¡Hola!... estoy de regreso con un nuevo fic KakaSaku. Esta pareja me gusta muchísimo y no pude evitar escribir una nueva historia de ellos, un poco más larga que la anterior. Ojalá les guste, no es la gran cosa, pero estoy esforzándome para entregarles algo que sea de su agrado.
Pues bien, dicho todo esto, les invito a leer el primer capítulo.
En el preciso instante que él volvió a la aldea, supo que su vida feliz y tranquila había terminado, pues era de su conocimiento la razón por la que había regresado… la verdad no entendía como se atrevía a hacerlo aún cuando un par de años atrás había intentado destruirla. Sin duda alguna había que agradecer a Kami-sama que sus planes fueron frustrados por Naruto, quien ayudado por el poder que Itachi le había otorgado tiempo atrás, se vio fortalecido en la batalla.
La pelea entre esos dos había sido dura, pero el rubio, que ahora ocupaba el puesto de Hokage, se había impuesto con determinación por amor a su aldea y el resto de sus amigos… su rival aceptó su derrota dignamente y cuando fue cuestionado acerca de si quería volver a la villa, dijo que lo haría, pero que aún no era el momento… argumentó que tenía demasiadas cosas que pensar y mucho dolor y rencor del que debía deshacerse. Nadie se opuso a su decisión, esta vez nadie intentó detenerle… Ni Naruto, ni Kakashi y mucho menos Sakura.
Tanto tiempo había pasado junto a su equipo buscándolo sólo porque era uno de sus queridos alumnos, y cuando dijo que no se quedaba en Konoha, sintió un alivio insospechado… en cierto modo era feliz porque él había decidido irse de nueva cuenta, una leve esperanza en su interior le decía que a lo mejor no regresaba nunca y que entonces su vida jamás se vería alterada por su presencia. El amor que tenía hacia cierta persona, provocaba que tuviera esa clase de sentimientos y de pensamientos.
Ahora que lo veía cruzando las puertas de la Aldea de la hoja, quería morir, quería gritarle que se fuera, que él ya no tenía cabida en ese lugar ni en las vidas de los que antes habían sido sus amigos… su familia.
Ya todos tenían una vida formada y él simplemente no encajaba, nada tenía que hacer en Konoha. Naruto, por ejemplo, después de la pelea que había sostenido con él, tuvo el maravilloso honor de ser nombrado Rokudaime y además llevaba 1 año casado con la dulce Hinata, quien ahora estaba a la espera de su primer hijo, tenía 6 meses de embarazo y lucía un vientre sumamente abultado; aún no sabían el sexo del bebé porque los futuros padres deseaban que fuera una sorpresa.
Y él, bueno… él y Sakura… ellos, por extraño que pudiera llegar a parecer, tenían una vida juntos; hacía poco más de año y medio que se habían casado y tenían un precioso par de gemelitos que eran el vivo retrato suyo, pero como particularidad, poseían los mismos ojos verde esmeralda de su madre. Los chibis tenían 8 meses de nacidos y ya se les veía la madera de prodigios, "tienen a quien salir"… decía él constantemente y la pelirrosa siempre le regalaba una hermosa sonrisa, se notaba el intenso amor que Kakashi le tenía a sus pequeños.
A pesar de la bella vida que llevaban juntos, el ninja copia temía que al volver Sasuke, viejos sentimientos se removieran en el interior de su esposa… le daba terror que él pudiera hacerla caer en sus redes, pues a eso había vuelto… quería hacer resurgir a su clan y Kakashi estaba completamente seguro de que su candidata para llevar a cabo tal plan, era nada más y nada menos que Sakura Haruno, quien después de su boda había pasado a ser Sakura Hatake.
-Hola Kakashi-. Saludó el último Uchiha a su ex maestro. No había ni una pizca de emoción en su voz, ni siquiera el tiempo pudo cambiar su acostumbrada frialdad.
-Sasuke… ¿así que después de todo si decidiste volver, ne?-. Le habló con recelo.
-Así es… por favor llévame con la Hokage-. Pidió con nula amabilidad.
-Querrás decir con el Hokage-. Le corrigió.
-Hum, ¿así que ya hay un nuevo "líder" en esta aldea?-. Dijo haciendo el ademán de las comillas con sus dedos, cuando pronunció la palabra líder, con la intención de restarle importancia al nuevo jefe de la villa.
-Así es y le debes respeto, de él depende que regreses o no a Konoha-. Le respondió con frialdad.
-Hum, veo que ya no te soy grato… sensei-. Habló con un tono que rayaba en la burla.
-…-. No hubo más que silencio de su parte.
-No dices nada… entonces llévame con tu adorado Hokage-. Dijo igual de "amable" que antes.
El trayecto no duró más de 15 minutos y en ese transcurso no se dirigieron la palabra ni una sola vez, Kakashi que era alguien reconocido por no ser visceral ni impulsivo, en ese momento estaba debatiéndose fuertemente entre darle una golpiza y cumplir con su deber como shinobi y llevar a Sasuke Uchiha delante del Hokage para que este determinara que debía hacerse con él, pero era tan difícil… segundo a segundo crecían sus ganas de masacrarlo y mandarlo bien lejos.
-"Calma Hatake, calma… el niñato engreído este todavía no ha dicho para que ha vuelto y si es para resurgir su famoso clan, pues no tiene que ser precisamente con Sakura… además, piensa que si ella era la candidata que tenía para llevar a efecto su plan, lo más seguro es que la descarte cuando sepa que es tu esposa… relájate, todo estará bien, Sakura te ama"-. Mentalmente intentaba tranquilizarse y entrar en razón, diciéndose a sí mismo que en realidad no tenía un motivo para preocuparse.
Ya en la torre hokage, el par de hombres era recibido por una Hinata bastante sorprendida a causa de la presencia el Uchiha.
-Ka… Kakashi-san, U… Uchiha-san-.
-Hola Hinata, ¿está Naruto?-. Preguntó el peligris muy educadamente.
-Sí, pa… pasen por favor-. Desde que la Hyuuga había empezado su relación amorosa con Naruto, no tartamudeaba, pero la impresión de ver a Sasuke de regreso, hizo que volviera a tomar esa costumbre infantil, que más bien parecía un tic que la atacaba cada vez que sus nervios se desbordaban.
El Hatake tocó la puerta antes de entrar y cuando escuchó que le permitían el paso, se introdujo en la habitación y tras él entró Sasuke, quien se quedó impactado al ver a la persona que actualmente ocupaba el puesto de hokage.
-Hola Kakashi-sensei… teme-. Naruto se encontraba de pie, mirando hacia la ventana y sin siquiera escuchar las voces de sus visitantes, supo al segundo de quienes se trataban.
-Hokage-sama, sólo vine a traer a Uchiha Sasuke, ¿necesitará de mis servicios?-. Preguntó el peligris, esperando recibir alguna indicación.
-No Kakashi- sensei y ya te dije que no te dirijas a mí con tanto respeto y formalidad… Rokudaime o no, sigo siendo el mismo Naruto que fue tu alumno. Entre nosotros hay confianza suficiente como para que me trates igual que siempre-. Dijo en tono sereno el joven rubio.
-Es cierto… bueno Naruto, con tu permiso, me retiro-. Se despidió el mayor.
-Sí, nos vemos sensei-.
Una vez que estuvieron a solas…
-Hum… Así que lo lograste, ¿no?... eres el hokage-. Comentó como si nada.
-Sí, ahora soy el Rokudaime, así que dime Sasuke… ¿has vuelto a Konoha para quedarte?-. Cuestionó tranquilamente.
-Ese es el plan, no me lo impedirás, ¿cierto?-. Preguntó muy confiado.
-No, por supuesto que no… a pesar de todo tú eres mi hermano, así te veo desde que éramos sólo unos chiquillos y no creo que eso cambie, además Konoha es tu hogar y no voy a oponerme a que regreses a tu casa, pero debes saber que muchas cosas han cambiado en la aldea y no sé si podrás adaptarte a las diferencias-. Sus palabras fueron honestas y salieron con suavidad de su boca.
-Hum, eso ya es cosa mía, sólo quería saber si no te oponías a ello-. Habló con su siempre marcada prepotencia.
-Necesito que me digas algunas cosas y decirte otras tantas-. Dijo cuando notó que el Uchiha se giraba para retirarse.
-Espero seas breve dobe-. Murmuró con una impaciencia impropia de él, parecía tener prisa por llegar a algún lugar o quizá por encontrar a alguien.
-No sé cuánto tiempo nos lleve esta charla, pero ten por seguro que de aquí no te mueves hasta que finalicemos-. Habló con firmeza que hasta cierto punto al Uchiha le pareció autoritarismo… su mejor amigo era un digno Hokage.
-Hum… habla-. Empleó cierto tono agresivo.
-Sasuke… tus planes, ¿siguen siendo los mismos?, es decir... ¿aún buscas reconstruir tu clan?-. Preguntó calmadamente, estaba seguro de la respuesta que obtendría, pero aún así quería escucharla de viva voz de su amigo.
-Sé que tú sabes la respuesta a eso-. Lo miró con reproche.
-Ajá, pero quiero que me lo digas tú-. Dijo mientras se sentaba en su silla.
-Esa es mi meta-. Contestó casi con indiferencia.
-¿Tienes alguna candidata?-. Se inclinó hacia adelante y sus ojos se clavaron en los de Sasuke.
-¿Te importa saberlo?-. Preguntó retador.
-Sí… es necesario que me lo digas, pues como te dije antes… muchas cosas han cambiado en Konoha y las personas y sus sentimientos no han sido la excepción-. Explicó y la madurez alcanzada se dejó notar.
-Es Sakura-. Respondió sin más.
-Creo que deberías dirigir tu vista hacia otra parte, Sakura-chan no es para ti-. Dijo con pesar.
-¿Por qué? ¿Acaso sigues amándola?-. Fue su turno de interrogar.
-No es por mí ue te digo esto, yo ya hice mi vida con alguien más… Hinata es mi esposa desde hace un año, ahora va a darme un hijo y la amo… lo que siento por ella es un amor real y no un enamoramiento infantil como el que sentía por Sakura-chan-. Confesó.
-Entonces… ¿por qué es?-. Comenzaba a irritarse.
-Sasuke, ella ya hizo su vida. Se casó, tiene un par de hijos preciosos, pero sobre todo… es inmensamente feliz-. Se notaba contento por su amiga.
-¿Qué…? ¿Quién fue el bastardo que se atrevió a tocarla? ¿Acaso fue mi copia barata?-. Sus ojos destellaban con furia, el sharingan se activó por sí solo, tiñendo de rojo la mirada del Uchiha.
-No, no puedo negar que Sai estuvo detrás de ella por mucho tiempo, pero no es él-.
-¿El fenómeno cejudo?-.
-Noup, Rock Lee conoció a una linda chica en una de sus misiones, se enamoró de ella perdidamente y ahora son novios-.
-¿Hyuuga?-. La conversación comenzaba a convertirse en el juego de adivina adivinador.
-Ah, ah… él está casado, sí, pero con Ten-Ten, su compañera de equipo-.
-¿Sabaku, Nara, Inuzuka, Aburame…? ¡Maldita sea dobe, dime quien es el desgraciado!-. Gritó completamente exasperado por no recibir la respuesta que buscaba.
-Ninguno de ellos… Sakura se casó con… Kakashi-sensei-.
Bueno, pues hasta aquí el primer capítulo, pronto colgaré la segunda parte, espero sus comentarios para ver que les ha parecido todo este rollo…
Nos leemos pronto, ciao.
