novela adapada;) ( GRACIAS NATALIE) NOS LEEMOS ABAJO :D


Las maletas sonaron contra el suelo con fuerza. Cargaban mucho peso y el golpe alertó a unos pájaros de un árbol cercano. La casa estaba igual que hacía 4 meses cuando la dejamos y eso era lo peor. La casa fingía que nada había pasado pero sí. Ya no era lo mismo. Cerré los ojos un segundo y dejé que la pena me invadiera pero solo deje salir una lágrima de mis ojos que bajó lentamente hasta perderse en mi cuello. Me limpié la cara con la manga y sentí como mi hermano Logan y mi prima Wendy casi me habían alcanzado. Logan es mi hermano pequeño. Tiene solo quince años pero es más alto que yo, tiene el pelo sido mi compañero y cómplice en muchas ocasiones. Wendy estaba a su lado, ella tenía mi misma estatura y tenía veinticinco años. Llevaba el pelo pelirrojo claro atado en un moño en la cabeza. Wendy había pasado de ser desde mi niñera hasta la chica mayor que me colaba en las fiestas, ahora mi tutora. No les miré la cara pero supongo que tuvieron la misma reacción que yo. Pasados 2 segundos Wendy se puso en marcha:
- Vamos hay mucho que hacer, ya habéis perdido casi dos meses de clase y eso hay que recuperarlo.
Fingimos que el dolor había acabado y nos pusimos en marcha. Era más fácil así. Mi nombre es Sam, tengo dieciseis años y acabo de sufrir la pérdida de mis padres. Tengo el pelo rubio y soy un poco baja. Mis ojos son azules aunque algunas veces se ven verdes. He estado estos cuatro meses en la casa de mi abuela hasta que se celebró el juicio que lo dio nuestra custodia a mi prima, nuestro familiar más cercano y disponible.
Subí con energía la maleta a mi cuarto y empecé a deshacerla y a colocarla cuidadosamente en el armario. Cuándo acabe me puse a reflexionar. Que fácil era mi vida antes del accidente y no supe darme cuenta hasta ahora. Tenía unas amigas que siempre estaban allí aunque tan solo podía contar con unas pocas, las otras se arrastraban delante mío solo por interés. Fui reina del baile de fin de curso desde los trece años superando a chicas mucho más mayores y guapas que yo. Mis notas eran muy buenas y no tenía ninguna falta en mi expediente, nunca conseguí que me pillaran cuando me saltaba las reglas del colegio excepto en una ocasión en la que salí airosa porque una chica mintió y reconoció que fue ella solo para busca mi aprobación. Podría haber conseguido al chico de las escuela que quisiera excepto uno que era el único que importaba. Se llama Freddie aunque sus mejores amigos le llaman Fred. Para él yo era otra animadora más con la que se iba de fiesta cada viernes. Tal vez fuera el reto lo que me atrajo pero seguro que había algo más. Las 90 chicas que estamos en el instituto no podemos estar todas equivocadas. El no buscaba una chica en concreto, no quería una relación. Él había tenido ya algo con todas las animadoras excepto yo, lo que por un tiempo me hizo sentir mal, luego me explicó la verdadera razón. Estábamos sentados en clase y la noche anterior le habíamos visto enrollándose con la nueva animadora del equipo, Carmen, así que aproveché y saqué el tema siempre todo de broma:
- ¿Te divertiste ayer con la nueva?
Él rió y respondió
- No estuvo mal pero le faltaba algo.- Yo me reí con él y respondí:
- Si tiene problemas en los entrenamientos. Le falta flexibilidad.- esto último lo dije con maldad: -¿Vas a liarte con todo el equipo?
- Con todo el equipo no. A ti te tengo respeto. Aunque no estás nada mal, rubia.- Reí, era un broma que me reconfortó mucho. Él siguió hablando:
- Además tu en esto tienes que entenderme. Cada vez te pareces más a mí.
Eso era verdad, antes de la muerte de mis padre estaba tan insatisfecha por los rechazos de Fred que me refugiaba en chicos que eran casi tan guapos que él y mucho más cariñosos. Se enamoraron de mí me hacían regalos y me enviaban mensajes deseándome las buenas noches. Pero para mí era un juego, conseguir enamorarlos, forzarlos al máximo y cuando ya me habían dado todo su cariño buscaba otro chico. Se trataba se un juego del que ahora me arrepiento.
La prima Wendy llamó mi puerta, y asomó la cabeza después dijo con un pequeña sonrisa:
- Sam, Gibby está abajo. Ha venido a ponerte al día con lo que han dado en clase tus compañeros.
Gibby. Ese era un tema aparte. Gibby era uno de los chicos con el estuve solo unas semanas para luego dejarle, pero él fue el único que me dejó marca. Me hacía reír y era muy cercano, como si fuera mi protector. Era guapo aunque no tenía nada realmente especial. Pero yo no le quería y mentirle a él me mataba. Si no hubiera sido por eso yo habría seguido estando con él solo por no hacerle sufrir. Cuando lo nuestro terminó busqué a toda costa ser su amiga, su mejor amiga aunque sus sentimientos hacía mí no habían cambiado, y yo lo sabía. Y así llevamos un año hasta el día en que todo cambió, en el que yo abrumada por la pena le grité que no le quería más en mi vida y estuve durante semanas arrepintiéndome hasta que decidí llamarle para disculparme y todo se arregló.
Bajé las escaleras y abrí la puerta despacio para llevarme una sorpresa. Gibby estaba más alto y más guapo que nunca, aunque el golpe en mi corazón llegó cuando vi a una pequeña figura morena detrás de él. Gibby me dio un abrazó y comenzó con las presentaciones:
- ¡Sam! ¿Qué tal estás? Que largo llevas el pelo, te presentó a mi novia, Ana. Nos conocimos en verano.- Después la miró a ella y siguió: Ana, esta es Sam, una amiga.
Ana tenía un rostro infantil y dulce y parecía la novia perfecta para Gibby pero había algo que no me gustaba. Mis sentimientos hacía Gibby no habían cambiado pero no quería que ninguna manipuladora con cara inocente le haga daño. Sonreí y les invité a entrar. Mientras Gibby me contaba con todo lo que habían estado estudiando este semestre, Ana estaba sentada en una silla en una esquina de mi habitación y no habría la boca.
Esa noche, antes de irme a dormir recibí un mensaje en el móvil. Era de Freddie y tarde unos minutos en reaccionar tras leer lo que ponía:
Rubia, te acuerdas de la conversación que tuvimos hace ya un tiempo sobre las animadores con las que me había liado. Pues he estado pensando que tu podrías ser mi animadora personal. ¿Qué me dices responde? Te quiero.
Apenas puede teclear el mensaje de la emoción:
Ha ha claro. ¿Sabes? Tú y yo pegamos. Yo también te quiero.
¿Qué estaba pasando? Él chico que di por perdido y que sabía que jamás podría conseguir de repente me pide salir, y el que podría haber conseguido en cualquier momento ahora se convertía en el inalcanzable. ¿Qué mundo es este? ¿Podían intercambiar mentes el chico que me quería demasiado y el que no lo suficiente? Este iba a ser un año muy especial.


Recibi muuchos reviews en mi otro fic{Drake&Josh en iCarly} Diciendo que cuando lo continuaba por que dije que lo hacia el 15/16 de Febrero...No va a poder ser,porque...se me a formateado la compu:/ tenia escritos 20 capitulos :( ! Y bueno intentare escribirlos de nuevo,de mientras espero que os guste la novela Corazon de oro de Natalie { h t t p : / / corazon de oro -natalie b .blog spot . com Sin espacios por favor } Bye:D