Holaas! :3 Bueno esta no es mi primera historia que subo aquí pero si la primera de esta cuenta :D espero que les guste y me dejen un raview para saber si les gusto o es un asco ( ojala eso no) Bueno saludos para ustedes y nos vemos en el proximo capitulo quizás.

.

.


Silencio

-Maka-

Me había despertado recién y era monótono como todo los días, me despertaba luego me bañaba, comía algo y luego me iba hacia el colegio. Cuando llegue al colegio me fui directo hacia mi sala sin mirar a nadie…

— Otra vez ignorando a la gente. — Escuche atrás mio y era una voz que conocía perfectamente. — Así nunca conseguirás amigos. — rio Kim, como siempre esto era monótono.

— No me importa. — Respondí sin interés. — ¿Para que tener amigos? Si todos son falsos como los tuyos. — Le escupí las palabras en la cara.

— Te maldigo Albarn. — Grito Kim mientras se iba furiosa a su puesto.

Paso la primera hora silenciosa sin recibir ningún pedazo de papel en mi cabeza o que los amigos de Kim me gritaran cosas, cuando tocaron para el recreo me fui al patio
trasero del colegio donde iba gente que solo quería estudiar así que era el único lugar que podía estar tranquila.

— Maka. — Apareció Chrona atrás mio.

— Chrona ¿Qué pasa?... te molesto de nuevo Kim o… — fui interrumpida por chrona.

— Nada de eso. — Grito y era primera vez que la escuchaba hablando segura. — Solo quería saber como estaba Maka, ya que eres mi mejor amiga.

— Gracias chrona por todo. — Le respondí con una sonrisa.

Chrona era un año mayor que yo y sufría lo mismo que yo acoso por sus compañeros y casi por todo el colegio, estaba peor que yo por eso me empecé a juntar con ella.

Cuando termino el día me fui directo a mi casa como lo hacia todo los días, pero estar hay encontraba lo peor que había, están hay lo único que escucha eran gritos por parte de mi mamá y mi papá, podría decirse que mi vida era peor que cualquier otra.

— Odio esta casa púdrete. — Escuche el grito de mi mamá y el portazo que supongo que viene de la entrada principal.

Llama a la muerte…

— eh?, quien dijo eso… debe haber sido solo mi imaginación.

No es tu imaginación... Maka

Ya estaba lo suficiente loca para escuchar voces, me pare para bajar a la cocina y buscar un baso de agua, pero el destino me estaba jugando una mala pasada la puerta no se abría y yo juro que nunca la cierro con llave cuando revise efectivamente la puerta estaba atrancada, empecé a gritar desesperada pero sentía como si nadie me escuchaba hasta que me di cuenta… podría estar sola en casa mi papá habría ido emborracharse como siempre y mi mamá se había ido…

No puedes escapar de la muerte

— ¿Quien esta hay? — Grite atemorizada. — ¡Responde! Sé que hay alguien.

No le puedes vencer a la muerte

Cuando pasaron 5 minutos no escuche nada mas de esa voz y me puse un poco tranquila pero la verdad tenia ganas de llorar ¿era normal escuchar voces?, me fue a sentar en mi escritorio y escribí en mi diario.

— Makita, hija mía estas durmiendo. — Escuche la voz de mi papá. — Sabes mami no vivirá mas aquí no es gracioso, perderlo todo en un solo día? …

Eh? Porque mi cara esta moja, no tengo que llorar tengo que ser fuerte… me pare y baje por el árbol que esta alado de mi ventana y camine siempre era la mejor forma de superar la tristeza.

— ¡Cuidado!. — Fue lo ultimo que escuche, pero eso no evito que el auto se estrellara hacia mi y lo ultimo que viera fue la hermosa luna brillante…

Donde estoy… a si muerta, pero este lugar esta muy oscuro…

— Toma mi mano… Maka.

— Escuche un débil susurro.

Pero quien eres tu… eres el mismo de…

Solo toma mi mano yo te ayudare

Tome la mano y tomo se volvió oscuro nuevamente…

Cuando abrí los ojos me encontraba tendida en una cama estaba con la misma ropa pero con una diferencia, estaba llena de sangre, mi sangre.

— Así que ya despertaste, llevas 1 semana durmiendo ya quiero ocupar mi cama. — vi con mi vista un poco nublada pero pude distinguir que era un hombre de pelo blanco y ojos rojos y parecía de como 18 años.

— Perdón pero donde estoy, ¿no estoy muerta cierto?. — pregunte con duda.

— Estas en el infierno. — respondió normalmente.

— ¿Cómo que en el infierno? Responde seriamente!. — Le grite.

— Como escuchaste este es el infierno y tu estas muerta… Maka.