Titulo: Get Lucky

Rango: M

Sumario: ―Solo estas ebrio, no sabes lo que dices, es mejor que me vaya a casa./ ―Sakura, ¿me dejarías hacerte el amor?/ (Three-shot)

Advertencia: Me gustaria que tomasen en serio el rated (M) de este fic. Si eres menor de edad o suceptible a este tipo de temas (relaciones sexuales explicitas) este no es el fic para ti.

Disclaimer: Cualquier divulgación total o parcial de esta obra; sea a través de una copia, edición, exhibición, intercambio, difusión y/o emisión de este texto esta terminantemente prohibido. El contenido de esta obra es exclusivo para el entretenimiento y sin ningún medio de lucro.

Naruto © es creación del señor Masashi Kishimoto pero esta historia pertenece a Nicole Luz de Luna ©


Sakura había llegado a las diez de la noche vistiendo esa blusa blanca que Ino le había regalado y ese super apretado pantalón azul a la cadera que compro meses atrás y nunca tuvo la oportunidad de usar. Ino se había encargado personalmente de vestirla y maquillarla mientras la pelirosa tuvo que solicitar la ayuda de Hinata y Ten-Ten para calzarse el pantalón. Maldijo como veinte veces los supuesto rollitos que le causaban los pantalones aunque sus amigas insistían que estaba bien y que en realidad no había grasilla, pero la ojiverde conocía el código entre amigas así que de verdad era muy probable que los tuviera.

Al llegar a la fiesta sus chicas la abandonaron perdiéndose cada una en algún confín del bar con algún chico. Así que Sakura opto por quedarse en la barra, pedir un trago y terminar bebiendo soda con limón puesto que aparentemente tenía un letrero en la frente que parpadeaba con luces de neón 'Diecisiete, diecisiete, diecisiete'. Un hombre del otro lado de la barra le sonreía y ella intentaba ignorarlo, de veras, pero el tipo era guapo, era endemoniadamente guapo con sus ojos azules y su cabello dorado; no tendría más de veinticinco. Ella le sonrió de vuelta, dispuesta a tomar tragos con él si es que le invitaba. Pero un carraspeo a su lado la hizo desviar la mirada para encontrarse con otro par de ojos azules.

―Yo...―trago con fuerza―yo...Sakura chan, era a ver si querías bailar conmigo.

Ella lo miro atentamente. Su cabello muy bien peinado, su camisa naranja con la corbata bien atada, su pantalón tan bien planchado... y entonces ella se dijo ¿Por qué no?.

―Claro, siempre y cuando no estés ebrio. Sabes que odio los borrachos.

―¡No lo estoy, de veras! Es más, vine sin la intención de beber, creí que era una fiesta mas formal― y extendió los brazos para que ella pudiera verlo bien.

Pareces muñequito de torta, que lindo.

Recordó que esa era la primera vez que Naruto pasaba un año nuevo con ellos luego de su viaje con Jiraiya, el claramente no estaba al tanto de lo que la Hokague solía organizar.

En la pista bailaron unas dos canciones bastantes lentas donde Sakura se sorprendió cuanto le gustaba que un chico fuese mas alto que ella y, aunque Naruto solo le sacaba como cinco centímetros, era divertido apoyar la cabeza en su hombro y aspirar su aroma a un muy buen perfume. El rubio se comportaba como todo un caballero, con las manos donde se debía y llevando el ritmo que ella quería. Sorprendente bailaba muy bien para alguien tan patoso como el hiperactivo jinchuriki.

―¡¿Qué pasa aquí?! ¿Estamos despechados?

Gritaba Tsunade desde algún lugar de la tasca, su grito seguido de coros y silbidos que solo obligaban a quien fuese el DJ a cambiar de canción si no quería que la mandamás de la hoja se le fuera encima.

Naruto sonrió un poco y se separo de ella. Sakura le sonrió de vuelta y le dio un pequeño puño en el hombro mientras ambos se retiraban a una mesa donde estaban ciertos de sus conocidos. Ino estaba en las piernas de Shikamaru mientras este fumaba y charlaba con Shino. Hinata hablaba en confidencial con Neji y Lee y TenTen tiraban pasos junto a la mesa. Una canción que ella no conocía y la gente grito y se alboroto.

Era realmente divertido escuchar a Tsunade y a Jiraiya levantar las copas y gritar '¡Dónde están los borrachos!' y más aun que la gente gritara de vuelta y siguieran el juego.

Naruto le dio una silla y ella se sentó con parsimonia mientras Shikamaru le tendía una cerveza. Por fin la fiesta se estaba prendiendo.

Up all night to get lucky, soquete. Vamos a bailar.

Y así Ino se llevo a Naruto a rastras y el pobre Shikamaru pudo encender su otro cigarrillo en paz.

Sakura continuo tomando y de vez en cuando participando en las conversaciones. Pero había algo que ella había estado haciendo desde un principio, buscar al rubio de la barra. Y en esa tarea que ya llevaba como una hora fue que lo vio. Sentado con unas chicas y otros chicos -civiles todos aparentemente- en una de las mesas mas alejadas, junto a la mesa de los senseis. Él pareció verla también y levanto la copa hacia ella, Sakura correspondió el gesto y en menos de un minuto ambos se dirigían a la pista.

Ella no solía bailar con cualquiera puesto que no asistía a fiestas con frecuencia y aparte era muy penosa. Pero faltaba como una hora para año nuevo, y esa era una de sus metas, dejar su timidez atrás, ser mas desinhibida, todos los que estaban en esa fiesta estaban allí más o menos por las mismas razones, olvidar las inhibiciones por un rato y, aunque la mayoría se tuviese que retirar pasada la una, todos parecían haber hecho una acuerdo mutuo e inconsciente de ser lo más sueltos posibles por lo menos esa noche.

Así que mientras se encontraron en la pista, empezó a sonar la música y las luces bajaron casi a una oscuridad total, el corazón de Sakura quería salir corriendo de su pecho. El joven la tomo por la cintura mientras ella empezó a mover su cintura. El juego de luces empezó y luces de varios colores empezaron a surcar el lugar, ella apenas podía ver su cara, y él parecía bastante divertido. Y mientras estaban frente a frente y la canción la obligaba a agacharse, Sakura hacia su mayor esfuerzo para hacerlo despacio y sensual como se lo había enseñado Ino, moviendo de lado a lado la cadera mientras bajaba y subía rozando un poco su entrepierna.

Ino había dicho explícitamente: Intenta rozar un poco, no mucho, y lentamente. Tienes que dejarlo con ganas.

Las manos de él recorrían toda su cintura y llegaban a un poco más de su cadera dando suaves apretones y atrayéndola hacia a él levemente. Nada demasiado obsceno, sino lo normal. Ella permito que ambos pegaran su cuerpo mientras cambiaban de canción. La gente se alboroto un poco con la nueva canción y las luces se apagaron completamente para luego de por lo menos cinco segundos ascender lentamente en finas lineas verdes de láser. La canción profesaba un 'sexy chick' mientras las manos del viajaban a lo largo de su cadera con movimientos rítmicos provocándole cierto cosquilleo en el vientre. Y ella ya se estaba soltando, eso ó las cervezas estaban haciendo efecto. Pero dejo que él atrajera su trasero hacia él con suaves embestidas al ritmo de la canción. Se sentía bien que su mano izquierda lo hiciera y la derecha llegara hasta más arriba de su cintura y rozara imperceptiblemente su pecho derecho.

El baile de desconocidos se estaba volviendo más sensual, más caliente y por qué no decirlo, más sucio. Pero sus movimientos, sus roces, su ritmo, no parecía la misma persona. Y a la pelirosa le importo en lo más mínimo puesto que la luz estroboscópica la estaba segando, la música estaba bastante alta y las sensaciones de su cuerpo la tenían al límite. Era la primera vez que bailaba con alguien que no era su amigo y más aun ese tipo de baile, pero ese hombre era todo un experto, puesto que ahora ella intentaba girarse para permanecer de frente pero él la mantenía así de espaldas a él, mientras su nariz rozaba la tierna piel de su cuello. Le causaba escalofríos, y aunado a los toques de su mano la hacía temblar, entrecerrar los ojos y echar la cabeza hacia atrás para intentar recostarla en el hombro de aquel rubio que ahora parecía haber crecido o qué.

Una mano enguantada empezó a deslizarse un poco más abajo de su cadera y más hacia el frente.

El revuelo de hacía rato debió hacerla cambiar inconscientemente de pareja porque ella recordaba muy bien que él no llevaba guantes. Y sin saber si era lamentable o disfrutarle, a ella no le importo.

Le masajeaba suavemente el trasero y ella soltó su gemino extraño que nunca antes en su virginal vida había hecho pero parecía haber sido creado para su boca. Miro a los lados con la poca visibilidad que le permitían las luces y se percato que estaban el todo el centro del gran mar de gente que bailaba y disfrutaba de buena música. El hombre olía a una mezcla extraña entre un olor que le parecía muy familiar y un poco de alcohol.

Satisfaction.―murmuro cerca de su oído siguiendo la letra de la canción.

Ya para ese momento, las timidez fue a dar un paseo y dejo a Sakura la extrovertida a cargo.

La canción cambio de nuevo a un ritmo menos agitado pero posible para bailar. La melodía un poco más suave le permitía que él desplazara sus manos con más facilidad mientras cantaba a su oído esa canción que a ella tanto le gustaba y que no sabía que podía disfrutar tanto hasta este momento.

Pero ella simplemente no contaba con que ahora él se atrevería a soltar el primer botón de su pantalón y cantara a su oído 'Lose yourself to dance' y la música seria lo suficientemente suave para ella escuchar claramente esa voz lenta, suave y ahora extremadamente sexy de Kakashi Hatake. Y se percatara de todo ahora que su mano estaba entrando con un poco de dificultad entre sus apretados pantalones..

El corazón por poco se le salio por la boca. Y se giro lo más rápido que pudo, con las mejillas encendidas y los ojos abiertos de par en par.

Hatake Kakashi la miro y dio un paso atrás.

Las luces apenas los dejaban verse claramente mientras permanecían parados uno frente al otro con gente aun bailando a su alrededor. Eso hasta que Kakashi pudiera reaccionar y simplemente diera la vuelta sin decir palabra alguna dejando a la pelirosa sola en medio de la pista. Algo dentro de ella se estremeció y salio pitando hacia la mesa con la voz de Tsunade anunciando quince minutos para que partiera el año.

―¡Frente, llevo rato buscándote!―soltó Ino una vez que Sakura se sentó en la mesa con algo de dificultad. Las piernas aun las sentía débiles y las manos le temblaban, tanto así que el abrocharse el pantalón discretamente se estaba volviendo un reto―. Había un rubio perfecto que estuvo preguntando por la chica de pelo rosa... si dejaste a ese bombón plantado debió ser por algo fuera de este mundo ¡Cuenta a ver!

Los ojos de todos se posaron el ella y la asustaron mas de lo que ya estaba.

―¡Ino, por dios, que cosas dices!―le defendió Ten-ten― De seguro Sakura estaba haciendo cosas que no puede contar en voz alta.

Y todos partieron a reír aliviando la tensión, pero mortificando mas a la ojiverde. Definitivamente no era la forma de acabar el año.

―Oi, Sakura, habrás de contar esto mas tarde. Quiero saber con quien fue el encuentro.

―¿Qué encuentro?―pregunto Kurenai apareciendo de repente tomada de la mano de Asuma.

Sakura se giro y tras la Kunoichi recién llegada permanecían Gai, Gemma, Yamato y lamentablemente Kakashi que permanecía con la vista enterrada en su libro.

―Sakura que tuvo un encontronazo con un desconocido.

La pelirosa se sonrojo hasta mas no poder cuando sintió la mirada de todos sobre ella, especialmente de cierto shinobi.

―¡No, Dios, no!―exclamo algo nerviosa moviendo las manos frente a su cara.―Solo baile un rato y luego hice la cola para el baño...

―Aja, frente, y te creímos. No eres la mojigata que pareces, a mi no me engañas.

Y el primero en reír fue Kakashi, pero nadie mas pareció percatarse de eso. Puesto que de repente empezó la cuenta regresiva. Naruto la tomo de la mano e inmediatamente Ino empezó a gritarles a todos que se tomaran de la mano para terminar el año juntos y comenzarlo juntos. Cuando la mano de Kakashi la toco. Sakura suspiro por algún tipo de sensación, algo que nunca antes había sentido, que le recordaba a lo que el simple rose de su mano en sus caderas le provocaba.

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¡FELIZ AÑO! Corearon todos al mismo tiempo.

Sakura sintió como la mano de Naruto se apretaba a la suya, y cuando ella volteo a darle su abrazo, una medio ebria Hinata se le había adelantado. Así que con desesperación busco a tos encontrándose que Neji besaba a TenTen con ansias, Kurenai permanecía en los brazos de Asuma; el trío Ino-Shika-Cho se apretujaba mutuamente; Lee y Gay lloraban muy juntos y los demás parecían haberse alejado con prisa. Dejándola a ella y a Kakashi solos mirándose mutuamente.

―Feliz año, Kakashi-sensei― murmuro la pelirosa acercándose a darle un tímido abrazo.

Y ahora Kakashi parecía mas alto y ella mas pequeña. Y su olor, un poco mas a alcohol.

Pero a pesar de todo, Kakashi le correspondió el abrazo y eso a ella la consoló un poco después de todo lo que había ocurrido, pero su toque volvió a estremecerla y mas cuando la mano de Kakashi bajo desde su espalda hasta sus glúteos dando un suave apretón.

Sakura se separo de golpe y lo miro. Su mirada era intensa, y ¿sensual?

―¿Gustarías sentarte conmigo un rato, Sakura?

Y ella tembló y miro a los lados a los demás dando aun abrazos y a otros ya empezar a bailar o a beber.

―Yo...―dudo un poco antes de responder. Ella tenia unas metas para el año nuevo. Dejar de ser tímida, dejar de ser virgen. ―No creo que deba...

―Solo te estoy invitando un trago, no pasa nada.

Su sonrisa tras la máscara le calmaba un poco, pero había algo que aun no cuadraba en ella.

Se sentó frente a el tomando la copa de sake entre sus manos y brindando con él. Por el momento solo se estaban mirándose, analizándose mutuamente. Sakura se sentía incomoda, tenia un revoltijo de emociones y sensaciones que jamas había vivido, que no pensó ser capaz de sentir. La necesidad carnal que sintió cuando cuando las manos de Kakashi empezaban a viajar por sus pantalones versus la vergüenza que sentía de saber que un hombre la estaba tocando y mucho mas de ese modo. Y ahora, ver al copy nin a la cara le encendía las mejillas aunque inconscientemente -como ella quería llamarlo- apretaba las piernas con fuerza. Algo raro pasaba. Esas bebidas tenían que tener algo, algún tipo de psicotrópico o afrodisíaco en el peor de los casos.

Kakashi empezó a jugar con un encendedor que Shikamaru había dejado en la mesa, sacando la llama y pasando los dedos muy cerca.

―No sabia que bailaras. Bailas bien―comento Kakashi mientras intentaba flamear un poco de sake.

Ella trago el nudo de su garganta y se removió un poco en la silla.

―Tu también―musito ella sonrojándose nuevamente y colocándose su corto cabello tras la oreja―.Si no me hablas no hubiese sabido que eras tu, Kakashi-sensei.

El peliplateado la miro, de una forma que Sakura no supo identificar, pero hizo una nota mental, le gustaba que la vieran así.

―Si, y tal vez hubiésemos bailado un poco mas.

Sakura se sorprendió, tal vez estuviesen bailando en la primera canción, pero luego de eso lo único que hacían era rozarse mutuamente, ¿entonces, a qué se refería con bailar? ¿a seguirle metiendo mano?. No me puedo quejar. Admitió con pesar. Ella había dejado que él la manoseara, ella lo había impulsado a más aún creyendo en él como un completo extraño.

―¿Quién quita? Talvez nuestro baile ya estaba a punto de acabarse―era una vil mentira, Sakura no quería que acabase, no se le paso por la mente ni una vez acabar con aquellas caricias, pero debía mantener la dignidad. No iba a quedar como una promiscua frente a Kakashi.

El se inclino un poco por sobre la mesa y acerco su cara a ella obligándola a pegar la espalda completamente de la silla.

―Umm, tal vez...―la voz del copy ninja sonaba tan diferente. Ningún hombre le había hablado así, de eso estaba segura―Aunque estoy bastante seguro de que hubiésemos bailado luego.

―¿Por qué tan seguro?― ahora la estaba retando y ella y su temperamental humor estaban cayendo.

―Soy un muy buen bailarín, Sakura. ¿Más sake?

Ya pasada la una de la madrugada quedaban pocos shinobis en el bar.

La fiesta de año nuevo fue todo un revuelo, de lo mejor, muy divertido considerando que ella no tendía a disfrutar de las exuberantes celebraciones que solía organizar Lady Tsunade. Sin embargo, aunque la fiesta fue muy buena, la gente tenia deberes que cumplir y el que un año se acabara y otro comenzara no los excluía de sus responsabilidades. Es por ello que luego de la emotiva cuenta regresiva ya muchos empezaban a retirarse con modestia mientras Tsunade despotricaba a causa de su embriaguez.

Y mientras Izumo y Kotetsu se despedían con reluctancia, y Shizune se llevaba a una muy ebria Tsunade, Sakura tonteaba con Kakashi en una mesa. No estaba ebria, eso si, pero hacia ya un rato que se sentía algo mareada, por ende pasaba más tiempo con el mismo trago de sake en la mano. Kakashi por otro lado, parecía ser absolutamente inmune al alcohol; ella hacia caras para pasar el sake, pero el peliplateado pasaba los tragos como si de agua se tratase.

La conversación hasta no había sido para nada mala. Kakashi no era un hombre de muchas palabras pero decía lo necesario cuando el punto lo a meritaba. Luego de media botella de licor ella noto y por fin pudo descifrar la mirada de Kakashi. Ésta aun no tenia un nombre exacto, pero compartía tantas similitudes con la de varios mas. Una extraña mezcla del modo en que Gemma miraba a las chicas con ese característica travesura en sus ojos, con la detallista de los ojos de Jiraiya y, la típica pizca de depredador que solía colocar kakashi cuando analizaba algo a fondo.

―¿Sabes? Tu mirada, tiene algo raro...

Kakashi levanto la ceja con incredulidad.

―¿Cómo raro?―pregunto algo divertido al cabo de un segundo.

Sakura acomodo su cabello tras la oreja por enésima vez y se inclino en la mesa un poco confidencial. Miro a los lados con sospecha y cuando comprobó que sus pocos amigos estaban bien ocupados y que los civiles que estaban permanecían lo bastante ebrios y ocupados, sonrió ligeramente y continuo:

―Diferente, lascivo― había descubierto una nueva faceta de ella, que el coquetear no se le daba tan mal aparentemente.

―Entonces, ¿debo buscar a alguien mas para mirarla así?

―Deberías―el licor le hacia mentir muy bien. Le encantaba que la mirara así― ¿o acaso no puedes?

El copy ninja sonrió arqueando su típico ojito.

―En lo absoluto. Ustedes las mujeres sin bastante fáciles cuado se trata de una noche.

―¡No todas somos así!

Kakashi se echo un poco hacia a tras con la repentina declaración. Y Sakura tuvo que tomar compostura y comportarse como una señorita, recalcando con voz mas suave:

―No todas las mujeres somos así.

Vio como Kakashi suspiraba y volvía a jugar con el yesquero al que ya le quedaba poco gas a juzgar por la llama.

―No quise ofenderte, pero es la verdad. O entonces, ¿qué crees que hacen todas estas mujeres aquí un miércoles a las dos de la mañana luego de haber partido el año?

La ojiverde permaneció en silencio esperando que el se auto-contestara la pregunta.

―Todas están aquí por una noche de sexo.

Sexo, la sola palabra la haría estremecerse, sin embargo, justo ahora no. Esta misma noche había descubierto también que ciertas palabras en los labios de Kakashi sonaban tan bien, tan suaves y apetecibles. Y otra de sus metas de año nuevo era dejar de ser tan pudorosa.

―Como todo hombre, solo piensas en hacer el amor.

Y ella no creía que su comentario fuese tan gracioso como para desatar tan ligera risa en Kakashi.

―¿Qué? Es verdad, o me vas a negar que siempre sales acompañado de un bar y no necesariamente por tus amigos.

―Si, mas o menos― y ladeo la cabeza con algo de duda.―. Pero te equivocas, yo no hago el amor.

Y ahí fue conde Sakura cayó en la cosa. Kakashi no se refería a hacer el amor, cuando él hablaba de una mujer no es que usara el termino técnico, el en realidad tenia sexo con ellas. Sexo. Solo eso, aparentemente había algún tipo de distinción entre tener sexo y hacer el amor que Sakura por su inexperiencia no comprendía muy bien y Kakashi se dio cuenta fácilmente. Así que le hizo una seña para que ella se moviera más su lado.

―Vamos, no te ofusques. Te voy a mostrar como todo lo que digo es la mera verdad.

Y Sakura lo miro algo desconfiada, pero rodo su silla hasta al lado de la de él e intento enfocarse en lo que le decía, aunque un poco difícil ahora que la botella solo tenia tres dedos de licor y ella estaba empezando a marearse más de lo que ya estaba.

―Ilustrarme pues.

―Bien. Yo pocas veces busco kunoichis, prefiero las civiles porque son un poco más... ah... comprensivas por así decirlo― la pelirrosa movió la cabeza no muy convencida de ello o sin haberlo captado bien para aclarar―. Ves a la pelirroja que esta sentada con los dos hombres.

Sakura capto rápidamente y la detallo, esbelta, de piel pálida, y algo mayor en comparación con los dos jovenzuelos con los que tomaba. Ella hablaba animadamente y cada cierto tiempo -intervalos muy cortos- tomaban una ronda rápida de shots de sake.

―¿Qué pasa con ella?

―Bueno, para empezar, va a hacer un trió con esos tipos.

Sakura supuso que había de tener en la cara una expresión realmente estúpida por lo que acababa de oír.

―Estas bromeando conmigo―afirmo con poca seguridad de lo que decía. La expresión de Kakashi lo respaldaba, él no parecía estar bromeando como anteriormente.

―Por supuesto que no, ¿por qué habría de hacerlo?― les dio una mirada discreta y cortésmente ofreció llenar la copa ya vacía de la pelirosa―. No le veo sentido a calumniar a una mujer casada que esta a punto de largarse de un bar con dos tipos mucho mas jóvenes que ella.

―¡¿Casada?!

―Baja el tono, Sakura, la música no es tan alta.― le silencio y volteo a sonreírle―. Su mano izquierda, dedo anular, pequeña marca mas clara que el resto de la mano. La manera de coquetearles, toques sutiles, evita el contacto directo de los ojos. Ademas, no hay muchas mujeres de esa edad solteras en Konoha. Claramente, casada.

Tenia que admitirlo, Kakashi era mucho mas observador de lo que parecía; y si, por un momento se sintió un poco impresionada.

―Eso de que lo primero que notamos los hombres en una mujer son los ojos es una gran mentira. Y otra mas grande todavía es esa de que le miramos los senos o el trasero― dio un largo trago a la botella, Sakura no se había dado cuenta de cuando Kakashi había dejado de beber de la copa―. Lo primero que nota un hombre en una mujer es si tiene o no un anillo de matrimonio. Y claro, luego le miramos las tetas y las nalgas y, si nos gusta entonces le miramos a los ojos.

Sakura hizo una nota mental. Kakashi hablaba como todo un experto. Estaba empezando a despertar cierta curiosidad en ella.

―A ver que mas puedes ver aquí― comento ella y abrió los brazos haciendo un curioso ademan.

―Ino Yamanaka, Shikamaru Nara y Sai a las tres.

―¡No me digas que también van a hacer cochinadas!

Hatake volvió a sonreír y Sakura sintió como pasaba un brazo por sobre sus hombros causando otra vez esa sensación desconocida.

―No, no lo creo. Ino solo quiere sexo con Sai.

La ojiverde bufo y retiro el brazo que tenia en los hombros.

―La cerda esta sentada en las piernas de Shikamaru. Como que te equivocaste, sensei.

―Bien, aclaremos algunas cosas, preciosa―le hizo otra seña a la mesera que estaba en la mesa contigua. ¿Cuantas botellas ya habían vaciado?

Kakashi parecía una persona totalmente distinta mientras bebía. No es que actuara como ebrio o luciera como ebrio o hablara como ebrio, es solo que su elección de palabras, el contacto físico un poco sutil, y hasta la extraña preferencia de tenerla a ella a su lado durante gran parte de la noche no parecía ser la actitud normal de Hatake. No es que ella lo conociera a fondo porque la verdad es que solo trataban superficialmente, pero verlo en un bar con una botella de sake a su lado y hablando de mujeres como todo un playboy confirmaba todos los rumores que giraban alrededor del copy nin.

Aparentemente era bastante verdad que Kakashi era todo un casanova que recorría tres bares diferentes a la semana y no necesariamente para beber. Algunos chismes decían que nunca dejaba que sus conquistas vieran su cara recurriendo él a nunca quitársela para ninguna parte del acto. Y eso, para Sakura Haruno, era algo bastante perturbador.

―Ha pasado toda la noche con Nara, lo se, pero eso no necesariamente significa que quiera algo con él. Regresemos un poco, Ino siempre ha sido una chica bastante... ¿extrovertida?, así que es bastante justificable que esa actitud se magnifique notablemente con sus compañeros de equipo por ende, no es tan comprometedor verla así con Shikamaru―Sakura asintió dándole la razón a regañadientes―. Luego esta el hecho de que el chico Nara la deje hacerlo cuando antes -cuando si quera algo con ella- evitaba cualquier contacto extremadamente físico, y ahora que se le ve bastante pendiente de la embajadora de Suna, no le importe en lo mas mínimo la actitud de su amiga. Eso me da a entender que él no esta ni pendiente de la rubia porque tiene a otra en mente. Ademas, es algo tarde, si de verdad quisieran algo ya se se hubiesen largado como la mayoría de las parejas.

―¿Y que te hace pensar que ella quiera algo con Sai?― le interrumpió algo irritada, tenia unos cuantos tragos encima y el maldito copy nin ya estaba empezando a irritarla con su estúpida perspicacia.

―A eso vamos pequeña saltamontes, hay que hacer las cosas con calma y disfrutar el preludio del juego― le guiño un ojo, pero la pelirosa en su increíble inocencia volvió a perderse en el sentido de la frase―. Primero, mira la manera en la que su brazo roza sutilmente el codo de Sai, un punto del cuerpo humano con mucha, sensibilidad, eres médico, lo sabes.

La chica miro bien a los tres shinobis junta a la barra. Ino sentada en piernas de Shikamaru y Sai sentado a su lado mientras charlaba con Shikamaru y ella se dedicaba a escuchar de vez en cuando removiéndose un poco y rozando su brazo contra el del paliducho.

―Mira la forma en la que se acomoda el cabello constantemente, exponiendo su cuello y regalándole una perfecta vista a Sai, inconscientemente esta incitándolo a tocarla eso es obvio. Ahora bien, inclinando un poco los hombros hacia adelante vuelve mas notoria su clavícula y pronuncia el escote. Lo lento que se mueven sus labios al hablar, eso ayuda, hace que su oyente desvíe la mirada de sus senos y se concentre en su boca que vamos, es muy sensual.

No encontró un motivo para contradecirlo, todo parecía tan real y aunque ella abrió y cerro la boca varias veces, no pudo decir nada. Y solo apretar los labios en una fina linea mientras Sharingan Kakashi le sonreía a la mesera que llegaba con la nueva botella. Sakura se extraño cuando la joven mujer se inclino de mas para servir los primeros dos tragos -sin necesidad de siquiera servirlos- y se detuvo un momento cerca del oído de Hatake a decir algo que ella no pudo captar. Se retiro contoneando sus cadera y el copy nin tomo el trago levantando la copa aparentemente a la salud de su servidora.

Perra.

―No tienen vergüenza― murmuro alejando el licor con la mano.

―No te molestes, si tu misma me has dicho que busque a alguien.

―Me molesta que creas que estoy molesta― y otra cosa aprendida, el alcohol si pegaba en su gramática―Olvídelo, señor lo-se-todo-sobre-las-mujeres. ¿Por qué mejor no me dice algo que me sorprenda? Vamos, gran ninja que copia, muéstrame tus habilidades. ¿A qué venido otra chica aquí?

Y aunque estaba repentinamente molesta realmente quería oírlo hablar pero no de la chica que ella misma acababa de señalar.

―¿A qué he venido yo aquí?―soltó como quien no quiere la cosa y esperando que Kakashi le ignorara y se concentrara el la peliazul de la esquina.

Pero realmente se sorprendió cuando el peliplateado volteo a mirarla de un modo tan intenso que ella apretó las piernas con fuerza.

―Y eso es lo que intente averiguar desde que cruzaste esas puertas junto con tus amigas.

Trago con fuerza el nudo de su garganta, de repente, todo el enojo había escapado de su cuerpo y ahora estaba empezando a sentirse bastante nerviosa ¿así se sentía estar ebrio? ¿cambiante y nervioso?

―Entonces cuando te vi tomar soda descarte la posibilidad de que tus intenciones fueran las mismas que las de tus amigas, pero me equivoque Sa-ku-ra― continuo susurrando su nombre de un modo tan especial―, le empezaste a sonreír coquetamente a ese civil y cuando tuviste unas cuantas cervezas encima no dudaste en ir a bailar con él contradiciendo dos de las pocas cosas que se de ti. Uno, tu no bailas. Dos, tu no bebes―contó con los dedos y permaneció una rato en silencio mirándola algo divertido, esperando que ella dijera algo.

Algo que nunca llego porque ella no iba a decirle, la vergüenza la mataría antes.

―Ahí supe exactamente que querías y te separe de él. Y te di la oportunidad de que te separaras de mi, que rechazaras los toques, pero por el contrario, dejaste que te tocara, lo disfrutaste tanto o tal vez mas que yo―estaba empezando a sudar en extremo y su corazón subía a su garganta y bajaba estrepitosamente a su lugar. Kakashi estaba tan cerca, su aliento saliendo de su mascara y rozando con la enrojecida nariz de ella―. Sakura. ¿sabes tú lo que viniste a buscar?

Lo sabia, ahora, lo sabia.

―Es año nuevo, quiero ser mas desinhibida―aclaro con voz suave y temblorosa―mas suelta, menos tímida...

―Menos virgen―concluyo él.

Talvez había llegado la hora de que Sakura se largarse, se había divertido bastante y todo, pero la situación se estaba tornando en su contra. Algo en la mirada de Kakashi había cambiado nuevamente, ya no era algo que ella pudo identificar.

Aunque si, él tenia razón, ella quería dejar ser el ser inocente y virginal por el que todos la tomaban. Pero esa era una meta casi imposible, los chicos no la miraban, no la notaban; ella misma no se atrevía a acercarse, a perseguirlos. Pero cuando ese hombre empezó a mirarla, ella sintió que algo cambio, que tal vez no era exactamente lo que ella buscaba pero que podía empezar de a poco... sin embargo, cuando las manos de Kakashi la agobiaron y la hicieron volar, vio la efímera pero muy real posibilidad de que algo pudiera suceder. Entonces, de manera inconsciente, continuaba deseando a Kakashi aun después de descubrir que era él en la pista. Él podría cambiar las cosas, y ella quería que las cambiara, lo prefería a él antes que a cualquier extraño en un bar de mala muerte...

―Entonces dime, Sakura, ¿qué tan lejos estas dispuesta a llegar en esta noche?― murmuro acercándose a su oído, un aire cálido rozando su oreja y erizándole los bellos de la nuca. Sakura era tan sensible.

―Solo estas jugando conmigo―dijo ella en voz alta, intentando convencerse y eliminar la idea que paso de ser inconsciente a rondarle la cabeza con insistencia.

―Si estuviese jugando, hace rato que te hubiera dejado salir por ahí con ese rubio―el tono seguía confidencial. Ella se secaba las manos con insistencia contra el pantalón―, pero me calentaste, Sakura. Desde que te vi moverte allí, desde que te dejaste tocar por mi...

―Solo estas ebrio, no sabes lo que dices, es mejor que me vaya a casa.

―Te has sentado a beber aquí conmigo durante horas, ignoraste al monigote rubio ese que te perseguía y aprietas las piernas cada vez que te hablo lento y cerca... No digas que no me deseas tanto como yo a ti.

Di algo, boba, dile algo.

―Si. Si quiero... pero mañana te arrepentirás, lo se. Ningún hombre ha estado conmigo nunca, no tengo experiencia...

―Eso no importa― y su sonrisa parecía tan cálida.

Sakura no estaba ebria aun, sabia perfectamente lo que hacia pero se sentía tan insegura y nerviosa ahora que por fin se le estaba presentando una oportunidad real.

―Yo...

―Sakura, ¿me dejarías hacerte el amor?


Fic que tenia guardado como regalo de año nuevo para la pagina de facebook: Para los que Aman el KakaSaku. Como quedo muy largo, lo voy a dejar con tres capitulos.

Nos leemos en la proxima actualizacion. ¡Gacias por leer!