Día 1, EXP. 1.

"Bien, ya que he llegado tan lejos como para escribir esta ridícula primera línea, supongo que esto será un viaje sin retorno.

Porque sí, puedo sentir un atisbo de alivio en cada trazo que hago, como si la tinta se hubiera convertido en un testigo silencioso de mi necesidad. Por penoso que sea, me siento acompañado.

Es tan lamentable, que bien puede ser el único analgésico para el síntoma más temible de la soledad: la necesidad de hablar con uno mismo, ese pequeño pero decisivo paso hacia la locura. ¡Por suerte he tomado cartas en el asunto!

Que imbecilidad.

Es bien sabido que la locura es incurable, razón por la cual sé que este pequeño momento de debilidad será el inicio de un nuevo hábito, uno que me seguirá por fuerza hasta la muerte. Lo que no es bien sabido es que la locura no se puede curar porque no es una enfermedad, sino un hábito, la gran adicción del alma. No hay químico ni sanador que pueda tocar el profundo lugar donde se encuentra alojada la locura, porque ésta, cual demonio, se esconde detrás de la mente del sujeto y se escuda en su temor. Las adicciones son simplemente otros síntomas de la locura, pues ésta es la verdadera causa de todo daño que uno se hace a sí mismo.

Soy adicto a tantas cosas que no sé por qué no lo vi venir antes. Estaba distraído, quizás, como todo buen demente.

Estoy tan desesperado por mantener la poca cordura que me queda, que he recurrido a los consejos de un libro sobre educación emocional infantil. Educación infantil, sí. Esto es lo que se aconseja que hagan los niños cuando tienen problemas emocionales, esto que yo estoy haciendo ahora.

Insisto: es tan lamentable que bien puede funcionar. Uno nunca debe subestimar el potencial irónico del cosmos.

De igual manera, esto es sólo un disfraz. En el mejor de los casos, detendrá el avance virulento de este mal que ya existe en mi, alojado en mi mente como un tumor, un parásito inextirpable.

No que quiera justificar mis actos meramente en este infortunio tan característico de mi persona; nunca he creído que la locura hace al sujeto inocente. Más bien, mientras más atrocidades comete el sujeto, más lejos patea su cordura, hasta que un buen día está tan lejos que no puede recuperarla.

La cordura es simplemente una moneda de cambio, el privilegio que poseen aquellos que nunca han tenido que hacer cosas de las que se arrepentirán el resto de sus días. Los honestos, los inocentes, ellos son los afortunados de este universo.

ellos nunca sabrán lo que se siente saberse la peor versión de uno mismo."

Hola :3

Les presento el diario de Loki Laufeyson!

Se viene Thorki, tengan calma. Se está asomando por el horizonte.

Esta historia también está subida a Wattpad con el mismo título por si prefieren ese formato.

Por favor, cualquier comentario me hará feliz, en serio. Sólo quiero saber si alguien está leyendo esto, y si lo está disfrutando o no.

Saludos! :D