Sólo la introducción, ojalá les guste ;)

Capítulo Uno:

Todo se encontraba pacíficamente silencioso aquella noche en la Mansión Queen; prueba de ello era el muchacho pelirrojo que dormía tumbado en el sofá.

Se había dicho a sí mismo que tan sólo sería una siesta de cinco minutos… Obviamente su cansado cuerpo había decidido lo contrario, así que para entonces había estado durmiendo aproximadamente cuatro horas ya.

No es como si no lo mereciera, de todos modos. Había tenido una semana bastante pesada; entrenamiento todas las tardes, misiones en las tardes casi noche, patrullar tarde cada noche. Para colmo de todo lo anterior, la semana estuvo llena de exámenes. Los profesores de la escuela habían decidido asignar tareas, trabajos y proyectos como locos. Por suerte, había sobrevivido a todo eso. Sí, definitivamente se merecía un descanso atrasado.

Después de todo eso, estaba cansado como el infierno y el sofá era simplemente tan suave. Tan pronto como llegó a casa, arrojó su mochila en el recibidor para posteriormente dirigirse a la primera superficie parecida a un colchón que pudo encontrar- la cual resultó ser el sofá de la sala de estar- y colapsó en ésta.

Tristemente para él, no pudo disfrutar por mucho tiempo de su efímero momento de descanso. Bueno, no tan tristemente para la sonriente chica rubia escondida detrás del sofá. Sonriendo malévolamente, se llevó un silbato verde a los labios y sopló como si de ello dependiese su vida.

-¡AH! ¡¿QUÉ DEM…- gritó Roy con pánico, saltando al piso en posición de combate… hasta que escuchó la risa de la malvada creatura que lo había despertado. Eso si se puede describir como "malvada creatura" a una adolescente que ama la arquería y pasar las noches salvando vidas.

Incluso con toda la ira que sentía, se relajó un poco al reconocer el familiar sonido. Al menos no se trataba de algún criminal o sociópata… o criminal sociópata, en todo caso, que hubiese entrado a la casa.

-Debiste haber visto la expresión en tu rostro- finalmente habló, saliendo de su escondite. Por fin había dejado de reír, pero una enorme sonrisa aun adornaba su rostro.

-¿Qué haces aquí?- le preguntó el arquero de mayor edad, enderezándose y tratando de no sonar tan mordaz. Estúpidamente le había prometido a Dinah y a Ollie que trataría de llevarse mejor con la chica.

En circunstancias distintas jamás hubiera cedido a tal cosa, pero parecía ser que Paula Nguyen y Oliver habían decidido compartir la custodia de Artemis. ¿Cómo fue que legalmente lograron eso? Quién sabe, quizás los millones de dólars en la cuenta bancaria de Olivr habían tenido algo que ver.

De todos modos, al parecer Artemis y él pasarían mucho tiempo juntos de ahora en adelante, lo cual llevó a los adultos a pensar que lo mejor para ellos sería que se llevaran bien.

Por supuesto, era más sencillo decir que hacer…

Al escuchar la pregunta, la sonrisa de la joven se desvaneció un poco, pero se las arregló para mantenerla allí.

-Mi mamá va a visitar a algunos familiares en su país… así que pasaré el Día de Acción de Gracias aquí- respondió, diciendo la última parte con una divertida y malvada sonrisa.

Eso era todo; Adiós paz.