Soul Eater no me pertenece. De lo contrario, ya estaría casada con Death the Kid y le hubiese dado 8 perfectos hijos simétricos
No hay lugar como el hogar
Aquel día
Esa mañana, Maka se veía muy animada. Eso había pensado Soul al sentir cómo su técnico besaba su mejilla y exclamaba un "¡Muy buenos días, Soul!" mientras bailaba hasta la cocina con una sonrisa enorme adornando su rostro.
Se preguntó la causa de aquello pero no consiguió llegar a ninguna respuesta. El día era como cualquier otro. Era sábado, Black*Star había demandado que se encontraran a las 11 en la cancha de baloncesto para poder mostrar un habilidades divinas, los pájaros cantaban y nada parecía fuera de lo común. Excepto claro, la actitud de Maka.
- ¡Vamos, Soul, eres muy lento! Si no terminas pronto de desayunar, Black*Star nos matará por hacer esperar a tan divina presencia. – rió ella al pasar hacia su cuarto, dispuesta a cambiarse.
Pero bueno, si su compañera estaba feliz, eso lo hacía feliz a él. Después de todo, no siempre podía contar con ese ánimo en su amiga.
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Jugaron basket y luego fueron a la casa de Kid para almorzar. En todo el día, Maka no quitó su sonrisa del rostro ni le propinó ningún Maka-chop ante sus comentarios desubicados. Soul no podía estar más feliz.
La tarde pasó tranquilamente, entre juegos, risas y gritos por parte de Kid al ver que sus amigos desacomodaban su simétrica habitación.
Al ser las 7 de la tarde, cada pareja se despidió para volver a sus respectivos hogares.
- Hoy estás de muy buen humor… - comentó Soul, como al pasar, caminando al lado de la rubia, con las manos en los bolsillos.
- ¿Tú crees? Es porque es un hermoso día. – Respondió Maka, sin dejar de dar saltitos a su lado – Ne, ¿Qué quieres comer? Yo cocino esta noche.
-Pero es mi turno de hacerlo.
- Da igual, aprovéchame que estoy buena y dime qué quieres, "Eater" – le dijo, haciendo referencia a la palabra en ingles.
- ¿Quieres decir que como mucho?
- Claro que sí, ¿acaso no sabes que casi todo el dinero del fondo va a tu estomago?
Y aunque aquello hubiese sido, anteriormente, un motivo de discusión entre ellos dos, ninguno se puso a la defensiva sino que continuaron hablando amenamente.
Al llegar a su departamento, Maka entró saltando antes que Soul, pidiendo el baño primero.
El peliblanco rió mientras cerraba la puerta. Había que ver. Con ese comportamiento, su técnico parecía una niña de 10 años. Aún así, le gustaba.
Recorrió su pequeño living y se tiró sobre el sofá, sujetando el mando de la televisión. Debía hacer algo mientras Maka se bañaba y la televisión parecía su alternativa más cercana. Pasó los canales sin encontrar algo que verdaderamente le interesara hasta que lo detuvo en uno de noticias en donde, sin siquiera darle importancia a lo que estaban diciendo, fijó su vista en el costado de la pantalla en donde se mostraba la hora, el día y la temperatura.
Y entonces sonrió. Y comprendió.
Cuando Maka salió de su habitación tras cambiarse, encontró a su arma sonriendo sobre el sofá, con las manos tras su cabeza y la mirada enfocada en el techo.
- ¿Qué te causa risa, Soul? – quiso saber, acercándose hasta quedar con la cabeza sobre la cabeza de él, provocando que algunas gotitas resbalaran de su cabello aún mojado.
- Solo estaba pensando… que deberíamos comprar algo nuevo para la casa…
La ojiverde suspiró y miró alrededor, considerando la idea, sin entender muy bien de donde venía.
- Ya sabes… - continuó Soul - …para conmemorar un año de vivir juntos.
Fue entonces cuando Maka recuperó la sonrisa que había adornado su rostro todo el día y asintió.
- Es una idea genial – le respondió, al tiempo que se acomodaba al lado de su guadaña y apoyaba su cabeza en su hombro, sin importarle el hecho de mojarlo – No pensé que te acordarías…
- ¿Por quién me tomas?
- Por alguien que no sabe ni en qué día estamos…
Él rió.
- Bueno, ciertamente no tenía idea en qué día estábamos, pero al ver la fecha inmediatamente lo recordé.
Como si pudiera olvidarlo. Aquel día en que Maka y él compraron juntos en el mercado la taza en donde pondrían sus cepillos de dientes y eligieron el sofá en donde tan cómodamente estaban acostados. Aquel día en donde dejó de ser solo él para pasar a ser ellos. Aquel día.
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Hola :D
Quedé muy feliz con los reviews de mi otro fic "Locura", así que decidí hacer un fic con momentos de Soul y Maka dentro de su apartamento :)
Intentaré que los próximos sean más largos y los iré subiendo cuando pueda. Pero no se preocupen, no pasará mucho tiempo, ¡esta serie me tiene loca!
Espero que dejen review y me digan sus opiniones o si quieren que escriba alguna situación en particular (:
¡Besos enormes!
Hikari x Takeru
