Disclaimer: No señores y señoritas, nada del Fandom me pertenece, ni los nombres, a excepsión tal vez de la trama del escrito.

Advertencias: Crack!Fic. ¿Posibles Spolers?

Notas: Porque han pasado ya algunos días desde el final de temporada de Hannibal, y esta escena entre Winston, tan bello perro, y Will se llevó un premio en mi corazón.


—'Buen chico'.

Winston, como perro recogido de la calle que era, resultó ser muy agradecido, tal vez un poco más al resto de la manada o 'familia' fundada por Will Graham. El detective especial del FBI con serios declines en su mente; sin embargo, Winston fue un buen chico desde el inicio, posiblemente porque Will le hubo agradado rápidamente con ese bocadillo inicial y después con el buen baño al aire libre ¡Bien que lo necesitaba! Todo ese polvo de la calle lo disgustaba.

Fue un vínculo rápido, un poco unilateral —Will tenía muchos perros a los cuales cuidar—; por ello, cuando los problemas comenzaron Winston estuvo presente lo máximo permitido a su condición de mascota, por ejemplo: cuando siguió a un sonámbulo Will a lo largo de la carretera hasta ser encontrado por los hombres de traje azul y auto de sonido molesto —este nunca lo sabría, pero Winston lo defendió de peligrosas alimañas nocturnas con sus feroces gruñidos—. Recibió a cambio muchas caricias, amor, y un buen plato de comida como recompensa incluso si realmente sus actos provenían del cariño más desinteresado.

Sin embargo, cuando los mismos hombres de traje azul acompañados por otros sujetos extraños con un poco del aroma de su dueño llegaron, llevándose a los otros miembros de su manada Winston no logró comprender debidamente qué estaba ocurriendo; separándose de su manada, correa en el cuello, gimoteó junto al auto donde estaba encerrado su dueño, Will lo observó con algo de desilusión y tristeza, deseaba creer que regresaría por sus perros, por su perro, pero le era imposible tener esa seguridad. Iban a encarcelarlo, estaba seguro de ello, ¡Por un crimen que no había cometido! Por culpa de su terrible estado mental, de esa maldita locura; iba a extrañar mucho a Winston, a toda la 'familia'.

Winston sólo pudo ver alejarse el auto, tal vez, en su mundo subyugado a la comprensión canina supo lo terrible del suceso, por ello siguió gimoteando hasta hartar a los policías. Porque Winston deseaba fuertemente seguir acompañando a Will, protegiéndolo de alimañas nocturnas —en especial esa de dos patas, la que sonreía cordialmente y a quien Will llamaba Dr. Lecter—. Winston quería seguir siendo un 'Buen Chico'.