Los Patos y los Herondale.
Capítulo 1.
Jace estaba cazando demonios con Alec e Isabelle parecía ser un día común y corriente todo marchaba bien, un día cazando demonios con sus hermanos luego ir con su novia su rutina, aunque no se aburría de ello.
Todo es su día iba bien nada extraño, pero, justo cuando habían terminado con los demonios pasaban por una calle que estaba vacía o al menos eso creían. Era un lugar oscuro solo iluminado por la luz del día nublado todo estaba mojado por la lluvia que había caído fue cuando entonces Jace oyó un sonido muy particular.
-Cuack.
Jace, aterrado ante aquel sonido que el tanto detestaba rápidamente se escondió detrás de Alec e Isabelle.
-¿Oyeron eso? Díganme por favor que no es lo que creo.-dijo él.
-Awww un lindo patito. -prácticamente grito Isabelle.
-¿Cómo puedes decir que esa cosa-dijo despectivamente-es linda? Es una bestia.
-Por favor Jace es solo un pato, ¿Qué puede hacerte?-se burló Alec.
Jace, molesto por el comentario de su hermano dijo-Pues yo no me hago responsable de que después estés medio muerto por culpa de esa bestia, te he advertido varias veces que no confíes en los patos, Y TU SOLO TE RIES.
Alec e Isabelle solo se podían reír por las cosas que decía Jace.
-Ya vámonos-dijo Isabelle sin dejar de reírse.
-¡Genial!, vámonos.
Siguieron caminando por las oscuras calles de Nueva York. Lo único extraño en su recorrido era que en casi todas las calles se encontraban uno o más patos, Jace sabía que algo andaba mal. Finalmente, cuando llegaron al Instituto Jace habló:
-Muy bien, y… ¿qué me dicen de la invasión?
-¿Qué invasión de qué?-le dijo Alec como respuesta.
-Ohhh, ya sabes la invasión de los patos.
-Jace-le dijo en tono cansado-no hay ninguna invasión de patos.
-Es cierto-dijo Isabelle hablando por primera vez desde que llegaron al Instituto-solo deben estar migrando… o que se yo.
-La gente de hoy cada vez más incrédula-dijo mientras se iba.
-¿A dónde vas?
-Es tarde, a dormir. Pero- se apresuró a decir-mañana iremos a limpiar las calles de los patos.
-Genial-dijo Alec con tono sarcástico-entonces, creo que en vez de llamarnos Cazadores de Sombras deberíamos empezarnos a decir Cazadores de Patos.
-Me gusta. Los veo mañana Cazadores de Patos.
