Eres Hermoso

Summary: Para el tonto y despistado Harry Potter vivir un mes con la Reina del Hielo; Ginny Weasley era pan comido solo tendría que respetar tres reglas: No tocarla, prohibido entrar en su recámara y no tomar sus cosas… ¡Mas fácil no podía ser! [Hanny] [AU/Magia].

Disclamer: Todo el mundo mágico de Harry Potter le pertenece a la magnífica y extraordinaria JeiKei Rowling :D

Advertencias: Esta historia tendrá un poco de OoC… bueno en el caso de Ginny porque Harry sigue siendo tonto y despistado pero aun así lo amamos, además de que solo será Harry nada de eso de El Elegido y El Niño Que Vivió y ellos nunca han tenido una relación.

Linea: Cambio de escena.


Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas.


Capitulo Uno: Prefiero irme al Infierno que vivir con Ginny Weasley.

Después de estar fuera de Inglaterra por un año, Harry Potter volvía a pisar su tierra natal y es que ese curso que le ofrecieron en Estados Unidos no era para desperdiciarlo y así completaría mas su carrera de Auror ¿Pero cómo alguien tan despistado como él era Auror? Simple y es que en el campo de batalla era como si otra persona se posesionara de su cuerpo, muy eficiente en la captura de los magos tenebrosos y respetado por su compañeros del Cuartel General.

Pero en eso era lo ultimo que pensaba el, ahora mismo cambiaría todo su oro por una mullida cama y es que hace cuatro horas había llegado a Londres pero su jefecito el Sr. Voldemort le había invitado a tomar café con galletitas y echar el chisme como vieja lavandera, porque en un año habían pasado varias cosas que el ni por enteradas ¿Qué Dean Thomas le había puesto los cuernos a Seamus Finnigan con Ritchie Coote? ¿Qué Cho Chang está embarazada de gemelos y no sabe quien es el padre? ¿Qué después de tanto negarlo Ron Weasley y Hermione Granger aceptaron su amor y ahora viven juntos?

¿Qué? ¡Había escuchado bien!

Acaso Ron y Hermione…

No era que no le alegrara la noticia pero, si ya están viviendo juntos...

¡En donde iba a vivir el! ¡¿Dónde?!

¡Oh! Su mejor amigo Ronald Bilius Weasley lo había dejado en la calle, y todo porque cayó en los encantos de una linda castaña.

Pero ahora si iba a conocer a Harry James Potter.


Llego al que hasta hace una hora era su departamento compartido con su mejor amigo Ron, entro a este utilizando un Alohomora porque la verdad había perdido sus llaves, entro a la estancia y el departamento era un absoluto silencio. Bueno a lo mejor no se encontraban en ese momento y salieron de paseo por el Callejón Diagon o Londres Muggle así que decidió echar una pequeña siesta en su cuarto.

¡Aaahhh!

¡Por las barbas de Merlín! ¿Por qué le suceden estas cosas a el? ¡¿Por qué?!

Y es que al momento de entrar a su ahora ex -cuarto atrapo a Ron con las manos en la masa, bueno en los senos de Hermione y a la chica arriba de su amigo montándolo como una desquiciada mental, sexual y todo lo que termine en "al".

- ¡Harry! – Dijeron los dos al unísono.

En solo una hora había todo ¡todo!

Su departamento, sus llaves, su cuarto, su virginidad… a no eso no.

Ya se lo imaginaba… el viviendo a mitad del Callejón Diagon con solo un periódico mas viejo que Dumbledore de cobija y una planta rodadora de compañera sintiéndose en su momento Forever Alone y más solo que la mierda.

En definitiva Merlín lo odiaba.

Se encontraban los tres sentados en la sala, Ron como siempre en bóxer y Hermione en pijama de conejitos y sus pantuflas de Godzilla, avergonzados por haber sido atrapados en "algo malo".

- Lo sentimos mucho Harry… pero como debiste de haber llegado hace como cinco horas y no lo hacías pues… pensábamos que ya no llegarías – dijo Ron con las orejas del mismo color de su cabello.

- Si llegue hace cinco horas pero Voldie me entretuvo en el Cuartel contándome todo lo que había pasado en mi ausencia, incluyendo lo de ustedes… no crean que no me alegro pero en vista de que ya llegue y suponiendo que Hermione utilizo mi cuarto, pues que ella se vaya al tuyo y asunto arreglado.

Ron y Hermione lo miraron como si recién descubrieran que la Tierra es redonda.

- Harry nosotros…

- No somos novios – dijo tajante Hermione.

- ¿Cómo que no son novios?

- No… solo tenemos sexo – menciono Hermione como explicando que dos más dos son cuatro.

- Mira Harry – empezó Ron – cuando dos personas andan calientes como nosotros dos, pues de alguna forma nos la tenemos que bajar, ya sé que tenemos a "nuestra mano amiga", pero su ella está sola y yo también así que ¿Cuál es el pedo?

- ¿Cuál es el pedo? Para empezar ella duerme en mi habitación… yo no voy a dormir en el sillón. También crees que me gustaría escucharlos como gorilas apareándose cada vez que tengan sus encuentros.

- Pues ponemos un Muffliato y ya, no es la primera vez Hermione es muy gritona en ese sentido.

- ¡Ron!

- No hay otra manera, me mudare a Grimmauld Place.


Ahora es cuando se estaba preguntando que le había hecho al Mundo para que le pasaran todas estas cosas y lo peor del caso en un solo día ¿Acaso alguien le estaba haciendo vudú?

Grimmauld Place era un asco.

Lo que era una hermosa casa ahora estaba lleno de moho puesto que al parecer se rompió una tubería y nadie tuvo la decencia de arreglarla en su ausencia. Paredes cuarteadas, el techo casi cayéndose, polvo, telarañas, un Kreacher muerto y ya echado a perder… nada fuera de lo normal.

- Y yo que pensaba que Kreacher era inmortal amigo.

- Pues ya vez que no, polvo eres y en polvo te convertirás, ya tenía sus añitos Kreacher… era hora de que estirara la pata – comento Ron.

- Voy a tener que contratar a un Arquitecmago para que me arregle la casa.

Y a la velocidad de una aparición llego su ex - compañero de Hogwarts; Oliver Wood.

- ¿Cómo están chicos del coro? Hace mucho que no los he visto.

- Como estas Oliver, nosotros estamos bien… te mandamos a llamar por mi casa.

- Y como no, está hecha un desastre.

- ¿Cuánto tardaras en arreglarla?

- Pues…

¡Esto no era posible!

¿Acaso era parte de un chiste? ¿Era como esos programas muggles en donde le realizan bromas a la gente?

¡Un mes! Un mes tomaría la remodelación de su casa y eso que iba a ser con magia porque si no tomaría más tiempo. Ahora la cuestión es donde iba a vivir un mes.

- Harry ahora hay que buscarte quien te tendrá de arrimado en su casa – dijo Ron ya casi sintiendo lastima por su amigo.

- Cuales opciones tengo.

- Mis padres.

No era que no le agradaran los Señores Weasley, pero vivir un mes con ellos… la Señora Weasley le haría comer como diez veces al día, de ahí que se pusiera a dieta en sus años en Hogwarts, y él tenía un cuerpo atlético, no musculoso porque daba asco. Pero como dicen después de los veinte años nada es igual y el metabolismo es lento y bla, bla, bla y él es Auror y pues mejor no.

- No.

- ¿Neville?

Puff era broma ¿verdad? Neville no dejaría que nadie invadiera sus plantas, capaz de que lo manda a dormir con una tentácula venenosa.

- Next.

- Con Luna.

Tendría que hacer su mochila para buscar el Snorckack de cuernos arrugados que todavía no encuentra.

- Ni pensarlo.

- Con mis hermanos no se puede, todos viven o están fuera del país por el momento, a excepción de…

¡No! ¡No! Y un rotundo ¡No!

No iba a vivir un mes con Ginny Weasley mejor conocida como la Reina del Hielo, es que era inaceptable. Preferiría irse al Infierno a jugar al muertito con el Diablo que vivir con ella.

- Vamos Harry no puede ser tan malo.

- ¿No? Claro como a ti no es el que mira como si lo estuviera enterrando por eso lo dices.

- ¿Prefieres acaso vivir en el Callejón Diagon?

Y la imagen de el solo con periódico y la planta rodadora volvió a su mente. De solo pensarlo le dio escalofríos. Y por milésima vez se preguntaba que había hecho para pasarle estas cosas a él.


Ginny Weasley había despertado algo incomoda y durante todo el día había estado así, ahora sabia la razón.

Harry Potter, ese tonto y despistado estaba en la puerta de su casa. Recién dejado por el cobarde de su hermano Ron que nada más llego y le dijo "Harry va a vivir contigo un mes" y se desapareció el muy gallina.

- ¿Por qué estás aquí?

- Porque me quede sin departamento y sin casa también.

Harry estaba tan recto como una tabla y a punto de romperse porque a pesar de ser más alto que Ginny (medía 1.82 metros), ella con su metro sesenta y cinco era más intimidante, también tierna por su vestimenta de jeans y blusa con el pelo recogido y descalza pero mejor se callaba la boca si no quería salir en una bolsa negra de ese lugar.

- ¿No tienes a alguien más que molestar?

- Eh… no.

Demonios porque estas cosas le suceden a ella, que por fin tenía su merecido descanso de un mes después de terminar la temporada de Quidditch le llega este inepto a pedir asilo a su casa. Pero a pesar de ser toda una "sangre de cochi" (*) no podía dejar a este tonto en la calle.

- Está bien te puedes quedar.

- Harry no podía creer lo que oía.

- Solo tengo tres reglas: No tocarme, prohibido entrar a mi recámara y no tomar mis cosas. Respeta eso y nos llevaremos bien.

- Está bien y en agradecimiento te doy estas galletas de chocolate y maní; están muy ricas las traje de Estados Unidos.

Ginny tomo una de las galletas, la partió por la mitad y se la tiro en la cara. Se dio media vuelta y se dirigió a su recamara mientras se limpiaba las manos.

Solo tres reglas, solo tres reglas…

No tocarla, prohibido entrar en su recámara y no tomar sus cosas.

Solo era seguir esas tres reglas al pie de la letra y sobreviviría a ese mes infernal.

Era pan comido.


Travesura realizada.


¡Hola crayolas!

Aquí subiendo una nueva historia Hanny no se cuanto capítulos van a ser, pero si van a ser pocos por eso no se asombren que los cambios de escena sean medio drásticos (si les molestan las lineas díganmelo :D).

Esta Ginny que mal portada u.u pobre Harry.

Acuérdense que sus reviews son mi Felix Felicis, comenten si les gusto o no, si mejor me dedico a otra cosa xDD o lo que quieran decirme.

Pido disculpas a las fans de Dean, Seamus y Ritchie pero los ocupaba ponerlos así u.u no me disculpo por Cho porque lo pu... no se le puede quitar wuahaha.

¡Adios!

Atte.

Karure-cienta limpiando su choza escuchando música de Jose Jose xDD