Este es un mini fic que le escribi a mi amiga
Oo0oOsakusasuOo0oO en deviantArt este es el link de su galeria .com/
Espero les guste tiene lemon. Tengo mas oneshots con lemon en mi galeria de deviantart! Luego los subire a esta pagina, pero si no quieren esperarme (es que soy algo lenta y a penas estoy aprendiendo a manejar esta pagina ji ji)
pueden visitar mi otra galeria el link esta en mi perfil!
Y de antemano muchisimas gracias por leer esta que tendra lemon historia! Siempre que escribo lemon trato de que sea lo menos vulgar posible espero sea de su agrado!
El aire estaba a punto de acabársele y sus pulmones lo estaban resintiendo. Movió sus piernas con velocidad y salió a la superficie; respirando profundamente para llenar de nuevo sus pulmones aliviándolos al instante. En el momento que exhaló el aire se percato del alboroto que habia a su alrededor, mismo que definitivamente no era tan molesto bajo el agua. Durante unos segundos observó a uno de sus compañeros saltar desde el trampolín para realizar un clavado perfecto. Una risa estruendosa llamo su atención; volvió sobre su hombro mientras aun flotaba en las aguas de la piscina. Nunca supo a quien habia pertenecido esa carcajada, pues su vista se detuvo en una cabellera negra que empezaba a sobresalir de las aguas. Era Sasuke; aquel chico que desde hace cuatro años lograba acelerar su corazón intensamente y no precisamente por amor. Ese chico que la habia rechazado justamente en el lugar donde se encontraba en esos momentos. Le observó nadar hasta las escaleras y subir lentamente por ellas; concentrada en su marcado abdomen del cual el agua resbalaba lentamente. ¿Cómo era posible que despues de tanto tiempo sintiera tanta atracción por él?... Porque no sentía amor; sentía deseo quería que todo su ser fuera consumido totalmente por él. Era una necesidad incumplida el sentir su tacto. Se habia enamorado un par de veces durante esos años en la universidad, pero jamás habia deseado a nadie con tanta intensidad…. Solo a Sasuke. Tal vez ese deseo tenía sus cimientos en la admiración que sentía por él –Pensó mientras lo veía secar su cuerpo con la toalla – Si eso debe ser y todo empezó ese dia –se dijo así misma mientras se imaginaba besando ese abdomen tan perfecto para despues perderse entre sus recuerdos–
Flashback
Estaba fascinada con las instalaciones. Su madre no le habia mentido cuando le habia dicho que ese instituto tenia la mejor piscina de la ciudad y no solo eso; los mejores profesores tambien. Desde niña habia amado el agua, el mar… Su madre habia sido una nadadora profesional que al nacer ella decidió abandonar su carrera para poder criarla. De alguna forma Sakura sentía que debía cumplir el sueño de su madre. Sería difícil pero no imposible, pues ella compartía las mismas aspiraciones que su madre algún dia habia anhelado cumplir. Mientras el profesor les guiaba por la piscina presenció el acto que la hizo cambiar su forma de ver la natación para siempre. Eran varios chicos entrenando y todos nadaban velozmente. Sakura siempre habia creído que era veloz, pero ante sus ojos tenia la prueba de que aun necesitaba mejorar. No pudo evitar caer hechizada por ese joven de cabellos azabache que miraba con seriedad el entrenamiento –
- ¿A eso le llaman velocidad? Parecen novatos…
- Suigetsu déjalos en paz. No los estreses más de lo que ya están. Todos ellos saben muy bien que para entrar a las competencias necesitan una buena marca. Vámonos debemos descansar…
- ¡Claro que no! Les demostraremos porque somos los mejores del instituto.
- Hmph… ya vas a empezar con eso otra vez.
- Si quieren mejorar deben intentar superarnos. Solo así encontraran la motivación suficiente.
- Como quieras… –Los dos jóvenes se quitaron la playera, mientras que los demás chicos se apresuraron a salir de la piscina para permitirles nadar. Una vez que todo se hubo despejado ambos se estiraron, se colocaron en posición y se lanzaron al agua. Las rodillas de Sakura comenzaron a temblar desde el lugar lejano del cual observaba. Se sentía afortunada de estar ahí para presenciar las sonoras ondas de sonido que provocaban los choques de brazos de ambos nadadores en las aguas. El chico de los cabellos plateados llevaba la delantera por menos de una cabeza. Pero justo al llegar a la mitad de la piscina el pelinegro lo adelanto velozmente sacando una considerable ventaja. Al llegar a la pared opuesta de la piscina tomo mas impulso para la vuelta de regreso. Sakura estaba a punto de llorar por la emoción. La dominación que ese chico tenia sobre el estilo mariposa era impresionante y lo era aun mas por su velocidad. Tan pronto el chico llego a la orilla los aplausos de Sakura comenzaron a hacer eco. Todas las miradas se desviaron hacia las gradas incluso la del azabache. La pelirosa se sonrojó terriblemente y decidió ir en busca de su madre. Pero antes de encontrarla se topó con el profesor que les estaba guiando; profesor que ahora era el esposo de su madre. –
- ¡Oh pero si aquí estas Sakura! Tu madre y yo nos preocupamos… veo que pudiste presenciar a los dos mejores nadadores de este instituto. Sasuke es el numero uno seguido por Suigetsu. Ambos entraron hace un año, pero rápidamente desplazaron a los demás. Tu madre me ha dicho que desde que eres muy pequeña has amado la natación. Así que hay algo que debes saber. Cualquiera puede pertenecer al club de natación, pero si lo que deseas es competir necesitaras pasar un tipo de audición. Nuestra universidad se caracteriza por tener a los mejores nadadores y si vemos potencial en alguien, no dudamos en apoyarlo incondicionalmente. Y digo no dudamos porque yo soy uno de los entrenadores de natación.
- Ya veo -contestó la pelirosa con una sonrisa – Lo primero que hare cuando sea parte de la universidad será presentarme a esa prueba –Aseguró con determinación –
Los nervios la invadían y la situación empeoraba por que había varios espectadores incluyendo a Sasuke. La mayoría la observaba como si se tratase de un ser insignificante. Pero ella les demostraría lo contrario. Habia entrenado tres semanas para presentar la prueba y antes que todo confiaba en ella misma.
- ¿Esta lista señorita Haruno? –preguntó el entrenador –
- Si, por supuesto.
- Bien ahora debe tomar al azar un papel de mi mano. Léalo en voz alta y así sabremos en que estilo nadara –Sakura sonrió cuando leyó el pequeño trozo de papel –
- Espalda…
- Bien, Ryosuke, Hiroki al agua. Señorita Haruno ellos participaran con usted. Lo único que queremos probar es su resistencia y velocidad. Si veo algo positivo en usted la admitiré en el equipo de natación. – ¡Bien al agua! – Los dos jóvenes y Sakura se tiraron a la alberca. Tomaron su posición y esperaron la señal de inicio. El profesor tomo su silbato, dio la señal y presionó el cronómetro. Sakura iba en último lugar; concentrada con el braceo. No podía ver en qué lugar iba, pero debía apresurarse. Estaba casi segura de que pronto llegaría al lado opuesto. Cuando diese la vuelta de regreso tomaría bastante impulso. Giro de inmediato y comenzó a moverse con velocidad. Inhalaba y exhalaba rítmicamente tratando de mantener la calma. Tan solo era una prueba confiaba en sí misma pues el amor a la natación la ayudaría a realizar sus sueños. Escuchó el silbato que anunciaba que la carrera habia llegado a su fin justo cuando su mano toco la meta. Se incorporó y para su sorpresa ella y el joven Hiroki llegaron al mismo tiempo.
- Impresionante señorita Haruno. En verdad es impresionante. Venga debemos hablar en mi oficina –Dijo el entrenador. Sakura trato de no prestar mucha atención a lo que los demás decían a sus espaldas –
- Debo admitir que está lejos de ser la nadadora más rápida que tenemos, pero si ha sido la primera en entrar al club con esa velocidad. La mayoría de nuestros integrantes a excepción de algunos se han vuelto veloces con el tiempo y con el entrenamiento. Pero estoy seguro de que usted… ¿Necesitas algo Sasuke? –preguntó el entrenador al ver que el pelinegro entraba a su oficina –
- Hmph… si debo hablar con usted.
- Toma asiento. Solo necesitare unos segundos más con tu nueva compañera. Tu padre me habia dicho que eras buena. Pero honestamente necesitaba verlo con mis propios ojos. Y ahora que lo he hecho creo que estas lista para un par de competencias. Como te decía eres la primera despues de Sasuke y un par de alumnos en ingresar a este instituto con esa velocidad. Es por eso que me gustaría que compitieras lo antes posible.
- Gracias, pero yo… yo… No creo estar lista para las competencias. Sería injusto para los demás que se han esforzado… además aun no estoy mentalmente preparada para algo tan grande. Creo que aun necesito disciplina y por otra parte me gustaría tomarme un poco de tiempo para entrenar y asimilarlo. Hacer todo paso por paso.
- Tienes razón te estoy presionando, pero la razón es porque me asombró que hayas podido recorrer 100 metros en menos de un minuto con diez segundos. El record de Sasuke en los 200 metros es de 1 minuto 57 segundos.
- Bueno tal vez fue porque me sobre esforcé demasiado –dijo Sakura riendo. Grabando en su mente que eran 23 segundos los que la separaban de Sasuke – Profesor prometo dar lo mejor de mí y le aseguro que cuando me sienta lista para una competencia se lo hare saber.
Habia entrenado duramente todo ese semestre. La piscina; lugar que siempre estaba abarrotado de chicas que iban solo para ver Sasuke mismo lugar donde pasaba más tiempo. Se sentía como una tonta porque ella al igual que esas chicas estaba fascinada con el chico…..fascinada viéndole nadar. Habia tenido la oportunidad de verlo en una competencia en la cual habia obtenido el primer lugar. Lloró…lloró demasiado al verle ganar. La emoción que sentía al verlo nadar era inexplicable y dia con dia su admiración por el crecía, curiosamente su atracción tambien. Verlo nadar la hacía extremadamente feliz la regeneraba; la motivaba para seguir mejorando. Finalmente un dia mientras lo observaba entrenar decidió que tenía que decírselo. Confesarle toda la admiración que sentía por él. Con cuidado se sentó en la orilla de la piscina, justo en el lugar donde Sasuke emergería en menos de tres, dos… uno.
- ¡Sakura! –Exclamó sorprendido. La habia llamado por su nombre. Jamás habían conversado, pero al escucharlo decir su nombre se dibujo una sonrisa en su rostro –
- Hola Sasuke…
- Hola… ¿Necesitas algo? –Preguntó con curiosidad mientras subía por las escaleras. –
- Yo… desde la primera vez que te vi nadar he sentido una inevitable atrac…
- Hmph… lo que me faltaba otra chiquilla tonta enamorada de mi –Sakura se sonrojó por completo pues lo que él no sabía es que no era amor lo que sentía. Si no un inextinguible deseo acompañado de inacabable admiración –
- Sakura voy a ser muy claro contigo. No tengo interés alguno en tener una relación con nadie y menos con una joven tonta que solo se inscribió al club de natación para poder estar cerca de mí. Deberías madurar y nadar por pasión no por andar tonteando con los chicos. La natación al igual que todos los deportes requiere disciplina…. Discúlpame pero estoy cansado – dijo haciéndola a un lado. –Sakura se habia quedado sin palabras. No podía creer que él le hubiera dicho eso. Realmente la habia ofendido pues ella no habia entrado al equipo por él. Tenía motivos propios y lo habia hecho por la pasión de la que él hablaba ¿Cómo era posible que él se hubiera formado un concepto erróneo acerca de ella? Si bien no se conocían ¿Qué le daba el derecho a decir eso? Sus palabras la habían herido profundamente y mas porque temía que la razón por la que los demás la rechazaban era porque la percibían de la misma manera que Sasuke. Percibida como una chica sin metas que solo quería estar rodeada de chicos y que veía la natación como una mera distracción. Se esforzaría… pondría todo su empeño para cambiar esa imagen que todos tenían de ella. Les demostraría lo importante que era la natación para ella. No descansaría hasta llegar a ser una de las mejores en el equipo de natación.
Tres largos años habían pasado desde ese dia en que Sasuke la rechazó. Años que habia dedicado exclusivamente a mejorar. Habia ganado infinidad de competencias estatales y un par de nacionales. Durante mucho tiempo se sintió rechazada por todos, incluso planeó vengarse de ellos demostrándoles lo buena que era nadando. Pero finalmente habia entendido que no tenía nada que demostrarles puesto que ella no nadaba para quedar bien con otros. No nadaba por arrogancia como algunos de sus compañeros; lo hacía por la serenidad que las aguas le regalaban. Todas sus acciones nacían de la pasión que sentía hacia ese bello deporte.
Fin del Flashback
Seguía observando a Sasuke quien ahora caminaba seguramente para ir a los vestidores. En unos momentos lo vería de cerca pues para llegar a los vestidores debía pasa frente a ella. Sakura lo siguió con la mirada hasta que alguien se paro frente suyo.
- Hola preciosa ¿Acaso no piensas descansar? –preguntó un chico pelirrojo –
- Sasori me conoces mejor que nadie. Sabes muy bien que no voy descansar hasta que ese idiota me pida una disculpa –
- No deberías tomarte tan apecho las palabras de Suigetsu. Aun no puedo creer que hayas aceptado su reto –
- Le ganare. De eso puedes estar seguro. Aunque Suigetsu sea hombre ten por seguro que le ganare.
- Creo en ti y estoy seguro de que lo harás, pero me preocupa que no te tomes un descanso. Déjame te ayudo a salir – El pelirrojo estiro la mano y Sakura cuidadosamente salió de la piscina. Sasori intento besarla, pero ella no lo permitió –
- Recuerda que ya no tenemos ese tipo de relación –
- Sakura… ¿No piensas perdonarme?
- Sabes muy bien que ya te perdone. Pero no deseo tener este tipo de relación contigo otra vez. Si la primera vez no funciono dudo que una segunda vez sea diferente – Sakura le dio un beso en la mejilla para hacerle ver que lo consideraba mas como un amigo. Justo cuando se soltó de los brazos del pelirrojo su mirada y la de Sasuke se cruzaron. Ella comenzó a caminar y pronto los dos se encontraron caminando uno junto al otro, pero se separaron al llegar a los vestidores, pues Sakura fue al que correspondía a las mujeres. Jamás le habia dirigido la palabra desde esa vez ni siquiera para decirle hola. Ciertamente no lo odiaba, pero tampoco se atrevía a dirigirle la palabra. Le daba vergüenza que el aun pensara que era una inmadura que solo quería regocijarse en el mundo de la natación sin tener respeto por el deporte. Se cambio y se fue a su dormitorio pensativa. La única ventaja que encontraba al vivir en el campus de la universidad era que podía nadar cuando ella quisiese. Esa noche iría a seguir entrenado debía cerrarle la boca a Suigetsu. El muy idiota le habia dicho que no tenia lo que se necesitaba para llegar a ser uno de los 5 representantes en las competencias continentales. Y que si lo lograba no sería por merito propio si no porque el entrenador al ser su padrastro la ayudaría. Uno de los pasos que tenía que dar para lograr su sueño era representar a su país en la competencia continental. Ya entrada la noche se escabulló de su dormitorio; llevando su disco favorito en mano y una grabadora. La música comenzó a sonar mientras ella se lanzaba al agua. A penas si lograba escucharla, pero cada vez que salía a la superficie para tomar aire la escuchaba con claridad. Con cada uno de sus braceos sentía la libertad de nadar entre las aguas. Como le gustaría poder transformarse en un delfín para poder dar esos saltos al aire libre e inmediatamente regresar y sentir el agua sobre su cuerpo. Sobre ese cuerpo que ya no era el mismo. Ahora era, resistente con músculos que le brindaban la fuerza esencial a cada uno de sus movimientos. La bella música iba al compás de sus movimientos. Habia dejado de nadar en línea recta para ponerse a danzar en las aguas. Solo esa magia que habia en las aguas le daba significado a su vida. Practicó todos los estilos; habia quedado exhausta. Se recostó en las aguas y se dejo llevar de un lado a otro con los débiles movimientos de las ondas. Tres años atrás recorría 100 metros en 1 minuto con 10 segundos sin embargo ahora podía nadar los 200 metros en tan solo un 1 minuto con 56 segundos. Ya no habia mucha distancia entre ella y Sasuke. Solo los separaban 6 segundos. Claro ambos nadaban en diferentes estilos así que aun no estaba tan cerca de Sasuke… el siempre seria inalcanzable. Esos 6 segundos nunca desaparecerían del todo… Al acabarse la música abrió los ojos; ya debía ser muy tarde. Vio que se encontraba lejos de las escaleras así que se sumergió y nado hacia ellas. Fue tan inesperado que al salir de la alberca Sasuke estuviera frente a ella. Tuvo que tomarse con fuerzas de los pasamanos si no hubiera caído de nuevo al agua.
