Honey
Otra serie de oneshots, este es GaaraHina, y está relacionado con comida, colores y formas.
Honey capítulo uno
Color, aguamarina; comida, Yakinuki.
Cuando vio sus ojos blancos, sintió una especie de escalofrío.
-¿Me verá? -Se dijo en voz baja.
Habiendo pasado tanto tiempo, fue a la única persona capaz de recibirlos sin hacer burla o comentario innecesario alguno.
-Buenas tardes, sean bienvenidos.
Su dulce voz, su pálida piel, y sus ojos tan blancos que podían reflejar los suyos.
Se veían como aguamarina.
-Gracias.
¿De qué otra manera debía ser? Podía ver en sus ojos el color de los suyos, pero diluídos por el efecto de la luz y el color de sus ojos.
-Síganme, por favor. Tsunade-sama los espera. -La chica Hyuuga comenzó a guiarlos por la aldea, directamente al edifico que la Hokage utilizaba para resolver los asuntos de la aldea- Después, será un honor recibirlos como invitados en mi humilde hogar.
-Gracias -respondió el kazekage atendiendo al protocolo de la chica, sin perder nunca de vista sus ojos.
Y ella se dio cuenta.
Aunque solo fueron unos instantes, sus miradas se cruzaron por completo. El joven de la arena sintió un choque eléctrico en su nuca que le hizo desviar la mirada, apenado por lo que fuera a malpensar la chica.
-Espero que les guste el Yakinuki -Continuó hablando la chica- A mi padre no le gusta que lo cocine, pero como es una ocasión especial, no podrá decirme nada.
-No es molestia, me encanta el Yakinuki, pero. ¿A tu papá le molesta que hagas lo que cualquier sirviente haría en tu lugar? -preguntó un confunfido Kankuro.
-No. A mi papá le encanta el Yakinuki, pero no le gusta admitirlo.
Tras escoltarlos hasta la presencia de Tsunade, la Hyuuga permaneció esperándolos en el cuarto continuo.
-No tuvieron problemas para llegar¿cierto?
-Ninguno -Temari tomó la palabra- La chica Hyuuga nos trajo directamente, no como Lee que nos hizo dar como 50 vueltas a la aldea, o Sakura que se detuvo a pelear con la rubia, o Naruto, que no se movió del puesto de ramen hasta que comiéramos un plato.
-Pero tenía razón -dijo Kankuro- estaba muy sabroso.
-El asunto -cortó el tema Gaara- Me gustaría retirarme pronto, si no es molestia.
La reunión fue más protocolo y una que otra interrupción para comentarios triviales y probadas a la botella de sake que tení Tsunade, pero al cabo de media hora, dicha tortura terminó.
-Síganme, por favor.
Hinata los llevó directamente a su casa, donde Hiashi, como un buen anfition, les dio la bienvenida.
-Hanabi, trae un poco de té.
-¿Por qué no va Hinata? -Se quizo rebelar la minishinobi pervertida (extrañaba decirle asi)- Después de todo son sus invitados.
-Por que ella está haciendo la cena -Le contestó Hiashi.
Y Kankuro agregó.
-Y está haciendo Yakinuki.
Gaara observó que el semblante del líder del clan cambió, lo mismo que el de la chiquilla.
-¡¿Va a hacer Yakinuki y no me dijo?! -La niña echó a correr y en unos minutos ya traía el té- ¡Hinata, tenemos que hablar muy seriamente!
-¿Le molesta que hagan Yakinuki? -Preguntó Gaara a Hiashi.
-No. Lo que pasa es que Hinata le pone miel al yakinuki -Los chicos de la arena notaron como Hiashi tragó saliva con dificultad- Y sencillamente es imposible resistirse a su sabor.
El olor de la comida les dio a entender a qué se refería con "imposible". Olía muy bien, e indudablemente sabría mejor.
-La cena está lista. -Anunció la chica una vez que hubo terminado.
Y como esperaron, la comida sabía mejor de lo que olía. Aunque la chiquilla le reclamó a su hermana no haber hecho más, el papá las sancionó con una mirada, lo cual solo se interpretaba como una señal de acuerdo hacia lo dicho por la menor.
-Les agradecemos su hospitalidad -Dijo Gaara al terminar su plato- Pero no podemos quedarnos mucho tiempo.
-Entendemos. Espero que en otra ocasión puedan permanecer un poco más de tiempo- respondió Hiashi atendiendo al protocolo- Hinata, acompáñalos a la salida.
-En seguida.
En pocos minutos, se dirigían al lugar donde todo comenzó, la entrada de la aldea.
-¿Y eso? -Preguntó Temari por el extraño paquete que tenía Hinata en manos.
-¿Esto? -La Hyuuga lo tendió hacia Gaara- B-bueno, pensé que a lo mejor les quedó un poco de hambre, así que hice un poco más de Yakinuki para el camino... Digo... Solo si...
-Gracias -Gaara tomó el paquete, pero al rozar sus dedos con los de ella, no los retiró. Permaneció un momento viéndola a los ojos, perdiéndose en el color que emitían por el reflejo de los suyos.
Después de unos momentos, Gaara separó sus manos de las de ella, y esta retornó a su hogar.
-Ya sé lo que pasa aquí -Inició una charla de trivialidades Temari- ¿Verdad Kankuro?
-Oh sí, yo también lo noté.
Gaara intentó no ponerle atención a sus hermanos, pero estos estaban decididos a explotar su nueva "comidilla"
-Prepara un yakinuki muy delicioso... -seguía hablando Kankuro
-Y es muy educada... -seguía con el tema Temari.
-Sí -Dijo Gaara molesto de que las tonterías de sus hermanos no terminaran- Estaba sabroso.
Los mayores comenzaron a reir y cuchichear, y molesto de que se burlaran a sus espaldas, los encaró.
-¿Qué se traen?
-Tranquilo hermanito -Temari le dio el paquete a Kankuro- Solo decíamos que... podríamos invitarla a quedarse unos días, digo, la hospitalidad se paga con hospitalidad¿cierto?
-Sí, estaría muy bien -Comentó Gaara, y sus hermanos estallaron en carcajadas- ¿Qué?
Como no obtuvo respuesta, Gaara acumuló su chakra para sacarle la verdad a sus hermanos... tan pronto los vio correr, por supuesto.
Nota de la autora -Jajaja, GaaraHinata, alguien dijo yo, alguein yo no, no importa. Diez oneshots, comida, colores y formas. Yeah!
