Que alguien le diga a mi psicólogo que la puta pelota antiestres no vale de nada ._."

...

En fin, buenas, queridas (Y algún que otro querido, espero xD) vengo con máaas yaoi. Actualizo rápido, porque es que tengo un montón de ideas actualmente para con esta serie. Muchas muchas :D

Y en fin, esto es el resultado de mi obsesion por los temas de medicina de biología: Enfermedades terminales.

Y así, los pasos por los que pasan estos enfermos se iran identificando con el morboso amor que siente Mello hacía Near.

-Diagnostico.

-Negación.

-Ira.

-Negociación.

-Depresión.

-Aceptación.

Disclaimer: Si, son míos y me los tiro cuando quiero (?) Ò_Ó

Bueno. Y aqui el fic, claro xD Ah, e informo, he mandado el canon un poco al traste.


Terminally Ill.

Diagnóstico...

"El paciente recibe la noticia rompiendo todo esquema o idea que hubiera podido tener. ¿Lo ha oído bien?"

Mihael Keehl tenía su mente dispersa de toda aquella física avanzada. Observaba distraído, como los mocosos de cuarto (Él estaba en primero de lo que era Bachillerato, a tan solo un año de diferencia, pero era lo suficiente para convertirles en mocosos.) jugaban a fútbol. Mello tenía la cabeza entre sus manos, apoyando los codos en el pupitre. Tenía el ceño fruncido. Y es que… ¿Por qué demonios ÉL no estaba allí?

Near… le habían adelantado no uno, sino dos años en sus estudios. Y tenía que aguantarle en clase, donde el menor se sentaba, ordenados alfabéticamente como estaban, tras él.

No pudo evitar mirar hacia atrás de soslayo. Con la mirada perdida, no sabía muy bien si en la profesora o en el no-tan-complejo problema que llevaba media clase en la pizarra aun sin resolver.

Sin desearlo, su hilo de pensamiento, como tantas otras veces, fue a parar en el niño albino. Movió un tanto su cabeza molesto. Y en ese momento, Near cruzó los ojos con los de él. Nula expresión por parte de ambos. Nula, ya que la de enfado de Mello era tan corriente que había perdido significado. Siendo este ultimo el primero en apartar la mirada para pasearla ahora por el resto de energúmenos de clase, no sin cierta molestia, claro. Aunque no ganaba mucho, su clase era taaaan aburrida... Estúpidos inmaduros, irritantes, gente sin razón alguna… Personas que desde luego estaban tan lejos de su nivel come de ser dignos siquiera de optar a sucesores del gran L.

Teniendo quizás, como única posible excepción a si mismo, a Matt y claro… a Near.

"Near…" Ya había vuelto una vez más sus pensamientos hacía él. Suspiró, molesto. Y su profesora, perspicaz, enarcó una ceja.

-Mello –nombró. No Mihael, claro, ni siquiera en la puta lista de asistencia mantenía su verdadera identidad.- Si pudiese hacer el favor de dejar de pensar y suspirar por la chica que le haya robado el corazón, dénos la solución al problema.

Mello dispuso una mueca, mezcla de lo horrorizado por la idea y a la vez de diversión, por la perspectiva de Near de chica. Antes de que pudiera empezar a debatir si a Near le sería cómodo usar falda y dejarse una larga, y blanca, melena y así divagar y divagar, dio, con una rápida ojeada a la pizarra, el resultado final.

La profesora afirmó con la cabeza y continuó explicando.

Pero Near no pudo evitar abrir su bocaza, claro.

-Hay un error en los pasos seis y siete, el resultado no es ese.- Dijo, con calma. Borrando cualquier rastro de lo que podía haber sido una sonrisa.

La mujer pestañeó un par de vece. Comprobando sus apuntes. Luego sonrió tímidamente. Un "En efecto" salió de sus labios, y se apresuró a seguir con la clase.

El rubio bufó con rabia. Otra maldita vez, los méritos eran para Near. ¡Joder! ¡No había derecho! Mello había llegado el primero a la institución, siendo el más inteligente, rápido, genial (Y bueno, temperamental) de todos, el mejor candidato a L. Hasta que un año después, llegó Near.

Un niño repelente, que le superaba en inteligencia, y conocimientos y…

Mierda, ya había vuelto a concentrarse en él. Apretó los labios, tensándolos. Y Matt, que le miraba de reojo, una mesa delante, por no decir que no perdía detalle de sus constantes cambios de expresión.

Como mejor amigo (Casi único) consecutivo durante unos quince años o así, sabía que es lo que pasaba por su cabeza a cada momento. Y también sabía que llevaba años que su mente solo la ocupaba Near, para bien o para mal. Este le era más ambiguo, no le daba ninguna opinión al respecto, solo podía sacar la conclusión de que la persona con la que más se relacionaba era Mello.

Pero sonrió de lado. "¡Mi mejor amigo se ha hecho todo un hombre!" pensó con sorna.

Y eso, actualmente, era un punto a favor de lo que tramaba.

Matt's POV

Mello comenzó a recoger sus cosas, con prisas. Aun tenía que llegar a nuestra habitación, soltarlo, llegar al comedor, comer, y luego encerrarse a estudiar. Repugnante rutina, vaya. Yo por mi parte, cogí el único boli que había llevado hoy a clase, me lo llevé a los labios y me senté sobre su mesa. Mientras, mi amigo guardaba sus cosas en la bandolera negra de calaveras que le había regalado por su cumpleaños apenas un mes atrás, y nos íbamos quedando solos.

-¡Matt, pásame eso! -Me ordenó, medio gritando, señalando a algún punto entre mi culo y la mesa. Y yo, con la serenidad que a él le faltaba, le tendí el libro que pedía. Psicología, irónico libro para él. Me lo arrebató deprisa y lo guardó con el resto. Cerró la bolsa y se encaminó a la puerta, como no, sin esperarme, aunque algún que otro improperio salía de su boca, acompañado de "Apresúrate, Matt"

-Mello… -Llamé con firmeza.

-Maaaaatt –Me urgió.

-¿A que tanta prisa? –pregunté bufando, y me bajé de la mesa a alcanzarle.

Me miró con toda la mala leche que podía, claro. Pero ahora que la clase estaba vacía era el momento idóneo de soltárselo.

-Tengo que decirte… mm… en fin, algo.-Cojonudo, la seguridad del principio se había ido al traste, pero es que le conocía y sabía que su se reacción sería de todo menos agradable. Pero claro, él era mi amigo, tenía que decirle que pensaba. Supongo.- Verás… Yo...

A Mello la mirada de confusión se le cambió a una de preocupación mucho más pálida que la anterior, si es que era posible.

-¿Matt, por dios, me vas a decir que te has enamorado de mi o algo así? Pues lo siento, en serio, pero no lo correspondo… eh…

-NO, no, no van por ahí los tiros, Mello. –Le corté. Y se pudo ver el alivio en sus ojos.

Yo… soy un imbécil, no lo niego. Pero es que claro, no era tan raro que hubiera llegado a aquella conclusión, ya que la situación daba pie a ella.

Pero sentí mi orgullo ligeramente herido. ¡¿¿Qué yo no le gustaba?!

Pues les gusto a todos, demonios, eso que lo sepa.

Aunque, eso sí, cambié rápido de parecer, pues en ningún momento se había excusado con un "¡Si eres un hombre!" (Ni gracias a dios, con "¡Eres feo!" Porque vamos…)

Lo cual seguía reafirmando mis teorías.

-Mello –Llamé ahora, con franqueza, colocando mi mano en su hombro, como el doctor que da el diagnostico de una enfermedad Terminal.- Estás enamorado… De Near. ¿Verdad? –Y… bueno, y la "verdad" chocó como un puño cerrado en mi cara. Literalmente. Retrocedí dos mesas. Ay…

-¡Imbécil! ¡Deja de perder el tiempo inventando cosas extrañas! -Rugió.

Procesé con lentitud lo que me decía. Joder, que daño. Ah, claro, me sangraba el labio un tanto y todo. "Amistad" bufé, poniendo los ojos en blanco.

Me había dejado a solas. Pero aun así, dentro del aula, sonreí a pesar del labio que se estaba comenzando a hinchar. La reacción también entraba en mis planes. Mello tendría que aceptarlo, si o si. A las buenas o a las malas, vaya.

-Preferible… preferiblemente por las buenas. –Rogué, limpiándome la sangre con la mano de mi camiseta.


Posiblemente sean la mayoría Pov's de Matt... es que... simplemente le amo O__O

Pero bueno, si de verdad de verdad de verdad la inspiración me dura, mañana actualizo. Si no, actualizo la semana que viene, el viernes~~

Que eficiente y maja que soy, si es queeee ... ? xD

Aunque también será la primera historia de más de un capitulo que saco en muuucho tiempo, pero es que más o menos la tengo estructurada en mi cabeza XD

Bueh, adios, gente (L)

Haineko.