Disclaimer: Los personajes aquí representados son propiedad de Craig Bartlett, Nickelodeon y Viacom.
"Sabes, hoy es una buena oportunidad para decirle… lo que sea que necesites decirle"
"¿De qué hablas?" preguntó el rubio mientras ajustaba su corbata en el espejo.
"De Helga" contestó el moreno.
"¿Qué hay con ella?"
"Has estado muy interesado en ella desde lo de San Lorenzo" dijo Gerald, "y de eso ya más de 5 años"
"Yo no estoy interesado en Helga" dijo Arnold dirigiéndole una mirada seria a su mejor amigo.
"Sí como no" el moreno puso los ojos en blanco. "¿Qué paso en San Lorenzo entre ustedes dos?"
"No puedo creerlo" se quejó el moreno. "¿De verdad le rogaste a Helga?"
La rubia había ganado un viaje para dos a San Lorenzo. Un viaje que Gerald sabía muy bien que Arnold se había propuesto ganar para ir en busca de sus padres. Cuando Helga lo ganó, Arnold inmediatamente se propuso ser el acompañante de Helga, aunque sabía que no sería tarea sencilla. Pero la rubia había aceptado casi sin pelea.
"No le rogué" dijo el rubio, "le pedí un favor"
"Y ella, con su corazón de oro, acepto" dijo el moreno sarcástico.
Helga no le hacía favores a nadie. Menos a Arnold.
"Pues… sí, fue más fácil convencerla de lo que espere" dijo el rubio pensativo.
Pocos días después Helga y Arnold se embarcaron en su viaje a San Lorenzo. Los primeros días pasaron como si nada. Hicieron su recorrido turístico, que era parte del premio. Al tercer o cuarto día, Arnold se levantó por la madrugada. Tomo su mochila y salió de su habitación de hotel para embarcarse en su búsqueda. Camino por el pasillo, pasando la habitación de Helga y de su tutor sin hacer ruido. Entonces llego frente al ascensor.
"¿A dónde crees que vas, inepto?" dijo una voz que él conocía muy bien.
Se dio la vuelta y vio a Helga sentada en uno de los pequeños sillones en la salita de estar frente a los ascensores. Al no recibir respuesta, la rubia se levantó y se acercó a él con los brazos cruzados.
"Te pregunte a dónde vas. ¿O qué? ¿Ahora eres sordo?"
Arnold parpadeo para recuperarse y respondió. Molesto. Esta vez no iba a dejar que Helga echara a perder sus asuntos.
"Escucha Helga, me voy a ir. A donde, no es de tu incumbencia. Y esta vez, hagas lo que hagas, no vas a poder detenerme. Así que vuelve a la cama y pretende que nunca me viste"
El rubio estaba por llamar al ascensor, pero la respuesta de la rubia lo congelo.
"No voy a detenerte. Voy contigo"
Helga lo paso y llamo ella misma al ascensor. Cuando se abrieron las puertas, Arnold estaba demasiado congelado. Esperaba que la rubia le gritara, lo golpeara, lo acusara en ese mismo instante, o no lo dejara ir hasta que forzara una respuesta de sus labios. Cualquier cosa menos eso.
"¿Vienes o no?" le llamo la rubia desde dentro del ascensor.
Fue entonces que Arnold noto que traía una mochila al hombro, igual que él .Y bajo su vestido, traía unos shorts cafés y tenis deportivos. Arnold entro al ascensor, preguntándose si Helga ya sabía que planeaba escaparse y ya había decidido acompañarlo. Eso parecía, pero sabía que era ridículo.
Gerald ya había hecho esa pregunta antes, pero Arnold siempre respondía lo mismo. Y esta vez no fue diferente.
"Nada"
"Eso no me lo creo. Siempre la has defendido pero después de San Lorenzo, algo cambio entre ustedes dos"
"Gerald" suspiro el rubio, "Helga me ayudo a encontrar a mis padres, claro que nuestra interacción cambio. Le estoy muy agradecido."
"Es más que eso, viejo" dijo Gerald negando con la cabeza. "Si no te conociera, diría que te gusta Helga"
Arnold se congelo, y sus ojos se abrieron como platos.
Era cierto. Desde San Lorenzo, Arnold no pudo evitar sentirse más cercano a la rubia. La buscaba. Quería tenerla cerca. Le tomo mucho tiempo darse cuenta de que se había enamorado. Y aun así, en los últimos cuatro años no había podido confesárselo. Ni a Helga, ni a Gerald.
"¡Oh, por Dios!" exclamo el moreno al ver su expresión. "Si te gusta"
"Sí" admitió el rubio, dándose por vencido. No veía el punto en negarlo. Nunca lo había confesado, pero no podía negarlo. "Pero eso no importa" dijo Arnold tomando su saco. "Aunque mis sentimientos por Helga hayan cambiado los de ella no lo han hecho" dijo con pesadumbre.
Y era cierto. Aunque el rubio se sorprendía buscando a Helga y queriendo estar con ella, y observándola de lejos; la interacción de Helga para con él no había cambiado en lo absoluto. Ahora lo molestaba menos, ya no había bolas de papel en su cabello, pero aun lo llamaba con sobrenombres y lo insultaba ocasionalmente. Estaba seguro de que Helga aun no lo quería cerca. Se sentía igual que Stinky cuando era él el que se sentía atraído por Helga: sin esperanzas. Aunque eso era muy diferente. Eran niños en ese entonces. Y Stinky lo había superado rápido. Arnold ya llevaba 5 años.
Gerald quisiera haberse mostrado más sorprendido. Pero no lo estaba. No realmente. Muy en el fondo ya lo sabía.
"Aun así, hoy es un buen día para decirle" sonrió Gerald. "Escucha, hermano, dudo mucho que Helga todavía te odie. Si es que alguna vez lo hizo… porque te ayudó en San Lorenzo, y no tenía porque. Tal vez, no te odia tanto como ella cree, y solo necesita que tú se lo demuestres."
Arnold le sonrió. Y ambos salieron de su habitación para dirigirse a casa de Rhonda para la fiesta.
Si… tal vez…
Nota de la Autora: ¡Hola, chicos! Solo quiero aclarar algunas cosas:
1. Aquí, la edad promedio de nuestros chicos es de 16 años.
2. Para que este fanfic funcioné como lo planeo deben mantener en mente que la confesion sobre el edifico de Industrias Futuro nunca pasó. Gerald los interrumpio mucho antes de donde se ve en la pelicula, antes de que Helga se confesara. Y al final, cuando Helga se da cuenta de que su papá se unió al abuelo de Arnold para salvar el vecindario porque lo habian estafado, usó eso como pretexto y Arnold ya no la cuestiono más. En este universo, él cree que le ayudo por su papá. Tambien que, a diferencia de como se sabe, no fueron varios alumnos al viaje a San Lorenzo, solo Helga, Arnold y un tutor responsable de los dos. El tan afamado beso que iba a pasar en la segunda pelicula entre Arnold y Helga, tampoco pasó.
¡Gracias por leer! Y espero que les guste lo suficiente esta probadita para seguir la historia y dejar comentarios. :)
¡Nos vemos en la actualización!
