esto. Espero que les haya gustado la introducción a nuestra historia, si bien no puede ser igual a Gravity Falls por muchos motivos evidentes pero habrá similitudes. Espero que les haya gustado, nos vemos en el siguiente capitulo.
