Ningun personaje de Pitch Perfect me corresponde, solo la historia de este ff :)
Cuando llego a Barden Bellas no podía creer que existiera ella, parecía un ángel recién caído del cielo.
En su vida era muy difícil encontrar a personas tan altas como ella, pero ahí estaba, tan hermosa, tan inteligente y tan elegante como solo Aubrey Posen podría serlo.
Aunque todas las personas decían que ella tenía un severo problema de control, la verdad era que a Stacie le gustaba bastante, toda su vida se la ha pasado entre fiestas, alcohol y sexo, así que conocer a una persona tan apasionada por la organización y administración de cada una de sus actividades era una grata sorpresa para ella.
Stacie no era mala alumna, de hecho era muy inteligente pero las demás personas olvidaban eso cuando veían sus enormes senos y debido a que muchas personas con las que hablaba no eran tan altas como ella pues era lo primero que notaban.
Pero con Aubrey era diferente, con ella podía hablar de ciencia, administración, liderazgo, mientras se hacían manicura.
Era muy raro, o sea obviamente ella ha estado con muchas personas en su vida, él era un cazador así que eso no le importaba cuando se trataba de genero para tener sexo, pero con Aubrey sentía una química, era muy raro pero siempre que la veía era como si le inspirara a ser mejor, como si quisiera ser la mejor Barden Bella.
Y de hecho así era, cuando Aubrey daba una orden Stacie la obedecía sin rechinar, le gustaba Aubrey porque sentía que ella sabía cómo llevarlas a ser ganadoras pero además le gustaba porque en su interior albergaba una persona bastante inocente y tierna que nadie más había podido ver.
Todas las personas veían la Aubrey mandona, enojona y controladora, pero ella había podido ver más que eso. Y no solo verlo, comprobarlo en cada sesión de manicura a la que iban y pasaban las horas charlando.
Aubrey jamás se daría cuenta de los sentimientos que su amiga sentía por ella, y ella lo sabía bien.
Aubrey estaba más concentrada en ganar y en pelear con Beca, le agradaba Beca, era una criatura sumamente pequeña que hacia sacar el peor lado de Aubrey y eso no cualquiera lo lograba, debía admitir que la pequeña tenia coraje.
Por otro lado cuando Aubrey se enojaba y parecía que iba a vomitar por todo el recinto, le parecía adorable.
Ella sabía que estaba mal. Pero Aubrey le gustaba bastante.
Pero sabía que aunque le gustara bastante y le gustara todo lo que las demás personas odiaban de ella, era algo que no iba a ocurrir, porque ninguna de las dos estaba dispuesta a dejar de lado sus metas.
Aubrey aspiraba a convertir al grupo en las mejores Barden Bellas de la historia y ella con acostarse con al menos 500 personas en este año.
Ambas tenían sus propias metas y estaba bien.
Para ella Aubrey era como un ángel. Y lo mejor que uno podía hacer con los ángeles es no tocar sus alas y dejarlos seguir haciendo su trabajo.
Y ella lo sabía. A lo mejor, tal vez en otro tiempo.