¿En El Mismo Mundo?
ADVERTENCIA: antes de que continues leyendo... debo hacer una pequeña advertencia (que tambien de eso depende mi vida XD) y de ante mano pedir una disculpa por si no les gusta lo que leeran (U¬¬ esperemos no ser linchadas XD) ¿abusare de mi poder de publicación y escritura? siii... . pero solo esta vez... jejeje (risa nerviosa)
una persona ya sabe de que tratara este fic... y pues... por ella me anime a publicarlo pero de ustedes depende si lo continuo, si me dicen... "no quita eso de aqui" lo hare... Un.n...(rincón de duraznos renovado) es solo una probadita de lo que seria si se puede continuar...
como he dicho en veces anteriores y lo seguire diciendo ¿escribiendo? como sea... lo que el lector pida se hara, sin alegaciones ni nada, solo pedire...piedad! (tiembla en un rincón)
este fic sera (si lo quieren XD y me lo permiten) fem. Allen (otra vez, como friego con eso verdad? XD pero es divertido verlo sufrir como mujer muajajajajajaja cof cof cof) Yullen (eso nunca faltara) Lucky (tampoco me podia faltar eso! seria un... un "pecado" XD) tratare de ponerle un poco de todo: drama, tragedia (mas que nada muajajaja) comedia... etc...
sobraran triangulos amorosos... pero no les digo mas por si deciden dejarme publicarlo... como dicen "el que no arriesga no gana" asi que... les dejo leer este nuevo moustro que atenta contra mi vida de escritora XD... pero mientras leen me mudare al polo norte... Un.n
Capitulo 1
Cruzando el océano Ártico, lejos de los demás continentes, descubierto en el siglo XIX pero oculto desde entonces has el siglo actual, para su precisa y correcta construcción para que el ser humano viviese en ella, se seleccionaron distintas familias para poblar este nuevo lugar, poco a poco se fueron haciendo las diferentes partes, no como los continentes de Europa, América, etc. Este era pequeño, "l´aviner" (Futuro en francés) dividiendo las fronteras solo por puentes de roca verdosa, con ríos, mares, lagunas, que pasaban por todos los sitios, pudiendo así, moverse por auto, barco, góndola o a pie, simplemente.
Los rayos de sol, pasaban entra las finas cortinas blancas sin estampados, anunciando que ya era de día, la habitación estaba en total silencio.
Percibió un dulce aroma, algo que no le desagradaba, todos decían lo amargado y frívolo que era, pero no lo conocían del todo, nunca dijo "odio las cosas dulces" simplemente no le gustaban tanto como a otras personas.
Miro entre sus brazos, de nuevo… una vez más… pasaron la noche juntos ¿Por qué? ni siquiera se levaban muy bien como para llegar a eso, ¿simplemente pasaba? ¿Por qué tenían el mismo problema? Quizás… solo eran excusas…
Tomo su celular antes de que iniciara un escándalo, frunció el ceño al ver quien marcaba tan temprano, dudo en colgar, sería la primera vez que rechazaba una llamada suya, se molestaría, pero… ¿Qué importaba? Ya le había hecho suficiente mal. Fue casi, inesperado que volviese a marcar.
-¿Por qué no contestas?- mirándolo detenidamente.
- tsk- apago el celular.
- se enojara contigo y dudo que quieras eso.
- no me interesa- se recostó de nuevo y cerró los ojos.
-¿ya la olvidaste?- apretó las sabanas entre sus manos.
- no lo sé.
- ya veo- suspiro tranquilamente.
El silencio reino de nuevo, ¿Qué pasaba? ¿No se había propuesto olvidarla? Por eso pasaba la noche con otra persona, ¿Qué sentía por esa persona? Abrió los ojos y contemplo esa pequeña y blanca espalda, su cabello platinado reluciendo con la luz matinal, la marca en su brazo izquierdo le hiso sonreír de medio lado.
-¿Qué pasa?- volteo para mirarlo.
- nada.
- Bakanda.
- Moyashi.
- ¿Dónde está mi celular?
- yo que se…. No soy tu niñera.
- gracias por la ayuda- dijo con sarcasmo.
- por nada- con sonrisa sínica.
Lo miro con molestia pero suspiro vencida, se levanto buscando el aparato ante la atenta y disimulada mirada de Kanda.
Todo igual, desde aquella noche, la primer que pasaron juntos, aunque ligeros cambios se habían dado cada noche, en las mañanas siempre peleaban un rato antes de irse a desayunar y esa no sería la excepción.
No lo había notado pero… ¡no! No podía hacer eso, no, más bien, no quería hacer eso, no aceptaría nunca lo que había descubierto.
Las cosas no siempre fueron de esa forma….
Ciudad central, Dalian (8 meses atrás)
El barco, tuvo problemas para desembarcar, pues el agua había comenzado a congelarse, la nevada anterior no ayudaba mucho.
-bajen con cuidado por favor- dijo un joven ayudándole a las mujeres y niños- el suelo está congelado y resbaloso.
-baja con cuidado shojo- con un cigarrillo en la mano.
- no te preocupes- sonriendo.
Bajo del barco, asombrada por los grandes pilares de la ciudad, la entrada principal a "Dalian", su distracción provoco que pisara un charco de agua congelado, para cuando se dio cuenta, miraba el cielo soleado entre los brazos de su acompañante y tutor…
-te dije que tuviera cuidado shojo- con un poco de molestia.
- p-perdón Tikky- sonrió.
- ¿Qué hare contigo?- sonrió- vamos, tenemos tiempo para comer algo- viendo su reloj- el auto lo traerán en 2 horas.
- si… tengo hambre- su estomago lo confirmo.
Fueron a una cafetería cercana al puerto.
-tres días en barco- estirándose- no fue tan malo ¿verdad?
- eso lo dices porque no te mareaste en el camino shojo- recordando sus constantes malestares.
-perdona… te dije que podíamos venir en avión.
- prefiero el mar….- dijo simplemente.
Antes de poder entrar al establecimiento, un fuerte viento frio, le arrebato la bufando a Allen.
-espera shojo- viendo como corría detrás de la prenda.
Quiso correr tras la joven pero justo en ese momento una muchedumbre paso frente a él, perdiéndola de vista.
No muy lejos de ahí, en una parada de autobús, su bufanda llego al rostro de la única persona ahí, esta tomo la prenda con fastidio, la miro y la hiso bolita para deshacerse de esa cosa.
-¡e-espera!- grito mientras corría.
- ¿eh?- mirando a la chica que grito.
-es mía…- tomando aire.
Sus miradas se encontraron, un perfecto contraste, aunque el contacto visual no duro mucho…
-cuida bien tus cosas Moyashi- regresándole de mala gana la bufanda.
- ¿M-Moyashi?- alzo una ceja- no me llames por nombres extraños, ni siquiera me conoces.
- tienes carácter… Mo-ya-shi- en tono de burla.
- ¡Kanda Yu!- grito una joven molesta- deja de insultar a una chica. Que mal educado eres.
- A-Alma- mirándola.
- ¿es hombre?- pensó Allen- ¡¿hombre?- grito repentinamente.
Los otros dos la miraron extrañados.
-lo siento- sonrió- pensé que… eras mujer.
- Moyashi…- molesto- primero me molestas con tu estúpida cosa- la bufanda- y ahora me jodes con esa estúpida idea.
- no es una "estúpida cosa" es mi bufanda.
- piérdete Moyashi- comenzó a caminar.
- ¡deja de llamarme así!- vio una lata vacía y sin pensarlo dos veces la pateo, golpeando a Kanda en la cabeza.
- ¡tu!- volteo muchos más enojado que antes- MOYASHI molesta.
-¡tu empezaste Bakanda!
- ¿B-Bakanda?- pregunto para sí misma Alma.
- ¿Cómo me llamaste?- una venita se sobresalto en su frente.
- Bakanda… si tú te tomas la libertad de ponerme apodos sin conocerme, puedo hacer lo mismo.
- ¡shojo!- grito Tikky a lo lejos.
- ¿eh?- volteando- Tikky- sonrió.
- no hagas eso de nuevo- dándole un golpecito en la cabeza.
- p-perdón.
- ¿son conocidos tuyos?- viendo a Alma y Kanda, que seguía muy molesto.
- no…- viendo con enojo al japonés.
- perdona…- sonrió Alma- soy Alma Karma.
- no es necesario que te presentes- dijo Kanda.
- y él es Kanda Yu. Te pido disculpas por su torpeza con las mujeres.
- ¿Qué?- alzo una ceja- ¿torpeza con las mujeres? Alma….- con aura negra a su alrededor.
- para que veas que lo digo en serio…- tomo las manos de Allen- te invito al restaurante de mi abuelo.
- ¿eh?
Sin decir más y a pesar de los reclamos de Kanda y Allen (que ahora estaban de acuerdo) Alma y Tikky los ignoraban, llegando al restaurante.
Alma explico la situación, a lo que su abuelo como buen mediador, les invito la comida. Lama y Kanda trabajaban ahí, por lo que se vieron obligados (por Alma solamente) a aceptar la comida gratis.
-eso fue infantil shojo, además de un poco…- pensó un momento- indecente para una dama ¿no crees?
- ¿lo viste?- se sonrojo notoriamente.
- no sé que paso exactamente pero… si el Conde te viese…
- moriría de un infarto- rio aun apenada.
- no por nada pasaste 6 años en ese internado shojo- dijo con cierto tono de molestia.
- no creo poder olvidar ese lugar- presiono su brazo izquierdo.
Alma atendía las mesas, pues Kanda solo terminaba llenando de pánico a los comensales, por lo que ayudaba en la cocina.
-¿Dónde conocieron a esas personas?- pregunto el abuelo de Alma.
-pues…- sentándose a un lado de Kanda- Kanda molestaba a la chica.
- ya veo… no quiero que te acerques a ellos de nuevo.
- ¿Por qué? no parecen malas personas- dijo la morena.
- hazme caso Alma- en tono serio.
Asintió sin realmente tener la intención de alejarse de esas dos personas, eran interesantes, especialmente Allen por su marca extraña y carmesí en el rostro, vaya forma de portar un "tatuaje".
-será mejor irnos shojo.
- si- sonrió- Alma.
- ¿dime?- acercándose a ellos para molestia de su abuelo.
- gracias por invitarnos.
- no te preocupes, es una disculpa de parte de Yu.
- ¿Yu?- alzo una ceja.
- Kanda…- dijo Alma- se que nunca lo haría por si mismo así que… le estoy haciendo el favor.
- nadie te pidió ayuda- molesto.
- no debes se descortés con ella- mirándolo feo.
- no me interesa ser "bueno o malo" como dices, con una Moyashi.
- ¡me llamo Allen!- molesta.
- es lo mismo.
- mejor nos vamos- tomando a Allen del brazo- muchas gracias, con su permiso- saliendo del restaurante.
- ¡déjame!- alego la albina- no dejare que me llame de ese modo- enojada.
- tus modales Allen.
- ¡no me interesa!
Finalmente Tikky logro alejarse lo suficiente para que Allen se calmara y dejara de gritar incoherencias contra Kanda; en el restaurante, Alma veía sorprendida la escena, ¿Cómo alguien con el aspecto de Allen podía perder la cabeza así? No parecía una joven de malos modales o de carácter fuerte.
-espero encontrarlos de nuevo- sonriendo- ¿verdad Yu?
- no- entrando a la cocina.
Puerto, estacionamiento subterráneo…
-¿sigues molesta shojo?- recibiendo las llaves de su automóvil.
-….- los ojos cerrados, brazos cruzados y ceño fruncido.
- entiendo- sonrió- sube, debemos llegar a casa en 30 minutos.
El camino fue tranquilo y lento, a pesar de ser invierno, tener vacaciones, trabajar menos horas, había transito, afortunadamente la casa de Mana quedaba cerca de una universidad, justamente donde Allen estudiaría.
Las calles llenas de arboles cubiertos de nieve, charcos congelados brillando con la luz solar, si bien era diciembre, la navidad no se celebraba en "Dalian" se pasaba como cualquier otro día, si acaso una fiesta con la familia pero no a la escala de la noche buena y demás. Por lo cual no se veían adornos coloridos y árboles navideños.
El único día de celebración a lo grande, era el 31, para celebrar el descubrimiento del continente, siglos atrás.
-¿eso era una biblioteca?- volteando.
- eso parece- sonrió.
- ¿no debería estar en el centro?
- aquí no veras nada parecido a Inglaterra u otro país, es como si…- pensó un momento- si estuviésemos en otro siglo shojo, son mas reservados y las cosas son… la mayoría contrarias a los otros continente, me refiero a las costumbres y esas cosas.
- ahora entiendo porque no hay adornos navideños.
- aquí no existe eso. Pero si quieres podemos celebrar de todos modos.
- no, lo mejor será seguir sus costumbres- sonriendo.
La residencia Walker, quedaba entre una mansión de color rojiza, por el ladrillo sin pintura y un gran campo verde, sin construcción alguna, quizá un terreno sin dueño o abandonado.
La mansión de Mana, el portón negro con una "W" en color plata, daba un aire de imponencia al verlo, con las formas de rosas, hechas a mano en los barrotes, todo el terreno rodeado por una barda de piedra gris, con unos 2 metros de altura.
Un camino de grava oscura, dividida en dos, una hacia la puerta principal de la mansión y otra hacia la cochera; un extenso jardín blanco, con varios arboles frutales seguramente, pues a Mana le gustaba tener todo tipo de frutas en la mesa, para disfrutar distintos olores, sabores y texturas, después de todo era un artista, músico, pintor, actor de circo, un sinfín de cosas, necesitaba inspiración.
Justo en el centro del camino de grava, un circulo de pavimentos blanco, con algunas masetas sin plantas, con pasto blanco alrededor, una muy pequeña fuente en forma de sol con una media luna dentro.
Tres escalones de madera indicando el camino hacia la puerta de madera rojiza, 6 pilares blancos sostenían la terraza de madera, un foco intermedio para iluminar la entrada; las ventanas con protecciones negras.
Tenía un color azul oscuro que combinaba con el color madera de las terminaciones, en el tejado y parte inferior de la pared, cortinas blancas con estampados de rosas, casi imperceptibles, no por nada tenía el nombre de "Bara Yashiki" (Mansión de las rosas).
Tikky abrió la puerta principal, dejando que Allen viese la mansión, antes de desempacar, los muebles habían llegado dos días atrás así que no tendrían problemas con eso.
Todo el piso, tapizado con una alfombra café pálida, las paredes blancas, lo primero que se podía ver al entrar era el amplio recibidor con las escaleras de madera oscura en medio, dividiéndolo en dos, a la derecha había tres puertas, donde residan la sala de estar, una puerta corrediza para salir al jardín trasero, un estudio con muchos, demasiados libros y por ultimo el salón de música de Mana, su piano negro de cola, era lo que mas destacaba del lugar.
Mientras que a la izquierda, estaban la cocina y el comedor dividido solo por un arco de concreto blanco, la puerta final era un medio baño, de azulejo café simulando ser madera.
-¿Qué te parece shojo?- dejando las maletas en la entrada.
- es muy grande- sonriendo.
- ¿te parece?- hecho una mirada rápida- a mi me parece pequeña.
- ¿Qué?- viéndolo con extrañeza.
- bueno, la mansión del Conde es mas grande. No me sorprende solo estuviste ahí un par de veces cuando eras pequeña.
- sí, la mayor parte del tiempo lo pase en ese internado.
Dejaron su charla para después y se dedicaron a acomodar las cosas que hacían falta.
Biblioteca "Bookman"…
Afuera, el extenso terreno ahora blanco, debajo de un roble donde había una banca, ocupado por dos jóvenes… uno de ellos lloraba de la risa, su cabello rojo y ojos esmeraldas no pasaban desapercibidos por ninguna chica.
-no puedo creerlo Yu-chan- presionando su estomago- ¿Cómo pudiste ser así?- las lagrimillas seguían saliendo.
- ¡cállate de una vez!- una venita se sobresalto de su frente.
- p-perdón…- la risa se fue.
- ¿puedes ayudarme o no?- pregunto de mala gana.
- sí, solo dime el nombre de la chica.
-….- lo miraba fijamente.
- ¿no lo sabes verdad?- Un.n
- ¿c-como voy a saberlo?- miro molesto hacia otro lado- es una Moyashi molesta.
- debió ser una linda chica- sonrió- si te pones así por algo como esto… seguramente te gusto ¿no Yu-chan?- sonriendo pícaramente- ya era hora de que dejaras a Karma.
- ¿Qué?- Lavi sintió como si la mirada oscura de Kanda lo acuchillara lentamente por dentro.
- lo siento…- comenzó a sudar frio- pero no puedo hacer nada si no sabes el nombre, por lo menos el apellido.
- tsk- metió las manos a su chamarra y encontró algo.
- ¿Qué pasa?
- esto es…- mirando una tarjeta del tamaño de una credencial.
- ¿Allen Walker?- viendo la fotografía- seguramente es su identificación de alguna escuela.
- investígala.
- ¿Por qué?- tomando la credencial- no se ve como una mala persona, además si es linda- sonriendo- me gustaría conocerla.
- no me interesa lo que hagas con ella. Investiga ese colegio.
- ¿Milenios Orden?- se puso serio.
- ¿Qué pasa?- miro a Lavi- ¿sabes algo?
- ese sitio- le dieron escalofríos- pobre chica, debió sufrir bastante- viendo la foto de Allen con tristeza- no es un colegio Yu-chan, es un internado… de lo peor- con molestia en las ultimas palabras.
Kanda lo miraba fijamente, también el abuelo de alma había dicho algo así, además de prohibirle a su nieta acercarse a la Moyashi, ¿Qué pasaba con ese lugar? Muchos parecían conocerlo y simplemente ponían cara de miedo o tristeza también decían cosas como "pobrecilla" "que lastima".
-esa marca- señalando la marca rojiza de Allen, en su ojo.
- ¿Qué pasa con eso?
- no puedo hablar aquí- guardo la credencial- ven a mi casa esta noche, te diré lo que se.
- bien- se levanto y tomo sus cosas.
- Yu…
-no me digas así- mirándolo con enojo.
- ¿de verdad… dejaste a Alma?- viéndolo fijamente.
-….- suspiro con pesadez- te veo en la noche- siguió con su camino hacia la salida.
- Yu… si sigues con esa mocosa…- frunció el seño- algo podre hacer- sonrió.
Más tarde, cerca de las 6:00 Pm Lavi regreso a casa, pensativo, tan metido en sus pensamientos que no noto que alguien corría en dirección contraria a él, por lo que chocaron, terminando en el pavimento.
-perdón- sonó preocupada- ¿estás bien?
- s-si…- abrió los ojos- ¿eh?- se sorprendió de ver a la misma joven de la credencial.
- ¿no te lastimaste?- seguía en el piso como Lavi.
- no- sonrió y se levanto- perdona, fui yo quien estaba en otro mundo.
- menos mal- sonrió.
- soy Lavi- ayudándole a pararse.
- Allen- sonriendo- gracias.
-no te había visto ¿eres nueva aquí?
- sí, acabo de llegar de Inglaterra.
- vaya…- alzo un poco la mirada- ¡¿Qué?
- ¿q-que pasa?- sorprendida por la reacción del pelirrojo.
- esa mansión…- refiriéndose a la de Mana.
- ¿Qué pasa con ella?
- hace mucho que no veía las luces prendidas….- analizo todo- ¿v-vives ahí?
- sí, mi padre era el dueño.
- ¡¿eres la hija de Mana Walker?
- s-si.
- conejo.
- hola Yu- sonriendo- llegaste temprano.
Allen y Kanda se miraron un momento…
-¡TU!- dijeron al mismo tiempo.
Lavi solo sonrió ampliamente, sería algo interesante ver como se relacionaban esos dos. Por fin algo divertido en la ciudad…
¿continuara?
