Disclaimer: los personajes son de Rumiko.


Love that let's go.
«El tipo de amor correcto es el que te deja marchar»

—Prométeme, prométeme que no me vas a olvidar —dijo Ayumi, abrazando a Yuka— y que siempre seremos amigas, que estarás ahí para mí así como yo para ti. ¡Promételo!

Yuka se sorbió los mocos y abrazó aún más fuerte a la chica a su lado.

—¡Te lo prometo, siempre en vida!

Y ambas comenzaron a llorar.

Kagome observaba la escena con ternura, pero no se sentía partícipe de ella; es decir, no era capaz de llorar, o ponerse sentimental en esos momentos, no le veía el chiste. Prefería sonreír porque había sucedido, no llorar porque se hubiese terminado.

Además, las vería el miércoles por el acto académico formal.

—Kagome-chan —le llamó Yuka. Estaba con los brazos abiertos y los ojos irritados.

Se abrazaron.

—No llores, Yuka —pidió—. Nos vamos a ver el miércoles.

—Lo sé, pero... —sollozó otra vez—. ¡Las voy a extrañar tanto! A todas. Aunque tú hayas faltado tanto tiempo en el año, te extrañaré muchísimo. Y ahora pasaremos a la preparatoria y tal vez no nos veremos, además no sé si iré a la graduación y... y...

Lloró aún más fuerte.

A Kagome eso le había tocado la fibra más sensible. Ahora caía en cuenta. Estaba rodeada de amigos, conocidos y personas que habían estado con ella toda su vida, prácticamente desde el kinder, y ahora se iban a separar. Qué mierda.

Los iba a extrañar, para qué negarlo. A sus queridas amigas del alma: Eri, Yuka y Ayumi, a sus profesores que siempre le ponían faltas, tareas extras y reprobados en los exámenes. Al director amargado. A los que le habían hecho la vida insoportable... Los iba a extrañar.

El tiempo había pasado demasiado rápido. La verdad es que prácticamente podía decir que parpadeaba y ya se veía con hijos y una carrera.

¿Y si no volvía a ver a sus amigas? ¿Y si algo pasaba y no podía ir a la graduación? ¿Y si ellas no iban?

Su ojos comenzaron a picarle al recordar todos los buenos y malos momentos de su secundaria. No, ella no lloraba.

En cambio, Yuka si lo hacía.

—Kagome-chan, ¿por qué tu no lloras? —preguntó Eri. Después, se sonó en un Kleenex.

—Porque me quitaron los lagrimales —bromeó, para hacerse la fuerte—. Pero ustedes lloren, vamos, es el momento perfecto —animó.

—Si, Kag, es el momento perfecto para llorar —invitó Ayumi.

A la azabache le tembló el labio de abajo y luego se desmoronó a llorar con sus amigas.

El recuerdo de ese cariño viviría con ella siempre.

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Reeditado el 20/01/2014.

Basado en mi graduación de secundaria. ^^