Insomnio
Drabble

Johan cerró la puerta cuidadosamente, tratando de no despertar a los vecinos de los dormitorios conjuntos, dado que pasaba la medianoche. Él y Juudai se habían pasado toda la tarde dueleando y hasta esa hora habían terminado, tanta era su afición al juego.

—¿Está bien que me quede aquí esta noche? -preguntó el de ojos esmeralda, sentándose en el suelo- La otra vez Manjoume-san se quejó del ruido que hicimos.

Juudai se puso de todos los colores.

—¿Qué te parece si dormimos un poco? Ya molestaremos a Manjoume después -pidió el castaño, saltando hacia su cama.

—Ok, buenas noches -se despidió el otro subiendo a la cama de arriba.

El silencio reinó inmediatamente, sólo quebrantado por el sonido que hacia Johan al cubrirse con las sábanas. Al Osiris aquello le molestó, pues en realidad él no quería dormir, por muy cansado que estuviese.

—Johan... -lo llamó con voz lastimera- Cuéntame un cuento.

La carcajada de respuesta sólo logró enfadarlo más.

—Creí que ya habías madurado -su voz se volvió fría- Después de lo de tu querida Yubel...

—Cuéntame un cuento -insistió- Uno pequeñito, para que pueda dormir.

El peliazul suspiró abatido, a él no se le daban bien esas cosas.

—Había una vez... -empezó, pero fue detenido por el gruñido de Juudai, quien parecía estar subiendo hacia donde él estaba- ¿Qué se supone que haces?

—Un cuento no se disfruta estando muy lejos -guiñó el muchacho, acurrucándose al lado de su novio y después mirándolo con adoración, esperando su historia- Prosigue.

—Había una vez -alzó el dedo índice, pidiendo silencio- un chico enamorado de otro chico, se casaron y tuvieron hijos, fin. ¿Lo ves? No soy bueno para esto -rezongó Johan, acariciando la mejilla del otro.

—Cuéntame cómo hicieron a sus hijos... si es que pueden tenerlos -pidió pícaramente Juudai, entrelazando una de sus piernas alrededor del torso del muchacho.

—Eso no te lo puedo contar -negó con un gesto y sólo consiguió un puchero- Pero sí te lo puedo enseñar -admitió, colocándose rápidamente encima del castaño.

—Parece que Manjoume sufrirá insomnio hoy también -afirmó riendo el Osiris, antes de dejarse llevar a la incosciencia que le producía su Johan.

FIN.


Notas de la Autora: 2.57 am, me voy a dormir, pero no hay ningún Johan para desvelarme :(, ok ya mejor me dejo de debrayes, otra cosa más, me gustó mucho imaginarme al cute de Juudai pidiéndole un cuento a mi Johan º------º, no sé qué más decir, me muero de sueño, nos vemos pronto, seguramente, gracias por leer.

Ja ne!