NO ES CUESTIÓN DE EDADES

1,- PROPOSICIÓN

DIA 1. SOLEADO, TEMPERATURA 19 GRADOS, HUMEDAD 62%

Di un largo y resonante suspiro, tan alto que podría haberlo escuchado alguien que estuviera fuera de mi habitación. Recostado en mi cama, con los brazos soportando el peso de mi cabeza, me preguntaba el ¿Por qué? De que, plenamente vestido con el uniforme del colegio, siendo tarde para la escuela, seguía aquí tirado mirando hacia el techo, ¡por Dios! Si hasta mi cuarto esta perfectamente arreglado. Ante este ultimo pensamiento mis ojos dieron un recorrido por los objetos de mi habitación, huh.

Me pare ya que no soportaba dejar escapar mi vida tan fácilmente sin hacer nada, prendí la PC, y mientras esperaba el inicio mire por la ventana de nueva cuenta, y por undécima vez en menos de una hora verifique en mi reloj despertador, ya solo faltaba media hora para clase, y necesitaba por lo menos quince minutos para llegar a la escuela. Ciertamente mi desesperación crecía en proporción de la posición de las manecillas del reloj.

El computador inmediatamente después de entrar en actividad, inicio la sesión del Messenger automáticamente, bueno, si tenia duda de que hacer con mis escasos minutos, chatear era una buena forma de pasar el rato. Solo tenia un contacto conectado, le di doble clic para iniciar una conversación.

Hola…. Como amaneciste…-

Mn….supongo que bien..

El asunto era claro, note como mi contacto dudaba al responder, después de su pregunta "¿Estas enfermo? O acaso ¿no vas a tener clases" Me di cuenta que tenia absolutamente toda la razón, y además note su preocupación, debería por lo menos estar en camino al instituto.

Timbre. Sentí como si me lanzaran un salvavidas después de estar ahogándome, y solo faltaban quince minutos para la clase. Solo me despedí de mi conocido e incluso deje la computadora prendida para después tomar mi mochila y salir despedido a lo mas que daban mis pies.

Instantes después, entre jadeos de cansancio pregunte el motivo de la tardanza.

"No fue mi culpa" Si claro, trato de disculparse con una sencillita "Sabes que tengo que encaminar a Kohaku a la secundaria"

"Ok, eso lo se, pero no inventes, ¿que no se puede ir solo?" eso lo lance casi como un bufido.

"Pero también sabes que mi padre me obliga a acompañarlo ¿verdad?" Mn… claro que sabia, es mas, ella sabia que yo sabia…por eso la directa y además iba a empezar de nuevo con lo de… "Además, tu también te puedes ir solo al instituto, ¿o me equivoco?"Como un eco perfecto de mi pensamiento soltó la misma frase.

"Sabes mis motivos, eh Sango" Le recrimine.

"Por favor, incluso podrías irte con tu hermano."

"Jakotsu es un tardado, de segurito ahora mismo esta viendo entrar a los chicos de la escuela privada. Seria incluso peor irme con él."

"Tu eres el que debería reflexionar Bankotsu, a poco solo por…."

No puse mas atención, estaba lo suficientemente concentrado en correr como para que ella desistiera de hacerme un análisis psicológico.

¿Es necesario mencionar que llegue tarde? Supongo que el retrasarte por causa ajena es más desesperante, pero tome con filosofía el cargo extra de ayudar a limpiar el salón a la salida. Así cuando terminaron las clases, y termine con lo referente a mi amonestación, me sentí tranquilo con que todos los estudiantes probablemente ya estarían en sus casas. Lo que si tenía era bastante hambre.

"De seguro Suikotsu se termino de paso mi porción"

El tener un hermano mayor claro que tenía sus desventajas, una de esas es el tener que mantener mi plato a por lo menos dos metros de distancia, pero lógicamente en mi ausencia el efecto de esa prevención era equivalente a cero.

Como plan alternativo pase a comprar unos emparedados al mini súper que estaba al desviar solo un poco mi camino de siempre. Fui a las estanterías del fondo y tome tres paquetes. Cuando me dirigí a pagar me encontré con un hecho curioso.

"Gracias" Dijo la chica al recibir el cambio, lo que llamo mi atención fue, que estaba tratando de equilibrar entre sus menudos brazos el peso de dos bolsas que ni siquiera le dejaban ver el camino con claridad.

Mi turno de pagar fue directamente después, así que solo solté un billete en manos de la dependienta.

"Quédese con el cambio."

No podía dejar de mirar a la joven que acababa de salir, a juzgar por su apariencia tendría alrededor de unos once años, pero aun así no había nadie fuera esperando para recibirle las bolsas, me indigne un poco, ¿que personas tan poco consideradas la mandarían a ella sola? En medio de mis cavilaciones vi el trastabilleo de la pequeña y su posterior caída. Si hasta ese momento no había intervenido, esa escena definitivamente me llamaba a ser acto de presencia. Rápidamente tome a la pequeña del codo y la posicione en vertical para después ponerme a recoger sus víveres poniéndolos de nuevo en las bolsas.

Cuando alcé la vista para entregarlas, fue que la aprecie en totalidad, se podría decir que era una niña aun, tenia sus ojos fijos en mi cara, eran oscuros y por alguna razón se me hicieron tristes, aunque su cara no mostraba ninguna emoción, tan estáticos, como sus cabellos plateados que le llegaban hasta los hombros.

Le entregue solo una de las bolsas.

"¿Te enviaron a ti sola a comprar todo esto?"

"Si"

Solo esa respuesta monosilábica llego a mis oídos y algo dentro de mí se removió, supongo que soy una buena persona después de todo.

"¿Me dejas ayudarte con esta bolsa? Parece que necesitas una mano."

"Si a ti te parece bien…"

Empezó a caminar silenciosamente, y yo me uní a su paso. A decir verdad no soy una persona que disfrute mucho del silencio, haciéndoseme mas bien incomodo, y que mas que por lo menos saber algo de la desconocida con la me encontraba caminando.

"Em…y ¿como te llamas? De mi parte, mi nombre es Bankotsu, puedes decirme Ban si así lo deseas, om… o como quieras."

¿Por que siempre al hablar termino diciendo frases tan estúpidas? Sinceramente no soy la mejor persona iniciando conversaciones con extraños, así que trate te apaciguar el terreno con una sonrisa al final de mi tonto intento de presentación.

"Mi nombre es Kanna."

Conciso, demasiado conciso, de echo no daba de su parte para seguir con la conversación, así que mi mente trato de maquilar otra pregunta.

"Oh bueno, Kanna, ¿cuantos años tienes? Yo tengo dieciséis y voy en la preparatoria que esta a pocas cuadras de aquí"

"Tengo doce años"

¿Era mi imaginación o realmente se me estaba haciendo difícil iniciar una verdadera conversación con una chica de doce años? Además de que estúpidamente yo mismo respondía a mis preguntas, ¿que acaso la pequeña en serio no sentía ni un poco de curiosidad por la identidad del amable joven que le ayudaba con su bolsa? Lógicamente modestia aparte, pero la situación me empezaba a frustrar.

"Entonces supongo que vas en…."

Claramente fui interrumpido.

"En la primaria distrital, en sexto año"

"Oh, ¿en serio?, entonces…em..mn….eh…¿tienes novio?

Demasiado tarde, no pensé la pregunta hasta después de haberla formulado así que resulto demasiado tonta para una chica de primaria, solo esperaba la reclamación "¿Por quien me tomas?" de la pequeña. He de repetir que no soy muy bueno iniciando conversaciones con desconocidos, y pensaras que sin duda son un tonto. Mucho gusto, soy un tonto.

"¿Novio? ¿Como definirías a un novio?"

Cuando me di cuenta ya nos habíamos detenido y Kanna me veía con esos ojos suyos, francamente me intimidaba un poco, ¿quería que le describiera un novio? A mi experiencia personal, yo nunca había sido puesto en ese titulo y con mi heterosexualidad como prueba puedo asegurar que nunca he tenido uno, pero a pesar de todo trate de darme a explicar lo mejor posible.

"Em…veras.." Mi cara ya debería de tener un tono rojizo en estos momentos. "Un novio es…em…como…eh…como un amigo…con el que gusta pasar tiempo, y que…em…que te quiere mucho y tu a él…y…"

Lo mejor posible, si como no. De nuevo fui interrumpido, pero esta vez fue un gran respiro para mí.

"Ni siquiera tengo amigos."

Supongo que eso anulaba la posibilidad de que dijera simplemente, "Oh si, mi novio de hecho viene para acá y va a romperte la cara por hacerme preguntas tan idiotas." Y entonces con un poco de retraso llego el análisis de su respuesta, si entendí bien, me estaba aclarando que si no tenia amigos, eso le hacia prácticamente imposible tener un novio, bueno, con referencia a mi poco clara explicación de lo que era uno.

"¿Cómo que no tienes amigos? Hazte memoria, ¿ni uno siquiera?"

"Ni uno"

Esta última me pareció aun mas concisa que cualquiera de sus respuestas anteriores, pero a la vez me pareció muy triste, aunque su carita no mostraba pena por su respuesta, sentí la ferviente necesidad de hacer algo al respecto.

"Claro que tienes amigos."

"Ya te dije, no tengo."

"Si tienes."

"Que no."

"¡Que si!"

"¡Que no!...¿por que me estas contradiciendo?"

Su frente se arrugo un poco, al parecer trataba con todos sus esfuerzos de entender mi argumento. ¿Cómo era posible que su cara de enojada fuera tan mona? Parecía incluso más pequeña con ese ceño fruncido.

"Fácil….si te parece bien, yo tengo deseos de ser tu amigo."

"Te acabo de conocer."

Empezaba a comprender por que no tenia amigos, no era muy sociable que digamos ¿verdad? ¿Que mas podría hacer que ofrecerle mi amistad? Su reacción me decía que mas bien no comprendía como yo, en el estatus de "extraño" podría querer ser su amigo. Internamente rezaba con que no confundiera mis buenas intenciones y me clasificara como pervertido.

"¿Y eso que? No es necesario conocerse un determinado tiempo para hacerse amigos, y yo quiero ser tu amigo."

Vi la cara de extrañeza que hizo, ¿de verdad era tan asombroso que le pidiera ser mi amiga?

"Si quieres ser mi amigo esta bien, pero de verdad ¿quieres ser amigo de una chica tan tonta y fea?"

Creo que en serio pesaba eso de ella misma, ¡¿pero como era posible? Si de los dos la que parecía más coherente en su forma de hablar ¡era ella! Así que lo de tonta quedaba descartado, y sobre lo de fea. Hasta el momento no me había puesto a mirarla tan detalladamente, y entre los estándares de belleza actual seria una equivocación no catalogarla como guapa, aun claro siendo una chica de primaria. Me dio la impresión de que estaba tan convencida que intentaba hacerme cambiar de opinión.

"Tonta y fea, ¡si como no!"No pude evitar reírme. "Por el tiempo que llevamos platicando me he dado cuenta que no eres tonta, y sobre lo otro…déjame decirte que eres muy bonita."

"Bonita… ¿yo?"

La expresión de sorpresa era real, muy real. ¿Qué en su casa no tenían espejos o que? Su incredulidad incluso me paso a dar risa, de verdad que si.

"Bueno, bonita no…eres linda, muy, muy linda. Hermosa."

Como para darle mas credibilidad a mis palabras la ultima de mi anterior frase, fue con mucha seriedad.

"Aunque…si es cierto lo que dices..." ¿Qué estaba pensando esa cabeza? "Lo que supongo es que no es suficiente ser linda e inteligente, eso no me va a dar amigos, y mucho menos un novio. Creo que estoy defectuosa o algo parecido."

¡Ahora hasta defectuosa! No, definitivamente algo andaba mal aquí, ni siquiera yo tenía un pensamiento tan malo sobre mi mismo, pero la pregunta era ¿como hacer para hacerle cambiar de opinión?

"Tu no estas defectuosa, mn…oye…entonces, debo suponer que no tienes novio ¿verdad?"

"No tengo"

Simplemente, me sentía el más idiota del mundo por lo que estaba a punto de decir, de verdad mis neuronas son muy perezosas como para buscar una mejor solución.

"Entonces…te gustaría…em…digo… ¿ser mi novia?

CONTINUED….