Sí, soy J.K Rowling… por eso tengo que colgar mis historias en páginas Web donde no me cobran por publicar lo que escribo, me adueño de personajes de otros en lugar de llevarlo a Bloosmury y hacerme asquerosamente rica.

AVISO IMPORTANTE: Si no os gustan las historias disparatadas, y con personajes con personalidades "ligeramente" distintas a las originales. Podéis iros haciendo un clic en la parte superior izquierda de esta ventanita donde hay una flecha hacía la izquierda o calcando una X que se encuentra en el margen superior derecho de la pantalla.

Para el resto…

Sed bienvenidos a mi mundo.

Paramount Hogwarts: Severus Snape, yo.

Snape se masajeó las sienes con fuerza, resopló indignado y se colocó detrás de un gran telón. Las luces se apagaron, los murmullos cesaron y un gran foco suspendido mágicamente en el aire iluminó el centro de un escenario improvisado. Abrió el telón rojo con ambas manos y avanzó lentamente. En el centro de aquella tarima había un taburete con un vaso de agua. El hombre miró ligeramente la muchedumbre de alumnos de cursos superiores y profesores que se hallaban sentados en sillas ordenadas alrededor de pequeñas mesas redondas en el gran comedor.

El hombre se acercó serio hasta el centro del escenario iluminado.

-Por mi radiante sonrisa os habréis dado cuenta de lo eufórico y encantando que estoy de estar aquí.- Espetó con sarcasmo- Como bien sabréis. Los requisitos para estar aquí encima haciendo el ridículo eran dos:- El hombre alzó un dedo.- Querer asistir.- Alzó otro.- Y presentarse voluntario. Bueno… Yo no cumplo ninguno de esos dos requisitos. Sin embargo cumplo otros.- Alzó tres dedos- Me suplicaron, me chantajearon, y finalmente me sobornaron…-Hizo una pausa donde lanzó una mirada de odio a los presentes.- Pero un caballero y un hombre honrado como yo, jamás aceptaría…

Un hombre honrado jamás diría quien me suplicó, un hombre honrado no diría como me chantajearon y mucho menos con cuanto me sobornaron.- Hizo otra pausa y miró a los alumnos.- Fue el director Dumbledore el que se puso de rodillas suplicando y me sobornó con vacaciones pagadas, instalaciones nuevas para pociones y un talón bancario- Alzó una ceja- Soy Slytherin, por Merlín ¿De verdad se creyeron que sería honrado?- Miró con desprecio anticipado- Y no digáis que es un buen trato… ¡Porque no! Cuando se negocia con Albus Dumbledore siempre hay letra pequeña… ¡Siempre!

Sé que están pensando: Le pagan unas vacaciones seguramente en algún paraíso, con arenas blancas, aguas cristalinas, una fauna fantástica, manjares nunca degustados, y mujeres exóticas. ¡Y el cabrón de Snape es el único que se queja! Por supuesto que me quejo ¿Alguna vez han tratado de hacer un trato con el Director Albus Dumbledore? -Esperó unos segundos- Nunca lo hagan, es una trampa ¡En realidad es un castigo por no aceptar esto! Si tuviera que decir que si a todas las ideas locas que se le ocurren al director hace tiempo que me habría encerrado yo mismo en Azkaban y besado con un dementor como una colegiala. –Protestó señalando al anciano.- El que avisa no es traidor, cuando se encuentren de "vacaciones" en un poblado perdido en un paraje desierto ¡Con tierra fangosa, agua estancada, mosquitos del tamaño de hipogrifos, vísceras de lagartos muertos como almuerzo y ancianas de tribus hogareñas sin dientes, desnudas y arrugadas!- Dijo indignado. Entonces no me vengan llorando.- Hizo una pausa- Luego está el tema de material nuevo para pociones.- Escupió con sorna- Lo que ustedes piensan que serán instalaciones nuevas se acaban convirtiendo en un cambio de mobiliario. Las mesas y sillas de aquí- Se acercó a una silla donde había sentada un joven Gryffindor.- ¿Me la deja un segundo?- Severus se la arrebató sin que la bruja pudiera decir nada y se fue a la otra esquina de la sala.- Por las de aquí.- Agarró una silla libre y la cambio por la de la chica llevándole la otra.- ¡Enhorabuena, ya tiene silla nueva!- Gritó con sarcasmo.- ¡Si, es genial! ¡No hay dinero para instalaciones nuevas, pero hay dinero para abastecer al castillo entero de malditos caramelos de limón!- Dijo Snape con asco.

- ¡Si, lo sé! Si sabía que esos dos sobornos no me favorecían, que el viaje era un asco y que las instalaciones nuevas no era nuevas ¿Por qué acepte? – Preguntó mirándolos atentamente- Que yo sepa no me he quejado del tercero….-Alzó la comisura del labio.- Hay una razón para ello. O en realidad varios cientos de razones, y como es información confidencial entre el director y yo, no diré cuantos galeones me pagó…- Todo el mundo se calló- ¡Está bien, está bien!- Gritó alzando una mano.- Si insisten en saberlo os daré una pista: Más de 999 y menos de 1001…

Hizo una ligera pausa se acercó al vaso de agua, pero cuando lo vió una mueca de asco se posó en su cara y haciendo un ligero movimiento con la mano transformó el agua en whisky. Después se bebió el vaso entero de un trago.

- Pero que se le va a hacer, es lo que pasa cuando te toca trabajar bajo el mando de un viejo y maldito lunático comedor de dulces. Sobre todo yo, que como hace unos años metí un poco la pata tengo que aguantarle todas y cada una de sus estúpidas ocurrencias solo porque el chiflado director me dio una segunda oportunidad. ¿Adivinad de qué? ¡Exacto! Profesor… De jodido profesor. ¡Yo! ¡Que adoro a los niños!- Vociferó con sarcasmo- ¡Ser profesor es un asco! No tienes tiempo libre, hay que soportar las estupideces de los inexpertos alumnos. Aguantar las hormonas revolucionadas de los adolescentes… ¡Y de los que ya no son tan adolescentes! Por no mencionar que tener vida privada es imposible en este colegio. Literalmente las paredes tienen ojos. Y bueno ya no hablemos de la vida sexual, es un maldito infierno tener vida sexual en un lugar donde la gente se mete permanentemente en la intimidad de los demás.- Bufó airado. Después rió con maldad al ver la cara de algunos alumnos ante la asociación de Snape y sexual.- ¿No pensarías de verdad que solo por ser el grasiento de las mazmorras iba ser virgen? -Susurró alzando una ceja.

-Y ya que ha salido el tema ¡Un consejo! No intentéis hacerlo en el colegio a menos que queráis que se entere el castillo en menos de 6 horas. Porque os puedo asegurar que los profesores son los primeros en enterarse. Aunque creáis que no… De hecho cada año realizan apuestas, el que encuentre a los alumnos en el lugar mas raro, el Director le paga un viaje...-Se calló- Vale, el premio es una mierda, pero es divertido descontar puntos, y es el mejor antiestrés. Y si aun así lo hacéis y además lo hacéis en lugares públicos, por favor procurad no hacer ruido, todos sabemos que el sexo es placentero pero no hace falta gritarlo. Para los que ya lo habéis hecho y no se ha enterado nadie aun…- Hizo una pausa y los miró- Enviarme después una lechuza con sugerencias… mis recursos se están empezando a agotar.- Relleno su vaso de whisky.- Bueno y no hablemos del sueldo, es un asco.

Aun así, ser profesor tiene muchas ventajas ¡Vivo en Hogwarts!- Dijo alzando los brazos- Por ejemplo… No tengo que pagar hipoteca, ni aguantar vecinas entrometidas con horrorosos vestidos de flores y peinados estrafalarios. Que si, que ver a la profesora Trelawney recién despertada da miedo y encontrarse por la noche a Minerva con sus malditos sombreros escocés provocan pesadillas. Pero no es lo mismo.- Alzó una comisura divertido- También me ahorro un dineral en cristales porque las mazmorras no tienen ventanas. Hay servicio de habitaciones 24 horas al día y gratis. Y en verano no hace falta poner aire acondicionado porque allí hace frío los 365 días al año. Además no gasto dinero en ropa nueva ni en champú.

Severus se quitó la túnica con un movimiento elegante y la dejó encima del taburete mientras bebía un largo sorbo licor.

- ¿Haber, champú y ropa nueva para que? ¿Para intentar estar presentable? ¿Ser elegante? ¿Más atractivo? Voy a seguir siendo feo, haga lo que haga. No, no hace falta que me lo diga nadie, ya se que soy feo. Pero feo, feo. Lo mío ya es de nacimiento, en mi caso la cigüeña vino dos veces, una a traerme y otra para disculparse.- Afirmó con la cabeza.-Conmigo no se rompió el molde, conmigo se deformó totalmente. ¡Eso si! Soy feo, pero de categoría A.- Los miró interrogante- Que… ¿Que no lo sabían?- Alzó una ceja.- Pues si, hay tres categorías: A, B y C. La C son aquellas personas que son feas, muy feas, ¡Espantosas! y que además son un estorbo.- El hombre miró atentamente al público.

- Por la cara de algunos deduzco que os sentís identificados con ese grupo ¿Eh?- Alzó una ceja y se rió despectivamente.- Después están los del grupo B, son aquellos que siguen siendo feos, pero que se intentan hacer los simpáticos… Por ejemplo Albus.- Le señaló- Y por último está la categoría A. Siguen siendo feos y además desagradables.- Explicó señalándose a si mismo.-Pero son multiusos. Si, si. Multiusos. Somos feos pero se nos saca partido. Por ejemplo. Mi nariz, es grande y aguileña ¡Un estorbo!... No es cierto, es útil.- Se calló durante unos segundos y luego inclinó la cabeza hacía atrás y se agachó.

- Me dais la vuelta y me colgáis de ella el bolso, el paraguas ¡Y como os descuidéis hasta la túnica! Pero eso no es todo… No, no.- Dijo negando la cabeza.- Mi pelo, es grasiento, un asco y no sirve para nada. ¡Mentira!- Gritó- ¡Tenéis un potente lubricante para las bisagras de las puertas y además puede ser utilizado como combustible! También tengo otras ventajas. Siempre soy fiel... No pongáis esa cara, que si, que soy fiel. ¿Por qué?- Preguntó alzando un poco las manos.- Porque soy tan feo que nadie quiere tenerme a menos de diez metros. A si en cuanto consigo pareja no la suelto…- Esperó unos segundos y alzó una ceja- ¿No me digáis que os lo creísteis? ¿Yo pareja estable? Por favor, si tengo la enfermedad mas común en el hombre… La alergia al compromiso. La relación más larga que he tenido… fue de 5 horas, el tiempo que me duraron los 100 galeones. Luego eran 50 más la hora extra y no me lo podía permitir, como ya os he dicho mi sueldo de profesor es patético.

En fin… - Resopló y miró hacía abajo señalándose su cuerpo.- Esto… Esto si es patético. Las mujeres siempre os fijáis en el torso de los hombres. Os gustan muy altos, atléticos y fuertes y los que tiene tableta de chocolate…- Se miró- ¡Vamos! Idénticos a mí. Yo también tengo una de esas… Bueno, la mía mas bien es chocolatina- Dijo mientras se palpaba el abdomen plano- Alto ¿para que? No sirve para nada solo para hacer más el ridículo, porque cuando te caes el golpe es más grande y más humillante, porque se te ve mas hacer equilibrios para no caerte y al final te la pegas igual. Yo me quedo con mi estatura media, que no es que sea bajo, es que tengo el centro de gravedad mas cerca. Pero no me importa, aunque sea de estatura media, feo, delgado, pobre y antipático, tengo cualidades buenas… Tengo… tengo…- Se paró a pensar- ¡Bueno, ahora no se me ocurre ninguna! Pero estoy seguro que tengo alguna por ahí. Solo que está algo perdida… Muy perdida. – Negó con la cabeza.

-Soy la combinación perfecta: Feo, huraño, sarcástico, insensible y además profesor y pobre. Y para culminar además soy ex mortífago. Si, no me importa reconocerlo. Hola soy Severus Snape y soy ex mortífago. Se que hice mal, lo reconozco. Pero poneros en mi lugar, poder, sexo, alcohol, dinero y fiestas. ¿Sexo y dinero? Eso no gusta… ¡Encanta! Solo que había un pequeño inconveniente claro. Tenías que estar al mando de un bajito calvo y muy feo que tenía muy malas pulgas y era un poco rarito, y que como siempre quería conquistar el mundo. ¡Porque ahora todos los malos se empeñan en conquistar el planeta! Porque esa es otra, si eres un cruel villano y asesino tienes que tener aficiones sangrientas, depravadas e inhumanas como torturar a la gente, raptar niños o sembrar el pánico. Parece que no está bien visto que un psicópata, pinte cuadros, o haga manualidades, o punto de cruz. Tiene que ser perverso. Y conquistar el mundo es el summum de los summums en las aficiones de los malos.

¿Es que acaso es interesante tener un trozo enorme de tierra con forma de huevo y rellena de un líquido incandescente mientras la gente se te arrodilla a tu paso?- Alzó un ceja- Bueno… En la variedad está el gusto. A unos les da por coleccionar cromos, o frascos con contenidos viscosos y a otros trozos de planeta. No me imagino a Voldemort…- Severus se llevó una mano a la frente con teatralidad- ¡Ay, disculpen, que no se le puede nombrar! Bueno pues llamémosle X. No me imagino a X intercambiando conquistas con otros líderes: Grayback te cambio Gran bretaña y parte de Francia por China y Australia. Y el otro: No, si Francia no viene con la Galia no hay trato. Igual que con los cromos de la rana de chocolate.

Severus bebió un largo, largo, trago de whisky y respiró con fuerza.

-Las conquistas, es algo que se puso de moda hace mucho tiempo, fijaros si hace tiempo que Albus Dumbledore llevaba pañales. Por lo general las modas pasan con el tiempo, pero esta ya lleva unos cuantos milenios y no hay manera de cambiarla. Las guerras ya están muy vistas porque los objetivos siempre son los mismos. Es que tanto masacre y acabar con el mundo empieza a ser aburrido. Se me olvidaba que las guerras siempre tienen que ser dramáticas y sangrientas.- Dijo con sarcasmo- Si no, parece que no causan la suficiente atención. ¿Que pasaría si en lugar de matarse entre ellos peleasen por cosas cotidianas?

Por ejemplo: Pelearse por el lado de la cama, para variar. O por quien viaja en el asiento delantero. Sería divertido ver a Vol… Perdón a X, peleándose con otro por ver quien se come el último pedazo de tarta, o el caramelo de fresa, o por quien elige el cuento de por las noches. Seguro que los seguidores serían muy distintos, si la recompensa fuera más dulce. En lugar de hombres de piel pálida e imponentes, serían bebés de mejillas sonrosadas y rechonchos, en lugar de túnicas largas y negras, pañales de hipopótamos y ositos, y en lugar varitas amenazadoras. ¡Biberones llenos de leche con cereales listos para salpicarte! No se rían, un biberón armado es el arma más poderosa que existe. Si no… prueba a echarte un chorro en el ojo. ¡Y ya no te digo nada como te manche una camisa negra! Ya puedes olvidarte de usarla.- Cruzó los brazos con cansancio.- Y si la conquista del mundo les aburre ¡Siempre pueden pelearse por los caramelos de limón de Albus! Señores…sean buenos, y parézcanlo.

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Esto es lo que ocurre cuando tienes demasiado tiempo libre y pasas demasiadas horas viendo monólogos. Que luego se te ocurren bestialidades como estás.

No se si os habéis reído o no. Si os ha gustado o si de poder hacerlo lo quemaríais.

A mí al principio me hacía gracia luego la perdí un poco. Porque claro, después de leerlo y rescribir esas frases unas cincuenta veces es normal. XDD.

Consta de dos capítulos más, tres en total. No son más monólogos tranquil s ^^. Los próximos capis son las consecuencias de hacer un monólogo delante de los alumnos.

Espero comentarios.