Bueno este es un nuevo proyecto que se me ocurrió pensando en la otra historia.
Para aclarar esta obra va a tener como pareja principal a un trío, espero les guste. La pareja en cuestión será CatxTorixJade.
Como siempre nada me pertenece yo solo ocupo los personajes sin fines de lucro.
Capítulo I. El infierno comienza.
Las cosas eran como siempre, en los pasillos de la escuela los alumnos practicaban para cuando se graduaran pudieran incursionar en el mundo artístico, todos tenían sueños y aspiraciones. Sin embargo sin que ellos supieran, el mundo que conocían nunca sería igual.
Nuestro grupo favorito estaba practicando para la obra sobre un astronauta con narcolepsia, las protagonistas principales eran Jade West y Victoria Vega, ambas habían tenido una cita el día anterior para que su interacción fuera más cercana, y según sus compañeros y profesor había funcionando, pues la obra comparada con días anteriores había sido mucho más fluida y ya no parecía como si se quisieran matar la una a la otra.
Estaban por concluir el ensayo cuando la alerta sísmica había empezado a sonar, por vivir sobre de una placa tectónica era un poco común que las escuelas tuvieran simulacros para evitar que en uno real las cosas se salieran de control, y los jóvenes entrarán en pánico, algunos al no sentir nada pensaron era el caso, por lo que el profesor sorprendentemente había guiado a sus alumnos a la puerta de emergencia del teatro para poder salir.
Tori se acercó a Cat, desde hace algún tiempo la primera había tenido un flechazo por la pelirroja, pero hasta el momento no había tenido el valor para poder hacer algún movimiento para hacer que la relación de amistad que tenían fluyera a algo más, sumando al hecho que Tori al ser una persona atractiva nunca había tenido que cortejar a alguien, y también el hecho que Cat era la primera mujer por la que se sentía de esa manera, pues apresar de haber sido catalogada como intersexual siempre se había sentido atraída hacia hombres, hasta que una tarde ambas habían quedado en estudiar para un examen sobre la historia del arte, Tori había tenido un pequeño inconveniente al no poner la suficiente atención a la clase, por lo que le pidió a Cat ayuda, pues aún con su peculiar carácter era una buena alumna, era de noche y ambas volvían del museo de arte de la ciudad de los Ángeles, Tori no recuerda completamente que es lo que iban platicando sin embargo recuerda como las luces de la calle hacían brillar el cabello de Cat, como la poca iluminación hacia ver su perfil de una manera muy diferente a como la llegaba a ver en la escuela, como por las calles retumbaba su risa haciendo que en su estómago hubiera una pequeña revolución, y aún cuando estaba sola en la seguridad de su habitación no podía dormir imaginando a Cat a su lado. Por el momento era suficiente tener una amistad con la joven imperativa, dentro suyo la latina sentía que era más que suficiente tener esa cercanía con la pelirroja.
Jade veía desde atrás como Cat y Tori iban platicando, trató de ponerse a un lado suyo pero un brazo en su cintura le impidió poder hacerlo, volteo a un lado suyo para ver a su novio hablando, aparentemente con ella. Suspiro, desde hace algún tiempo había dejado de sentir la misma chispa con el, bueno en realidad desde aquella vez que Tori le había ayudado a regresar con el, trataba de convencerse que solo era temporal, que en algún momento volvería a sentir aquello, pero después de unas semanas sentía que se alejaban cada vez más, sabía que ella había sido la que quería regresar con el, pero desde ese momento cada que veía a alguien coquetear con el, hacia su típica escena de celos más por costumbre que por otra cosa, y sin su maldito consentimiento, el día anterior se había dado cuenta de algo, cuando aquellos muchachos se acercaron a ellas para tratar de ligar, la molestia a la que estaba tan acostumbrada, ese malestar en el estómago que hacía que quisiera hacerle ver a todos que ella era la que tenía la pertenencia sobre de alguien nació cuando vio como tomaron de la cintura a la latina, ella era una persona que se dejaba guiar por sus instintos, casi siempre estos tenían la razón y si no la tenían ya vería como lo arreglaría, pero por el momento estos le decían que lo mejor era estar a un lado de la latina.
En cuanto llegaron al estacionamiento de la escuela la mayoría de los alumnos ya estaban formados en las zonas seguras.
Jade pudo acercarse a Tori y a Cat una vez hicieron que los hombres se separaran de las mujeres, durante unos segundos todo fue un silencio abrumador, nada a lo que estuvieran acostumbrados al vivir en una metrópolis, pero este fue roto de la manera más atronadora posible, gritos y disparos empezaron a sonar, y por la entrada del estacionamiento vieron a una estampida de hombres y mujeres correr por la calle, algunas tuvieron la mala suerte de caer y ser arrollados por la estampida humana, la mayoría vieron aterrorizados aquello, una horrible muerte, sin embargo nada los preparo para lo que seguirá, policías y militares caminaban en reversa disparando a algo desconocido, pero en cuanto uno vio que los alumnos estaban parados inmóviles.
-¡CORRAN!
Ese grito tuvo aún más peso al ver como un hombre se tiraba sobre del policía y mordiendo su rostro arrancando un poco de su cara. Los gritos del hombre no se hicieron esperar, y antes de darse cuenta, los mismos alumnos corrieron por todos lados.
Jade se quedo más de la cuenta viendo la sangre, siempre tuvo una pequeña fascinación por el líquido vital, pero fue sacada de su burbuja al sentir como alguien jalaba su brazo, y por unos segundos pensó en que sería su novio, pero esto murió al verlo saltar la reja que delimitaba el estacionamiento, volteo hacia la persona que estaba jalandola hacia el interior de la escuela, y era Tori, en su otra mano tenía a Cat casi cargándola, más al frente veía a Trina abriendo la puerta de una patada, y haciendo señas para que corrieran más deprisa.
Y solo fue un segundo en el que supo que aquello apenas estaba comenzando.