Un one-shot. Está basado en una conversación, agena a HP, que tuve con una amiga. Es un retazo de la vida de Luna y Ginny varios años después de Hogwarts. Espero que os guste.
La PlagaLu...na – Ginny Weasley cerró los ojos con fuerza. Milésimas de segundo después un pesado mueble cama se estampaba contra el suelo haciendo un estrepitante sonido.
Se agarró al marco de la puerta y suspiró aliviada, al menos Luna estaba sana y salva.
¿De dónde has sacado este armatoste, Luna? – le preguntó en cuanto que se recuperó de la impresión y tomo de nuevo aire.
Oh, lo compré en una tiendecita del callejón Diagon – le respondió esta sonriendo – el señor que me atendió me aseguró que tiene trampas anti-doxys.- parecía muy satisfecha con su compra, se acercó a Ginny sorteando astillas y trozos de madera del mueble roto y le dijo en tono confidencial – me ha dicho mi padre, que habrá una plaga de doxys en Londres esta primavera. Ahora mismo vienen de camino con las corrientes de aire del Nairobi, en España están asfixiadísimos.
Ginny se mordió el labio impaciente. Con el tiempo se había acostumbrado a las excentricidades de Luna, pero últimamente la sacaban un poco que quicio. En concreto, desde que estaba embarazada.
¿Pero porqué has comprado un mueble cama?? – volvió a inquirirle evitando a propósito mencionar el tema de las plagas y las doxys, cuestión que seguramente jamás llegara a comprender, por mucho que Luna tratara de explicarle.
Pues para el bebé.
Pero, cariño, el bebé ya tiene su propia habitación. ¡Y una cuna!
No es seguro
¡Qué no es seguro! – Ginny se llevó una mano a la frente. ¡Qué desesperación!
Claro, por la plaga... – para Luna todo tenía mucho sentido, y en esos términos se expresaba – Me voy corriendo a la redacción – le dio un beso apresurado en los labios – tenemos mucho trabajo pendiente, hay que hacer un reportaje sobre las doxys, hay que prevenir a los ciudadanos...
Luna se marcho y Ginny sacó la varita para limpiar todo el desorden que había dejado la rubia tras de sí. Gracias a Merlín que era una bruja, jamás podría haber dejado todo aquello limpio tan rápido.
Fue hasta el vestíbulo, cogió el listín telefónico y marcó un número.
¿Hola?, sí, ¿tienen ustedes algún mueble cama con... eeh... con trampas para doxys? – Bien, muchas gracias. 16 Brent Hunter, East Dulwich. Muchas gracias.
Se lo dijo su madre, se lo dijeron todos sus amigos, Hermione pudo quedarse afónica repitiéndoselo: Luna Lovegood no es tu mejor opción. Es despistada, loca, impredecible. Pero Ginny no era capaz de concebir su vida sin ella.
