¡Hola! Hace mucho que no escribo porque la U me deja escribir de hecho esta historia la escribí entre exámenes…. (12/07/13) hasta ahora me faltan dos exámenes más espero que les guste.
Disclaimer:Harry Potter y sus amigos le pertenece a J.K. Rowling. Todas las ideas que no reconozcan son mías.Esta historia participa en el "Reto Off-Scorse de Julio: Los Olvidados del ED" de El Escorpión Que Coleccionaba Rosas"
Agradecimientos a Lauchyar, quien tuvo la amabilidad una vez más de betear lo que escribo(Y darme apoyo y ánimo por la u) "
Dedicado a Justified October, por ser la creadora del reto y a todas/os que les guste Fred/Angelina y George/Angelina
El titulo lo entenderán cuando leean el FF :)
Una pequeña luz en la oscuridad.
Angelina estaba sentada en la terraza del departamento que compartía con su amigo George, con quien se había ido a vivir luego de la guerra para tratar de superar la muerte de Fred. De aquello habían pasado ya, cuatro años y aún, lloraba por las noches; extrañaba a Fred con locura, pero también se sentía culpable. Cada día que pasaba, se enamoraba más y más de su amigo George, y sabía que eso, era la peor traición que podía hacerle a ambos.
1 de septiembre 1989
Una pequeña niña morena caminaba en búsqueda de un vagón en el cual entrar, todo el tren estaba repleto, y fue cuando los vio por primera vez. Sus padres le habían enseñado que antes de entrar algún lugar, debía tocar y así lo hizo.
A su llamado respondió abriéndole un chico pelirrojo:
— ¿Puedo entrar? —Preguntó— Todo el tren está repleto…. Y soy nueva…
Fred, quién había sido quien abrió la puerta le sonrió y la dejo entrar.
—Claro que si nosotros también somos nuevos, él es George—comentó Fred señalando a un chico igual a él.
— ¡Oh, vaya son gemelos! —Comentó inocentemente Angelina
, mientras se sentaba frente a ellos—
— ¿Cómo te llamas?—preguntó uno de los pelirrojos—
—Angelina Johnson,pero pueden llamarme Angie y… ¿Tú eres?
—Fred—respondió y le sonrió amablemente.
Y así había sido como había conocido a dos de los chicos más importantes en su vida.
Mientras estaba sentada tratando de escribir una redacción para El Profeta, se distraía mirando la ciudad de Londres, por su rostro comenzaron a caer lágrimas de impotencia y de odió a sí misma.
1 de septiembre 1989
La selección comenzaba y Angelina estaba a cada rato más nerviosa, una parte de ella deseaba saber a qué casa sería enviada, su familia tenía prejuicios y no quería ser enviada a Slytherin, y desde la conversación que había tenido con los gemelos deseaba estar en la misma casa de ellos.
—Johnson, Angelina.
La morena dudo unos minutos y se encaminó hacia el taburete, pero antes sintió que una mano se posesionaba en su hombro como en señal de apoyo, en ese momento no supo se había sido George o Fred, pero el tiempo se encargaría de decirlo.
— ¿Por qué me dejaste? —se preguntó en a sí misma volviendo al presente— ¿Por qué me enamore de ti? Como puede ser tan estúpida… él es mi amigo... jamás traicionaría a su hermano.
1995-1996
Baile de navidad.Ser Capitana del equipo de Gryffindor y encima desear que uno de tus mejores amigos te invite al baile era pedir demasiado. Desde siempre los quiso a su manera, pero a Fred siempre lo quiso de otro modo… aunque él no lo notó hasta aquel baile…
— ¿Angie, quieres ir al baile conmigo?
Angelina estaba emocionada, Fred (sí, con el tiempo había aprendido a reconocerlos) la había invitado al baile, esperaba que al fin, se hubiera dado cuenta lo mucho que lo quería. De todas formas, pese a la invitación, sabía que en algún momento debería compartir con George, aunqueéste se lo veía muy ocupado con una chica de Ravenclaw conversando. Por alguna razón, se sintió feliz por él, pero a la vez, extraña.
— ¿Bailamos?—pidió Fred.- ella asintió.
La música había cambiado de un ritmo veloz a uno más lento y pausado, en ese momento Fred acortó la distancia entre ambos y la besó. Angelina estaba feliz, Fred la quería como ella lo quería a él.
— Angie, te quiero hace mucho…
Angelina se acercó, y sólo rozó sus labios, para luego decir:
—Y yo también te quiero mucho.
Angelina secó sus lágrimas, y trató de volver a la redacción que llevaba horas tratando de escribir para El Profeta.
Un año antes de la batalla
Fred y Angelina se habían reunido en una taberna para beber una cerveza. Hacía un tiempo ya que su relación amorosa se había ido apagando, no porque no se quisieran, sino porque les daba miedo lo que se avecinaba y porque que tenían intereses diferentes; además las cosas, ya no eran como en un inicio y antes de hacerse daño mutuamente decidieron terminar.
— ¿Fred, me odiarías? —preguntó en voz alta.
3 de mayo 1998
Entre el alboroto de la guerra ves como todos corren de un lado a otro muchos queriendo protegerse y proteger a los suyos, entre su desesperación buscas a tus gemelos favoritos, tus mejores amigos desde siempre, pero entre el alboroto no los encuentras, y empiezas a desesperarte…
Sufres…
Todos gritan, todos corren, los hechizos casi rozan tus cabellos...
No encuentras a Fred ni a George temes lo peor… estas asustada… Cuando al fin tienes esperanza escuchas un grito desgarrador…
— ¡No Fred!—escuchas gritar a alguien, pero no reconoces la voz.
¿Fred? ¿Habían dicho Fred? ¿Podría ser que Fred hubiera….? Ni siquiera te atrevías a pensarlo.
Caminas o corres entre la gente, según algunos parecía que volabas por la rapidez que pasabas entre ellos, y fue cuando viste la peor escena que ni siquiera podías imaginar...
George lloraba sobre el cuerpo inerte de Fred, se aferraba como si este fuera un oso de peluche y a ti se te partió el alma, y por tu rostro comenzaron a caer gruesas lágrimas.
Fred, tu primer amor, yacía muerto a los pies de todos, y no sólo eso, tu mejor amigo estaba junto a él llorando con tal desesperación que solo querías poder consolarlo… pero te es imposible sientes que eres incapaz de hacerlo en ese momento tenías tu propia batalla interna.
George entró al departamento, y comenzó a buscar a Angelina y la sintió sollozar.
— ¿Angie, estas bien?
Angelina asintió, pero él la conocía sabía que mentía.
—Vamos, te conozco desdeque eras casi una niña y hace cuatro años que compartimos este departamento… te conozco más de lo que piensas.
George se sentó junto la morena, y esta evitó mirarlo
— ¿Qué te pasa?
— ¡Soy la peor persona del mundo!—le respondió, mientras golpeaba con sus manos la mesa, en donde estaba la redacción que yacía olvidada.
George secó las lágrimas de la morena.
—No lo eres, eres la persona más linda que he conocido en toda mi vida.
La morena negó con la cabeza ¿Cómo le diría eso? ¡No la entendería! ¡Para él siempre seria su mejor amiga Angelina y primera y única novia de su hermano! Jamás la amaría, ni jamás la desearía como un hombre debe desear y amar a una mujer.
— ¿Angie sabes por qué te ofrecí vivir conmigo?—cuestionó el pelirrojo.-
La morena negó nuevamente.
—Porque cuando murió Fred, le jure que te haría feliz, que te protegería, porque él ya no podría.
Angelina apretó las manos de George fuertemente.
—George, me enamore de ti, y esto es terrible porque eres amigo y hermano de Fred ¡Soy la peor persona del mundo!
George comenzó a reírse ante la situación.
— ¿Qué te parece tan gracioso?—cuestionó Angelina, mientras le clavaba las uñas en las manos del chico (por accidente claro)
George le sonrió.
—Angie, me duele en el alma cada vez que te escucho sollozar, porque sé que lo haces, y te entiendo porque a veces también lo hago; pero como te decía le juré a mi hermano que te protegería y que buscaría la forma de hacerte feliz, pero algo falló…
Angelina estaba asustada.
— ¿Qué falló? — preguntó Angelina ansiosa.
—Me enamore de ti—le confesó George quien sentía como su rostro se tornaba del mismo color que su cabello incluso su única oreja.
Y después de mucho tiempo de tristeza y dolor, George vio sonreír nuevamente a su compañera. Ambos sabían que sería difícil, que quizás nadie los entendería, que el mundo se les vendría encima, pero no pudo importarles menos.
Y antes que Angelina pudiera decir algo más George la besó de lleno en los labios y ese sería un nuevo comienzo.
3 años después.
George caminaba de un lugar a otro en la sala de espera de San Mungo, había recibido mensaje de alerta de Katie que su esposa se había sentido mal, y ella la había obligado prácticamente a ir.
Cuando llego el mensaje de Katie, George salió prácticamente corriendo de la tienda, que apenas le había dado tiempo de cerrarla.
— ¡George quédate quieto! —Rogó Katie. — Él siguió caminado de un lado a otro sin hacer mucho caso a la mejor amiga de su mujer.
— ¡George Weasley! —le gritó ella cual Molly en su adolescencia lo que le hizo dudar si era su madre o su amiga.
— ¿Qué quieres? —respondió exasperado.
—Ella va estar bien, tranquilo —George se apretó sus manos de puros nervios
— Es una mujer sana, no le puede pasar nada, no puede, ella no me puede dejar, es mi todo— hablaba desesperado George —
Katie puso los ojos en blanco.
— ¿Familiares de Angelina Weasley?
Antes que Katie pudiera acercarse al Sanador o tratar (en vano) de calmar a su amigo, George ya había desaparecido de su vista.
—Ella es mi esposa. ¿Está bien? ¿Es grave?—sacudió al sanador por los brazos desesperado- ¡Dígame que está bien!
El sanador colocó su mano en el hombro de George, como indicando que se calmara y que lo siguiera. Una vez que llegaron a la habitación pudo ver a Angie con una amplia sonrisa que descoló a George.
— ¿Angie, estas bien? ¿Qué te pasó? ¿Estás bien?—preguntaba George, mientras se sentaba cerca de la cama de su mujer.
Angelina asintió.
— ¿Por qué estás aquí? —Angelina sonrío ampliamente, lo que le dio tranquilidad al pelirrojo—.
—Estoy embarazada, me sentí un poco mal y Katie exageró un poco, aunque ella se enteró cuando me hizo venir —
George acarició su rostro.
— ¡Que noticia más linda amor!
Angelina y George se miraron nerviosos, ansiosos y temerosos.
— ¿Podemos…?—Comenzó George. —
Angie asintió.
— ¿Pero como sabes lo que diré? —
Angelina lo miró dulcemente.
—Amor te conozco, y me encantaría que nuestro primer hijo se llame como tu hermano —George sonrió. —
—Angie, tengo muchos hermanos— le dijo George con malicia. —
Angelina lo golpeo cariñosamente.
—Sabes que hablo de Fred, no seas payaso — y él la besó. —
—Lo sé amor, de cierta manera le debemos todo esto a Fred.
Dolor, impotencia, oscuridad fue lo que muchas veces acompañó a Angelina, pero pudo encontrar la luz que necesitaba en el otro gemelo, en George. Aunque algunos pensarán que era practicante una locura lo que había ocurrido: él la había devuelto a la vida como ella a él. Y su hijo sería la prueba de ello, la luz que les faltaba, la luz que tanto necesitó Angelina, llegaría en unos meses para que pudiera continuar. Ella ahora, tendría un motivo para hacerlo, tenía un motivo más para querer seguir viviendo.
Fin
N/A: Cuando escribi lo de la guerra tendré que confesar que lloré l u me tiene muy estresada a nivel emocional,fisicamente etc.
¿Reviews?¿Tomates? ¿Algo?
¡Review plis!
PD:¡Esta historia solo será publicada en FanFiction! Ya que solo tengo cuenta acá y desde hace años que solo publico en esta pagina.
PD2: Únanse a mi campaña: ¡Llenemos FanFiction de Reviews! ¡Quizaás alegres a una persona! Y si vas a poner en favoritos una historia deja un review también! que nada cuesta :D
PD3:Si alguien se le ocurre un mejor summary que me lo comente xD
Besos y abrazos
¡Nos leeeeeemos!
Bella Valentía
