La oscuridad que cayó del cielo.
El salía de la universidad, le había invitado ir a una fiesta esa noche, pero el rechazo la oferta, ya que necesitaba estudiar para una prueba de fin de semestre y esa noche sería definitiva para su plan, pero él no estudiaría, ni habría ninguna prueba que estudiar, ya que al mirar al cielo observo algo que le paralizo su rostro, al igual que a todos los ciudadanos de esa ciudad.
— ¿Qué rayos es eso?—una joven, miraba al cielo.
Del cielo cayeron unas extrañas masas negras, que cayeron al suelo, esas cosas, eran criaturas negras, con forma de animal, pero mucho más grotesco que esos seres vivos, mucho más gigantes y con una furia incontrolable y ganas de matar a seres humanos y así empezó la destrucción de la tierra.
13 de diciembre del 2017
Escribo este diario, para las generaciones que vienen después de mí, mi nombre es Alexander Santana, mis conocidos me llaman Alex, bueno me llamaba, ya que parece que todos están muertos. Todo empezó la semana pasada, esas extrañas criaturas que venían de otro mundo, acabaron con muchas vidas humanas y destruyeron la ciudad tuve la suerte de escapar y esconderme en el subterráneo con otras personas, trate de llamar a mi familia, pero no contestaba, talvez sucedió algo con los celulares, corte de línea o algo así o murieron a causa de estas criaturas.
20 de diciembre del 2017.
El ejecito vino acabar con esta criatura, pero acabaron muertos, por eso el gobierno, mejor dichos la ONU o todos los gobiernos, decidieron acabar con esas criaturas con bombas nucleares, dispararon a cada lugar infestado con estas criaturas, pero tuvo mínimo efecto, según unos de los sobrevivientes que era experto en la radiación, estas criaturas pudieron sobrevivir gracias, a que absorbieron de alguna forma la radiación y se volvieron mucho más fuertes y peligrosos, realmente me da miedo ir hacia el exterior.
27 de diciembre del 2017.
Es obvio que debemos aventurarnos hacía el exterior, para buscar comida o algo que nos ayude a sobrevivir, pero por ahora tenemos lo suficiente, temo que la raciones se acabe.
29 de diciembre del 2017.
Salimos a la superficie, el experto en radiación llevaba una máquina para detectar cual fuerte podía ser esta, pero sorprendentemente el temor, se disipo cuando supimos que no había ningún peligro, tal parece que el doctor tenía razón, así que no dispusimos a caminar con armas de fuego, escopetas, que pudimos encontrar, nos escondimos muy bien de esas criaturas, hasta que uno nos encontró, disparamos, disparamos, pero no sucedió nada, huimos de ese ser protegiendo nuestras raciones, pudimos escapar, pero dos de nuestro grupos murieron.
30 de diciembre del 2017
Solo queda un día para año nuevo, pero no creo que tenga ánimo para celebrar, aunque algunos padres, entusiasma a sus hijos con la idea, admito que envidio a esa familia, son muy optimista o solo quiere alejar a sus hijos de una cruel realidad, aunque nunca he sido optimista con el futuro.
1 de enero del año 2067
Han pasado 50 años, desde que esas criaturas a la cuales se le han puesto el nombre de mareas negras, por su color y su numeró, que parece un mar. Los seres humanos han desarrollado forma de luchar contra esas criaturas y han adiestrado a otras generaciones, como la mía, mi nombre es Hope Shield Red, nombre raro pero me gusta, tengo 17 años y soy una recluta de la fuerza de expedición y defensa, nosotros nos encargamos de defender el subterráneo y también de defender a los exploradores de las mareas negras, seguimos las órdenes del gran Maestre general Santana y este es el día que me dejaran salir al exterior, obvio con la supervisión del maestre Santana.
El maestre Santana, era un hombre que aparentaba menos edad de la que tenía, piel morena, de cuerpo ancho y musculoso, pelirrojo de largo que le llegaba hasta los hombros, barba larga como la de un chivo que le llegaba hasta el cuello, bigote al estilo Dalí, tenía un ojo ciego con una marca de una garra y el otro de color negro, vestía con unos pantalones negros, una camisa blanca, una gabardina verde y larga, zapatos negros, unos guantes blancos y unos lentes de sol. Santana, estaba sentado en un vehículo militar esperando a los novatos con los cuales iban ir en esa expedición, miraba con impaciencia el reloj fr bolsillo de color plateado.
—Gran maestre, disculpe el retraso—Una joven de cuerpo delgado y curvilíneo, piel blanca y tersa, ojos verdes oscuro, pelo negro que le llegaba hasta la barbilla y tapaba sus orejas, era un poco más alta que las jóvenes de su edad, vestida de un pantalón verde, una camisa blanca, zapatos negros, y una gabardina azul, que representaba que ella era una novata. La joven, hizo el gesto de saludo militar—Hope Shield, para servirle mi señor.
—Me dijeron que iba a venir cuatro—Santana, observo a la joven.
—Disculpe mi general, mis compañeros decidieron que era mejor ir con otro general—Hope, mantuvo su formalidad militar.
Santana, suspiro y encendió su vehículo, ordeno a la joven Shield, que subiese al auto, y cuando la chica, hizo lo que le ordeno el general, partieron.
En lugar más bien en otro mundo, se estaba celebrando un torneo, en el cual participaba los cazadores novatos de los reinos del mundo de Remnant. Tres grupos, conversaban de lo bien que le había ido en sus respectivos combate.
—Estuvieron genial—una joven de pelo negro y vestida con una capucha, le dijo a los dos único presente del equipo SSSN.
—Jaja, si fue muy fácil vencerlas—Presumió un joven de pelo azul
—Claro, Neptune— comento en forma sarcástica un chico de pelo rubio y una cola de mono y agrego—Según me acuerdo, tú te acobardaste un poco por el agua.
El chico que respondía con el nombre de Neptune, observo a su amigo un poco molesto y le balbuceo unas palabras en el oído.
—Bueno ahora que lo pienso, y espero que no te moleste Neptune, fuiste menos valiente que Jaune—Una joven de pelo anaranjado perteneciente al grupo JNPR, le comento al chico.
—Ho gracias—Neptune, dijo con algo de molestia.
—O vamos, fue genial como vencieron al otro grupo—una joven de pelo blanco y vestida totalmente del mismo color, defendió a Neptune.
Una chica de pelo amarillo, observo a la chica con una cara de "Lo está defendiendo, solo porque te gusta".
—No es eso—La pelo blanco se sonrojo por la cara que le puso la rubia
—Puedo unirme a su grata conversación—Otra chica de pelo Naranja—Tuve que escabullirme, para venir a pasar el rato con ustedes.
—Claro Penny—la chica de la capucha, le contesto a su amiga.
La chica de pelo naranjo, agradeció a su amiga con un efusivo y fuerte abrazo, que casi la dejo sin aliento y después reanudaron su conversación, pero no se había dado cuenta que algo pasaba en los cielos, un eclipse de sol, se estaba gestando, algo raro incluso en ese mundo, cuando los tres grupos, se dieron cuenta d elo que sucedía, un torbellino salió de la nada y se tragó a los chicos.
El general Alexander y Hope, estaba haciendo el recorrido por la ciudad, había matado a varias mareas negras, que se había cruzado por el camino gracia a la metralleta que llevaba el 4x4 militar y que la joven Hope, por órdenes del general utilizaba para tal tarea, entonces la joven Hope, vio algo desde el asiento de la artillería.
—Mi general, el sol está siendo consumido por algo negro—se sorprendió la chica.
—Verdad, nunca ha visto uno—Alexander, observo el sol—Eso es un eclipse solar, sucede cuando la luna coincide con el sol cuando este esta iluminando esta parte del globo, aunque lo conocíamos bien, no era muy común ver uno en mi época.
—Ya veo, pero… ¿el torbellino que sale de este eclipse es común?—Hope, aún conservaba su cara de sorpresa.
Alexander, al escuchar sobre un torbellino observo el sol y se dio cuenta de este suceso, así que paro el vehículo, tomo su binoculares y observo atreves de ellos. El general, se dio cuenta de que adentro de aquel extraño torbellino, había unas personas.
—Hay personas en peligro—Ascendió de nuevo el vehículo—Novata, cúbreme la retaguardia.
—Claro, mi general—Hope, hizo la señal militar.
El grupo RWBY, JNPR Y los dos miembros del grupo SSSN, estaba tendido el asfalto.
—Están todos bien—la chica de la capucha, se levantó lentamente
—Si Ruby, pero lo que sucedió si fue extraño—La pelo rubio se levantó y observo a sus compañeras, la chica de pelo blanco y otra chica, que tenía el pelo negro— ¿Weiss, Blake, están viva?
—Claro que si—Weiss, la chica de pelo blanco, se puso de rodilla y se tocó la cabeza— Espero que la caída, no me haya provocado algún moretón en mi cabeza.
Black, la chica de pelo negro, ya estaba levantada y miro el lugar.
—chica, parece que no estamos en la feria—Blake, se sorprendió del lugar donde estaban, parecía una ciudad abandonada y destruida.
—Si tienes razón—una joven pelirroja y vestida con una armadura, se acercó a Blake—Y según veo, no parece que estuviésemos en Vale o incluso en nuestro mundo.
Entonces los chicos, escucharon el ruido de un vehículo de cuatro ruedas, y miraron hacia dónde provenía el sonido, era un 4x4 de color verde, manejado por un tipo pelirrojo y por una chica de pelo negro, cuando el vehículo paro frente a los chicos, el hombre que era mayor, los observo.
— ¿He que hacen en este lugar?—el sujeto, le pregunto a los chicos y agrego—Por lo visto no soy de la guarida, así ¿qué de donde son?
